Número 36, Marzo 30 de 2003

El mundo en lucha detendrá al fascismo

Rebelión contra la guerra

Desde antes que estallara la guerra, los corazones de los pueblos llamaron a la paz. ¡No al genocidio! dijeron todas las voces. Ese sentimiento a escala planetaria no fue escuchado y se impuso la sinrazón. El 19 de marzo se cumplió el ultimátum de Bush, Blair y Aznar para vergüenza del mundo. Se inició un despiadado bombardeo sobre Irak. Al mismo tiempo, en todos los continentes se han levantado los pueblos y, en rebelión, a una sola voz decimos: ¡Alto a la guerra imperialista!

En Italia, España, Francia, Inglaterra, Bélgica, Alemania, Grecia y otros países más, millones están en movilización permanente. No ha habido un día sin marchas de protesta contra los gobiernos de Estados Unidos, Gran Bretaña y España.

No nada más Europa, otro tanto está ocurriendo en los demás continentes. Las multitudes han recorrido las calles expresando coraje e indignación. Un movimiento de unidad y solidaridad internacional se ha producido, aislando políticamente a los gobiernos entreguistas aliados del imperialismo.

No obstante la tergiversación de los hechos, ha sido inocultable la verdad. Al interior de Irak hay una masacre, principalmente de civiles, y también hay resistencia. 10 días después de la invasión, hay lucha guerrillera. Bagdad no está tomada ni existe rendición alguna. No obstante las víctimas, el pueblo iraquí defiende su territorio y dignidad.

En el frente político, las masas se han desbordado en todos los continentes tomando iniciativas, políticas y de organización.

En Australia y Nueva Zelanda es intensa la movilización. Lo mismo en Sudáfrica, Irán, Canadá, Dinamarca, Marruecos, Rusia y Filipinas.

En América, hombres y mujeres norteamericanos han alzado la voz. En Washington, Nueva York y las principales ciudades de los Estados Unidos, el pueblo norteamericano ha expresado su desacuerdo con el gobierno. Solo en Miami, la gusanera apoya a Bush.

En Asia, los pueblos musulmanes de Pakistán e Indonesia se han levantado, lo mismo en Malaysia e incluso China, donde fue “autorizada” una manifestación. En Bangladesh ha habido huelgas. En la India las movilizaciones han sido grandes. También en Corea y Japón, incluso Israel. El pueblo árabe en Palestina, Libia, Siria, Jordania, Yemen, Egipto, está en pie de lucha en muchos casos en abierto desafío a los gobiernos.

En América Latina, las protestas se han sucedido prácticamente en todos los países. Brasil, Argentina, Cuba, Venezuela, Bermudas, Nicaragua, Bolivia, Chile, Venezuela, Perú, etc.

México no ha sido la excepción, si bien, no hemos logrado una amplia movilización. Ha habido marchas en la Ciudad de México Acapulco, Puebla, Querétaro, Chihuahua, Tijuana y otras partes.

Sería muy importante la organización de Jornadas Nacionales contra la Guerra Imperialista, con marchas simultaneas, y diversas modalidades, en la capital y las principales 100 ciudades del país.

En algunos lugares del planeta se ha pasado al enfrentamiento. No es para menos, la indignación es grande. No es suficiente, sin embargo, atacar MacDonald’s o apedrear embajadas o ministerios.

Está en el deber de todos extender y consolidar el movimiento en todas partes. Los trabajadores debemos ser los primeros, encabezar la lucha y actuar en consecuencia. Hoy el punto que unifica las voluntades de una amplia mayoría es la lucha contra la guerra imperialista.

El FTE de México llama los petroleros, electricistas y nucleares que marchan en sus filas a redoblar la lucha antimperialista y participar con todas las acciones alcance.

Pueblo y trabajadores de México contra la guerra imperialista.