2 de julio de 2006, elecciones presidenciales
Elecciones en México
IV Culto al espontaneísmo ¡NO!
Crítica a la política de Marcos
¿Derrocar al gobierno? ¿Cuál, el de Fox?
En un contexto de una
campaña electoral sucia y denigrante, la Otra campaña de Marcos ya
anunció un “levantamiento”, propone “derrocar al
gobierno” y dice que éste “va a caer”. ¿A
qué gobierno se referirá porque Fox ya se va, antes NO dijo NADA?
O, ¿se trata de cualquier gobierno, el que sea?
El objetivo de la
otra campaña es "derrocar al supremo gobierno y acabar con los ricos
y los grandes propietarios" (Bellinghausen H., Anzar N.J. en La Jornada
20 mar 2006) dijo Marcos en Guadalajara, Jalisco. Agregó que, “El
dolor que ha ido recogiendo la otra campaña ya no tarda en
estallar, por lo que advirtió a los asistentes que habrá un
levantamiento nacional civil y pacífico. "Venimos a avisarle a la gente
que todavía no se decide, que va a haber un levantamiento nacional civil
y pacífico. El viejo grito de ¡fuera el mal gobierno! va a volver a
escucharse y el gobierno va a caer".
“El subcomandante
Marcos insistió en la necesidad de construir otro país,
empezando por otra política, donde se escuche a la gente sin que se
busque tomar el poder para engañar y enriquecerse. Una política
donde la gente mande y el gobierno obedezca, que recabe los dolores del pueblo
en un programa nacional de lucha”.
El discurso suena a
“idealismo filosófico” pues se insiste en negar la toma del
poder político. ¿Cómo podría haber, entonces, un
gobierno “obediente”? Si se propone derrocar al gobierno seguramente
tendría que ser sustituido por otro ¿Cómo sería,
mediante elecciones? Decir que “la gente mande” y “el gobierno
obedezca” es una frase de impacto en los mítines pero la
situación no es tan simple, México es una Nación no una
comunidad pequeña ni siquiera un pueblote.
¿De veras?
Y no digo lo que se me ocurre, sino lo que me mandaron
decir" (sic) dijo Marcos en San Blas, Nayarit, el 27 de marzo. "No nos vamos a
alzar en armas. Estamos promoviendo un alzamiento civil y pacífico, pero
a lo bestia, nacional. Y no hay gobierno ni sistema que resista eso. Lo que
falta es organizarnos. Cuando eso pase, no nos vamos a conformar con cambiar el
gobierno y que sea otro el que nos explote, hay que cambiarlo todo. No vamos a
hablar con el gobierno, ¿por qué vamos a hablar con el que nos
está oprimiendo? ¿Qué le vamos a decir? Lo que vamos a hacer
es partirle la madre".
Luego, el 6 de abril en Morelia,
Michoacán, Marcos dijo que “se plantea una alternativa, el germen
de otra cosa. Es lo que debe plantear en todos sus niveles la otra
campaña. Señalar al enemigo, el capital; al aliado de ese
enemigo, la clase política. Plantearse el objetivo, porque no
habrá que arriar ninguna bandera: el derrocamiento de ese gobierno y la
destrucción de ese capital”.
El “germen” de esa
“otra cosa” se nota muy indefinido. Señalar que el enemigo es
el capital NO es ningún nuevo descubrimiento. “Partirle la
madre” al gobierno implica que sea derrocado el gobierno y que sustituido.
¿Seguiría existiendo el Estado o ya no? y, si “destruye”
al capital, ¿qué habría en su lugar? ¿Cómo
sería esa destrucción? ¿En el caso de las transnacionales
eléctricas, habría que destruir a las centrales generadoras?
¿”Acabar con los ricos”, p.e., Carlos Slim, significaría
“destruir” a Telmex?
¿“Partirle la madre”
al gobierno quiere decir que el aparato del Estado no existe, que el
ejército, la policía, el imperialismo mismo, están cruzados
de brazos? Estamos de acuerdo el derrocar al gobierno pero, ¿cómo
hacerlo? El propio Marcos reconoce que “falta organizarnos”
¡Nada menos! El llamado, entonces, tiene un sustento político muy
débil.
El “alzamiento”, ¿quién lo
decidió, cuándo, cómo fue? En la naturaleza NADA ocurre
espontáneamente, en el movimiento social TAMPOCO. Cuando ocurren acciones
“espontáneas” se produce mucha incertidumbre. Incluso, una
acción bien organizada no puede ignorar JAMAS la acción del
contrario. “Derrocar al gobierno” es algo que difícilmente
puede ocurrir “con agua de rosas”. SIEMPRE está presente la
tendencia del Estado a enfrentar a la insurgencia. SIN organización, y
aún teniéndola, el Estado procede a la represión violenta.
Esa película ya la vimos y no nos gusta. Además de la
organización es muy necesaria la política y, con esa base, el
programa, la estrategia y el plan. Nada de esto se puede improvisar.
De
manera que, “decidir” unilateralmente el alzamiento es una muestra
de buena voluntad porque, es necesario que ocurra tal alzamiento. Se acerca ya
el centenario de la Revolución (2010) y el fin de la era del Sexto Sol
(2012) en la Cuenta Larga de Los Mayas, sí. Pero, no se puede descartar,
a priori, NINGUNA forma de lucha ni proceder al margen de la organización
social y su inexistencia. Se podría caer en lo que algunos llaman
radicalismo pequeño-burgués.
La única manera de
“derrocar” al gobierno es tomando el poder político,
cuestión a la cual Marcos se niega EXPLÍCITAMENTE. Lo que
desearíamos muchos es una Revolución pero habría que
prepararla concientemente y ¡ya nos hemos tardado! Marcos,
¿estaría dispuesto, ha cambiado de opinión? Porque los
antecedentes dicen otra cosa. En 2001 fuimos testigos de la conocida entrevista
que le hizo Julio Scherer, transmitida por Televisa y publicada por la revista
Proceso. En esa entrevista, Marcos le dijo a Scherer que NO es revolucionario,
ni quiere serlo. ¿Alguien que no es revolucionario, ni quiere,
podría proponer la revolución? O, ¿para que sería el
“alzamiento civil y pacífico”?
Intelectuales, humillación y arrogancia
En referencia a los intelectuales
Marcos se ha referido a los intelectuales de arriba, de en medio y de abajo. A
los intelectuales de abajo les plantea “la humildad de reconocer
que se está frente a algo nuevo”. ¡Hummm! Parece que Marcos se
ha creído las adulaciones de algunos “intelectuales”. No solo
eso, les pide “humildad” palabra muy reiterada en su
discurso.
Marcos, sin embargo, no es “humilde”. En su
escrito expresa que, “Como zapatistas pensamos que la otra
campaña puede decir con orgullo que se merece a l@s mejores
intelectuales de este país que forman parte de ella; ahora que ellas y
ellos, con su quehacer propio, digan si se merecen a la otra
campaña” (en La Jornada 25 mar 2006).
Se
advierte una clara arrogancia de sentirse “sobrados” de sí.
Eso no es prudente porque el “algo nuevo” NO ha empezado
todavía ni siquiera está definido. Por lo demás, Marcos no
representa a todos los zapatistas de México, hay más.
El
maestro González Casanova ha dicho que cada quien escoge sus propias
contradicciones. Tiene razón. En la Otra campaña están
valiosas voces y plumas pero hay poca actitud crítica y no hay presencia
de la intelectualidad obrera.
La lucha obrera no se improvisa
Desde nuestro punto de vista, el
“algo nuevo” podría ser otro “Comenzar de Nuevo”
pero NO comenzar de Zero. La primera condición de ese “Comenzar de
nuevo” es que la izquierda REGRESE al seno del movimiento obrero. No es
fácil, por supuesto, muchos lo rechazan a priori, pero allí
es el espacio donde se enfrenta, cotidianamente, al capital y a los
capitalistas.
En El Salto, Jalisco, Marcos llamó a los obreros
“a preparar el otro primero de mayo” (Bellinghausen H., Anzar N.J.
en La Jornada 21 mar 2006). Allí se reunió con el Sindicato
Revolucionario de Trabajadores de la Hulera Euskadi. Al concluir el
encuentro, Marcos dio lectura a la convocatoria para el primer Encuentro
Nacional Obrero:
"A los trabajadores de la ciudad adherentes a la Sexta
y a la otra campaña, a todos los obreros que luchan y a todos los
explotados", los llamó para el sábado 29 de abril, en el local de
sindicato de Uniroyal, para preparar la participación en el otro
primero de mayo, discutir un plan de lucha para derrotar al
charrismo, promover a lo largo de la otra campaña la
formación de una organización democrática, clasista y de
lucha e internacionalista que permita enfrentar la lucha contra la patronal y su
gobierno. Firman los sindicatos de Euzkadi, Uniroyal y de Personal
Académico de la Universidad de Guadalajara, obreros de General Tyre,
trabajadores de Tornel y despedidos de IBM, Frente Solidario en Defensa de los
Derechos Laborales de San Luis Potosí, FUTAJPSS, CUT, POS y EZLN.
¿Preparar la participación en el otro primero de
mayo en menos de 48 horas? En México, NINGUN sindicato puede
“preparar” NINGUNA movilización al vapor menos para un
1º de mayo. En los sindicatos hay procedimientos mínimos para
acordar las acciones tomando, al menos, el tiempo necesario para informar a los
trabajadores. Cuando se convoca a una acción el mismo día, ocurre
lo previsible: nadie asiste. Son típicas las convocatorias del STUNAM a
través de la prensa: “Hoy, gran marcha”. Por supuesto, nadie
va, salvo comisiones que solo exhiben debilidad.
Hace más de 30 años hay otro primero de mayo
¿El otro primero de
mayo? ¿A que le llaman otro primero de mayo? ¿A otra marcha
más?
En la época reciente, hace más de 30
años que, en la capital e interior del país, existe OTRO primero
de mayo. Fue conquistado por la Tendencia Democrática movilizada en
muchas partes del territorio nacional. Después del 68, en la capital
ninguna marcha podía llegar al Zócalo. Pero, a partir de la
conquista del Zócalo, en los primeros de mayo, la situación
cambió.
Durante décadas, el primero de mayo, siguiendo la
tradición impuesta por Alvaro Obregón se convirtió desde
los años 20s en un “día de gracias” al presidente en
turno. Ese día, la movilización era organizada por el charrismo
sindical, principalmente la CTM, Congreso del Trabajo, FSTSE, CROC y algunos
más. Nunca había protesta porque estaba expresamente
prohibida.
Sin embargo, el Primero de Mayo tiene una tradición
combativa desde la primera vez que ocurrió, en 1913, siendo enfrentado
violentamente por la dictadura de Victoriano Huerta. A pesar del sometimiento
temprano, durante los años 30s, la clase obrera mexicana irrumpió
con fuerza y logró importantes conquistas. Después, el movimiento
fue sometido por el charrismo sindical. No obstante, la resistencia
alcanzó niveles sobresalientes. Tratándose del Primero de Mayo
hubo acontecimientos notables en 1936 y 1938 con motivo de la huelga del SME y
la expropiación petrolera, respectivamente.
Luego de una lucha de
varios años, en el Primero de Mayo de 1952, los electricistas mexicanos
agrupados en la Confederación Nacional de Electricistas, integrada por la
Federación nacional de Trabajadores de la Industria y Comunicaciones
Eléctricas (FNTICE) y el SME, propusieron públicamente la
Nacionalización eléctrica, la unidad en un solo sindicato y la
contratación colectiva única.
El Primero de mayo de 1960,
los electricistas de la FNTICE realizaron una amplia movilización en el
interior del país, al siguiente año lo hicieron unificados en el
Sindicato de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (STERM).
En las Jornadas Nacionales por la Democracia Sindical de 1971-72, en el STERM
desarrollamos una amplia movilización nacional. El primero de mayo de
1972 fue una jornada de lucha combativa que culmino en noviembre de ese
año con la fundación del Sindicato Unico de Trabajadores
Electricistas de la República Mexicana (SUTERM).
Luego, en 1974
se rompió la “tradición” de silencio y agradecimiento
charro en el Zócalo de la capital. Los nucleares de esa época
participamos en la marcha oficial, la izquierda SIEMPRE se había negado a
asistir, rechazaba EXPLÍCITAMENTE participar en la marcha del Primero de
mayo por tratarse de un acto oficial y charro pero NUNCA organizaba ninguna
acción alternativa por la sencilla razón de tener una influencia
Nula en el movimiento obrero.
Aquel 1º de mayo de 1974, no solo
marchamos en el Zócalo sino que entramos a Palacio Nacional por la misma
puerta Mariana y, en el Patio de Honor, hicimos un mitin. Como resultado,
conquistamos el primer contrato colectivo de trabajo e ingresamos al SUTERM.
Antes, solamente las tropas de Eufemio Zapata habían entrado a
Palacio en 1914 y, en el Patio de Honor instalaron sus caballerizas para
disgusto del poeta Ramón López Velarde y del intelectual
José Vasconcelos.
Después, en varias ocasiones (de 1976 a
1988, por ejemplo) la presencia democrática en la marcha del Primero de
Mayo alcanzó altos niveles por el contenido político expresado en
las consignas, pancartas, volantes, discursos y comunicados de prensa. Se
volvió tradicional en nuestros contingentes cantar La
Internacional y Venceremos.
Marcha preparada hace décadas
El Primero de Mayo en México fue
recuperado por los trabajadores en lucha. Recordamos con emoción la gran
marcha de electricistas del SME y Tendencia Democrática del SUTERM en 1975
en la capital. Fue la marcha unitaria más importante que ha habido en las
últimas 4 décadas.
Al Zócalo entrábamos
“a trancazo limpio” y en nuestro contingente integrábamos a
diversos sectores en lucha, entre ellos petroleros y sindicalistas de otros
países. En los 80s, se sumaron los maestros de la CNTE. Luego,
participaron incluso estudiantes. En 1986, se produjo un petardo hacia un
costado del balcón presidencial. Eso llevó a retirar las tribunas
y ejercer mayores controles pero, los trabajadores en lucha se habían
convencido de la necesidad de recuperar el Primero de Mayo.
Algunos
contingentes no podían llegar al Zócalo, entonces, se
hacían 2 actos uno de ellos llamado Marcha Independiente. Los
trabajadores de la energía asistíamos a los dos
eventos.
Después, en la medida en que la protesta cundía
hasta en las filas del charrismo, los propios charros y el gobierno decidieron
“reducir” el acto. Durante el mandato de Salinas de Gortari
(1988-94), para evitar protestas contra el presidente, muchos sindicatos
suspendieron la participación ese día. Pero la lucha sindical
había retomado la costumbre de ejercer su derecho a manifestarse en el
Zócalo. S empezó a realizar actos paralelos. Muy temprano los
charros hacían su acto, más tarde, el llamado sindicalismo
independiente hacía el suyo. En años recientes, la marcha
más importante es la independiente, los charros se limitan a un
simple y minoritario mitin.
Actualmente, la marcha del Primero de Mayo
es encabezada por el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), cuyo contingente
es mayoritario. La marcha no es, sin embargo, unitaria porque es difícil
lograrlo; el movimiento sindical mexicano está dividido y, la unidad no
se puede forjar en menos de 48 horas.
De manera que, para este 2006, NO
hay necesidad de preparar Otro Primero de Mayo. La marcha en la Ciudad de
México, y en el interior del país, está preparada hace
décadas. Lo único que hace falta es organizar la
participación sumándose a las marchas, hacer una marcha distinta
no sería apropiado. En la capital, la marcha será encabezada por
el SME y los compañeros electricistas asistirán previo acuerdo de
asamblea.
Todos los que quieren pueden asistir a la marcha pero, NADIE
puede decir que la organizó y que éste es Otro primero de
mayo. Puede haber un contingente que se llame como quiera pero NO puede, ni
debe, sustituir a los demás ni montarse sobre una marcha que no
organizó.
Si Marcos desea asistir, será bienvenido, por
supuesto. Como corresponde a todos los políticos, su lugar estaría
hasta atrás, adelante van los sindicatos. Esa ha sido la costumbre
impulsada, por cierto, por la izquierda. ¿Marcos podría ser orador?
Sí, uno más, probablemente después de Hernández
Juárez, es difícil que se pudiera antes porque en el mitin todos
quieren posesionarse del micrófono aunque, generalmente, hacen mal uso
con discursos improvisados y muy chafas. Este escenario, sin embargo, es
real. La lucha sindical está LEJOS de ser idílica, es muchos
aspectos es muy dura, amarga y agria.
Si, en vez de sumarse al
contingente obrero mayoritario, Marcos optara por Otro evento
“aparte” ¡Adelante!, se puede. Eso tendría la
característica de APARTARSE del espacio donde están los
trabajadores. Sí, los sindicatos son el espacio obrero. Allí los
trabajadores están secuestrados por el charrismo pero, precisamente, hay
que RESCATAR a los sindicatos como instrumentos VALIDOS para la lucha obrera.
Por lo demás, charros son los burócratas sindicales NO los
trabajadores. Esta es una vieja discusión. En los 70s, la izquierda
rechazaba participar en las marchas del 1º de mayo porque allí
“estaban los charros”. Durante años, décadas, estos se
posesionaban de la marcha. A esta la conquistamos en lucha, hoy es un poquito
diferente, aunque todavía hay algunos charros, pero se trata de la marcha
obrera más importante en la Ciudad de México y 100 ciudades
más del interior del país. Separar las escasas fuerzas no es
correcto. ¿O, qué, hay que salirse de los sindicatos
“charros”?
La lucha contra el charrismo es un asunto muy serio
¿Plan de lucha para
derrotar (sic) al charrismo? ¿En menos de 48 horas? Algunos podrán
decir que eso es “inédito” pero no, hace décadas que
existe el plan formulado luego de innumerables reuniones, asambleas,
mítines y manifestaciones.
Da la impresión que Marcos
está fuera de la jugada y se comprende porque jamás ha sido
obrero, ni pertenecido a un sindicato, ni menos padecido al charrismo. Si con la
sola presencia de Marcos se espera definir ese “plan”, tal vez un
nuevo plan, en tan solo unas horas, que sirva para “derrotar” al
charrismo nos daría mucho gusto. Nosotros llevamos 4 décadas de
lucha consecuente contra el charrismo sindical y no hemos podido. Hemos sido
partícipes, organizadores, dirigentes, militantes de las luchas obreras
más importantes en México en la segunda mitad del siglo pasado.
Nadie ha dado una pelea tan cerrada y decidida contra el charrismo a nivel
nacional y, sin embargo, no ha sido posible derrotarlo.
Vencer al
charrismo es una necesidad pero se trata de un asunto muy serio que no es de
corto plazo ni solo asunto de voluntad. Pensarlo de otra manera sería
voluntarismo, sería rendir culto al espontaneísmo y fabricar Otra
derrota. Esa idea no la compartimos.
La campaña de Marcos tiene
una evidente debilidad obrera. Superarlo implica replantearse muchas cosas. A
los trabajadores, aun estando en su mayoría sometidos por el charrismo no
se les puede tratar como menores de edad ni marcarles la
“línea” desde afuera. Eso, simplemente No funciona, algunos
de los troskistas que están cerca de Marcos lo saben bien. Por lo
demás, al charrismo no se le puede derrotar con voluntarismo, ni siquiera
siendo mayoría, porque el problema es “un poquito” más
complejo.
Cuarta estrella:
Culto al espontaneísmo ¡NO!
Crítica a la política de Marcos
Es nuestra tesis que los movimientos se
ganan en los preparativos. Esto implica diseñar adecuadamente el camino
por recorrer, visualizar los cursos alternativos de acción y, sobretodo,
organizar las filas de los participantes. La organización no es todo pero
sin organización no hay nada, lo hemos reiterado. Sin embargo, la
organización no se hace sola, se necesita de la política y no
cualquier política.
La política se expresa en el programa
y a este se integran los proyectos. El programa No puede ser un rollo ni
un chorizo de puntos porque no es asunto de sumar sino de
integrar.
No obstante, saludamos los esfuerzos realizados por Marcos y
demás organizaciones que lo apoyan. Por nuestra parte, seguiremos
luchando incansables; obreros somos y en el camino andamos. Es nuestra
sugerencia que, para lograr una transformación social de fondo, es
preciso que la izquierda revolucionaria mexicana REGRESE, organizada, al
interior del movimiento obrero y sumemos fuerzas en el espacio de la lucha de
clases. ¡Salud y Revolución Social!
Trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas en la marcha del 7 de marzo
de 2006, en la Ciudad de México FOTO: FTE de México