Resultados electorales alterados
El virus-ife
Sospechas documentadas
Algunos expertos han dicho, después de las
elecciones del 2 de julio, que el Instituto Federal Electoral (IFE)
habría manipulado los datos de entrada de la votación; otros han
declarado sobre la posibilidad de que el IFE haya “sembrado” un
software para alterar los resultados. Diversos científicos han dado a
conocer múltiples dudas respecto al comportamiento estadístico de
los resultados a favor de Calderón y Andrés Manuel López
Obrador, contendientes de los partidos PAN y PRD respectivamente.
Una
observación concierne a la tendencia gráfica del conteo de actas
en los 300 distritos. El conteo empieza con una ventaja de Obrador misma que,
conforme avanza el conteo, disminuye consistentemente mientras el conteo por
Calderón aumenta sucesivamente. Se forman dos curvas, una es espejo de la
otra. Mientras más avanza el conteo, más disminuye para Obrador e,
inversamente, aumenta para Calderón. Después del conteo de
más del 94% de actas, se produce un cruce de las curvas y, hacia el
final, Calderón rebasa a Obrador quien sigue descendiendo.
Este
comportamiento de las gráficas no es casual, corresponde a los datos
generados por el programa de cómputo utilizado por el IFE. Los
investigadores han señalado manipulación en los datos de entrada.
Eso es parcialmente cierto, en multitud de casillas (40 mil según el PRD)
existen inconsistencias aritméticas. Se trata de ciertos detalles
numéricos pequeños aunque, por ser tan cuantiosos, pudieran tener
mayor importancia. Pero el problema no está en los Datos de Entrada sino
en el Procesamiento de esos datos. ¿Quién tiene el código
fuente? preguntamos oportunamente (ver energía75). Nadie
contestó ni siquiera se interesó, salvo las mafias poseedoras de
ese programa al que habían alterado deliberadamente.
Conteo de actas en los 300
distritos electorales. De acuerdo a los datos del IFE, transmitidos por la
agencia de noticias Notimex y otros difusores autorizados, conforme avanzaba el
conteo López Obrador bajaba más y más y Calderón
subía más y más produciendo una grafica con un
comportamiento simétrico. Al final, después de más del 94%
de actas contadas, Calderón superó a Obrador con una diferencia
menor al 1%. Tal comportamiento es posible pero no es real sino
simulado.
La operación del PREP
Los Datos de Entrada son aquellos producidos durante la
votación, es decir, el conjunto de datos que corresponden a 130 mil
casillas en 300 distritos electorales. Allí se indican los votos
obtenidos por cada partido contendiente: PAN, PRD, PRI, PAN-AL y Alternativa,
más los números correspondientes a los Candidatos Independientes y
a los Votos Anulados. En cada Distrito Electoral, los votos por cada
contendiente son la suma de los recibidos en las casillas que integran al
Distrito en cuestión. Los datos totales, a nivel nacional, resultan de
sumar los votos obtenidos en cada uno de los 300 distritos.
Salvo casos
de inconsistencia numérica, en cada casilla se contaron los votos en
presencia de los funcionarios electorales y los representantes de los partidos
políticos. En aquellos casos, donde los partidos no tuvieron
representantes de casilla es más fácil que ocurran
“inconsistencias”. Sin embargo, los datos de Entrada, derivados de
las casillas y distritos, pueden verificarse.
El acopio de actas de las
casillas se hace por el Centro de Acopio y Transmisión de Datos (CEDAT)
que clasifica y ordena las actas. Los datos se ingresan electrónicamente
a las terminales de computadora y la información capturada se trasmite
desde los CEDAT hasta el Centro Nacional de Recepción de Resultados del
Programa de Resultados Electorales Preliminares (CENAPREP) que se encuentra en
la ciudad de México. Después de que los datos ingresan a la base
de datos del CENAPREP, éste emite un acuse de recibo al correspondiente
CEDAT y éstos verifican que los datos del recibo coincidan con el
acta.
El procesamiento de la información lo realiza el CENAPREP y
los resultados se difunden a través de pantallas y computadoras,
vía Internet e intranet.
En 2005, el IFE constituyó un
Comité Técnico Asesor del PREP cuyas funciones, entre otras,
incluyen “Apoyar y asesorar en la coordinación del desarrollo y la
adquisición de los programas de cómputo necesarios para los
procesos de captura, validación, transmisión, recepción,
consolidación y difusión de los resultados electorales
preliminares de las elecciones federales, en el marco de la política
informática institucional;...”. Este comité está en
funciones del 15 de enero al 15 de agosto de 2006.
El comité
participa en actividades para el proceso de captura, medidas de seguridad y
difusión de los resultados. Esto es, se trata de funciones de
asesoría para la aplicación y operación del
PREP.
Son miembros de este Comité: Adolfo Guzmán Arenas,
experto en desarrollo de software y sistemas, investigador del Centro de
Investigación en Computación del Instituto Politécnico
Nacional (IPN); Alejandro Pisanty Baruch, experto en comunicación
organizacional, redes y difusión, director General de Servicios de
Cómputo Académico (DGSCA) de la Universidad Nacional
Autónoma de México (UNAM); Carlos Fernando José Jaimes
Pastrana, director de la Escuela de Tecnologías de Información y
Electrónica del Instituto Tecnológico de Monterrey (ITESM), campus
Monterrey; Judith Zubieta García, investigadora del Instituto de
Investigaciones Sociales de la UNAM; y, Salma Leticia Jalife Villalón,
coordinadora de la Corporación Universitaria para el Desarrollo de
Internet (CUDI).
Resulta extraño que contando con tales expertos,
el IFE haya delgado en el coordinador de la Unidad de Servicios de
Informática del IFE, René Miranda, la explicación de tan
flagrantes fallas. Como responsable del PREP, Miranda se dedicó a repetir
ante los medios la versión oficial del IFE, en vez de explicar la
situación técnica.
La CAPTURA de datos “bien”, el PROCESAMIENTO mal
El
control FORMAL de los resultados electorales estuvo a cargo del IFE pero, las
decisiones no. Se ha dicho que la elección estuvo en manos de más
de 1 millón de ciudadanos en las casillas, que allí mismo se
contó y, luego, en cada distrito se volvió a contar cotejando las
actas de las casillas. Después, los resultados en cada distrito,
correspondientes a todas y cada una de las casillas, fueron capturados e
ingresados al sistema de cómputo. El proceso fue muy limpio, han repetido
el gobierno y los medios.
Todo esto pudiera estar “bien”,
independientemente de inconsistencias aritméticas. Es decir, hasta el
ingreso de los DATOS de ENTRADA, el proceso pudiera ser “impecable”.
Sin embargo, eso, NO es todo. Después, sigue la importantísima
fase del PROCESAMIENTO de los datos y, allí, SÍ hay
problema.
El problema consiste en que, los Datos de Entrada NO coinciden
con los Datos de Salida. La razón es simple: están desviados,
checan pero no cuadran, o bien, cuadran pero no checan. De allí el
comportamiento estadístico errático. En los resultados anunciados
por el PREP, el 3 de julio, se observó una diferencia de 3 millones 549
mil votos inexistentes, las simples sumas entre el total de participantes y los
resultados derivados de la votación obtenida por los contendientes NO
coincide (ver energía76 suplemento). Después, el IFE hizo
un “rearreglo” e informó de una diferencia menor; el
rearreglo consistió en distribuir aproximadamente 2 millones entre los
diversos contendientes manteniendo la misma tendencia final; aún
así los resultados NO checan.
Después, cuando se
realizó el conteo de actas en los 300 distritos, los resultados totales
fueron diferentes al PREP pero manteniendo la misma tendencia, es decir, dando
ganador a Calderón por una diferencia menor al 1%. Al revisar las
anomalías en las diferentes casillas impugnadas (más de 40 mil),
el PRD y algunos investigadores encuentran que hay un faltante de más de
1 millón de votos que no están respaldados por boletas, es decir,
existen más votos que boletas electorales.
Programa fuente alterado
Las evidencias empíricas constatan lo que hemos
señalado, estamos ante un fraude electoral computacional. Este no fue
producido ni en la captura de datos, ni en la operación del programa ni
en la difusión de los resultados. El fraude se planeó y
diseño previamente y al margen del proceso electoral; ocurrió al
momento de elaborarse el programa de cómputo. Para ello se introdujo un
algoritmo modificado, es decir, el programa funcionó con un
algoritmo, diferente al normal y correcto, que fue
modificado.
Inicialmente, el IFE ofreció un primer dato, no
comprobado porque jamás fue verificado, indicando el total de mexicanos
con derecho al voto, se anunció un Padrón Electoral (P) de 71
millones 350 mil. Después, los pasos que pudieron llevar a la
modificación del algoritmo y que produjeron resultados alterados
incluyeron:
1- La definición a priori del total (T) de votantes esperados. El
IFE, antes de empezar las votaciones, anunció a priori que la
participación sería del 60%. Al final, se reporto que fue del
58.9%, es decir, aproximadamente 42 millones de mexicanos.
2- Antes de iniciarse la jornada de votación del 2 de julio, las
encuestas promovidas por el PAN y de más mafias hicieron públicos
sus planes. Hasta marzo, prácticamente todas las encuestas ubicaban a
Obrador con 10 puntos arriba de Calderón pero el panorama cambió
súbitamente, sin ninguna explicación. A principios de abril, la
encuesta del Grupo de Economistas Asociados (GEA) de Reyes Heroles otorgaba 36%
a Calderón y 34% a Obrador. A fines de abril la consulta Mitofsky,
patrocinada por Televisa, declaró que las preferencias eran: 35% para
Calderón y 34% para López Obrador. Estos datos, basados en
encuestas falsas, fueron inventados pero se trata de datos clave.
Los datos hechos públicos por las falsas encuestas fueron
introducidos en el programa fuente
alterado para ajustar los resultados
finales de cada contendiente a los valores previamente decididos por las mafias.
Así, al final, los datos del PREP indicaron: 36.38% para Calderón
y 35.34% para Obrador; el Conteo de Actas indicó 35.89% para
Calderón y 35.31 para Obrador. Luego, se introdujo al programa
alterado la asignación de 5% de los votos para el PAN-AL y 2% para
Alternativa; también se incluyó la parte correspondiente a los
Candidatos Independientes y a los Votos Anulados; la diferencia porcentual
(21.57%) se otorgó al PRI. Todos estos datos NO son ciertos fueron
manipulados.
Con los porcentajes “ajustados” y el total
“supuesto” de votantes el IFE dio a conocer el número de
votos para cada contendiente. Son datos irreales.
3- Con el total “supuesto” y los porcentajes
“ajustados” se realizó un ajuste mayor. Los votos por cada
contendiente, deben corresponder al total de votos sumados en todas y cada una
de las 130 mil casillas, de manera que los datos de entrada coincidan con los
datos de salida. Pero no fue así. Para hacer este nuevo
“ajuste” se introdujo un factor a sumar en cada casilla. Este
factor resultaría de la diferencia entre los votos totales (ajustados) de
cada contendiente menos la suma de votos (reales) obtenidos en el total de
casillas; esta diferencia, después, se dividiría entre el total de
las 130 mil casillas para dar un factor de distribución que se
adicionaría al conteo de cada casilla. De esta manera, se
produciría un algoritmo modificado que haría coincidir los
resultados del IFE y de las
encuestas.
Votos virtuales inventados
El algoritmo modificado es un programa. En este
sentido se parece a un virus que es, también, un programa. El algoritmo
modificado, o virus-ife, altera los resultados, igual que un virus. Sin
embargo, en estricto sentido el programa fuente modificado no es un virus, sino
un programa de cómputo alterado para producir los resultados
previamente determinados. La formulación del algoritmo modificado
es posible y la ejecución del programa resulta impecable, la
alteración de los resultados es aparentemente invisible y difícil
de detectar, peor aún de comprobar.
Sin embargo, el fraude realizado
por las mafias comandadas por Aznar, operadas por Sola y Morris, Oracle e
Hildebrando y otras, utilizando al IFE, resultó muy burdo. En una simple
inspección, el resultado de existir más votos que boletas
electorales, es decir, votos que no están respaldados por boletas, es una
muestra de que el programa de cómputo fue alterado. Esa diferencia fue
producida por el factor de distribución que “ajustó”
los valores en las casillas a los valores finales previamente definidos y
anunciados por las encuestas falsas.
Por supuesto, el fraude electoral
computacional recientemente realizado en México constituye una seria
ofensa a los mexicanos, votantes y no votantes. El fraude NO lo originaron ni
operaron los votantes ni los funcionarios de casilla, ni los representantes de
los partidos contendientes. Eso era antes, con los métodos antiguos y
pedestres; esta vez el fraude fue preparado y operado a la distancia del
proceso, antes del mismo y por grupos “aparentemente” ajenos al
propio IFE. Este es el resultado de una política errónea del
gobierno federal al poner el proceso electoral en manos de las transnacionales,
el IFE con todos sus “expertos” ha sido incapaz de desarrollar su
propio software deviniendo tan solo en simple instrumento al servicio de las
mafias.
Millones de mexicanos en las
calles de la capital mexicana. Las movilizaciones ciudadanas del 8 y 16 de julio
son las más importantes de los tiempos recientes.