En México 93 de cada 100 trabajadores no están sindicalizados
Sindicalismo mexicano DESTRUIDO
El nivel de sindicalización nacional es menos del 10%.
Existen 1 mil 165 sindicatos y 34 centrales con reconocimiento oficial.
Se estima un total nacional de 12 mil sindicatos, el 92% son falsos.
De los sindicatos oficializados, el 99.9% están controlados por el charrismo.
Es necesaria la reorganización del movimiento obrero de México.
Introducción
A pesar de graves distorsiones, las cifras oficiales revelan la
descomposición política y el retroceso en los índices de
sindicalización en México. La población
económicamente activa es de casi 43 millones, de los cuales solo 26
millones son “subordinados y remunerados”. De éstos, las
autoridades laborales registran únicamente 1.4 millones de trabajadores
“organizados”, esto es, el 3.4%. La estructura sindical, reducida y
secuestrada por el charrismo, impide una adecuada respuesta organizada a la
política neoliberal.
El siguiente es un informe preparado por el
FTE de México con base en las cifras oficiales disponibles. Las fuentes
son el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e
Informática (INEGI) y la Secretaría del Trabajo y Previsión
Social (STPS). Los datos son incompletos porque el gobierno mexicano siempre los
ha considerado secretos. Pero el mismo gobierno carece de suficientes datos
(actualizados) porque el charrismo todo desorganiza, simplemente no hay
estadísticas completas y verídicas.
La Ley Federal del
Trabajo (LFT) mexicana establece la obligación sindical de actualizar los
datos e informar a la autoridad laboral pero, casi nadie lo hace y la STPS
siempre incumple sus funciones. Al gobierno y a los charros sindicales les
conviene mantener la irregularidad para evitar que se modifique el actual
esquema corporativo.
Las apreciaciones que siguen no son las
últimas y tienen limitaciones cuantitativas pero, cualitativamente la
situación es muy clara. Visto en su conjunto, el sindicalismo mexicano
tiene una imagen deplorable resultado de una estrategia exitosa para
desnaturalizarlo y destruirlo suprimiéndole cualquier dinámica
social, sindical y/o política.
Las estadísticas más
recientes de empleo del INEGI revelan que en México la población
de 14 o más años de edad es de 74.3 millones, de los cuales el
57.4% --es decir unos 42.7 millones--, constituyen la llamada Población
Económicamente Activa (PEA), es decir aquella en edad de
desempeñar un trabajo [www.inegi.gob.mx, datos al primer trimestre de
2005].
El INEGI calcula que el 96.1% de la PEA, casi 41 millones de
trabajadores, constituyen lo que define como "Población Ocupada" (PO),
término que en el Sistema de Cuentas Nacionales de México (SCNM)
se refiere a cualquiera que desempeñe un trabajo, independientemente de
que perciba o no un ingreso salarial (trabajo para autoconsumo o en empresa
familiar, por ejemplo).
A partir de dicho parámetro, INEGI reporta
que solo el 64.3% de la PO, es decir unos 26.3 millones, son trabajadores
subordinados y remunerados, mientras otro 23.6%, unos 9.6 millones, laboran por
cuenta propia. Esto implica, al comparar con las cifras de la STPS, que solo un
3.4% de los trabajadores considerados como "población ocupada"
está afiliado a algún tipo de organización sindical, es
decir, 1 millón 392 mil 196 de los 41 millones 33 mil 958 mexicanos que
realizan algún tipo de trabajo.
A nivel nacional el porcentaje de
trabajadores sindicalizados, respecto de la "población ocupada" por
entidad federativa, confirma la inexistencia de organización obrera.
Salvo el Distrito Federal, que presenta el más alto porcentaje (con un
29.4%), solo los estados de México, Nuevo León, Aguascalientes,
Guanajuato, Puebla y Baja California Sur superan el 1% (aunque ninguno rebasa el
3.3%); los demás ni siquiera alcanzan un dígito.
Estadísticas “optimistas”
El capitalismo, en su etapa neoliberal, para concretar la
disminución de los salarios reales y la disminución del gasto
social, en salud, educación, vivienda y alimentación, lleva
adelante a nivel internacional una política antisindical como parte
fundamental de las políticas para la reactivación del capital y la
ganancia.
En México, las cifras "macroeconómicas" se
manipulan para simular recuperación, se infla el empleo con salarios
inferiores al mínimo (en la industria maquiladora), aumentan los recortes
de personal en las empresas, el cierre de fábricas y la
reubicación de los centros laborales. Como en otros países
subdesarrollados, la mayoría de los trabajadores mexicanos son
explotados, sin contrato colectivo de trabajo o con alguno que encubre esquemas
irregulares de remuneración, siempre carentes de protección social
(jubilación). Lo peor es la incapacidad para articular una respuesta. Las
cifras oficiales, aún parciales, revelan la crisis del sindicalismo
mexicano.
De acuerdo a los datos de 2005 del INEGI, la población
mexicana mayor de 14 años es de 74 millones 388 mil 900, la
población económica activa (PEA) es de 42 millones 699 mil 228 y,
de ésta, el 96.1%, es decir, 41 millones 33 mil 958 mexicanos son
población ocupada. Eso quiere decir que, el desempleo es del
3.9%.
Se trata de cifras publicadas con muy buena voluntad pero irreales.
El nivel de desempleo es, por supuesto, mayor. Las estadísticas ocultan
la verdad, son muy superficiales y engloban a todos los casos aún siendo
disímbolos. Además del desempleo abierto, existe un
ALTÍSIMO nivel de subempleo. Una enorme proporción de mexicanos
“trabajan” por su cuenta en lo que pueden, generalmente en el
comercio callejero, constituyendo lo que los economistas llaman el sector
informal.
Pero un análisis más cercano de las
estadísticas oficiales permite apreciar mejor la gravedad del asunto. Los
trabajadores asalariados son solo el 64.3%, o sea, 26 millones 384 mil 835.
Según el INEGI, el 23.6% (9 millones 684 mil 14 mexicanos) trabajan por
su cuenta y, por supuesto, no son asalariados.
Más de la mitad de
los trabajadores asalariados reciben un ínfimo salario. El 38.6% de la
población ocupada, 15 millones 839 mil 108, reciben 2 salarios
mínimos o menos. Los demás, reciben un salario nominal
mayor. Sin embargo, TODOS los asalariados mexicanos reciben un salario
REAL cada vez más deteriorado. Desde agosto de 1976, el salario
REAL de los trabajadores mexicanos está a la baja, la caída es
casi vertical, sin recuperación en NINGUN momento. La caída
llegó hace tiempo al nivel de los años 50 e, incluso, a niveles de
1900, antes de la Revolución Mexicana.
En cuestión de
seguridad social, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) tiene
registrados a casi 13 millones de trabajadores (12 millones 847 mil 253
derechohabientes entre permanentes 10 millones 934 mil 205 y eventuales 1
millón 913 mil 048) mientras el Instituto de Seguridad y Servicios
Sociales (ISSSTE) atiende a 2.5 millones más; es decir, apenas cerca de
15.5 millones, de los 26.5 de trabajadores “subordinados y
remunerados” que existen en el país, tienen acceso a este servicio
mientras 10.8 millones de trabajadores y sus familias carecen de toda seguridad
social.
ESTADÍSTICAS DE
EMPLEO INEGI (Datos al primer trimestre de
2005)
CONCEPTO |
REFERENCIA |
% |
NUMERO |
|
|
|
|
Población de 14 y más años de edad |
|
|
74,388,900 |
Población económicamente activa (PEA) |
Porcentaje de la población de 14 y más años de
edad |
57.4 |
42,699,228 |
Población ocupada (PO) |
Porcentaje de la PEA |
96.1 |
41,033,958 |
|
|
|
|
Población ocupada en el sector agropecuario, silvicultura, caza y pesca |
Porcentaje de la PO total |
15.3 |
6,278,195 |
Población ocupada en el sector industrial |
Porcentaje de la PO total |
25.9 |
10,627,795 |
Población ocupada en el sector comercio y servicios |
Porcentaje de la PO total |
58.3 |
23,922,797 |
|
|
|
|
Trabajadores subordinados y remunerados |
Porcentaje de la PO total |
64.3 |
26,384,835 |
Trabajadores por cuenta propia |
Porcentaje de la PO total |
23.6 |
9,684,014 |
|
|
|
|
Población ocupada que gana hasta dos salarios mínimos |
Porcentaje de la PO total |
38.6 |
15,839,108 |
Población ocupada en micro-negocios |
Porcentaje de la PO total |
40.9 |
16,782,889 |
Fuente: Elaboración
propia con información del Instituto Nacional de Estadística,
Geografía e Informática, INEGI
[www.inegi.gob.mx].
Nivel bajísimo de sindicalización
En materia sindical la situación es más grave.
Según datos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social
(STPS), responsable en el plano jurídico de normar las relaciones del
Estado y los trabajadores en México, la estructura sindical se compone 1
mil 165 organizaciones sindicales (asociaciones, según la STPS)
legalmente registradas. Esas asociaciones están agrupadas en 34 centrales
reconocidas por la misma dependencia estatal. A dichas organizaciones
están afiliados un total de 1 millón 392 mil 196
trabajadores.
De manera que, suponiendo que el 96.1% de la PEA es
población ocupada, es decir, 41 millones 33 mil 948 mexicanos son
trabajadores y, de este total, 1 millón 392 mil 196 trabajadores
están afiliados a alguna “asociación” sindical,
entonces, el nivel de sindicalización en México sería del
3.4%. Pero los datos oficiales están incompletos. Aún suponiendo
que fuera el doble, considerando un 100% de error en los datos, la tasa de
sindicalización es bajísima. En la propaganda oficial, los charros
hablan del 17% pero no hay tal. En el mejor de los casos, el nivel de
sindicalización nacional NO llega al 10 por ciento.
Es decir, la
enorme mayoría de trabajadores mexicanos NO están sindicalizados
ni organizados en nada. Si se considera únicamente al sector industrial,
es decir, al 25.9% de los trabajadores (10 millones 627 mil 795), el resultado
sería del 13.09%. El nivel sigue siendo bajísimo y, a la vez,
demasiado optimista porque se estaría excluyendo a los trabajadores de
los demás sectores, algunos (como el sector servicios) en creciente
aumento. El mayor nivel de sindicalización está en la capital
mexicana (Distrito Federal) con 29.4%. Salvo los estados de México y
Nuevo León, en el resto del país el nivel no llega al
1%.
ORGANIZACIONES SINDICALES
CON REGISTRO ANTE LA STPS (Datos a julio de
2005)
|
Número de
|
organizaciones
|
agremiados
|
CTM
|
CONFEDERACION DE TRABAJADORES DE MEXICO
|
341
|
548,173
|
“SIN CENTRAL” *
|
CONGRESO DEL TRABAJO
|
249
|
489,771
|
FESEBS
|
FEDERACION DE SINDICATOS DE EMPRESAS DE BIENES Y
SERVICIOS
|
9
|
133,558
|
CROC
|
CONFEDERACION REVOLUCIONARIA DE OBREROS Y
CAMPESINOS
|
169
|
75,043
|
FENASIB
|
FEDERACIÓN NACIONAL DE SINDICATOS
BANCARIOS
|
9
|
36,604
|
CROM
|
CONFEDERACION REGIONAL OBRERA MEXICANA
|
152
|
28,532
|
FTSA
|
FEDERACIÓN DE TRABAJADORES DE SINDICATOS
AUTÓNOMOS
|
9
|
13,004
|
FENASA
|
FEDERACIÓN NACIONAL DE ASOCIACIONES SINDICALES
AUTÓNOMAS
|
10
|
7,785
|
FNSP
|
FEDERACION NACIONAL DE SINDICATOS PROGRESISTAS "JOSE MARIA
MORELOS Y PAVON"
|
4
|
6,064
|
CRT
|
CONFEDERACION REVOLUCIONARIA DE TRABJADORES
|
27
|
5,647
|
COM
|
CONFEDERACION OBRERA DE MEXICO?
|
23
|
5,623
|
COR
|
CONFEDERACION OBRERA REVOLUCIONARIA
|
32
|
5,266
|
CTC
|
CONFEDERACION DE TRABAJADORES Y CAMPESINOS
|
26
|
5,250
|
COCEM
|
CONFEDERACION DE OBREROS, CAMPESINOS Y EMPLEADOS DE
MÉXICO
|
5
|
4,383
|
FNSI
|
FEDERACIÓN NACIONAL DE SINDICATOS
INDEPENDIENTES
|
8
|
3,738
|
FASTA
|
FEDERACION DE ASOCIACIONES Y SINDICATOS DE TRABAJADORES DE
AVIACION DE MEXICO
|
1
|
3,672
|
FNRTOI
|
FEDERACIÓN NACIONAL DEL RAMO TEXTIL Y OTRAS
INDUSTRIAS
|
13
|
3,297
|
FSL
|
FEDERACION DE SINDICATOS LIBRES
|
5
|
2,599
|
CORAS
|
CONFEDERACION OBRERA REVOLUCIONARIA DE AGRUPACIONES
SINDICALES
|
2
|
2,578
|
CGT
|
CONFEDERACION GENERAL DE TRABAJADORES
|
14
|
2,321
|
FRET
|
FEDERACIÓN REVOLUCIONARIA DE EMPLEADOS Y
TRABAJADORES
|
9
|
1,775
|
ASP
|
ASOCIACION SINDICAL PROGRESISTA
|
2
|
1,718
|
FAO
|
FEDERACION DE AGRUPACIONES OBRERAS DE LA REPUBLICA
MEXICANA
|
7
|
1,550
|
CAT
|
CONFEDERACION AUTENTICA DE TRABAJADORES DE LA REPUBLICA
MEXICANA
|
7
|
839
|
FSR
|
FEDERACION SINDICAL REVOLUCIONARIA
|
5
|
780
|
FNAS
|
FEDERACION NACIONAL DE AGRUPACIONES SINDICALES
|
3
|
679
|
FOS
|
FEDERACION DE ORGANIZACIONES SOCIALES
|
5
|
634
|
FROT
|
FEDERACIÓN REVOLUCIONARIA DE OBREROS
TEXTILES
|
2
|
556
|
FISNE
|
FEDERACION INDUSTRIAL DE SINDICATOS NACIONALES Y
ESTATALES
|
5
|
278
|
FSTCS
|
FEDERACION DE SINDICATOS TEXTILES, CONEXOS Y SIMILARES DE
SANTA MARIA CHIAUTEMPAN
|
3
|
207
|
FSCNT
|
FEDERACIÓN SINDICAL COORDINADORA NACIONAL DE
TRABAJADORES
|
3
|
129
|
FORAS
|
FEDERACIÓN OBRERA REVOLUCIONARIA DE AGRUPACIONES
SINDICALES
|
2
|
72
|
UNO
|
UNIDAD NACIONAL OBRERA
|
3
|
71
|
FAITA
|
FEDERACIÓN DE ASOCIACIONES DE LA INDUSTRIA TEXTIL Y
AGREMIADOS
|
1
|
|
|
|
1,165
|
1,392,196
|
Fuente:
Elaboración propia con información de la secretaría del
trabajo y previsión social [www.stps.gob.mx].
* La STPS le llama
“Independientes” a varios sindicatos que no están afiliados
(directamente) a alguna de las centrales oficialmente reconocidas. No son, de
ninguna manera “independientes”. Se trata de sindicatos controlados
por el charrismo sindical. Esos “independientes” forman parte del
Congreso del Trabajo (CT), organismo cúpula de los charros
sindicales.
Para tan ínfimo número de trabajadores
sindicalizados, en cambio, ya existen 34 centrales reconocidas oficialmente.
Algunas son centrales, otras son centralitas pero todas tienen un común
denominador: están controladas por el charrismo sindical. NINGUNA es una
verdadera central obrera, TODAS son vulgares negocios administrados por los
charros sindicales.
La cobertura de dichas centrales a nivel nacional es
variable. La Confederación de Trabajadores de México (CTM) abarca
31 de las 32 entidades de la República Mexicana (solamente en el estado
de Hidalgo no tiene presencia). Le siguen el mal llamado sindicalismo
“independiente", es decir el Congreso del Trabajo, con presencia en 23
estados y después la Central Revolucionaria de Obreros y Campesinos
(CROC) presente en 22 entidades y la Central Regional Obrera de México
(CROM) en 17 estados. Muchas organizaciones solo actúan regionalmente y
algunas operan en 1 solo estado. Es el caso de ASP, COCEM, CORAS, FAITA, FAO,
FAO, FASTA, FISNE, FNAS, FNSI, FOS, FROT, FSCNT, FSR y FSTCS. Varias de estas
minúsculas centrales oficialmente reconocidas son solo
membretes.
Durante décadas, la CTM declaró que afiliaba a
más de 5 millones de trabajadores. Los datos oficiales disponibles
indican que afilia apenas a la décima parte. Entre las organizaciones
importantes de la CTM está el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la
República Mexicana (STPRM) y el Sindicato Unico de Trabajadores
Electricistas de la República Mexicana (SUTERM).
En el Distrito
Federal (DF) operan 521 organizaciones con 1 millón 122 mil 349 de
afiliados pertenecientes a diversas ramas. El DF representaría el 80% del
total nacional. Luego estarían el Estado de México (EdoMex) con 60
mil 666 trabajadores afiliados en 106 organizaciones, Nuevo León con 44
mil 964 afiliados y 59 sindicatos respectivamente, Jalisco con 33 mil 490
afiliados en 68 sindicatos, Puebla con 31 mil 819 afiliados y 88 sindicatos,
Guanajuato con 20 mil 159 afiliados y 10 sindicatos y Veracruz con 14 mil 201
afiliados en 62 sindicatos.
En estos estados la situación
contrasta con la prevaleciente en entidades cuyo potencial maquilador
generó muchas expectativas de nuevos empleos. Tal sería el caso de
Tamaulipas donde, según las autoridades laborales, solo están
legalmente organizados 3 mil 262 trabajadores en 11 sindicatos (de una PO de 1
millón 245 mil 162), Tlaxcala (2 mil 711 afiliados de 394 mil 439), o
Chihuahua con 376 afiliados de un total de 267 mil 361 trabajadores. En las
cifras oficiales no se indica pero, seguramente, no se está incluyendo a
los trabajadores que viviendo en el interior del país están
afiliados a alguno de los sindicatos que operan a nivel nacional.
“Estructura” sindical charra
Por centrales, la CTM es la mayor con una afiliación total de
548 mil 173 trabajadores y 341 organizaciones. Le siguen de cerca las
organizaciones caracterizadas por la STPS como “independientes”
(siendo todas totalmente dependientes del estado, gobierno y empresarios) con un
total de 489 mil 771 agremiados agrupados en 249 organizaciones. Entre las
organizaciones supuestamente “independientes” están el
Sindicato de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana,
usurpado por gánsters y el Sindicato de Trabajadores
Minero-Metalúrgicos, Similares y Conexos de la República Mexicana,
encabezado por charros que nunca han sido trabajadores sino simplemente
heredaron al sindicato.
Después, está la FESEBS, con 133
mil 558 agremiados en 9 organizaciones sindicales (entre las que está el
SME y el SUTIN), la CROC (75 mil 043 afiliados y 169 sindicatos), la FENASIB (36
mil 604 afiliados y 9 sindicatos), la CROM (28 mil 532 afiliados y 152
sindicatos) y la FTSA (13 mil 4 afiliados y 9 sindicatos).
En
México existen, legalmente reconocidos, 1 mil 165 sindicatos que en su
conjunto afilian a la ínfima minoría de trabajadores. Obviamente,
se trata de DEMASIADOS sindicatos para tan pocos trabajadores sindicalizados.
NO existe ninguna estructura sindical por rama industrial. Cada central
o centralita afilia trabajadores de diversas ramas y muchas organizaciones son
controladas por individuos que regentean varias a la vez.
Esta
desorganización es deliberada porque así se controla más
fácilmente a los trabajadores, absolutamente carentes de identidad e
impedidos para ejercer la solidaridad. Los trabajadores de estas centrales ni
siquiera se conocen.
AFILIACION SINDICAL POR
ENTIDAD FEDERATIVA (Datos al primer trimestre de
2005)
ENTIDAD FEDERATIVA
|
ORGANIZACIONES
SINDICALES
|
NUMERO DE AFILIADOS
|
POBLACION
OCUPADA1
|
% AFILIACION
|
DISTRITO FEDERAL
|
521
|
1,122,349
|
3,812,553
|
29.4
|
ESTADO DE MÉXICO
|
106
|
60,666
|
1,828,529
|
3.3
|
NUEVO LEON
|
59
|
44,964
|
1,745,821
|
2.6
|
JALISCO
|
68
|
33,490
|
6,031,796
|
0.6
|
PUEBLA
|
88
|
31,819
|
2,412,744
|
1.3
|
GUANAJUATO
|
10
|
20,159
|
1,227,787
|
1.6
|
VERACRUZ
|
62
|
14,201
|
2,681,704
|
0.5
|
AGUASCALIENTES
|
12
|
9,174
|
381,301
|
2.4
|
COAHUILA
|
14
|
6,519
|
1,564,484
|
0.4
|
MORELOS
|
10
|
5,978
|
681,724
|
0.9
|
HIDALGO
|
6
|
5,424
|
2,890,770
|
0.2
|
QUERETARO
|
17
|
5,282
|
630,972
|
0.8
|
SAN LUIS POTOSI
|
8
|
4,048
|
947,221
|
0.4
|
MICHOACAN
|
19
|
3,567
|
1,563,240
|
0.2
|
TAMAULIPAS
|
11
|
3,262
|
1,245,162
|
0.3
|
OAXACA
|
14
|
3,108
|
1,384,611
|
0.2
|
TLAXCALA
|
25
|
2,711
|
394,439
|
0.7
|
BAJA CALIFORNIA SUR
|
8
|
2,480
|
207,235
|
1.2
|
BAJA CALIFORNIA
|
18
|
2,359
|
1,199,465
|
0.2
|
ZACATECAS
|
1
|
1,716
|
504,647
|
0.3
|
YUCATAN
|
11
|
1,678
|
758,378
|
0.2
|
SINALOA
|
11
|
1,615
|
1,190,655
|
0.1
|
GUERRERO
|
6
|
1,447
|
981,613
|
0.1
|
NAYARIT
|
6
|
985
|
393,961
|
0.3
|
SONORA
|
12
|
810
|
1,014,579
|
0.1
|
COLIMA
|
8
|
757
|
1,273,052
|
0.1
|
CHIAPAS
|
7
|
457
|
956,605
|
0.0
|
DURANGO
|
5
|
436
|
539,556
|
0.1
|
CHIHUAHUA
|
4
|
376
|
267,361
|
0.1
|
QUINTANA ROO
|
7
|
173
|
471,779
|
0.0
|
TABASCO
|
9
|
136
|
800,118
|
0.0
|
CAMPECHE
|
2
|
50
|
322,201
|
0.0
|
|
1165
|
1,392,196
|
42,306,063
|
3.3
|
1. Datos al cierre de 2004.
Fuente:
Elaboración propia con información de la Secretaría del
Trabajo y Previsión Social, STPS [www.stps.gob.mx] y del Instituto
Nacional de Estadística, Geografía e Informática, INEGI
[www.inegi.gob.mx].
Las centrales nacionales están
organizadas en Federaciones estatales y locales, las cuales afilian a
trabajadores de diversas ramas, los cuales están sujetos a diferentes
condiciones de trabajo, distintos salarios y diferentes sindicatos o
sindicatitos. Esa tendencia a la pulverización obrera lleva ya más
de 50 años.
Recientemente, hace 5 años, se
constituyó la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) como una
escisión del Congreso del Trabajo.
ORGANIZACIONES SINDICALES
Y NUMEROS DE AFILIADOS A LA
CONFEDERACION DE TRABAJADORES DE MÉXICO
(CTM)
(Datos de la STPS a julio de
2005)
CENTRAL
|
ENTIDAD FEDERATIVA
|
ORGANIZACIONES
SINDICALES
|
NUMERO DE AFILIADOS
|
CTM.
|
DISTRITO FEDERAL
|
160
|
436,975
|
|
ESTADO DE MÉXICO
|
29
|
25,798
|
|
GUANAJUATO
|
5
|
17,776
|
|
JALISCO
|
12
|
14,672
|
|
AGUASCALIENTES
|
10
|
9,024
|
|
NUEVO LEON
|
5
|
7,789
|
|
VERACRUZ
|
26
|
7,146
|
|
COAHUILA
|
10
|
5,332
|
|
PUEBLA
|
5
|
4,456
|
|
QUERETARO
|
9
|
2,821
|
|
TAMAULIPAS
|
9
|
2,761
|
|
SAN LUIS POTOSI
|
3
|
2,252
|
|
MICHOACAN
|
6
|
1,997
|
|
ZACATECAS
|
1
|
1,716
|
|
BAJA CALIFORNIA SUR
|
4
|
1,678
|
|
YUCATAN
|
8
|
1,623
|
|
OAXACA
|
1
|
1,430
|
|
NAYARIT
|
4
|
985
|
|
SONORA
|
10
|
627
|
|
MORELOS
|
5
|
534
|
|
DURANGO
|
2
|
309
|
|
BAJA CALIFORNIA
|
3
|
115
|
|
TLAXCALA
|
1
|
110
|
|
CHIAPAS
|
3
|
86
|
|
CAMPECHE
|
2
|
50
|
|
TABASCO
|
3
|
46
|
|
SINALOA
|
1
|
33
|
|
QUINTANA ROO
|
1
|
32
|
|
CHIHUAHUA
|
1
|
|
|
COLIMA
|
1
|
|
|
GUERRERO
|
1
|
|
|
|
341
|
548,173
|
Fuente:
Elaboración propia con información de la Secretaría del
Trabajo y Previsión Social [www.stps.gob.mx]
No se
conocen datos oficiales pero en la UNT, central afiliada a la CIOSL,
están el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana
(STRM), el Sindicato de Trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social
(SNTSS) y el Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional
Autónoma de México (STUNAM), entre otros.
De los 1 mil 165
sindicatos oficiales, y los no incluidos, el 99.9% está controlado por el
charrismo sindical. Las excepciones son muy raras y, generalmente, ocasionales e
incluyen al Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y algunos pocos
más. El SME está afiliado a la Federación Sindical Mundial
(la FSM).
Charrismo, estrategia del imperialismo
Los sindicatos mexicanos, en su amplia mayoría, están
dominados por el charrismo sindical. El charrismo es una superestructura
política y económica poderosa ligada corporativamente al Estado
mexicano. Son los charros sindicales los que administran los Contratos
Colectivos de Trabajo, ellos controlan el ingreso (y expulsión) de los
trabajadores en las empresas, manipulan las prestaciones salariales y sociales,
y hacen del sindicato un lucrativo negocio mediante la corrupción y el
crimen organizado.
Pero el charrismo en México es algo mucho
más grave. Se trata de la estrategia organizada por el imperialismo, a
través de la CIA, para desnaturalizar al sindicalismo y destruirlo. Esa
estrategia fue diseñada hace más de 50 años y aplicada con
éxito hasta la fecha. En más de 5 décadas, el imperialismo
ha concretado sus acciones a través de la Organización
Interamericana del Trabajo (ORIT), oficina regional de la Organización
Internacional de Organizaciones Sindicales Libres (CIOSL). Por muchos
años, la ORIT tuvo sus oficinas en México (hasta que la expulsamos
en los 70s) y se encargó de pervertir a los sindicatos.
El plan
sindical del imperialismo en México consiste en apoderarse de todos los
sindicatos a través de camarillas corruptas integradas al Estado y
corrompidas por las empresas. Los charros sindicales son, al mismo tempo,
diputados, senadores y/o funcionarios del gobierno. No nadamás,
también son empresarios y contratan trabajadores asalariados a su
servicio. Peor aún, se rodean de mercenarios y sicarios encargados de
eliminar literalmente toda oposición.
Políticamente, el
charrismo sindical es el valladar que impide a los trabajadores la lucha por sus
reivindicaciones. En los sindicatos controlados por el charrismo nunca se
realizan asambleas ni se organizan procesos electorales.
Actualmente, el
charrismo sindical es el pilar número uno del gobierno para llevar
adelante las privatizaciones en todas las áreas, al margen de la ley y en
contra de lo dispuesto por la propia Constitución política del
país.
El nivel de corrupción del charrismo es escandaloso.
Apenas en la revisión contractual de agosto de 2005, los charros del
sindicato petrolero recibieron más de 400 mil dólares por ser los
titulares del Contrato Colectivo de Trabajo. Ese fue el disfraz, la suma se
otorgó por ser el principal apoyo del gobierno y transnacionales para la
privatización de la industria petrolera nacionalizada.
El
charrismo sindical está representado por negociantes, grandes
contratistas, verdaderos burgueses y mafiosos. El fenómeno se reproduce a
todos los niveles, desde el secretario general nacional (que nadie
eligió) hasta el charrito local que tampoco fue electo por nadie sino
designado por las cúpulas. Existen casos, como el sindicato
minero-metalúrgico, cuya secretaría general fue heredada por el
padre al hijo, o el SUTERM heredado recientemente al sobrino. Eso es
común entre los sindicatos pertenecientes a la CTM y a la CROC. Entre
ambas, también, se llegan a disputar violentamente el control de los
trabajadores.
Degeneración sindical
Más aún, además del charrismo, en
México se padece la existencia de sindicatos falsos que
“venden” protección a las empresas y “contratan”
con las mismas a cambio de dinero, sin que exista ningún sindicato
legalmente constituido. Los trabajadores son suministrados a las empresas por
esos falsos sindicatos pero, los trabajadores, nunca se afiliaron ni mucho menos
participan de alguna actividad sindical. Eso, simplemente, no existe. Se trata
de sucios negocios, del tráfico de trabajadores, tolerado por las
autoridades gubernamentales, los patrones y el Estado.
El caso de Roberto
Ruiz Ángeles, quien se da tiempo para dirigir simultáneamente seis
sindicatos, caracteriza el fenómeno. Ruiz es dirigente formal de cinco
organizaciones afiliadas a la CROC (de la que además es el secretario de
desarrollo agropecuario) y uno más que la STPS caracteriza como
"independiente". Este individuo opera en el Estado de México controlando
organizaciones civiles y sindicales (de trabajadores del cartón y la
celulosa, textileros y de la industria alimenticia) e incluso una de
trabajadores del campo. Ruiz fue diputado federal por el Partido Revolucionario
Institucional (PRI) en la pasada legislatura encabezando el grupo que en 2002
presentó a la Cámara de Diputados el llamado "proyecto Abascal"
para la reforma laboral neoliberal.
Otro charro es Ramón
Gámez Martínez quien, con el apoyo del gobierno, se ha
adueñado de 2 mil contratos colectivos que afectan a 50 mil trabajadores.
El negocio le reditúa 10 millones de pesos al mes que le permiten pagarse
safaris en Africa. Otra de sus aficiones es la violación de menores de
edad que lo han llevado a prisión. En el colmo de la ignominia,
Gámez ha convertido a miles de falsos sindicatos en
“franquicias” que alquila a otros “líderes”
sindicales.
Otro ejemplo es el de Isaías González Cuevas,
quién desde su puesto en la CROC dirige también cinco
organizaciones sindicales en el DF entre trabajadores automotrices, de la
construcción, de la industria alimentaria, comerciantes y hasta
campesinos. Este charro es también un animoso promotor de la nueva
cultura laboral que, preocupado por los problemas culturales de los
trabajadores, contrató al Instituto Tecnológico de Monterrey (la
escuela privada más cara de México) para que los trabajadores
cursen la educación media superior ¡por Internet!
Hay, por
supuesto, casos de evidente nepotismo, como el de los hermanos Domínguez
Rivero, caciques de Zumpango, Estado de México. Abel dirige cinco
organizaciones de distintos ramos en el Edomex (automotriz, vidrio, textil,
comercio), todas afiliadas a la Confederación de Trabajadores y
Campesinos (CTC), y una más --de comerciantes-- en el DF; mientras sus
hermanos Leonel y Jorge dirigen otras cuatro organizaciones afiliadas
también a la CTC, tres en el Estado de México el primero, y una el
segundo, cabeza de la Federación Autónoma de Trabajadores de
Cuautitlán.
Un caso más es un tal Salim Kalkach Navarro (el
"defensor" de la niñas "barbi" de Tepeji, explotadas por la empresa
MATEL, fabricante de dichos juguetes), quien regentea cinco organizaciones en el
DF, dos “independientes”, una afiliada a la CTM, otra a la CROC y
una más a la CROM. Este “sindicalista” negocia trabajadores
de las industrias alimentaria, metálica, construcción y textil,
mientras administra su propia Federación de Trabajadores Vanguardia
Obrera.
Otros charros representan hasta 4, 3 y 2 sindicatos. No son pocos
pero, además, todos son muy hábiles para administrar eso de la
“democracia”, ya que tienen el puesto asegurado (ante la STPS) por
bastantitos años (Kalkach, por ejemplo, hasta el 2009).
Varias de
estas mafias están encabezadas por abogados sin escrúpulos que
tienen despachos dedicados a la “administración” de esos
falsos sindicatos. Algunos despachos “jurídicos” controlan
hasta 5 mil contratos.
Las autoridades laborales saben de esta
situación pero hacen caso omiso, deliberadamente toleran tales
prácticas. La razón, para ellos, es simple. Ese
“sindicalismo” les representa una fuente de enriquecimiento mutuo y,
al mismo tiempo, impide la acción organizada de los trabajadores,
cuestiones que el Estado y los patrones, el imperialismo mismo, celebran y
premian.
Cifras deliberadamente falseadas
Las cifras de la STPS están deliberadamente incompletas. Se
trata de ocultar la ignominiosa estructura charra del corporativismo sindical.
Baste decir que se omiten importantes sindicatos (charros) como el Sindicato
Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), que agrupa alrededor de
un millón de maestros de educación media y superior o la Alianza
de Tranviarios de México (ATM), por ejemplo. Tampoco están
consideradas organizaciones de sectores fuertemente golpeados por la
política del estado mexicano: como el Sindicato Nacional de Trabajadores
del Instituto Nacional del Fondo Nacional de Vivienda para los Trabajadores,
SNTINFONAVIT, el Sindicato de Trabajadores de Novedades Editores, STNE y la
Unión Linotipográfica de la Republica Mexicana, ULRM, integrantes
del Congreso del Trabajo.
A nivel de confederaciones y federaciones
también se omite a organizaciones grandes, como la Federación de
Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), que agrupa a la
mayoría de los trabajadores al servicio del Estado en crisis a
raíz del desprendimiento del SNTE. Pero la proliferación de
centrales y sindicatos sigue creciendo. Hace algunos años había
media docena, ahora hay 6 veces más y todas están controladas por
el charrismo sindical.
Miles de contratos y sindicatos falsos
Tampoco existen datos confiables a nivel nacional para detectar los
miles de contratos colectivos prácticamente inexistentes, porque
jamás han sido revisados, o porque se resuelven entre empresa y
líderes charros, al margen de los trabajadores.
Algunos
investigadores señalan más de 12 mil contratos falsos, de los
cuales los trabajadores ignoran su contenido, muchas veces ni saben que existen.
Los 12 mil podían ser, incluso, más porque no existe ningún
control.
ALGUNAS CENTRALES
OMITIDAS
CNMT
|
CONFEDERACION NACIONAL "MARTIN TORRES"
|
CONACOPSE
|
CONFEDERACION NACIONAL DE COMERCIANTES Y PRESTADORES DE
SERVICIOS
|
FNMT
|
FEDERACION NACIONAL MEXICANA DEL TRABAJO
|
FOEV
|
FEDERACION DE OBREROS DEL ESTADO DE VERACRUZ
|
FNUTE
|
FEDERACION NACIONAL DE UNIONES TEATRALES Y DE
ESPECTACULOS
|
FSTDMIDCERM
|
FEDERACION DE SINDICATOS DE TRABAJADORES AL SERVICIO DE LOS
MUNICIPIOS E INSTITUCIONES DESCENTRALIZADAS DE CARACTER ESTATAL DE LA REPUBLICA
MEXICANA
|
FSTSE
|
FEDERACION DE SINDICATOS DE TRABAJADORES AL SERVICIO DEL
ESTADO
|
FTDF
|
FEDERACION DE SINDICATOS DE TRABAJADORES DEL DISTRITO
FEDERAL
|
FNC
|
FEDERACION NACIONAL DE CAÑEROS
|
FFSTSGEMRM
|
FEDERACION DE SINDICATOS DE TRABAJADORES AL SERVICIO DE LOS
GOBIERNOS ESTATALES Y MUNICIPALES DE LA REPUBLICA MEXICANA
|
Las Juntas Locales de Conciliación y Arbitraje no ofrecen
información confiable, ni siquiera en el Distrito Federal, la entidad con
mayor índice de sindicalización [Ver www.juntalocal.df.gob.mx]. La
propia STPS omite toda información, a partir del año 2000, sobre
revisiones salariales y contractuales por central obrera ("esta
información se encuentra en revisión", indica un aviso en la
página Internet de la Coordinación General de Políticas,
Estudios y Estadísticas del Trabajo
www.stps.gob.mx/01_oficina/05_cgpeet/302_0055a.htm). Lo que sí es
evidente es que el desorden es auspiciado y tolerado por las mismas autoridades
laborales en connivencia con los charros. Tampoco se tiene
información de la multitud de sindicatos “blancos” que operan
en Monterrey organizados por los mismos patrones.
Necesaria reorganización del movimiento obrero
Por sectores, INEGI reporta que de la PO un 15.3% trabaja en el sector
primario (agropecuario, silvicultura, caza y pesca), un 25.9% en el secundario
(industrial y manufactura) y el 58.3% en el terciario (comercio y servicios).
Mucho se ha hablado de las transformaciones en el mundo del trabajo,
propiciadas por el capitalismo a escala global, cuya tecnificación
provoca un traslado cada vez mayor del trabajo "vivo" al trabajo "inmaterial",
"borrando" las antiguas categorías y dificultando la toma de conciencia
de clase. Sin embargo, al menos en el caso de México, la
proporción de trabajo vivo es históricamente constante. Pero la
mayoría de los 10.6 millones de trabajadores que aún quedan en el
sector industrial y manufacturero (realizando trabajo perfectamente "vivo") no
están sindicalizados (o pertenecen a un sindicato charro).
En
México, la reestructuración del trabajo lleva al menos 3
décadas. En 1976, con la represión político-militar a la
Tendencia Democrática de los electricistas, con motivo de la Huelga
Eléctrica Nacional impedida violentamente por el ejército y el
Estado, se entró en una onda larga de crisis económica persistente
que no ha terminado sino que se ha agravado.
El sector primario referido
a las actividades silviagropecuarias está en declive desde los 30s. El
auge industrial de esos años alcanzó su máximo en los 70s y
ha entrado también en declive. Precisamente, desde los 70s empezó
a cobrar fuerza el sector de los servicios, comercio y burocracia. Esta
área es actualmente la dominante. Hay una nueva generación de
proletarios ubicada en este sector que carece de organización y derechos.
Este, es ya el sector mayoritario y el más débil social y
políticamente.
En suma, existe una total desnaturalización
del sindicalismo mexicano usurpado por el charrismo sindical. La clase obrera
mexicana, organizada minoritariamente, está secuestrada en sus propias
organizaciones sindicales. Este proceso lleva ya 50 años y no es casual
ni espontáneo. Se trata de la estrategia implantada por el imperialismo a
través de la ORIT-CIOSL para impedir cualquier acción organizada y
conciente de los trabajadores. El resultado: en México la mayoría
de los trabajadores NO están sindicalizados. Pero si el capital ha
infiltrado a los sindicatos, es porque le afectan, por ello crea la
percepción de que son caducos, para debilitarlos ante las nuevas
generaciones de trabajadores.
La respuesta a esto se encuentra en el
orden político. Actualmente el llamado “movimiento sindical
mexicano” se “organiza” desde cuatro agrupaciones: Congreso
del Trabajo (CT), Unión Nacional de Trabajadores (UNT), Frente Sindical
Mexicano (el FSM) y el Consejo Nacional de los Trabajadores (CNT). Sin embargo,
estos organismos operan con una política borrosa y corporativa. El
Congreso del Trabajo es el organismo cúpula del charrismo encabezado por
la CTM y la CROC; la UNT encabezada por el Sindicato de Telefonistas sigue una
política similarmente charra y, en algunos casos, apenas
socialdemócrata. Ambas, CTM y UNT están afiliadas a la CIOSL. El
FSM está encabezado por el SME con presencia solo en la capital del
país, y el Consejo Nacional de Trabajadores es inexistente. Otras
opciones no han cristalizado.
El FTE de México, continuador de la
Tendencia Democrática, enarbola la tesis de que la construcción
del movimiento requiere la reorganización democrática del
movimiento obrero de México en 20 sindicatos nacionales de industria en
otras tantas ramas de actividad, base de la Central Única de
Trabajadores. Esto implica la necesaria derrota del charrismo y el rescate de
los sindicatos por los propios trabajadores.
Para llevar adelante estas
propuestas el FTE de México enarbola un Programa Obrero y ejerce acciones
concretas. La tarea es enorme pero es pertinente, por ser necesaria, para
liberar al sindicalismo mexicano de las garras del charrismo y del
imperialismo.
¡Venceremos!
|