Reunión de trabajadores petroleros
Universidad Obrera de México
18 de noviembre de 2006
El petróleo de México
Nuestra bandera: Defensa de la industria petrolera y recursos energéticos.
Unificación en un solo movimiento de trabajadores a nivel nacional.
Preparar la Convención Nacional Petrolera con eventos regionales.
1 Introducción
El petróleo, el gas y el agua
están en el centro de la disputa económico-política
mundial. Dos escenarios lleva adelante el imperialismo: 1- la apropiación
de tierras, incluidos sus recursos naturales energéticos, por la
vía de la compra o la invasión, 2- la privatización de los
recursos energéticos e infraestructura industrial.
En pocas
regiones del mundo se concentran las reservas más importantes de
petróleo crudo, gas y agua. Los energéticos son motivo de guerras
de agresión, afectando la vida humana, soberanía nacional y
seguridad energética de los pueblos.
En México, la
industria petrolera es una conquista de los trabajadores y del pueblo. Si
embargo, hoy se vive un acelerado proceso de destrucción resultado de una
política energética antinacional. Los trabajadores petroleros
hemos sido sometidos por décadas. Hoy debemos reorganizarnos y enarbolar
banderas comunes.
2 Desarrollo
2.1 Panorama petrolero mundial
La situación a nivel mundial es
crítica. El centro de la preocupación i9mperialista está en
la disponibilidad de reservas para atender su enorme y creciente consumo y
despilfarro. En un escenario optimista se estiman reservas para los siguientes
25 años; en el escenario pesimista se estima que el mundo está a
punto de una severa crisis que, tal vez, ya empezó.
Junto a la
invasión armada de las tropas anglo-norteamericanas a Irak, coexiste otra
invasión de corporaciones transnacionales que se apropian de la riqueza
energética. El conflicto en Medio Oriente está determinado por la
pretensión de la apropiación privada del petróleo y el agua
de los pueblos.
Esta política está proyectada para
aplicarse a escala mundial. En Latinoamérica se incluye a Venezuela y
México.
2.2 Panorama petrolero nacional
En nuestro país, se logró la
expropiación de la industria petrolera en jornadas epopéyicas.
Pero, la nacionalización nunca concluyó. Jamás se
siguió una política petrolera independiente. Más
aún, desde hace 30 años se sigue una política opuesta, y
pro-imperialista, basada en la creciente extracción de altos
volúmenes de petróleo crudo y su consecuente exportación,
principalmente hacia Estados Unidos.
El proceso de trabajo petrolero ha
sido fraccionado y, una parte importante de la industria se ha privatizado. El
proceso de privatización es inconstitucional. En materia de
hidrocarburos, NO se otorgará concesiones ni contratos a los
particulares, indica el artículo 27 constitucional. Todas las actividades
estratégicas se deben realizar mediante administración directa por
Petróleos Mexicanos (Pemex) y, el desarrollo tecnológico, por el
Instituto Mexicano del Petróleo (IMP). Pero, mediante reformas ilegales a
la legislación secundaria se ha procedido a privatizar la
petroquímica, la distribución, transporte y almacenamiento de gas
natural, la exploración y explotación de gas seco.
Una
consecuencia de la irracional política petrolera oficial es el
agotamiento de los yacimientos productores y la seria declinación en las
reservas petroleras probadas. Con base en la actual plataforma de
explotación, la relación reservas-producción está en
apenas 8.5 años.
2.3 Privatización petrolera furtiva
Mediante los Contratos de
Servicios Múltiples, los Contratos de Servicios Integrales, y los
ilegales permisos privados otorgados por la Comisión Reguladora de
Energía, multitud de transnacionales y sus filiales, se han venido
apoderando del patrimonio colectivo social en materia de
hidrocarburos.
La privatización incluye la exploración de
crudo y la perforación de pozos. Es de alto interés oficial, la
exploración en aguas profundas del Golfo de México. Los Estados
Unidos han venido perforando intensamente a grandes profundidades en la zona,
habiendo alcanzado la región de los hoyos de dona,
apropiándose de parte de mar territorial mexicano.
Los planes
oficiales apuntan a entregar esas reservas a las transnacionales imperialistas.
Su pretensión es extraer crudo para la exportación no para
satisfacer las necesidades nacionales.
Por lo demás, la
corrupción administrativa y sindical ha llegado a límites
intolerables. Al tiempo que se realiza una Expropiación Petrolera
Extranjera, también existe un acelerado proceso de destrucción de
la industria petrolera nacional.
3 Conclusiones
Los trabajadores petroleros mexicanos estamos
obligados a dar una firme respuesta obrera. De hecho, nos hemos tardado dejando
pasar multitud de atropellos y agravios. Ahora es el momento de recuperar la
dignidad proletaria y, junto al pueblo de México, enarbolar banderas
comunes, a través de un movimiento vertebrado por los propios
trabajadores petroleros.
Con estas bases, el FTE de México propone:
3.1 Defensa de la industria petrolera de México
Esta es nuestra principal bandera que significa la
lucha para poner a Pemex, efectivamente, al servicio de la Patria. Defender a la
industria significa defender el patrimonio colectivo social, que incluye a los
recursos naturales y a la infraestructura física. Esto quiere decir,
luchar por el desarrollo racional del proceso de trabajo petrolero y contra la
privatización, en cualquiera de sus modalidades.
Esta propuesta
tiene 3 aspectos básicos: a) la propiedad colectiva social de la
industria petrolera y recursos naturales, b) el desarrollo una política
petrolera independiente que incluya la transformación industrial de las
materias primas básicas, 3- la integración del proceso de trabajo petrolero.
3.2 Unificación petrolera democrática
Para rescatar a la industria
petrolera mexicana de las garras del imperialismo necesitamos de la fuerza
social que haga posible nuestra independencia. Esto quiere decir que, todos los
mexicanos, estamos llamados a unificarnos en un solo movimiento a nivel
nacional. Esto es más urgente tratándose de los trabajadores. En
materia eléctrica, los electricistas del Sindicato Mexicano de
Electricistas encabezan una lucha ejemplar. En materia petrolera, el movimiento
es casi inexistente.
Años de sometimiento han desarticulado a las
fuerzas obreras pero, no es posible ningún cambio en interés de la
nación y del pueblo, sin la acción organizada de los trabajadores.
En el presente caso, los petroleros debemos hacer un esfuerzo extraordinario
para superar problemas internos y luchas aisladas. El momento reclama la unidad.
Pero ésta no puede ser en abstracto. La unidad no se puede idealizar, es
un medio para desarrollar un programa propio y exige definición
política.
Por ello, proponemos la unificación en un solo
movimiento a nivel nacional de todos los trabajadores petroleros con base en una
práctica política incluyente y solidaria. Esto no implica la
desaparición de ninguna de las organizaciones existentes. Sí
implica un compromiso serio para trabajar en acciones concretas previamente
acordadas de manera colectiva y democrática.
3.3 Convención Nacional Petrolera
Una de las acciones que
proponemos estaría en torno a la organización de una
Convención Nacional Petrolera. Para concretarla, se realizarían
convenciones regionales previas.
El evento nacional podría ser el
próximo 18 de marzo de 2007 en la ciudad de México y, el primer
evento regional, podría ser en diciembre de 2006-enero de 2007 teniendo
como sede a una de las secciones del sureste, p.e. Coatzacoalcos o Villahermosa.
A continuación se harían otras convenciones regionales en
diversas partes del país. También podría realizarse una
Caravana Petrolera, en marzo de 2007, que recorriera la ruta de las principales
zonas petroleras del país enarbolando banderas propias.
Para la
promoción de las acciones se dispondría de las páginas
electrónicas y medios de prensa de las organizaciones de trabajadores.
Las convenciones se harían de acuerdo a una temática
específica definida por la propia convocatoria. Para coordinar las
acciones se formaría una comisión organizadora integrada por 1
representante (y un suplente) de cada organización participante.
¡Unidos Venceremos!
Frente de Trabajadores de la Energía,
de México
En defensa de la industria
petrolera de los mexicanos, los trabajadores sindicalizados debemos tomar en
nuestras manos las banderas unitarias de un movimiento nacional petrolero
independiente.
¡Unidos Venceremos! |
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