Número 42, Septiembre 30 de 2003

Dicen que las causas son las lluvias de agua

Tiempo de Apagones

Más que las lluvias de agua, es la tormenta privatizadora la causante de los apagones. La industria eléctrica en varias partes del mundo se desarrolla en ausencia de planeación y va dejando tras de sí un desastre. Las redes eléctricas no resisten ni siquiera una descarga atmosférica. No parece creíble. Las redes no funcionan a prueba de fallas y están tan endebles que cualquier perturbación genera fallas en cadena ocasionando severos daños. La planeación eléctrica solo es posible con base en una política energética adecuada y en un régimen de propiedad social, jamás privada, de la industria eléctrica integrada.

Apagón en Italia, Francia y Suiza

Ninguna explicación convincente. El 10 de agosto el Papa había orado para que lloviera en Europa luego de un verano muy caluroso. Ahora, los gobiernos simplemente culparon a las lluvias por los apagones.

En la madrugada del sábado al domingo del 28 de septiembre, Italia se quedó a oscuras, un apagón se prolongó por horas. Es el mayor apagón de la historia italiana, se publicó en los medios. 55 millones de personas fueron afectadas.

Como siempre, las causas no fueron aclaradas. Fuentes italianas dijeron que el origen se sitúo en el nudo de líneas de alta tensión entre Francia, Suiza e Italia. El Instituto Farvenhofer de Berlín, dedicado al estudio de la industria eléctrica, señaló que la privatización realizada en los 90s había provocado “una reducción sustancial” en las inversiones para mejorar las redes de distribución.

Algo parecido al apagón de Estados Unidos y Canadá “nunca podría ocurrir” en Italia, había dicho Berlusconi el 14 de agosto. La privatización eléctrica es la causa, dijo la izquierda a través del Partido de Refundación Comunista.

Toda Italia fue paralizada por la emergencia. Milán, Florencia, Génova, Venecia, Palermo, Bolonia, Cagliari, Capri, en suma desde Los Alpes hasta Sicilia. El apagón causó los mayores estragos en Roma. Una noche triste como en Nueva York, dijeron los italianos. Después del apagón sobrevino una fuerte lluvia para aumentar el caos. No se salvó ni el Vaticano, el tradicional “Angelus” del Papa fue suspendido.

Se dijo que a las 3:01 del domingo saltó una línea de 400 mil volts en Suiza y, después, una tormenta dañó las líneas en Los Alpes. Suiza cortó el suministro y Francia también para evitar la extensión del problema. La red italiana quedó aislada, la tensión en la red nacional “se desplomó”. En Francia y Suiza el servicio se restableció pronto no así en la península.

El operador de la red en Italia es Enel. Esta entidad culpó de entrada al operador francés, luego se dijo que la falla de produjo en Italia.

El 16 por ciento de la electricidad que consumen los italianos es importada. Con el apagón, el consumo llegó a cero entre las 3:25 y las 18:30 hrs. Entre las 10 ya las 13:30 hrs ocurre el máximo de la demanda equivalente a una potencia de 27 mil Mw.

En 2001, el consumo eléctrico de Italia era de 285 mil 492 Gwh y la producción de 265 mil 965. La capacidad eléctrica instalada es de 76 mil 950 Mw y la disponible de 48 mil 950 Mw. Italia importa electricidad de Suiza, Francia, Austria, Slovenia y Grecia.

Apagón en Dinamarca y Suecia

Los cortes comenzaron cuando fue afectada una línea de transmisión que conecta a Dinamarca con Suecia. Sería el origen o pura coincidencia pero, la información fue que una tormenta afectó la zona y provocó el derribo de árboles, consecuentemente también se afectaron las líneas eléctricas.

El hecho es que Copenhague y Estocolmo, capitales de Dinamarca y Suecia quedaron a oscuras varias horas el 23 de septiembre. Hay diversos problemas, incluidos los relacionados con las centrales nucleares de Oskarshamn y Ringhals, en Suecia, que sin embargo se omiten de la discusión.

Fuentes: BBC, La Vanguardia, Corriere Della Sera
La Jornada 290903.

El mundo desarrollado a oscuras, en Estados Unidos, Canadá y Europa;
su modelo privatizador es un fracaso