Propuestas energéticas del FTE de México
Estas y otras propuestas han sido
desarrolladas activamente por los integrantes del FTE de México, desde
los años 70s, siendo parte del Frente de Defensa de los Recursos
Naturales; y, también, en épocas posteriores, compartiendo la
lucha y desarrollo de alternativas con el ingeniero Heberto Castillo, el doctor
Ulises Ricoy, el ingeniero Rafael Decelis, el doctor David Bahen PhD y muchos
compañeros más, entre otros, los trabajadores petroleros de
diversas secciones, especialmente la 1, 34 y 35 del
STPRM.
1- Reestablecer la legalidad
constitucional rota por los gobiernos en turno al vulnerar flagrantemente lo
dispuesto por los artículos 25, 27 y 28 constitucionales en materia
energética. La ruptura es cada vez más grave debido al
otorgamiento de cientos de permisos privados inconstitucionales tanto en la
industria petrolera como en la
eléctrica.
2- Orientar los objetivos,
las actividades y la renta de la industria petrolera con criterios de beneficio
social. La industria nacionalizada no puede, ni debe, reducirse a simples
criterios mercantiles sino al desarrollo social. Esto supone una Política
Energética Independiente formulada, desarrollada, concretada y evaluada
por los investigadores, ingenieros, técnicos y trabajadores de la
energía.
3- Explotar racionalmente los
recursos naturales energéticos que son propiedad de la Nación, no
del Estado ni menos de los gobiernos en turno. A este respecto, es preciso un
Programa Nacional de Energía, así como los correspondientes Plan
Nacional de Hidrocarburos, Plan Eléctrico Nacional, y diversos programas
estratégicos.
4- Impulsar la
investigación científica y el desarrollo tecnológico que
permita la transición energética hacia otras fuentes alternas.
Desafortunadamente, al momento, el mundo no está preparado. En
México ha existido un sistemático y planeado bloqueo oficial al
desarrollo tecnológico propio.
5-
Reorganizar todo el proceso de trabajo energético con base en la
intervención de los trabajadores organizados. Esta es la lucha en el
espacio-tiempo del saber obrero que requiere de un nuevo tipo de
organización, a través de Consejos
Obreros.
6- Participar formalmente de los
planes y proyectos de Integración Energética Latinoamericana y
Caribeña.
7- Derogar todas las
reformas inconstitucionales a la legislación petrolera y
eléctrica; cancelar todos los permisos privados en materia petrolera, de
gas (transporte, distribución y almacenamiento) y generación de
energía eléctrica (en todas las modalidades); cancelar los
Contratos de Servicios Múltiples; y las franquicias a las
gasolineras.
8- Otorgar a Pemex, CFE y LFC
los recursos necesarios para financiar su desarrollo integral en los diferentes
proyectos estratégicos.
9- Respetar el
derecho de los trabajadores a organizarse sindicalmente, democratizar a su
organización sindical y reorganizarla en todos los centros de trabajo del
país.
10- Impulsar la
participación social organizada en la vigilancia del funcionamiento y
desarrollo de la industria energética
nacional.
11- Modificar radicalmente la
política de extracción de petróleo crudo y su
exportación estableciendo diferentes plataformas de producción,
continental y marina, a las actuales, reorientando el proceso productivo a la
transformación de los energéticos
primarios.
12- Suspender la exportaciones de
petróleo crudo porque la relación reservas
probadas/producción actual es mucho menor a 20 años, de hecho
menos de la mitad.
13- Suspender los
proyectos eléctricos, tipo ciclo combinado, a base de gas
natural.
14- Construir el número
necesario de refinerías
energéticas.
15- Impulsar un Programa
de cogeneración eléctrica entre la industria petrolera y la
eléctrica.
16- Desaparecer a la
Comisión Reguladora de Energía por ser lesiva al interés de
la nación.
Consideramos que la
inclusión de proyectos nucleares de potencia debe estudiarse más
detenidamente y mejor. Existen razones al respecto, entre
otras,
a) México no tiene capacidad de
financiamiento nuclear, esos proyectos son muy
costosos.
b) Las sociedades, en general, tiene
una alta percepción del riesgo y no desean instalaciones nucleares de
potencia.
c) Salvo EU, Francia y Japón, la
tendencia mundial es sin energía nuclear de FISIÓN a base de
uranio y/o plutonio.
d) La energía nuclear
de potencia, tipo fisión, tiene muchos problemas tecnológicos de
no resueltos.
e) Es inconveniente para
México la dependencia total del combustible nuclear, por razones
políticas y militares.
Como
alternativa proponemos:
17- Impulsar las
actividades de investigación y desarrollo en materia de energía,
para el soporte científico y tecnológico a la industria
energética nacionalizada de México. Esto incluiría el
desarrollo de proyectos sobre FUSION termonuclear controlada.
18- La integración de los actuales
institutos del sector (IMP, IIE, ININ) en uno solo, el Instituto Nacional de
Energía, dedicado al estudio de todas las fuentes
energéticas.
19- Asimismo, proponemos
la INTEGRACIÓN de la industria eléctrica nacionalizada con base en
la Ley Reglamentaria del Artículo 27 Constitucional en Materia de
Energía Eléctrica (Ley eléctrica del
FTE).
20- Nuestra propuestas considera,
también, que los trabajadores y pueblo de México debemos construir
una sólida unidad democrática y solidaria para rescatar a la
industria energética de México en todos los sentidos. Dado el
avance neoliberal, está planteada la necesidad de una nueva
Nacionalización que implica 3 banderas
esenciales:
a) El derecho de propiedad
colectiva social,
b) El desarrollo de una
Política Energética Independiente,
c) La integración del proceso de trabajo
energético.
En consecuencia,
proponemos la RENACIONALIZACION de la industria energética de
México (petróleo, gas y energía
eléctrica).
Las propuestas
energéticas que proponemos son parte del Programa Obrero cuyas banderas
enarbola el FTE de México.
Este
histórico proceso requiere socializar las propuestas formuladas entre los
trabajadores y forjar la unidad conciente y organizada para lograr
los objetivos acompañando este proyecto con la correspondiente
movilización social y acciones propias de la dinámica proletaria
concreta.