Movilización social y confrontación política
Crisis política en México
Campamentos por la democracia
Desde el 30 de julio, al término de la gran movilización ciudadana
en la capital mexicana, se instalaron 47 campamentos en el Zócalo y a lo largo de
9 kilómetros sobre el Paseo de la Reforma, una de las principales avenidas.
La Coalición “Por el Bien de Todos” encabezada por el Partido de la Revolución
Democrática (PRD) postuló a Andrés Manuel López Obrador (AMLO) como candidato a la
Presidencia de la República. Sin embargo el mismo 2 de julio se presentaron los
primeros s ntomas de un fraude electoral inocultable.
Las acciones de la
resistencia llevaron a que miles de ciudadanos cubrieran una amplia
extensión de calles y avenidas bloqueando la vialidad que, en la ciudad
de México, es de suyo complicada. Pero, el problema post-electoral dista
de ser un asunto de vialidad. Se trata de una crisis política nacional.
El fraude perpetrado por las mafias comandadas por José María
Aznar representa una ofensa a la mayoría de mexicanos que, en sucesivas
acciones, durante ya varias décadas, hemos tratado de abrir espacios
democráticos en México. No es la capital la que está
bloqueada, es la Nación la que está
agraviada.
Fraude electoral anunciado y confirmado
El fraude electoral en México fue
diseñado por las mafias del imperialismo y operado por Aznar y socios,
contratados por el Partido Acción Nacional (PAN), con el deliberado
propósito de imponer en la presidencia de la República Mexicana a
Felipe Calderón, un individuo perteneciente a la ultraderecha, sumamente
corrupto y proclive a los intereses extranjeros.
En el conflicto
post-electoral la radio y televisión privadas han omitido los
antecedentes. Deliberadamente olvidan las denuncias previas. El Instituto
Federal Electoral (IFE), encargado del proceso electoral, puso la base de datos
del Padrón Electoral en manos de las transnacionales. Oracle de
México y su socio Hildebrando S.A., empresa del cuñado de Felipe
Calderón, manipularon los datos. Dicho Padrón fue alterado de
manera grotesca incluyendo a más de un millón de muertos y
excluyendo a miles de mexicanos con derecho al voto. El programa fuente
para el conteo de votos siempre ha sido secreto, ningún partido lo conoce
y, el día de las elecciones produjo tales irregularidades que ni los
resultados preliminares ni el conteo de actas fueron convincentes. Ese programa
fue deliberadamente modificado para producir resultados falseados. Se produjo de
inmediato un escenario político fraudulento.
Recuento parcial de votos
Los medios han dicho que el fraude es una
“percepción”, sin embargo, hay muchas evidencias. Una
consiste en el hecho de que, en los resultados totales, existen más votos
que votantes. Según denuncia de la Coalición, hay más de
1.6 millones de votos sin sustento en boletas electorales. Este hecho es burdo
pero explicable y podría tener relación con la manipulación
deliberada del programa fuente de cómputo. Las implicaciones
serían dos, a saber, 1- un grado de abstención superior al
declarado oficialmente por el IFE (41.1%) y, 2- la victoria de AMLO quien
habría obtenido mayor número de votos que
Calderón.
Pero la Coalición descubrió un
sinnúmero de otras anomalías. En análisis de las casillas y
las respectivas actas se encontraron inconsistencias, los números
“checan” pero “no cuadran” o viceversa. Las denuncias
llevaron al IFE a abrir, unilateralmente, multitud de paquetes. Estos, en cada
distrito, están supuestamente resguardados por el Ejército federal
pero el IFE tuvo acceso al margen de los partidos contendientes. En muchos
distritos electorales el IFE procedió, indebidamente, a
“maquillar” los datos.
Irregularidades en múltiples casillas
La Coalición, desde un primer
momento, propuso el conteo de todos los votos en todas las casillas de los 300
distritos electorales. Sería la apertura de los paquetes electorales en
130 mil 477 casillas en todo el país. El objetivo era
“limpiar” la elección y darle legitimidad al presidente que
fuera electo.
El Tribunal Federal Electoral (Trife) es el organismo
responsable de atender las quejas y, finalmente, validar la elección. El
3 de agosto, el Tribunal anunció que desechaba totalmente la
petición de la Coalición rechazando el conteo Voto por Voto y
Casilla por Casilla. La argumentación del Trife fue simplista al
señalar que la negativa se basaba en que la Coalición no
había impugnado todos los distritos ni todas las casillas. Eso es
evidente, si la impugnación hubiera sido del 100 por ciento, el conteo
hubiera sido improcedente y lo pertinente sería la anulación de la
elección. Pero esto, la anulación, es algo que la Coalición
nunca ha propuesto ya que se trata de hacer valer el triunfo de AMLO. La
anulación de la votación implicaría la designación,
por el poder legislativo, de un presidente interino quien convocaría a
nuevas elecciones en un plazo máximo de 18 meses.
Entonces, el
Trife decidió proceder a un recuento parcial de los votos abriendo los
paquetes en 11 mil 839 casillas (9.07% del total). En los siguientes días
se realizó el recuento en 149 distritos. En prácticamente todos
los casos se encontraron errores aritméticos. Más de 6 mil votos
se quitaron a Calderón y 344 a López Obrador. Pero, lo más
significativo fue que, en las diversas casillas, había más votos
que votantes, o más boletas de las debidas, las listas de ciudadanos son
inconsistentes.
La Coalición anunció, desde el principio,
que no aceptaría los resultados del recuento parcial. El Trife no ha dado
los resultados finales que son previsibles porque, independientemente de la
corrección aritmética, el nuevo conteo total se volverá a
realizar con un programa de cómputo alterado que dará los
mismos resultados previos, con una mínima diferencia (0.57%), tal vez, a
favor de Calderón. Las casillas donde se encontraron anomalías,
legalmente, debieran ser anuladas pero el Trife no lo hará. Este
organismo, desde su creación, fue concebido solo como la instancia para
dar forma jurídica a las decisiones políticas. El Trife tiene
hasta el 31 de agosto para dar su informe final pero la decisión
política ya fue tomada mucho antes.
Se fortalece la resistencia
Defender la democracia ha sido marcado, por AMLO, como
el objetivo central del movimiento. Desafortunadamente, en México,
jamás ha existido democracia. Por lo demás, por democracia, cada
quien entiende lo que quiere. Fox y Calderón reiteran llamados diarios a
defender “la democracia” y hacen un manejo faccioso y
demagógico.
En 1978 se propuso la llamada Reforma Política
en México orientada a canalizar el descontento social por la vía
del parlamento y las elecciones. Pero, nunca han existido elecciones limpias. Se
recuerda con insistencia la elección de 1988. Esa vez, Carlos Salinas de
Gortari fue impuesto por las mafias internas y externas. Esa gestión
política se caracterizó por las múltiples privatizaciones
de empresas estatales, la destrucción del campo y la represión
social.
Ahora, en 2006, los mexicanos estamos ante un nuevo fraude y, en
el ánimo de millones de ciudadanos está presente una firme
convicción para impedir un nuevo atraco, sabedores que con otro gobierno
de ultraderecha, se agravarán las condiciones económicas y
sociales actualmente deterioradas al máximo por el gobierno de Fox. Para
muchos mexicanos ya no hay otra oportunidad, la situación es de
desesperación. Para los campesinos no hay alternativas. El neoliberalismo
impulsado por Fox ha traído una elevada tasa de desempleo abierto, un
empobrecimiento que alcanza a más del 80% de la población, la
privatización ilegal de los recursos e infraestructura social, la
emigración forzada a niveles históricos de expulsión y la
ruptura de la legalidad constitucional en todos los órdenes.
En
tales circunstancias, la ciudadanía movilizada ha tomado diversas
iniciativas. Los campamentos están repletos, miles de mexicanos duermen a
la intemperie y sobre el piso húmedo por las torrenciales lluvias de la
temporada. Allí viven, cocinan y participan de múltiples acciones
culturales y políticas. La Bolsa de Valores, los bancos, y las casetas de
cobro en todos los accesos a la capital y en el interior del país, han
sido bloqueados temporalmente. Los ciudadanos han hecho plantones o clausuras
simbólicas. En todos los casos, las acciones de la Coalición han
sido pacíficas.
Agresión a diputados del PRD
La violencia ha estado del lado de los medios
escritos y electrónicos. Los llamados periodistas de la televisión
ven la “insurrección” en la resistencia civil. El PAN y
socios se declaran ser “los pacíficos” y acusan a los
demás de violentos. El discurso se manipula a conveniencia identificando
al movimiento con una persona, se ataca a AMLO para desprestigiar al
movimiento.
El 14 de agosto, en las inmediaciones del Palacio
Legislativo, sede de la Cámara de Diputados, la Policía Federal
Preventiva (PFP) enfrentó con violencia a diputados del PRD. En ese
recinto se llevará a cabo, el próximo 1º de septiembre, la
presentación del último informe de gobierno de Fox. Elementos del
Ejército federal, del Estado mayor presidencial, han tomado
posesión adelantada del conjunto de edificios, junto con la
policía paramilitar (PFP) y la policía
metropolitana.
Cuando diputados y simpatizantes del PRD intentaron
instalar un campamento frente a la Cámara fueron interceptados de
inmediato con violencia. La PFP no se detuvo ante el fuero de los diputados y
procedió a golpearlos.
Sitio policiaco y militar
La PFP ha dicho que utilizará la
violencia “legítima” (sic) exactamente como lo piden
“los pacíficos” de la ultraderecha. La zona aledaña a
la Cámara de Diputados está bajo verdadero estado de sitio. Por
allí no se puede transitar, todos los vecinos deben identificarse a
satisfacción de la policía y soldados, ninguna persona o
vehículo puede pasar por esas calles. Sobre las avenidas cercanas se han
instalado barreras impenetrables de acero a lo largo de varios kilómetros
a la redonda. La Cámara está convertida en un bunker
custodiado por policías y soldados.
Con este escenario, Fox ha
anunciado desafiante que irá a la Cámara. Fox, intolerante y
cínico, adopta en los últimos tiempos un aspecto de tirano como en
las peores épocas históricas de México. En su
irresponsabilidad está auspiciando el enfrentamiento violento entre los
mexicanos.
Los intereses detrás del golpe
La compulsión del foxismo está motivada
por el compromiso con las transnacionales que se han venido apropiando
ilegalmente del patrimonio nacional y que están detrás del proceso
fraudulento. Fox está obligado a colocar como sucesor a Felipe
Calderón porque esa es una condición de las corporaciones
imperialistas. Estas impusieron a Fox y ahora pretende hacer lo mismo con
Calderón.
Tan solo en la industria energética, el 35% de la
capacidad eléctrica instalada total a nivel nacional ya es privada. Otro
tanto ocurre en materia de hidrocarburos (petróleo y gas natural). 300
empresas eléctricas y otras 300 de gas natural participan en
México, al margen y en contra, de lo dispuesto por la Constitución
del país. Entre dichas empresas están la española Repsol,
la que explora hidrocarburos en aguas someras y profundas del Golfo de
México, Iberdrola de España convertida en la “segunda”
empresa eléctrica y Unión FENOSA de España, ambas
participantes en la generación eléctrica privada. En la
distribución, transporte y almacenamiento de gas natural, también
hay varias empresas españolas.
Estas corporaciones y sus empleados
Aznar, Fox y Calderón piensan que México es todavía la
“Nueva España” y creen que lo mejor para nuestro país
es el franquismo, mismo que combatimos españoles y
mexicanos siempre solidarios con la República
Española.
La perspectiva próxima
López Obrador, en asambleas informativas
diarias en el Zócalo, ha señalado que los campamentos
seguirán por tiempo indefinido. Se prevé una resolución
adversa del Trife misma que será rechazada intensificando las acciones de
la resistencia civil. Para el 1º de septiembre, se hará un bloqueo
en los alrededores de la Cámara de Diputados. Después, el 15 de
septiembre se llevará a cabo la ceremonia de “El Grito” de
Independencia en los campamentos del Zócalo y, al siguiente día,
se realizará una Convención Nacional Democrática para
determinar las acciones a seguir extendiendo la resistencia.
Fox ha
anunciado que el tradicional “Grito”, para vitorear a los
héroes de la independencia mexicana, lo dará él y en el
Zócalo. El Ejército federal, por su parte, ha pedido que el
Zócalo y la avenida Reforma sean desalojados para realizar el
también tradicional desfile militar que Fox presidiría desde el
balcón del Palacio Nacional. Se configura un escenario de
enfrentamiento.
Se prevé, también, que el 1º de
diciembre, día de la toma de posesión del presidente electo,
habría acciones de la Coalición tendientes a impedir la
imposición de Calderón. De manera que, la temperatura
política se eleva y la crisis tiende a profundizarse.
La derecha
política se ha manifestado en contra de la Coalición acentuando
los llamados a la represión violenta. Esta no se descarta. Peor
aún, Fox la está invitando a diario. Como en los peores tiempos ya
anunció que “asumirá los costos políticos” para
facilitarle el camino a Calderón. Por su parte, el pueblo de
México no parece dispuesto a seguir siendo impunemente
sometido.
Campamentos instalados
en el Zócalo de la capital mexicana con la presencia de miles de
ciudadanos procedentes de los 31 estados del país y las 16 delegaciones
del Distrito Federal. Los 47 campamentos son parte de la resistencia civil
pacífica en contra del fraude electoral
presidencial.