La tarea política de nuestra época
Construir organización
con política clasista
No hay organización verdadera sin estructura, programa y política de clase.
La organización que necesitamos es obrera, social y política.
La praxis está determinada por la dinámica concreta.
La prioridad política
Muchos son los problemas y retos de los pueblos
del mundo y, en el contexto de la lucha de clases, los trabajadores debemos
esforzarnos por tener en alto nuestras propuestas. El proyecto de los
trabajadores se basa en la política y nuestra política no puede
ser sino de clase. El concepto de unidad no es abstracto ni es absoluto. La
unidad es un medio para cumplir un programa. De allí la importancia de
definir ¿Porqué luchamos?
La política, el programa y
el proyecto deben orientarse al cumplimiento de nuestra prioridad. En la
presente época, la tarea política es la organización de los
trabajadores y de los pueblos en general. La propuesta no es de ahora, tiene
vigencia histórica, pero ahora cobra más fuerza ante las
tendencias del imperialismo no solo por debilitar todo tipo de
organización seria sino de suprimirla.
La mayoría de los
trabajadores en el mundo NO están organizados en nada. Los sindicatos no
solo han dejado de afiliar trabajadores, ahora enfrentan la desafiliación
masiva. En muchas partes, de hecho, los sindicatos no cumplen sus funciones y NO
sirven a los trabajadores. El caso más degradado está en
México pero no es el único caso, el fenómeno también
ocurre en la vieja Europa.
La tendencia a la eliminación de la
Jornada de Trabajo, el pago por horas simples trabajadas, la contratación
individual, la desprotección social, conducen a la negación de la
organización sindical, vista inútil además por la
corrupción, corporativismo y conservadurismo que le son
característicos.
Desorganizar, tarea imperialista
Nada mejor para el imperialismo que llevar
adelante sus políticas en ausencia de resistencia y oposición. En
varias partes de la vieja Europa, por ejemplo, las privatizaciones se realizan
sin que NADIE diga NADA. En otros casos, todo se busca canalizar por la
vía electoral fraudulenta y las propuestas se basan en la política
de ciudadanos, individuales y anónimos. A los partidos políticos
tradicionales solamente les interesa organizar “redes ciudadanas” o
“comités promotores del voto”, desde luego sin programa ni
propuestas.
Otros sectores plantean la desorganización
organizada, al margen de la lucha de clases, todo diluido en la multitud, en la
masa informe, sin estructura ni liderazgos (por demás inexistentes). En
la abstracción de la lucha de clases, los trabajadores no son
considerados como clase social y su programa no se toma en cuenta. Estos
sectores se creyeron el discurso del posmodernismo y ya le dijeron ¡Adiós! Al
proletariado.
En el mejor de los casos, los sindicatos son reducidos
solamente a “lo laboral”. Eso le gusta mucho al imperialismo. Con
esa dinámica se favorecen las tendencias al atraso político, los
sindicatos devienen en el gremialismo y el sindicalerismo, siempre ajenos a la
lucha social.
Organización obrera
Pero los sindicatos siguen siendo vigentes y tienen un
valor muy importante. Se requiere, por supuesto, derrotar al charrismo, rescatar
a los sindicatos y hacerlos funcionar correctamente. Eso solamente es posible
con la intervención organizada y decidida de los trabajadores. El
sindicato somos todos, no las cúpulas burocráticas. Pero el
sindicalismo NO se puede reducir únicamente a la lucha por las
reivindicaciones inmediatas y gremiales; como la democracia sindical No se puede
reducir solamente al voto. Claro, en casos como México, si los sindicatos
tan solo lucharan por la defensa de los salarios y del empleo y, si tan solo
hubiera asambleas generales, se habrían dado pasos gigantescos porque
NADA de esto existe.
Sin embargo, el sindicato tiene tareas adicionales
más importantes que cumplir. En ese sentido, proponemos la
Reorganización Democrática del movimiento obrero, no solo en
México sino en muchas partes más. Tratándose de los
sindicatos existentes proponemos abrir procesos de unidad para formar
Sindicatos Nacionales por Rama Industrial. Un solo sindicato en cada rama de
actividad productiva. No se necesitan más, la proliferación de
sindicatos y sindicatitos por todas partes solamente debilita al movimiento y
sirve a los intereses antiobreros. Respecto a los trabajadores no
sindicalizados, la propuesta consiste en dedicar suficientes esfuerzos para
integrarlos a su respectivo sector.
Por supuesto, no se trata de
organizar por organizar, en México existen miles de sindicatos muchos de
ellos simples negocios e inexistentes organizaciones. Se trata de organizar a la
clase obrera con base en un programa mismo que proponemos en términos del
Programa Obrero de México basado en décadas de lucha
proletaria.
La reorganización obrera es crucial, es la
condición fundamental para desarrollar cualquier lucha sea electoral o
no. Los trabajadores mexicanos requerimos de una organización nacional
que nos represente y unifique en la dinámica concreta. En este sentido
una propuesta sería integrar el Frente de Trabajadores de
México. En este frente los trabajadores mexicanos del campo y de la
ciudad nos integraríamos en una sola categoría: trabajadores; y
estaríamos organizados en sindicatos y en Consejos obreros para hacer
valer la fuerza proletaria en el espacio del
saber.
Organización social
La clase obrera no debe limitarse al simple interés
gremial porque desnaturalizaría los objetivos de la lucha. La solidaridad
proletaria no es la dádiva ni el apoyo solamente económico, es
ante todo el accionar político para integrar al conjunto de la clase y de
los pueblos. Pero los trabajadores no podemos sustituir al pueblo ni debemos.
Pero si debemos desarrollar la lucha integrados en la organización social
del pueblo.
En México la situación es deplorable, la
mayoría de mexicanos resistimos pasivamente, sin organización
social de ningún tipo. Esfuerzos se han hecho en varios momentos pero
hace falta que cristalicen en una organización nacional. Proponemos la
acción en todas partes del país, en todos los lugares, no en plan
de gira para los reflectores sino de acción orientada hacia un punto:
CONSTRUIR organización social, política y obrera.
La
organización social requiere ser representativa, con estructura y con
dinámica. Una propuesta es construir un Frente de Soberanía
Nacional, con carácter antiimperialista, integrado por 1 Consejo
Nacional, 32 Consejos estatales, 10 Consejos regionales y 2000 Consejos
municipales. Los objetivos serían: la defensa de los derechos sociales
del pueblo y de la Nación.
Organización política
Los trabajadores debemos dejar de lado
atávicos defectos que son perniciosos. Debemos suprimir el voluntarismo,
la improvisación y el culto al espontaneísmo. Construir
organización, de cualquier tipo, es una tarea política que no se
puede reducir solamente a la plática o a las visitas de aparato ni al
manejo de los medios. La construcción social es concreta, NO es
fácil pero es indispensable.
Para llevar adelante estas tareas,
más allá de la coyuntura, necesitamos de una organización
política. En los últimos 100 años en México ha
habido muchos esfuerzos, algunos exitosos otros no tanto. Hoy carecemos de
organización política, la izquierda mexicana está difusa,
la socialdemocracia se ha apropiado la representación, las fuerzas
están desarticuladas.
La organización política que
necesitamos no se puede limitar a la simple protesta contestataria ni al
idílico discurso, es preciso ejercer acciones de poder político
mismo que debemos construir. Una propuesta sería avanzar en torno a una
política de Frente Unido e integrar el Frente Socialista de
México.
Construir la organización en todo el
territorio del país, enarbolar el programa obrero y popular, dinamizar el
movimiento es ser parte de la lucha para defender a México del
imperialismo y para abrir nuevos espacios de lucha que no se limiten a los
sucios procesos electorales.
Por supuesto, la organización NO se
construye sola ni la construye NADIE, se construye por TODOS, en alianza
política, con base en acuerdos democráticos, en la acción
concreta y en la coherencia política.
¡Salud y Revolución Social!
¡Venceremos!
Trabajadores mexicanos en lucha por objetivos inmediatos e históricos.
Construir organización con estructura y programa,
a todos los niveles, es la tarea política de hoy.