FTE México

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Volumen 2, Número 30, Septiembre 30 de 2002

 

Informe de Elías Ayub

La capacidad eléctrica instalada, a junio de 2002, es de 40 mil 336 MW según CFE. Al 2011 se proyectan 62 mil 385 MW mediante 61 proyectos de generación (privada), la mitad están en marcha. La privatización furtiva es mayor e incluye casi 200 permisos fraudulentos. Esto se ha hecho en la práctica, sin ninguna reforma constitucional. Fox, Martens y Elías Ayub traicionan a la Nación, deben renunciar y ser juzgados.

Alfredo Elías Ayub, director de CFE, informó a la Junta de Gobierno del Organismo que supuestamente dirige, que la CFE tiene prevista la construcción de 61 proyectos de generación con una capacidad global de 28 mil 862 Megawatts (MW) en el periodo 2002-2011.

El 7 de agosto, precisó en inserción pagada a la prensa nacional, que de esos proyectos 7 ya están en operación, 10 en construcción, 2 han sido adjudicados, 4 están en licitación y otros 6 se licitarán en el transcurso de este año. Los 32 restantes serán licitados entre los años 2003 y 2007.

Por supuesto, Tito Elías Ayub no dijo que se trata de proyectos privados, en el contexto de la privatización furtiva, ilegal y fraudulenta, que lleva a cabo el gobierno de Fox.

Lo que sí dijo fue que “la CFE podrá llegar a una capacidad instalada de 62 mil 385 MW en diciembre de 2011, lo que le permitirá atender la demanda y proporcionar un servicio de excelencia a sus clientes, que se incrementan a una tasa promedio de 900 mil por año. Esto significa un aumento de 65 por ciento en la infraestructura actual de la empresa”.

En este contexto dijo, que de enero de la fecha, se terminó la construcción de 17 centrales, con una capacidad de generación de 5 mil 418 MW e inversiones por 3 mil 459 millones de dólares, que permitieron a la paraestatal alcanzar una capacidad instalada de más de 40 mil MW.

No explicó tampoco que esas plantas son privadas y que CFE ha pactado comprarles toda la energía que generen, a los precios que las transnacionales quieran, garantizados durante 25 años ¿De que presume, entonces, Tito Ayub?

Elías Ayub informó que, a junio de 2002, la empresa registró una capacidad instalada de generación de 40 mil 336 MW, cifra superior en 11.56 por ciento a la que había en 2001.

Tampoco explicó que ese crecimiento se debe no a la eficiencia ni planeación eléctrica, mismas que no existen, sino al indiscriminado número de permisos privados de generación autorizados unilateralmente por los gobiernos zedillista y foxista.


Plantas eléctricas terminadas, 2000-2002

Tipo

Central

Capacidad MW

Consorcio

CCC

Bajío

495

Intergen

CG

Tres Vírgenes

10

Alston

CCC

Chihuahua

435

Mitsubishi

CCC

Hermosillo

229

Unión Fenosa

CCC

Tuxpan II

495

Mitsubishi

CD

San Carlos II

39

Alston

CCC

Monterrey II

437

Alston

CCC

Altamira II

495

EDF-Mitsubishi

CCC

Monterrey III

449

Iberdrola

CT

Mérida III

484

AES

CG

Cerro Prieto

100

Mitsubishi

CCC

Río Bravo II

495

EDF

TG

El Sauz

130

Siemens-Westinghouse

CT

Valle de México

249

ABB/Alston

TG

El Encino

131

Siemens-Westinghouse

(*) Repotenciación Fuente : www.cfe.gob.mx


Las próximas licitaciones que prepara CFE son: Tuxpan V (479MW), Altamira V (450MW), Mexicali II (975MW), Tamazunchale (1,106MW) y Valladolid III (508MW). Todas estas licitaciones serían bajo la modalidad de Productor Externo de Energía (sic) (privados) y entrarían en operación comercial entre 2006 y 2007.

Los técnicos que le escriben a Elías Ayub tergiversan la realidad. Tratando de quedar bien, dicen que “En los últimos cuatro años, los inversionistas de todo el mundo han mostrado bastante interés por participar en el desarrollo del sector eléctrico en México, muestra de ello son los directorios de los consorcios que han resultado ganadores en los procesos de licitación...”

Como no van a estar contentos si la propia CFE les está entregando lo que la Constitución prohíbe. El interés de esos consorcios es el lucro y el interés de Tito es hacer negocios turbios.

Los 61 proyectos de los que habló Elías Ayub, que representan 28 mil 862 MW hacia el 2011, es un número cercano a los 32 mil MW que “proyecta” Fox sin fecha. La mitad de los proyectos ya está en marcha y los demás están previstos para licitarse durante el resto de la gestión foxista. Fox no indica fecha, porque ésta ya está rebasada, 30 permisos ya se otorgaron, la propiedad de la nueva infraestructura eléctrica ya es privada. A nivel nacional ya van 200 permisos adicionales otorgados al sector privado disfrazados de autoabastecimiento y cogeneración, que no son tales.

Por eso es que Moody’s, firma consultora norteamericana, premia a la burocracia neoliberal foxista y hasta los felicita por la supresión de los subsidios eléctricos al fin que los consumidores menores pagarán los 500 millones de dólares “ahorrados” en este año.

¡Todo esto significa un verdadero fraude a la Nación! Días después, el 15 de agosto, Fox envió al Senado de la República 5 iniciativas para la privatización eléctrica. Pareciera innecesaria tanta preocupación legislativa. Al momento, sin ninguna modificación constitucional la mitad de sus metas se ha cumplido y el faltante está por cumplirse. La privatización eléctrica en México es un hecho.

¿Qué pretende Fox con sus iniciativas eléctricas? Ante todo, legalizar sus fraudes legitimando a la privatización de facto. Si se pudiera modificar la Constitución, mejor.

Es evidente que, esto último difícilmente ocurrirá. Entonces, los partidos políticos irían a un Plan B, consistente en aceptar que no haya reformas constitucionales, pero sí aprobar reformas a la legislación eléctrica secundaria.

En este caso, las propuestas del PAN, PRI y PRD son muy parecidas. Todos coinciden, absurdamente, en ratificar las reformas de través de figuras espurias que permiten la participación privada en la industria eléctrica nacionalizada.

La (i)responsabilidad de Tito es inocultable. Supuestamente dirige a la principal empresa eléctrica de México, pero hace todo para destruirla. Su informe podrán aprobarlo los burócratas y charros “vendepatrias” que constituyen a esa Junta de Gobierno, el pueblo de México lo rechaza en todos sus términos.

Más aún, Elías Ayub debe salir de CFE y responder ante la Nación por usurpar funciones comprometiendo el patrimonio nacional entregándolo impunemente al capital extranjero.

Los legisladores del PRI y PRD también incurrirían en responsabilidad. Es una necedad, por decir menos, insistir en sendas iniciativas privatizadoras mediante reformas a la legislación secundaria. Le están preparando a Fox el escenario que quiere. Mediante ese mecanismo, la Constitución seguirá afirmando el derecho de la Nación, pero en la práctica sería inexistente.

La alternativa está en culminar la nacionalización mediante la cabal integración de la industria eléctrica nacionalizada y la cancelación, cancelación, de TODAS las concesiones privadas anticonstitucionales. Aún es tiempo, pronto podría ser más difícil, el capital privado se está apropiando aceleradamente de la Nación.

¡Venceremos! así tengamos que hacer una nueva nacionalización eléctrica. El pueblo mexicano en lucha defenderá a México en cualquier circunstancia.

¡La Patria no se vende!

La industria eléctrica de México es propiedad de la Nación no de las transnacionales,  ni de la burocracia política en turno FOTO : tigerpress