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Organización obrera afiliada a la FEDERACIÓN SINDICAL MUNDIAL

Volumen 6, Número 73, marzo 20 de 2006

El gobierno foxista reafirma al corporativismo y a la dictadura

Fox pone y quita a Napoleón

Fox viola la ley y las Convenciones Internacionales en materia sindical.
Gobierno y charrismo sindical “tuercen” a la Autonomía sindical y la manipulan.
Los trabajadores minero-metalúrgicos paran labores durante 24 horas en apoyo a los charros.
La alternativa: organización INDEPENDIENTE y DEMOCRATICA de los mineros.
El charrismo sindical, la peor tragedia obrera en México, debe ser extirpada.

Gobierno ilegal y charro

El gobierno de Fox y los medios han tratado de minimizar la reciente tragedia minera encargándose de alimentar el escándalo. Ahora, el nuevo payaso es Napoleón perseguido por Vicente Fox otro payaso.

El 28 de febrero, la secretaría del trabajo y previsión social (STPS) foxista anunció a la prensa que “desconocía” a Napoleón Gómez Urrutia como secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores Minero, Metalúrgicos, Similares y Conexos de la República Mexicana (SNTMMSCRM). Ese desconocimiento incluye a todo el comité ejecutivo nacional del sindicato. Al mismo tiempo, la STPS hizo el “reconocimiento provisional” de Elías Morales, otro charro que ni siquiera es trabajador activo sino jubilado.

A la “Toma de Nota”, que otorga personalidad jurídica, se le puso como fecha el 16 de febrero 2006 (tres días antes de la explosión en Pasta de Conchos) y tiene una vigencia hasta el 31 de mayo de 2008. Detrás de este bochorno está la transnacional Grupo Minero México, encabezado por Gerardo Larrea, explotadores salvajes que no toleran siquiera la tibia oposición de Gómez y prefieren a alguien más dócil aún.

Napoleón y Elías, ambos charros, se habían venido disputando la representación sindical siempre al margen de los trabajadores. A la muerte de Napoleón Gómez Sada, “líder” minero vitalicio durante 40 años, Elías pretendió sucederlo pero Napoleón se sintió con derechos hereditarios, previamente el padre lo había designado secretario general suplente.

Hace 6 años, Napoleón decidió ostentarse como nuevo secretario general del sindicato sin haber sido minero NUNCA. En 2000 la STPS le negó el registro. Con la llegada de Fox, Napoleón exhibió una vieja credencial y el foxismo decidió reconocerlo sin haber cumplido ningún requisito legal. De hecho, Fox puso a Napoleón al frente del sindicato minero. Hoy, ya no le sirve y, con el mismo ilegal procedimiento, lo quitó.
¡Ah!, en Hermosillo, Sonora, Fox declaró a la prensa: "Fueron los propios sindicalistas quienes decidieron remover a su líder”. Luego, volvió a declarar que, en su gobierno, ha habido “cero intromisiones'' en la vida interna de las organizaciones sindicales. Se trata, desde luego, de un individuo desquiciado.

Paro nacional minero

México es, tal vez, el único lugar en el mundo donde los trabajadores hacen una huelga para apoyar a sus opresores; 130 secciones del SNTMMSCRM anunciaron un “paro indefinido” a partir del 1 de marzo.

Al mismo tiempo, el 28 de febrero, estallaron huelgas mineras en San Luis Potosí, Sombrerete en Zacatecas, Cananea, Nacozari y Agua Prieta en Sonora. En San Luis Potosí y Sombrerete las huelgas estallaron por revisión contractual. En Sonora, las huelgas en Mexicana de Cobre y Mexicana de Cananea estallaron por falta de mantenimiento y equipo adecuados. Las huelgas de San Luis Potosí contra la Planta de Zinc de Industrial Minera México (IMMSA) y Sombrerete, reconocidas legalmente, serán clave en el conflicto.

El 1 de marzo, más de 270 mil mineros, metalúrgicos y siderúrgicos paralizaron 70 centros de trabajo del país pertenecientes a las corporaciones Industrias Peñoles, Industrial Minera México, Altos Hornos de México, Minera Real del Monte, Minerales Monclova, Minera Carbonífera Río Escondido, Minerales del Norte, y otras empresas pertenecientes al Consorcio Acerero del Norte, Grupo México y Grupo Villacero. El motivo: protestar por el desconocimiento de la STPS a Napoleón y por congelar 15 millones de dólares en las cuentas bancarias del sindicato.

El paro, acompañado de algunas marchas, tuvo lugar en los estados de Hidalgo, Coahuila, Guerrero, Chihuahua, Guanajuato, Querétaro, Michoacán, Estado de México, Sonora y otros. En La Siderúrgica Las Truchas (Sicartsa) el paro duró casi 48 horas, los compañeros de Mexicana de Cananea acordaron “solicitar a Fox que destituya a Francisco Javier Salazar, secretario del trabajo”(sic). En la minera Autlán de Puebla siguieron en paro más de 24 horas. Luego, el paro se fue diluyendo poco a poco.

Envalentonado, el grupo de Napoleón declaro que irían “hasta las últimas consecuencias” y denunciaron el contubernio del gobierno con los Grupos México y Villacero. Esta es la segunda vez que ocurre una huelga minera nacional, la anterior fue en 1944.

Charrazo y charrismo

¿Cómo es que los trabajadores apoyan a sus opresores? Muy simple. El charrismo sindical, durante 7 décadas ha creado una superestructura corporativa con el Estado reproduciendo el esquema a todos los niveles. Cuando alguien es reconocido como secretario general, al otorgarle el gobierno en turno la correspondiente “toma de nota” se vuelve poderoso.

El mecanismo está contemplado en la Ley Federal del Trabajo. El secretario general ES el titular del Contrato Colectivo de Trabajo (CCT). Con ese instrumento en sus manos, los charros sindicales contratan a los trabajadores, pactan con las empresas, acumulan poder económico y político, y reprimen a quien quieren cuando quieren.

Los charros sindicales han sido “instruidos” por el imperialismo (CIOSL y ORIT) para afianzar su poder. El secretario general nacional “controla” a los secretarios locales. Estos, representan al sindicato pero NO son titulares de NINGUN contrato. Eso, también lo indica la ley: las secciones NO tienen personalidad jurídica, son solo mecanismos organizativos internos del sindicato.

El sindicato nacional minero-metalúrgico, en realidad, NO es un sindicato sino una Federación de sindicatos. En cada una de las 130 secciones, algunas muy pequeñas, existe un CCT mismo que es diferente en cada caso y que se revisa en fechas distintas. Durante todo el año, el sindicato siempre está en revisión salarial o contractual. ¿Por qué se sigue este mecanismo en vez de unificar las condiciones laborales y las revisiones en una sola fecha? ¡Por razones estratégicas!

Que las condiciones laborales, en el mismo sector de actividad correspondientes al mismo proceso de trabajo, sean tan diferentes y desiguales tiene como consecuencia la DIVISIÓN entre los trabajadores del mismo sector. A charros, gobierno y patrón conviene que esto ocurra porque les permite ejercer su poder sin enemigo al frente.

Que las revisiones se realicen en fechas diferentes tiene como consecuencia que NUNCA se puede ejercer la solidaridad, todo se reduce a la Sección en cuestión. Son tantas las revisiones y tan aisladas geográficamente que jamás hay ni tiempo para relacionarse.

En tales condiciones, el charrismo ejerce un control férreo. El secretario general se vuelve poderoso porque es él, nadie más, quien firma con las empresas y el gobierno en TODOS los casos. Por ello es que, con un solo caso que se resuelva de las actuales huelgas será suficiente para afirmar “legalmente” al “nuevo” secretario general elegido por Fox. Elías Morales, charro espurio, es el único que tiene personalidad jurídica y, por tanto, capacidad para firmar los acuerdos; Napoleón ya perdió esa facultad legal. Ahora recibirá “una sopa de su propio chocolate”.

El síndrome del charrismo

¿Cómo se organizó el paro “de apoyo” y cuánto podría durar? El paro fue organizado por los charros locales, los charros nacionales fueron quienes “convocaron” a los trabajadores y les dieron “instrucciones” de parar. En NINGUN caso hubo acuerdos previos de asamblea, ni preparativo alguno mucho menos discusión.

Pero, los charritos locales, van a traicionar a Napoleón aunque él mismo los haya designado. NINGUNO tiene la personalidad jurídica reconocida, Napoleón NUNCA lo permitió. Entonces, NINGUNO es titular de la contratación colectiva; el titular es Elías Morales, el charro impuesto por Fox.

Los trabajadores, por lo demás, se manifestarán en contra de la “imposición” del nuevo charro. Antes, también había manifestaciones en contra de Napoleón por charro. No pasó nada. Van décadas de lucha contra el charrismo sindical, en la mayoría de las veces hemos perdido por la represión ejercida por empresas, gobierno y charros.

¿Qué haría que los trabajadores sostuvieran la movilización? Que se organizara un verdadero movimiento democrático. Eso supone quitar a los charros. ¿Estos lo permitirían, lo organizarían ellos mismos? JAMAS.

La película anterior la vimos en 1989 cuando el presidente en turno Carlos Salinas de Gortari, en un operativo militar, detuvo al poderosísimo Joaquín Hernández Galicia, (a) La Quina y al Comité Ejecutivo Nacional del poderosísimo sindicato petrolero. Al enterarse los trabajadores, varios abandonaron el trabajo y salieron a las calles en una acción desorganizada y espontánea “de apoyo” a su “líder”. Esa lucha espectacular no duró 24 horas. La Quina y compinches pasaron años en la cárcel, fueron sustituidos por otros charros elegidos por el gobierno y tan, tan, el charrismo sigue firme y fuerte, aliado ahora a Fox.

Fox denuncia a Napoleón

Desde la propia presidencia se anunció la persecución a Napoleón. El 2 de marzo, el vocero presidencial informó a la prensa que existía una investigación en la Procuraduría General de la República contra Napoleón por actos de corrupción. Se trataría de una posible defraudación fiscal relacionada con los 55 millones recibidos con motivo de la privatización de dos minas en Sonora, Minera de Cananea y Minera de Cobre, en 1989 y 1990, cuya parte proporcional no había entregado a los trabajadores.

El grupo de Napoleón informó que la denuncia era infundada porque, de los 55 millones de dólares correspondientes al 5 por ciento de las acciones de dos mineras privatizadas, 35 millones ya se habían entregado a 5,600 de los trabajadores indemnizados. Los restantes 15 millones son los que están en las cuentas bancarias que Fox decidió “congelarle” al sindicato.

El asunto es por demás turbio, en varios casos hay disputas por el cobro, en otros no hay comprobantes; también hay varias demandas por trabajadores que no tienen derecho alguno. Se ha dicho que el conflicto fue auspiciado por el Grupo Industrial Minero México que entregó los 55 millones de dólares al sindicato en 2004.

De inmediato, la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal giró una orden de localización y presentación de Napoleón por negarse a comparecer a diversos citatorios. De inmediato, la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) de la PGR se dedicó a buscar a Napoleón en todo el país. Se supo que la PGR acusaría a Napo de ''delitos financieros y probable lavado de dinero''.

Napoleón desaparece

Todos los medios políticos, con excepción del PAN criticaron al gobierno foxista por la ingerencia de la STPS en la vida sindical interna y por violar la “Autonomía sindical”. Todos dijeron que correspondía a los trabajadores nombrar a sus dirigentes. Se trata de simples declaraciones demagógicas. TODOS, absolutamente TODOS, fingen que los trabajadores NO pueden tomar ninguna decisión porque el charrismo, encabezado por Napoleón o por Elías, lo prohíbe.

Para defenderse el grupo de Napoleón declaró que interpondrían una denuncia penal contra el GIMM y la STPS por responsabilidad en la tragedia de Pasta de Conchos y por ingerencia en la vida sindical. La Federación Internacional de Trabajadores de las Industrias Metalúrgicas (FITIM), en la parte latinoamericana y caribeña, envió una carta a Fox diciéndole que “en ningún país del mundo los gobiernos quitan o ponen dirigentes sindicales". La United Steel Workers (USW) de Estados Unidos se manifestó contra la “ingerencia” de Fox y en apoyo a Napoleón. De éste no se supo nada, simplemente desapareció.

Los abogados de Napoleón se dedicaron a definir la estrategia, consistente en obtener un “amparo” para evitar la presentación del mismo y seguir por la vía administrativa la impugnación al acuerdo de la STPS. Néstor De Buen, abogado patronal, asesor de la UNT y ahora asesor del sindicato minero, informó que había presentado ya las demandas de amparo. Esa película ya la vimos: siempre termina igual: Néstor pierde todos los amparos y deja al movimiento en la indefensión total; eso sí, cobra caro. Todo México vimos esa mala película con motivo de la privatización de la seguridad social. Ahora, para apoyar a Napoleón, los charros de la UNT les recomendaron su abogado a los mineros. ¡Vaya solidaridad!

Apenas unos días después, “La juez cuarta de distrito en materia laboral, María Olascuaga García, negó al depuesto líder minero una suspensión provisional que solicitó su abogado, Néstor de Buen, por lo que Elías Morales podrá continuar como dirigente del gremio” (Méndez A., en La Jornada 10 mar 2006). Los defensores jurídicos dijeron que interpondrían “un recurso de revisión”. Lo que sigue, también ya lo vimos. El 15 de marzo, la juez negó la suspensión definitiva.

Apoyo sindical al charrismo

La Unión Nacional de Trabajadores (UNT) manifestó un fuerte enojo. Francisco Hernández Juárez, charro que se ha reelegido ya durante 30 años en el sindicato de telefonistas, dijo que se trataba de una ''maniobra arbitraria, ilegal y de clara intromisión en la vida sindical y violatoria de los acuerdos de la Organización Internacional del Trabajo''. Agregó que la STPS desconoció a Napoleón por “crítico” (sic).

El 5 de marzo se supo que la Confederación para la Renovación del Congreso del Trabajo (sic), la UNT y el Frente Sindical Mexicano (FSM) formarían “un frente de solidaridad” contra la violación de la autonomía del sindicato minero y la intromisión de la STPS. Espantados, los charros del Congreso del Trabajo llamaron a ''hacer a un lado banderas, colores y tendencias ideológicas'' en repudio a la violación de la autonomía sindical. Los charros se quejaron del apoyo del gobierno foxista al charrismo sindical (sic).

El 6 de marzo, varios sindicatos anunciaron la formación del Frente de Solidaridad en Defensa del Sindicalismo Nacional, pidieron la renuncia del secretario del trabajo foxista y convocaron una marcha para el día siguiente. ¿Así de rápido, cómo, con quien o quienes? M. Esparza, secretario general del SME dijo que, ese frente, era para defender “el principio de autonomía”. F. Hernández Juárez habló de un paro nacional, dijo que habría que ''dejar al país un día sin luz, sin teléfonos, sin Seguro Social, sin universidad, etcétera '' para defender la libertad sindical. Decirlo es fácil, hacerlo ¿quién?

Ese mismo día, 97 de 130 secretarios generales locales acordaron apoyar a Napoleón “hasta las últimas consecuencias” y anunciaron medidas como movilizaciones, toma de casetas de cobro en carreteras e, incluso, un nuevo paro. Es decir, los “líderes” locales se manifestaron en defensa de la autonomía sindical acordando apoyar a Napoleón, individuo ajeno al sindicato, que nunca ha sido trabajador y que, al igual que Elías Morales, en su momento fue impuesto por Fox violando la autonomía sindical que ahora dicen defender. Los compañeros NUNCA eligieron a Napoleón, se los impusieron por herencia de 40 años previos de dictadura familiar, pero ahora lo legitiman.

Marcha deliberadamente manipulada

México es, también, el país donde se hacen marchas de apoyo a los charros sindicales, enemigos de los trabajadores. Eso se podría concluir inmediatamente de los reportes de prensa y declaraciones de los “líderes” sindicales. En parte es cierto pero, afortunadamente, no es una verdad total, hay manipulación.

Según la prensa, 30 mil trabajadores marcharon el 7 de marzo en la capital del país encabezados por electricistas, telefonistas, mineros y otros sectores. Sin embargo, el 90% de los asistentes fueron los compañeros electricistas del SME, los otros sectores combativos solamente enviaron comisiones, no se vieron telefonistas, solo algunos universitarios y del seguro social, y un pequeño grupo de mineros. Napoleón Gómez, escondido, ni siquiera asistió.

En el mitin, la marcha realizada se hizo aparecer como de apoyo a Napoleón. Martín Esparza, secretario general del SME “planteó que la protesta por la intromisión del gobierno en la vida sindical ''no va a parar aquí; éste es el inicio, pero vienen acciones más fuertes, más graves; llegaremos hasta donde quieran'' (Muñoz P., en La Jornada 7 de mar 2006). Francisco Hernández Juárez “refrendó la determinación de esta central obrera de ir a paro nacional si el gobierno no rectifica y saca las manos del sindicato minero”.

Demagogia pura, bien sabe Hernández Juárez que los telefonistas NO quieren NI pueden hacer huelga; el sistema de telecomunicaciones YA ESTA automatizado. Por otra parte, sería risible que los charros se auto-hicieran una huelga, Hernández Juárez y camarilla son socios de Carlos Slim, el magnate privatizador más rico de Latinoamérica y dueño mayoritario de Teléfonos de México (Telmex).

El charro de los telefonistas se adorna hablando de un paro pero ¡para que lo haga el SME! probablemente mediante una falta colectiva. Acerca de Roberto Vega Galina, secretario general del seguro social, es preciso recordar que ni siquiera cuando se aprobó la modificación a la ley del seguro social se atrevió “a tanto”, prefirió TRAICIONAR A TODOS firmando con el gobierno la aceptación de la privatización. Esta vez, el diputado del PRI dijo que Fox y el PAN pagarán en las urnas su antisindicalismo; confundió a la marcha con un acto de campaña de su partido.

Respecto al SME, una fue la expresión de los trabajadores y otra la publicada por la prensa. Para los trabajadores se trató de la tradicional marcha, previamente convocada, que realizan en periodo de revisión contractual. Todas las consignas se refirieron, precisamente, a la revisión que vencía el 16 de marzo. Pero, las “nuevas alianzas” llevaron a que, en el mitin, se dijera y publicara otra cosa. Los compañeros del SME probablemente evaluarán la situación.

Falsa autonomía sindical

Casi todos los que han hablado han puesto en el centro de la discusión “la defensa” de la autonomía sindical. El enfrentamiento se ha calificado de crisis entre Fox con el movimiento sindical (sic). Grave atentado contra la autonomía sindical, escribió L.J. Garrido (en La Jornada 10 mar 2006).
¿Cuál movimiento sindical? Tratándose de los charros, la alianza Fox-charros es fuertísima basada en intereses recíprocos determinados por las privatizaciones que ambos apoyan. Movimiento sindical no existe en México y, en el actual enfrentamiento, los trabajadores mineros están en una enorme contradicción. Si aceptan la imposición de Fox serán sometidos por el charrismo; si logran salvar a Napoleón, estarían aceptando voluntariamente al mismo charrismo. Esa sería una doble tragedia: los mineros atrapados laboral y sindicalmente.

El derecho a la Autonomía y Libertad Sindical fue una de las históricas propuestas de la Federación Sindical Mundial expresada en la Convención 87 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la otra es la Convención 89 sobre el derecho a la contratación colectiva de trabajo. En muchos países e innumerables veces se ha invocado estos derechos; muchas luchas se han producido para defender los preceptos. Pero, en México, esos conceptos se han utilizado para pervertir al sindicalismo.

Los charros sindicales son los MÁS interesados en invocar SIEMPRE el concepto de autonomía sindical para ejercer, entre cuatro paredes, el derecho a cometer todos los crímenes y atrocidades posibles contra los trabajadores. Los charros son férreos “defensores” de la autonomía sindical porque eso les permite robar, matar, apoderarse de todos los sindicatos, no rendir cuentas a nadie y mantener la impunidad. En México van ya 70 años de esa degeneración sindical.

La acción de Fox no es personal, en este caso contra Napoleón sino contra las organizaciones sindicales, dicen algunos, mirando solamente la mitad de la realidad. La acción de Fox es inadmisible, ¡de acuerdo! Pero, la defensa del charrismo y charros individuales, escudados en una falsa autonomía sindical, ¡No es, por ningún concepto, defendible!

El caso del sindicato minero no es el único. La enorme mayoría de los sindicatos mexicanos están intervenidos por el gobierno, patronal e imperialismo. En México, la Autonomía Sindical NO existe. Lo que existe es la simulación, la usurpación de la representación, la inexistencia de movimiento sindical, el crimen organizado. Todo esto tiene un nombre y apellido: charrismo sindical.

Supuestos intelectuales que teorizan al respecto para apoyar charros, de uno u otro bando, se equivocan al mirar acríticamente una realidad fragmentada a conveniencia. En crítica al manotazo de Fox, uno escribió que se trata del “regreso del charrismo”. ¿Apoco ya se había ido? ¿Cuándo, dónde? El charrismo sigue allí, ya va para el siglo, cada vez está más corrompido y violento. Si hay dudas, basta mirar al Congreso del Trabajo.

Solamente el actual gángster que lo preside tiene 14 mil denuncias judiciales de los trabajadores en su contra. Esas demandas no son de ahora. En Pemex hay 20 mil demandas solo por despidos injustificados realizados por empresa y charros. En teléfonos, Hernández Juárez lleva 30 años reeligiéndose, en la Universidad Nacional, el charrismo y corrupción incluyen hasta a la oposición, según ellos mismos han confesado públicamente a la prensa. ¿Cómo está eso de que el charrismo se había ido?

Napoleón está perdido; Morales también

Napoleón está perdido y sus “apoyadores” también. La estrategia de sus asesores va al fracaso, la vía de los “amparos” está agotada. Por la vía legal, y meramente “administrativa”, la STPS les lleva ventaja. Lo veremos en las próximas revisiones contractuales en la industria minera. Los convenios de revisión los avalará la STPS pero SIN la firma de Napoleón sino de Morales con lo cual se afirmará “legalmente”.

Una vez detenido Napoleón le impondrán cargos hasta inventados para mantenerlo en la cárcel. Napo se esconde por miedo y tiene razón pero, en la lucha obrera hay dignidad. Un ejemplo lo dio nuestro compañero y amigo Demetrio Vallejo, en 1958-59, cuando fue detenido y encarcelado por encabezar las huelgas ferrocarrileras. Obviamente, Napoleón NO se parece en nada a Demetrio, son lo opuesto.

Descabezado el movimiento, el gobierno y empresarios se irán sobre los demás. Napoleón, por otra parte, NO puede hacer nada; lo que podía hacer era antes pero NUNCA preparó nada porque no le convenía. Movilizar a los trabajadores organizadamente, en todo el país, es algo CONTRA los charros. Elías Morales tampoco podrá sostenerse con el consenso de los trabajadores sino burocráticamente, porque se necesitará su firma, pero el repudio irá creciendo.

El próximo 1º de mayo se iniciará en la ciudad de México la próxima convención del Sindicato Minero-Metalúrgico. Es la oportunidad NO para apoyar a NINGUN charro sino para APROBAR una nueva representación genuina. Para sostenerse se requiere del correspondiente plan de acción. Lo más importante: es necesario enarbolar las banderas programáticas que otrora han hecho gloriosos a los mineros y metalúrgicos mexicanos, expresadas en las huelgas de Cananea en 1906, Nueva Rosita en 1950, Nacozari en 1977 y Las Truchas en 1979 y 1985, entre otras.

El sindicato minero-metalúrgico debe ser reorganizado en términos de un sindicato UNICO de rama industrial a nivel nacional, la contratación colectiva debe unificarse en UNA sola, empezando por establecer una fecha de vigencia UNICA para la revisión de los actuales contratos. El proceso empieza con la elección, a puerta de fábrica, de nuevos comités ejecutivos locales y comité ejecutivo nacional, en todas las secciones y delegaciones del sindicato.

¡Abajo Fox!, ¡Abajo el charrismo sindical!


FOTO: L.H. González, en La Jornada, 7 mar 2006.
Martín Esparza, secretario general del SME, flanqueado por Roberto Vega Galina,
charro del sindicato del seguro social quien, en 2005, firmó un acuerdo con 200
sindicatos y los traicionó al firmar con el gobierno de Fox la aceptación a la
privatización de la seguridad social, y Francisco Hernández Juárez, charro del
sindicato de telefonistas, socio de la privatización de Teléfonos de México y
eternizado en el puesto, ya lleva 30 años reeligiéndose. Galina y Juárez no son
confiables, fingen defender a la Autonomía sindical pero lo que defienden es un
sindicalismo charro, desclasado, mafioso, criminal y antiobrero.


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