Volumen4, Número 50, Mayo 31 de 2004

Marchas en Latinoamérica

Contra el ALCA y el neoliberalismo

El movimiento sindical latinoamericano reivindica los derechos sociales de los trabajadores y se manifiesta contra el neoliberalismo. El desempleo es el principal flagelo. Fuertes críticas a los gobiernos entreguistas y firme disposición a la lucha aún en condiciones críticas.

Las mayores concentraciones obreras se realizaron en Brasil, principalmente en Sao Paulo. Más de 2 millones de trabajadores protestaron por los bajos salarios y exigieron al presidente Lula medidas para combatir el desempleo mismo que ha llegado a más del 12%. En las capitales de los 27 estados brasileños hubo marchas convocadas por la Central Única de Trabajadores, Fuerza Sindical y la Central General de Trabajadores Brasileños.

Las diversas centrales se manifestaron contra el desempleo, la recuperación del salario real y reducción de la jornada laboral sin descuento salarial; también contra el ALCA y el FMI. Asimismo, se realizó la tradicional misa del trabajador en la Iglesia Matriz de Sao Bernardo do Campo, a la cual acostumbra asistir Lula, otrora combativo líder obrero.

Los sindicatos paraguayos se manifestaron contra el neoliberalismo y el ALCA. Allí el desempleo es más del 16% y afecta ante todo a las mujeres. La Central Unitaria de Trabajadores Auténtica, la Central Nacional de Trabajadores y la Coordinadora Sindical por la Unidad criticaron al gobierno neoliberal y expresaron su rechazo a las privatizaciones.

En Santiago de Chile, la Central Única de Trabajadores se manifestó contra la política laboral del gobierno y anunció un paro. Este se realizará a fines de julio si el gobierno no retira el proyecto de reformas a la legislación laboral enviado ya al Congreso.

Abierto rechazo al gobierno entreguista de Lucio Gutiérrez, expresaron los trabajadores ecuatorianos en Quito. La marcha unificó a diversos sectores sindicales, sociales y políticos. El reclamo generalizado fue la exigencia para que renuncie Gutiérrez sometido al Fondo Monetario Internacional.

Con más de 13% de desempleo, y en medio de enormes dificultades, los trabajadores colombianos salieron a las calles en Bogotá y las principales ciudades de Colombia. Fuertes críticas se expresaron contra la política económica y social del gobierno. Los trabajadores denunciaron, también, el clima de persistente violencia contra el movimiento sindical. Prácticamente todos los sindicatos han sido víctimas de la violencia de los grupos paramilitares que operan impunemente en el país con el apoyo de los gobiernos de Colombia y de Estados Unidos.

Las centrales oficiales de Argentina NO convocaron a ninguna acción este 1 de mayo. La CTA, por su parte, organizó una reunión en la frontera con Brasil y Uruguay. "Aumento en salarios, jubilaciones y planes sociales a 900 mil desocupados que se encuentran en lista de espera" reclamaron los piqueteros argentinos. Estas agrupaciones de trabajadores desempleados realizaron diversos actos, entre otros, el bloqueo de la autopista que une a Buenos Aires con el sur, y una manifestación en la Plaza de Mayo de la capital.

En Centroamérica, diversas marchas se realizaron en Honduras. En la fecha se conmemoró el 50 aniversario de la huelga contra las transnacionales norteamericanas Chiquita Brands y Standard Fruit. En la capital Tegucigalpa y en la provincia los trabajadores hondureños se manifestaron en contra del ALCA.

Convocada por la Confederación de Unidad Sindical Independiente (CONUSI) se realizó una marcha en Panamá. Al término se hizo un mitin. Los trabajadores panameños se manifestaron contra el ALCA. También, rechazaron las candidaturas de todos los partidos políticos y llamaron a votar en blanco pues consideraron que las propuestas de todos los candidatos son neoliberales.

En otras partes también hubo marchas. Son tradicionales las movilizaciones en Perú y Bolivia, encabezadas por la CGT y la COB respectivamente. En La Paz, la COB llamó a una huelga indefinida a iniciarse el 3 de mayo en demanda de la abrogación de la ley de hidrocarburos, las leyes de pensiones y de tierras, en nueva fase de la lucha.

Destaca, también, la lucha del pueblo venezolano. Aquí los trabajadores siguen sometidos a las mafias sindicales de la CTV. Otras instancias, como la UNT, están en lucha sin haber terminado de estructurar al movimiento. La CUT sigue enarbolando las banderas clasistas. En tan desigual situación, los trabajadores y pueblo de Venezuela en movilización siguen defendiendo al proceso bolivariano.

El movimiento sindical latinoamericano es sensible a la desfavorable situación de la clase obrera y expresa su protesta contra los gobiernos neoliberales. Las marchas del 1º de mayo siguen siendo masivas y casi generalizadas en la región.

A pesar de las enormes dificultades, señaladamente en Colombia, debido a la violencia paramilitar del gobierno contra el pueblo, el día es de lucha y resistencia. Falta, sin embargo, desarrollar un sindicalismo clasista que supere la lucha de resistencia sindical limitada.

Trabajadores y pueblo de Venezuela poyan el proceso bolivariano
encabezado por el presidente Hugo Chávez.