POISE; catálogo de privatización del foxismo
El menú oficial de la privatización
Entre 2008 y 2014 se proyectan
16 mil Mwe adicionales, en su mayoría proyectos a base de gas natural,
todavía no comprometidos pero ya ofertados. La
“planeación” eléctrica oficial se ha convertido en
simple canasta privatizadora. Se trata de irresponsables hechos
inconstitucionales. A la fecha, el 36 por ciento de la capacidad
eléctrica instalada total, a nivel nacional, esta CONCESIONADA a las
transnacionales. Es la DESNACIONALIZACION eléctrica del
foxismo.
El “Menú” de la privatización
La Secretaría de Energía (Sener), hemos afirmado, se
encarga de convertir el Programa de Obras e Inversiones del Sector
Eléctrico (POISE) en el catálogo de privatización del
foxismo, confeccionando para los inversionistas un verdadero menú de
opciones integrado por los proyectos más importantes (entre los
candidatos) de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), según
registra la Prospectiva:.
Lo interesante de la Prospectiva es, en todo
caso, que involuntariamente registra las tropelías de la Comisión
Reguladora de Energía (CRE) en materia de las inconstitucionales
concesiones.
Según este documento, dicho organismo
mantenía vigentes (hasta diciembre de 2004) 330 permisos, de los cuales
el 89.7% ya operaba, con una capacidad autorizada total de 12,557 Mw en la
modalidad PIE (para venta en el servicio público) más otros
4,682Mw correspondientes al Autoabastecimiento y 2,117Mw más a la
Cogeneración.
Por supuesto, a la fecha, el número de
permisos privados, capacidad instalada y de generación, es
mayor.
Generación privada
para el Servicio Público (sic), en 2004
Modalidad |
Permisos |
Capacidad Mw |
Vigentes |
Operando |
Autorizada |
Operando |
Producción Independiente |
21 |
15 |
12,557 |
8,212 |
Sector |
Autoabastecimiento |
Cogeneración |
Permisos |
Capacidad Mw |
Permisos |
Capacidad Mw |
Privados |
105 |
2,670 |
27 |
1,406 |
Público (Pemex) |
38 |
1,481 |
4 |
515 |
Otros1 |
40 |
531 |
3 |
197 |
TOTAL |
184 |
4,682 |
34 |
2,117 |
1 Incluye usos en agricultura, ganadería, municipal,
servicios y turismo
Modalidad |
Permisos |
Capacidad MW |
Vigentes |
Operando |
Autorizada |
Operando |
Exportación |
5 |
4 |
1,630 |
1,330 |
Importación |
27 |
27 |
1842 |
1842 |
2 Demanda Máxima.
Fuente: POISE 2005-2014,
CFE.
Con la ilegal
figura de “Productor privado independiente”, la industria
eléctrica nacionalizada ha dejado de generar NUEVA energía, toda
es privada. En 2004, la CFE y LFC tenían ya solamente el 71% de la
capacidad instalada total. Un tercio del patrimonio nacional se había
entregado a las transnacionales; hoy, en 2006, la situación está
peor, porque hay más proyectos en construcción y otros permisos en
concesión.
Capacidad eléctrica
instalada total a 2004
(Servicio
Público + Generación Privada)
Fuente: POISE y Prospectiva del Sector Eléctrico (2005-2014,
CFE).
La industria
eléctrica nacionalizada está siendo aceleradamente convertida en
simple REVENDEDORA de la energía eléctrica generada ilegalmente
por las transnacionales. Además de haberles otorgado la propiedad (ahora
privada), se les aumenta la tasa de ganancia a través del aumento
sostenido en las tarifas eléctricas.
Estas cifras
demuestran que en materia de generación efectiva, alrededor de 11,200 Mw,
que representan casi la cuarta parte de la capacidad propia del servicio
público, ya había sido privatizada a finales del 2004 (y lo
estará por menos los siguientes 25 años).
Pero no solo
eso, la generación que “supuestamente” no se destina al
servicio público (Autoabastecimiento, Cogeneración y
Exportación), está fuera de la jurisdicción de las empresas
públicas y es “regulada” por la CRE mediante contratos
respaldados --esos sí-- por dichas empresas públicas.
Se
trata de contratos y convenios para facilitar la interconexión,
transmisión, respaldo y compraventa entre particulares de energía
eléctrica, con los que la CRE garantiza a los privados el acceso a la red
y hasta la continuidad del servicio, porque una vez otorgada la concesión
por parte de la CRE, CFE y LyFC están obligadas a proporcionar tales
servicios (y, en su caso, a crear las condiciones técnicas necesarias
para ello).
Por otro lado, según la prospectiva, 89.5% de la
capacidad autorizada por la CRE proviene del gas natural, bajo control
también de la CRE. Pero lo mismo ocurre en el caso de electricidad
generada a partir de fuentes renovables, para las cuales la CRE publicó
en 2001 una serie de resoluciones que establecen una normatividad
especial.
En el caso de la importación de electricidad, la CRE
tampoco analizó las implicaciones técnicas del caso, sino que se
limitó a emitir un contrato especial por el que obligó a CFE a
proporcionar la interconexión entre los sistemas de Baja California y la
red controlada por el Consejo Coordinador de Electricidad del Oeste (WECC, por
sus siglas en inglés). Otros enlaces son con el Consejo de Confiabilidad
Eléctrica de Texas (ERCOT) y al sur, con el sistema eléctrico de
Belice.
Finalmente, no
solamente la generación se privatiza. Todas las obras de
repotenciación, rehabilitación y modernización de plantas
de CFE, así como para la ampliación de la red eléctrica, se
entregan también al capital privado, sea para ejecutar solo la
construcción o bien para la construcción y el financiamiento, a
través de costosos esquemas financieros que les reditúan
pingües ganancias.
Cabe recordar que para ello, la
administración de la CFE previamente “desapareció” su
área dedicada a construir infraestructura, ya que por ley estaría
obligada a realizar dichas obras mediante Administración Directa, en
términos de la Ley de Obras Públicas y Servicios Relacionados con
las Mismas.
Ya están definidas
las ofertas eléctricas para el siguiente sexenio gobierno y más
allá, gane quien gane las elecciones presidenciales. La mayoría de
los proyectos serían a base de gas natural tipo ciclo combinado. Si no se
re-establece la legalidad constitucional, la privatización seguirá
aumentando y las transnacionales se apoderarán de la ya reducida
industria nacionalizada.
A detener los intereses antinacionales
Como se ha planteado, la planeación eléctrica en
México ha sido pervertida para desnacionalizar a la industria y
entregarla al capital transnacional la electricidad de México. Para ello
se la desintegra, reduciendo la autonomía y las funciones de las empresas
públicas, en lugar de promover su integración, como una sola
industria energética de México (Pemex, CFE y LyFC), cancelando
así toda posibilidad de una planeación
estratégica.
Cada vez más voces convocan un cambio en la
política energética de México. Por nuestra parte reiteramos
que dicho cambio debe contemplar una Ley Reglamentaria del Artículo 27
Constitucional en Materia de Energía Eléctrica, como la
propuesta por el FTE [energía 27].
Este proyecto de ley
NO es para que lo ensucien los legisladores cuya irresponsabilidad es
manifiesta. El asunto es muy importante para dejarlo en manos de los diputados y
senadores. Este asunto compete al pueblo mexicano organizado, enarbolando una
política energética independiente. Dejar la legislación en
manos de los actuales partidos políticos es legalizar la traición
a la Nación.
A la fecha, TODOS los partidos basan su
política energética en otorgar Autonomía de gestión
a las mafias burocráticas y charras, al tiempo que
“fortalecen” a la CRE. Se trata de propuestas erróneas,
superficiales y privatizadoras.
Pero entretanto se logran las
condiciones para una adecuada legislación de Re-nacionalización
Energética, es necesario coordinar un plan de acciones inmediatas,
tendientes a contrarrestar el avance de la privatización alrededor de
objetivos centrales de política energética para rescatar la
soberanía y detener el avance neoliberal.
¡Política energética independiente!
El punto central de la
Política Energética del momento tiene que ver con el
restablecimiento de la legalidad constitucional rota por los sucesivos gobiernos
del PRI y el PAN. Reestablecer la legalidad constitucional significa respetar, y
hacer respetar, lo dispuesto por el artículo 27 constitucional en materia
eléctrica, petrolera y de gas. Esto tiene las siguientes
implicaciones:
1- Derogar las anticonstitucionales contrarreformas de 1992 a la Ley del
Servicio Público de Energía Eléctrica, así como las
disposiciones contenidas en la legislación Reglamentaria
derivada.
2- Derogar las anticonstitucionales reformas de 1995 a la Ley Reglamentaria
del Artículo 27 Constitucional en el Ramo del Petróleo, referidas
a la distribución, transporte, almacenamiento y distribución de
gas natural.
3- Revocar en interés de la Nación las inconstitucionales
concesiones otorgadas por la CRE en materia eléctrica y de gas natural.
Si las transnacionales oponen resistencia, expropiar --sin
indemnización--, toda vez que operan ilegalmente en el territorio
nacional. Esto abarca las plantas ya “comprometidas” por la CRE y la
supresión de los proyectos aún no licitados.
4- Desaparecer a la CRE y demás organismos burocráticos
creados para privatizar la industria energética de México,
usurpando las funciones que por ley corresponden a las empresas públicas.
Todavía hoy, la Sener intenta ampliar las atribuciones de la CRE
otorgándole la de fijar “los precios” de la electricidad (no
las tarifas) en términos del pernicioso modelo de mercado, que
afectaría aún más la economía de los
consumidores.
Adicionalmente, revisar y ajustar todos los programas
estratégicos del sector, reorientando los onerosos proyectos del foxismo,
como las centrales hidráulicas El Cajón, en Nayarit y La Parota en
Guerrero o las “granjas” eoloeléctricas de La Venta, Oaxaca.
En cambio, se deben concretar un Plan Nacional de Cogeneración
Eléctrica con Pemex, CFE y LFC. La base del plan sería un programa
para la instalación de refinerías energéticas, propuestas
por distinguidos ingenieros y trabajadores de la energía de
México.
¡La Patria No se
vende, la Patria se defiende!