No hay planeación sino adecuación a la privatización
Planeación eléctrica pervertida
Documentos oficiales dan cuenta del avance de la reforma
estructural de la industria eléctrica mexicana. Simulando mejora y
mediante el amañado manejo de los factores de planeación
(económicos, políticos, sociales y hasta ambientales) el gobierno
mexicano fomenta la venta de TODA la nueva infraestructura eléctrica y la
"liberalización" normativa del sector eléctrico nacional, que poco
a poco pervierte su papel social, anulando las ventajas de la propiedad
colectiva social de la industria eléctrica.
Antecedentes
Los llamados monopolios nacionales paulatinamente ceden su lugar a
nuevos monopolios privados de alcance mundial que, paso a paso, y en complicidad
con gobiernos neoliberales eluden las legislaciones nacionales y locales para
apropiarse del suministro de electricidad.
En México las llamadas
reformas estructurales, entre las cuales la reforma eléctrica tiene un
peso importante, se llevan a cabo mediante reformas a la legislación
secundaria que reducen cada día más el papel de las empresas
públicas, constitucionalmente responsables del servicio público de
energía eléctrica.
La estrategia central ha sido el
recorte del gasto público pero, también, se restan o acotan cada
vez más funciones constitucionales de las empresas públicas. Esas
funciones estratégicas son transferirlas al sector privado o, a
organismos de la propia administración pública empeñados en
fomentar la privatización de los servicios públicos.
Una
de las principales funciones al servicio de la privatización
eléctrica es la planificación que, en México,
función que debería ejercer la Comisión Federal de
Electricidad (CFE). Sin embargo, esta facultad ha sido indebidamente asumida por
la Secretaría de Energía (Sener) para asegurar que el desarrollo
de la industria eléctrica de México avance de acuerdo al proyecto
privatizador de Vicente Fox. Esto es grave, puesto que la planificación
orientada a la privatización abre todos los caminos a esta, alimentando
un círculo perverso que mina económica y socialmente a las
empresas públicas legitimando, en contraparte, la expansión de los
intereses privados.
Hoy, aunque la CFE sigue ejerciendo la
planeación eléctrica, sus proyectos de expansión y
desarrollo están sujetos a la discrecionalidad de la Sener, la cual
determina si dichas obras (incluso la propiedad de la infraestructura) queda en
manos de particulares o la desarrollan las empresas
públicas.
Anualmente la CFE emite el denominado “Programa
de Obras e Inversiones del Sector Eléctrico” (POISE), que es un
estudio prospectivo en el horizonte de los siguientes diez años y que,
publicado a finales del mismo año de planeación tiene la ventaja
de presentar cifras consolidadas. Sener por su parte publica, también
cada año, su “Prospectiva del Sector Eléctrico”
(Prospectiva) en donde “adecua” y “corrige” la
información del sector eléctrico presentada por los
técnicos de CFE y añade lo referente al sector eléctrico
privado, que de manera furtiva impulsa, para terminar tomando el POISE y
convertirlo en un catálogo de ventas de la industria eléctrica
nacional.
El Sistema Eléctrico Nacional y su planeación
La planificación del Sistema Eléctrico Nacional (SEN)
parte de la necesidad de desarrollar eficientemente la infraestructura del
mismo, para brindar eficazmente el Servicio Público de Energía
Eléctrica que, según datos de CFE, a diciembre de 2004 contaba con
una capacidad efectiva de 46 mil 552Mw, destinada a garantizar el suministro a
más de 28 millones de servicios (equivalentes al 95.7% de la
población).
Sin embargo, esa capacidad No es totalmente propia.
La CFE manipula la información e incluye como capacidad propia la
correspondiente a los generadores privados que, en la modalidad de Productor
Privados Independiente (PIE) suministran TODA la nueva energía generada a
CFE. Esta empresa eléctrica se ha venido convirtiendo aceleradamente en
simple REVENDEDORA de las transnacionales a las que compra la energía que
ILEGALMENTE generan. La infraestructura, expresada en capacidad instalada es de
propiedad totalmente privada.
Tratándose de la capacidad efectiva
en operación el 30% termoeléctrica convencional, el 25% es
termoeléctrica a base de gas natural, el 22.4% es hidroeléctrica
y, el resto, corresponde a otras fuentes.
Fuente: POISE 2005-2014,
CFE.
En cuanto a la capacidad de Transmisión del SEN,
la red troncal de CFE contaba -- en aquel momento --, con 43 mil 717 Km. de
líneas de 400 y 230 KV, complementada por una red de
Subtransmisión de 45 mil 405 Km de líneas de entre 161 y 69 KV.
La Distribución se realiza en Media Tensión a
través de una red de 357 mil 304 Km (de entre 60 y 2.4 KV) y otra de Baja
Tensión con 230 mil 264 Km de longitud (de 220 y 240 V).
Por su
parte, Luz y Fuerza del Centro (LyFC) disponía en total de 70 mil 221 Km.
de redes (de Transmisión y Distribución).
La capacidad
total de Transformación del sistema, era de 225 mil 615 MVA, de los
cuales 128 mil 841MVA correspondían a Transmisión, y el resto a
Distribución.
La seguridad y confiabilidad del Sistema
Eléctrico Mexicano, hasta ahora exento de los graves apagones registrados
en los grandes sistemas eléctricos "liberalizados", se basa en una
minuciosa planificación que permite prever un Margen de Reserva de
Generación adecuado, así como de la Capacidad de
Transmisión suficiente para afrontar cualquier contingencia
previsible.
Debe, además, considerarse la necesidad de
diversificar las fuentes energéticas primarias para evitar que la
variación en el precio de los combustibles (o la escasez de éstos)
impacte negativamente el suministro y/o precio de la
electricidad.
Mantener el balance entre estos factores implica
también disponer de una estimación confiable de la
evolución de la demanda y el consumo a partir de las ventas de
electricidad. Finalmente, para definir las necesidades de ampliación del
sistema, dentro de los márgenes de seguridad y confiabilidad
establecidos, se requiere tomar en consideración los parámetros de
crecimiento económico esperado. Esto, precisamente, es lo que ha venido
pervirtiendo el gobierno poniendo en peligro las ventajas de una verdadera
planificación estratégica.
Planificación para el mercado privado
Las ventas de energía para el servicio público
constituyen uno de los parámetros para la programación.
Estas se contabilizan en cinco grupos básicos que corresponden a los
distintos sectores de consumidores industrial, comercial, doméstico,
servicios y bombeo de agua), siendo el industrial el que más
energía compra y representa “el nicho de mercado más
atractivo” en el modelo neoliberal del mercado eléctrico.
Ventas de electricidad por
sector
Con dicha orientación, la planeación de la industria
eléctrica se ha venido modificando para priorizar la participación
del sector privado, adecuando paulatinamente los parámetros de
planificación para dar cabida a las necesidades del sector Industrial,
otorgándoles concesiones de generación en las modalidades de
Autoabastecimiento y Cogeneración (supuestamente para que reduzcan sus
costos de operación y aumenten así su competitividad).
Por lo mismo, se regionalizan cada vez más la demanda y el
consumo, y se modifica la legislación, para favorecer el uso privado de
la Red de Transmisión y Distribución. Inclusive se ha
acuñado un concepto ILEGAL denominado “autoabastecimiento
remoto”, que pretende “legalizar unilateralmente” la
compraventa de electricidad por parte de las denominadas "sociedades de
autoabastecimiento" --declarada inconstitucional por la Auditoría
Superior de la Federación en marzo de 2004--. La idea es que dichas
sociedades “compartan” cierta capacidad de generación (de su
propiedad), independientemente de su ubicación geográfica,
utilizando la red eléctrica nacional que debe reconfigurarse para
habilitar dicho “mercado eléctrico privado”.
En el
POISE, la CFE reporta que amplió el número de regiones de
transmisión para mejorar el proceso de planeación. Esto quiere
decir que aumenta la granularidad de la red y se establecen nuevos
compromisos de interconexión entre las regiones, básicamente para
poder integrar la generación dispersa que inyectan las plantas privadas
de Autoabastecimiento y Cogeneración. La propia CFE advierte en el citado
documento que, al instalar éstas plantas, “se necesitará
incrementar la capacidad de reserva y adaptar la red eléctrica para
proporcionar los servicios de transmisión y respaldo requeridos" (por los
generadores privados).
¡Alto a la “planeación” eléctrica privada!
Marcha del Sindicato Mexicano de Electricistas, en la Ciudad de México,
7 de marzo de 2006 FOTO: FTE.
La planeación
eléctrica nacional NO puede realizarse en abstracción del Proyecto
de Nación Mexicana, democrática y solidaria. La planeación
eléctrica nacional debe estar basada en la Política
Energética Independiente e incluye, el Plan Eléctrico Nacional, el
Plan nacional de Hidrocarburos y diversos programas, tales como el Programa de
Cogeneración Eléctrica con Pemex y el Programa de
Investigación y Desarrollo en materia de energía. Estos planes
deben ser formulados, desarrollados, concretados y evaluados por los
investigadores, ingenieros, técnicos y trabajadores de la energía
no por ninguna burocracia en turno.