La resolución de los republicanos norteamericanos, considera que "Pemex, el monopolio paraestatal mexicano, es ineficiente, plagado de corrupción y necesita una reforma sustancial y de inversión privada para ofrecer suficientes productos petroleros a México y Estados Unidos para nutrir el futuro crecimiento económico, lo cual podría frenar la migración ilegal a Estados Unidos".

Respecto a la corrupción se trata de una verdad del dominio público. Esa corrupción ha sido auspiciada por los gobiernos en turno y por las sucesivas administraciones de Pemex. La ineficiencia de Pemex no les preocupa a los gringos, la reforma sí para cambiar el régimen de propiedad. Los yankis lo que quieren es la propiedad privada de Pemex. Aparentemente Fox se opone, pero se trata de un discurso engañoso e insultante. Expresa que Pemex no se vende, pero sí se privatiza. Como es característico en ese individuo, dice una cosa y hace otra.

Esta “Resolución Halliburton” la aprobaron 24 votos republicanos, pero se trata de una propuesta previa de Fox. Este y Muñoz Leos, día y noche hacen lo que quieren con el patrimonio colectivo de los mexicanos. Tratándose de Pemex, día y noche vienen haciendo lo que ahora aprobaron “como sentir” los republicanos.

“Pemex no está a la venta” declaró Ernesto Derbez canciller de Fox, desde Colombia. “Lo de Pemex por migración no es para tanto” dijo Jorge Castañeda, candidato presidencial del imperialismo actualmente ya en campaña. Esa resolución “refleja un ánimo de negociar”. Estas declaraciones las hizo el “téorico”, supuesto académico, de la basura que se trasmite por Monitor de InfoRed.

De inmediato se sucedieron otras declaraciones sin ton ni son. Los charros del Congreso del Trabajo (CT), a través de Enrique Aguilar, secretario de asuntos económicos, “pidió al gobierno mexicano rechazar la pretensión “absurda y ventajosa” del Partido Republicano.

Benito Bahena, de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) dijo que “el gobierno federal debe mostrar su política nacionalista y rechazar en forma tajante cualquier intento de apertura privada en Pemex, ya que la Constitución establece que es propiedad absolutamente de todos los mexicanos y “los sindicatos democráticos no permitiremos más una maniobra imperialista”.

Estas expresiones son patéticas. Los charros del CT le piden al gobierno rechazar una propuesta con la cual ese gobierno está absurdamente convencido. La UNT le pide al mismo gobierno (proimperialista) mostrar una política nacionalista. Desde luego que Fox lo hará, pero a favor de la Patria (su patria) norteamericana.

La diputada Alejandra Barrales (PRD) “convocó a todos los sectores a integrar alianzas de oposición ante una posible apertura de la paraestatal a la inversión extranjera”. La señora todavía no sabe que esa “posible” apertura es ya una triste realidad. Parece que tampoco sabe de los proyectos privatizadores de los legisladores de su partido en materia energética.

La declaración más ridícula estuvo a cargo de Rosario Robles, presidenta del PRD. “Fox debe fajarse los pantalones”, dijo, “y decir no a la intención de Estados Unidos de negociar un acuerdo migratorio a cambio de Petróleos Mexicanos”. No únicamente es desafortunada la declaración sino la política que se promueve. Dijo Robles hacia Fox, que “se faje bien los pantalones y defienda lo que es de toda la nación, lo que es de todo el país”. ¡Cómo no!, ahora resulta que Fox ha de ser el defensor de la Nación. ¡Eso no lo cree ni el mismo Fox! (Fuente: Notimex, en Milenio Diario 091003).

Con ese “ambientito”, el gobierno foxista emitió un comunicado, tres días después, expresando que “El gobierno de México ''de ninguna manera aceptará'' privatizar ni vender Petróleos Mexicanos (Pemex) a cambio de un acuerdo migratorio con Estados Unidos”. (en La Jornada 120503).

Pemex ''no está en venta'', dijo Fox en Minatitlán en un acto donde se anunció la reconfiguración de la Refinería Lázaro Cárdenas. (Venegas JM, en La Jornada 130503). Esta reconfiguración se hará por contratistas financiados por el propio Pemex.

Algunos funcionarios como Santiago Creel, secretario de gobernación foxista, repitió que “el petróleo no está sujeto a negociación”. Un senador panista, Jorge Lozano Armengol, llamó a vender a Pemex pues se debe ''aprovechar esta oportunidad, porque a lo mejor no se vuelve a presentar''.

“Rechazo total a la apertura de Pemex” declaró el Partido Acción Nacional (PAN). La propuesta de Estados Unidos, imprudente, dijo Felipe Bravo mena presidente de ese partido. (Salinas J, Llanos R, en La Jornada 120503).

Es “una tormenta en un vaso de agua” dijo Ernesto Martens, secretario de energía de Fox, al minimizar el tema. Mientras, ya se concretó la ocupación imperialista en Irak y México sigue exportando 1 millón 800 mil barriles diarios, de los cuales el 95% se destina a los Estados Unidos.

Para algunos investigadores, la “inusual e inesperada propuesta es una ''presión'' de la petrocracia texana que llevó al poder a George W. Bush y a Vicente Fox y ahora reclama sus cuotas. Faltó un poco de precisión, la propuesta ni es inusual ni inesperada, está en marcha y, las cuotas, ya se están cobrando desde el interior de Pemex.

Un ingeniero petrolero, puso las cosas en claro. “Francisco Garicochea, dirigente del grupo de ingenieros petroleros Constitución de 1917, aseguró que el cometido de esta demanda no es sólo lograr la apertura del sector energético al capital privado estadounidense, sino que quieren la propiedad del gas y el petróleo de México. En los hechos, agregó, hay una apertura de Pemex para que las compañías estadounidenses participen en toda la gama de actividades dentro de Pemex. ''Pretenden que renunciemos al patrimonio petrolero que no pertenece al gobierno, sino a todos los mexicanos.'' (Rodríguez I, en La Jornada 121003).

Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la Paz dijo que Estados Unidos busca engullir a Pemex y anexarse América Latina. “El plan estadunidense de vincular un acuerdo migratorio con México a la apertura de Pemex es el primer paso para la apropiación del crudo. El pueblo mexicano debe impedir a toda costa que se privatice esta empresa nacional. (Petrich B, en La Jornada 120503).

El senador priísta Oscar Cantón Zetina señaló: ''¿Quiénes se creen los legisladores republicanos para ordenar los pasos específicos en Pemex para reformar sus operaciones? ¿Es que acaso ya escrituraron nuestro petróleo? ¿O dan como un hecho que nuestros recursos energéticos les pertenecen?'' Incluso calificó de ''timorato'' al embajador mexicano en Washington, Juan José Bremer, porque ''quiso minimizar el delicado asunto''. (Ballinas V, Méndez E, en La Jornada 130503).

“La apertura de Pemex a las empresas multinacionales del ramo -incluyendo las de construcción- domiciliadas en Estados Unidos, se ha venido realizando desde hace varios sexenios, aunque de manera solapada, y durante este gobierno, Fox y el director de Pemex, Raúl Muñoz Leos, han liderado el esquema empresarial y geoestratégico impulsado por Washington a través de diversos medios incluyendo el endoso al esquema bushiano de "integración energética" de América del Norte y la profundización de los esquemas de "modernización" y restructuración de Pemex promovidos desde mediados de los 80 por el Banco Mundial (BM)”. (Saxe-Fernández J, en La Jornada 150503). En las recientes declaraciones panistas dijo, “se trata de un patriotismo retórico y oportunista de cara a las elecciones” a realizarse en julio próximo.

En el Senado de la República, Laura Alicia Garza Galindo expresó que el gobierno foxista pruebe en los hechos que Pemex no se vende”. Los senadores priístas, con Manuel Bartlet a la cabeza han sido los más críticos a la política energética foxista. Otras voces han sido más claras y contundentes contra Fox.

“Los riesgos de que la privatización del sector energético se acentúe en lo que resta del sexenio son mayores, a pesar de que Estados Unidos controle el petróleo iraquí, pues dicha privatización es estratégica para Washington y parte central del programa de Fox y sus compromisos. Y esto lo saben muchos sectores a los que no engaña cuando repite para la propaganda interna que Pemex no se vende, cuando sigilosamente no ha hecho otra cosa desde que llegó a Los Pinos, y también los miembros del PRI y del PRD que lo felicitaron por su actitud “patriótica” en lo que no es una “comedia de equivocaciones”, sino simulación”. (Garrido LJ, en La Jornada 160503).

Los trabajadores mexicanos de la energía rechazamos la política energética norteamericana y la política energética foxista, ambas contrarias al interés de los pueblos norteamericano y mexicano.

¡Alto al fascismo del gobierno norteamericano!
¡Abajo Fox y su gobierno proyanki!
¡Pueblo y trabajadores defenderemos a Pemex!
¡Pemex Sí, PeUSA No!

Los energéticos mexicanos son de la Nación, el gobierno privatiza lo que no es suyo. ¡Abajo Fox y su gobierno proyanki!