Las precampañas tradicionales, y La Otra, sin política
La importancia de
TENER política
Las precampaña presidencial en México entre la mercadotecnia y la impolítica.
Los partidos políticos en la abstracción de los grandes problemas nacionales.
La izquierda mexicana sin proyecto político y fuera de la lucha de clases.
Precampañas huecas
Para el posmodernismo, la política es no tener
política. Eso es engañoso pero no es nuevo porque NO tener
política ES una política. Todas las opciones que se han hecho
públicas, las oficiales y no oficiales se caracterizan por realizar
precampañas SIN política. Esa es una gran debilidad. El resultado
es la oferta de “opciones” SIN política.
Los partidos
políticos oficiales (PRI, PAN y PRD) NO configuran ninguna alternativa
coherente para México. La “Otra Campaña” anunciada por
Marcos, a nombre del EZLN, se ha definido solo para “escuchar” SIN
proponer. Eso es realmente poco. En todos los casos, los grandes, graves y
acuciantes problemas nacionales ni siquiera se mencionan. Las precampañas
se llevan acabo SIN programa, SIN proyecto, SIN teoría, son simples
precampañas huecas.
Consecuentemente, NO se propone NINGUNA
organización social, alternativa e independiente, al pueblo de
México. NADIE propone luchar para la liberación social,
económica y cultural NI siquiera por la soberanía e independencia
de México. TODAS las “opciones” se plantean en la
abstracción de la lucha de clases. Es previsible que, las próximas
elecciones presidenciales en México sean un fraude en el amplio
sentido.
Obrador adelante
Primero tendrá que vencer en su propio
“gallinero”. Al interior del PRD es el único precandidato
registrado. Cárdenas tuvo que declinar dada su creciente impopularidad
política. Pero no ha renunciado totalmente. Su contradictoria
intención es ser proclamado candidato por fuera del PRD bloqueando a
López Obrador. La formación de un supuesto Frente Amplio tiene ese
objetivo.
Pero ni siquiera hay tal Frente. La integración al mismo de
partidos-negocio como el llamado Partido del Trabajo (PT) o Convergencia
Democrática (CV), entre otros, es solamente para negociar la
repartición de puestos. Los diversos partidos, incluido el PRD, carecen
de fuerza real. Pero, la “chiquillada” busca aprovecharse del
candidato (quién sea) para obtener favores. NO hay programa ni
convicciones ni principios, solamente intereses oportunistas.
Mientras
otros lo critican y amenazan, López Obrador se encuentra de gira por el
país. En unos cuantos días ha recorrido varios lugares. En todos
los casos, miles de mexicanos han acudido a su llamado. En ningún lugar
ha habido desbordamiento ni siquiera en los lugares gobernados por el PRD. Pero,
los mítines se han sucedido incluso en lugares donde el PRD no existe.
Los promotores de Obrador, coordinados por Manuel Camacho Solís,
ideólogo salinista, han sustituido al partido. Por ello sus voceros
plantean que el PRD les “abra” las puertas.
La respuesta de
un importante sector del pueblo mexicano ha sido estimulante. López
Obrador está movilizando electoralmente a las masas. Pero su
política es completamente insuficiente, hasta ahora no ha pasado de
promesas simplistas y vagas. Finalmente es el viejo estilo del PRI, prometer
todo lo que se le ocurra a un pueblo empobrecido, ávido de oportunidades
y cansado de agravios.
La precampaña de López se desarrolla
sin programa, con escaso contenido político. Se aprovecha muy bien del
descontento popular y, muchos mexicanos nobles y sencillos, ven en Obrador una
alternativa. A nivel de encuestas, Obrador es el ganador, lleva indiscutible
ventaja a los demás. Desafortunadamente, en política, las
encuestas no son la mejor
referencia.
Madrazo va a fondo
Por lo pronto el PRI está a punto de deshacerse de
Elba Esther Gordillo, charra del magisterio nacional. “Brazo
político de Fox” le llaman. En medio de disputas e insultos
públicos se prepara su expulsión. El costo será
también para Arturo Montiel, otro de los precandidatos, porque Roberto
Madrazo indica que irá a fondo, “cueste lo que cueste” para
hacerse de la presidencia de la República.
En Juchitán,
Oaxaca, tierra tradicionalmente izquierdista, López Obrador fue muy bien
recibido y reunió a 4 mil; Madrazo, tuvo allí su primer mitin y
fueron más de 40 mil, diez veces más que su oponente en un solo
acto. De seguir ese ritmo la llamada “cargada” del PRI será
arrasadora, obviamente con derroche de recursos económicos para,
literalmente, “comprar” voto por voto en todas partes del
país.
Roberto NO tiene política propia, ni le interesa, es
conciente que su papel será el de simple empleado de los organismos
financieros del imperialismo. Esas instancias decidirán el programa que
se aplicaría en el gobierno de Madrazo. Sería previsible que las
privatizaciones siguieran avanzando para cubrir todos los sectores posibles. Ese
sería, por supuesto, un gobierno de vergüenza sometido a Washington
como lo ha hecho Fox.
El PRI, para imponerse, ha puesto en movimiento su
estructura territorial en todo el país. En los siguientes días,
desplegará todo su poder de convencimiento basado en la
corrupción. Miles de operadores políticos a sueldo, pagados por
los gobiernos locales, ya están dedicados de tiempo completo a organizar
el fraude. La población indefensa podría volver a ser
sometida.
Felipillo pagará los platos rotos
Desde ya el PAN será el gran perdedor. La
nefasta experiencia con Fox ha desencantado hasta los furibundos de hace 6
años, incluidos taxistas, pequeña burguesía e intelectuales
del “voto útil”. La muestra evidente es la campaña
opaca de Santiago Creel quien, en Monterrey, ciudad industrial centro de la
reacción y trasnacionales, solamente reunió en un mitin a 150
(ciento cincuenta personas). El caso patético fue en Yucatán, pues
a un mitin de Creel asistieron solamente 3 (tres) campesinos. Obviamente, ya
está eliminado.
La caída de Creel revela el fracaso de Fox
pues, su candidato, perdió la primera ronda de elecciones internas.
Felipe Calderón, individuo sin principios, privatizador, entreguista y
sumiso al gobierno norteamericano, se perfila como el candidato de la
ultraderecha.
Es previsible que Calderón, y el PAN,
perderán. Calderón se mueve SIN política, ni propuestas,
hasta su discurso está desgastado. Es sumamente difícil,
además, que pueda revertir el alto nivel de descontento social acumulado
que ha propiciado el mal gobierno de Fox.
Si las elecciones fueran
limpias y verdaderas, el pueblo de México echaría a Fox sin
pensarlo no ahora sino mucho tiempo ha. Desafortunadamente, en México, la
voluntad popular NO cuenta. Lo que decidirá las próximas
elecciones será el acuerdo entre mafias, la circulación de mucho
dinero sucio y el manejo computarizado y de medios. El PAN está basando
su estrategia precisamente en la propaganda de televisión repitiendo
mentiras hasta el cansancio.
Pero así el PAN haga derroche de
recursos, que lo hará, Fox y su partido serán
echados.
“Escuchar” es la “propuesta” de Marcos
Después de emitida la
llamada Sexta Declaración, Marcos se ha reunido con diversas
agrupaciones. Según sus propios datos, se trata de al menos 55
organizaciones de “izquierda” y algunos cientos de ONGs, más
un número sin precisar a título personal.
En las reuniones
en Chiapas hubo algunas propuestas, críticas y alabanzas. Marcos ha
escuchado pacientemente a todos “con mucha tolerancia” según
algunos medios. Las reuniones se han prolongado al estilo de algunas
interminables asambleas estudiantiles que se disuelven por falta de
quórum. Ese típico estilo de la izquierda marginal se promueve con
insistencia.
Pero no se han discutido los problemas nacionales ni se
pretende discutirlos. “Escuchar” solamente, ha dicho Marcos,
proponer NO está en su agenda.
El 15 de septiembre se
anunció el inicio de la Otra Campaña. Oficialmente, Marcos la
“entregó” a los demás. ¿Que ocurrirá? Una
gira promocional de Marcos con una debilidad implícita expresada en la
ausencia de la política. Últimamente le ha bajado a los insultos
pero políticamente no hay NADA. Tampoco se pueden esperar definiciones
importantes de Marcos, él está convencido de la lucha
“anticapitalista” FUERA de la lucha de clases (sic). Vencer a
López Obrador sigue siendo el “objetivo” de Marcos, al PRI y
a Fox NO los toca para NADA. Eso, no es serio, por decir menos.
Es
interesante aprovechar la coyuntura electoral para movilizar pero sería
mejor sí se procediera con contenido político. Movilizarse sin
rumbo, sin organización ni programa, “sin oradores” ni
propuestas, es insuficiente. Algunos son optimistas miran los hechos como una
“nueva forma” (sic) de hacer política pero, al mismo tiempo,
dudan. “Ya veremos, dijo el ciego”, escribió Luis
Hernández.
Pertinencia de la política
Como nadie quiere tener política o
prefieren la política de NO tener política, el panorama mexicano
es por demás decepcionante. La política ha sido envilecida por la
corrupción de casi un siglo. Pero el desprecio por la política
contribuye a mantener un estado de sometimiento. Eso es así, porque al NO
proponer NADA, el pueblo no tiene manera de orientarse COLECTIVAMENTE todo queda
en el nivel INDIVIDUAL. Eso, en política, sirve poco.
El
horizontalismo y el verticalismo son igualmente engañosos, falsos e
innecesarios. México y los mexicanos necesitamos de la política
para accionar organizados. TODOS necesitamos saber, al menos,
¿Porqué luchamos? ¿A dónde pretendemos llegar?
¿Cómo le haríamos? Eso supone, necesariamente, un Programa y
una Organización Social. En ausencia de estas, prevalece una excesiva
confianza en el voluntarismo y el espontaneísmo pero, eso, no garantiza
mucho. Esos métodos “artesanales”, improvisados, NO son
nuevos y SÍ son fuente de amargas experiencias.
La práctica
de la NO política o impolítica favorece a quienes ejercen
(torcidamente) la política. Escuchar al pueblo no basta, en el
México profundo se siente como un clamor un enorme descontento y grandes
deseos de cambio verdadero. Pero no sabemos cómo ni tenemos con
qué. El nivel de desorganización social en México es
alarmante. Baste señalar, por ejemplo, que el nivel de
sindicalización es mínimo, no llega ni al 5 (cinco) por ciento. La
enorme mayoría de trabajadores (de todo tipo) NO están organizados
en NADA. La situación es trágica porque, además, la
ínfima minoría sindicalizada está controlada en un
99.9% por el charrismo sindical.
Unidad y lucha de clases
Necesitamos desarrollar la política, misma
que ha de estar basada, NECESARIAMENTE, en una determinada teoría. Para
los trabajadores, esa teoría es el pensamiento revolucionario
clásico aplicado a las condiciones concretas de hoy. No hay
anticapitalismo sin antiimperialismo y, eso, implica DEFINIRSE, y ser
coherentes, respecto de la propiedad de los medios de producción:
¿Propiedad privada o propiedad colectiva social? ¿Expropiación
de transnacionales o contemporización? ¿Poder político o solo
protesta contestataria? ¿Rollo marginal o Revolución? ¿Lucha
organizada con un proyecto programático o ai’ se va a como salga?
Esto es crucial dada la VIGENCIA de la lucha de clases en México y en el
mundo entero. A partir de la teoría es que se pueden, y deben, definir
las propuestas y acciones. SIN teoría y SIN política, SIN
organización y SIN programa, SIN iniciativa y SIN bandera, la izquierda
mexicana (cualquiera que sea) omite sus tareas inmediatas e
históricas.
Pero, sí la política se desprecia la
teoría está peor porque se deja olvidada siempre “para
después” si es que procede. Se prefiere el empirismo negando
experiencias previas.
Se hace camino al andar, dirán que dijo el
poeta. Sí, pero antes que el pie de un paso éste se origina
primero en la mente. La primera actividad se realiza en la cabeza después
en los pies. Es decir, primero se piensa el paso luego se ejecuta. Y así,
sucesivamente, con los demás pasos. De manera que no es nadamás
andar, no es solo movilizarse por movilizarse o estar, supuestamente,
movilizados sin saber porqué o para qué.
El desarrollo de
la conciencia, siendo un asunto estratégico, se deja para NUNCA, ni se le
toma en cuenta. Al empirismo ingenuo no le importan la conciencia, antes
al revés, para asegurar su “existencia” (empírica y
grilla) promueve obnubilar la conciencia.
No por casualidad, Obrador y su
grupo llevan la delantera. No por casualidad, la corrupción y las mafias
del PRI y el PAN dominan la política. Es que la izquierda incumple su
papel, no ejercemos el derecho a organizarnos y a hacer política. La
organización y la política se vuelven a dejar a la iniciativa del
contrario. Así, el papel de solo “escuchar” se podría
convertir en solo “ver”, “padecer”,
“soportar” la cada vez peor política del imperialismo y sus
personeros.
Los trabajadores de la energía de
México llamamos a los demás compañeros a involucrarnos
críticamente en la discusión de los grandes problemas nacionales e
intervenir organizadamente para seguir desarrollando una política de
clase, propia e independiente. ¡Venceremos!
El gobierno foxista y las transnacionales siguen violentando la legalidad constitucional.
¡Abajo el mal gobierno!, ¡Expropiación SIN indemnización a transnacionales!