Recomendaciones del imperialismo a Calderón y Labastida
GasMex en marcha
′ Desmantelar y privatizar a PEMEX son planes puestos en práctica.
′ A la fecha existe un fuerte avance en la privatización del gas natural.
′ El interés fundamental está ahora en las reservas y producción de petróleo crudo.
′ Calderón y Labastida son simples cabilderos al servicio de las transnacionales.
Alfredo Jalife (en La Jornada 6 jun 2007)
publicó que, entre las 50 “recomendaciones iniciales”, que
representan las “prioridades del sector privado” para el ASPAN
está “el desmantelamiento parcelar de Pemex, que sería
privatizado tangencialmente en su segmento gasero mediante la creación de
Gasmex a más tardar en el año 2010, lo que queda asentado en su
documento de febrero de este año, que "incluye la construcción,
propiedad (sic) y operación de gasoductos y oleoductos" (Plan Labastida),
en el que las trasnacionales privadas de EU jugarían papel
determinante”.
Esos son los planes del proyecto de
integración energética trilateral impulsado por el CCAN -Consejo
de Competitividad de América del Norte (NACC, por sus siglas en
inglés). De acuerdo a esos planes, "existe potencial (sic) para una
reforma significativa (sic) en México en la liberalización del
comercio de los productos refinados, así como para su almacenamiento y
distribución" mediante "cambios en la gobernación (sic) y
organización de Pemex". Con la "liberalización plena (sic) del
sector energético de México, sus reservas de petróleo y gas
relativamente abundantes (¡súper sic!) atraerían
tecnología e inversiones significativas (sic)".
Esos son,
EXACTAMENTE, los argumentos que promueve el senador Francisco Labastida Ochoa
(PRI), convertido en cabildero de las transnacionales y asignado como empleado
al servicio de Felipe Calderón. Los “argumentos” son los
reiterados para modificar la legislación petrolera secundaria tendiente a
permitir “legalmente” la privatización de
PEMEX.
Sería una privatización No constitucional pero
privatización al fin aún contradiciendo flagrantemente y violando
explícitamente a la propia Constitución.
Según los
ideólogos del norte, “A partir de 2008 se lanzará una
campaña de linchamiento (le llaman "ejercicio de parámetros de
referencia") para "publicitar (sic) la brecha (sic) operativa de Pemex", que
"obligará (sic) a proceder con los cambios estructurales", en especial
del gas en el que México se ha vuelto importador cuando cuenta con
"vastas (sic) reservas de gas natural". Se pondrá en la picota la
disminución de refinación de México, que importa 6 mil
millones de dólares al año y el patético nivel de sus
recursos humanos (la "brecha del conocimiento").
Esa ofensiva seguramente
será fuerte no para “deshacerse” de la parte industrial
relacionada con el gas sino la del petróleo. A La fecha, con 185 permisos
privados otorgados ilegalmente por la Comisión Reguladora de
Energía, la distribución, transporte y almacenamiento del gas
natural es COMPLETAMENTE privada. Lo mismo ocurre tratándose de la
exploración y explotación del gas seco. Más aún,
está en marcha un amplio proceso para privatizar las redes de oleoductos,
gasoductos y poliductos en todo el país.
No siendo suficiente para
las transnacionales ahora proponen fraccionar a PEMEX y Gasmex. Se trata de una
propuesta aparentemente absurda pero tramposa. El gas natural se produce
ASOCIADO al petróleo crudo, ambos son las materias primas que determinan
a un mismo proceso de trabajo. Pero, no es el gas el que interesa, allí
ya están metidos, lo que importa es el petróleo crudo, donde
quiera que esté.
El objetivo del imperialismo es “desembocar
en la creación del CEAN: Consejo de Energía de América del
Norte (NAEC, por sus siglas en inglés)”. Ese objetivo requiere de
la posesión, por cualquier vía, tanto del gas como del
petróleo crudo.
Complejo Cantarell en el Golfo de México. Desde 2004, Pemex llegó al pico de producción,
ahora se está en declive sin que haya nuevos descubrimientos relevantes.