Desde este 10 de mayo, las transnacionales y socios menores, podrán extraer petróleo crudo en 19 áreas en tierra y en aguas someras del Golfo de México. El gobierno de Peña Nieto y los ganadores de la Ronda 1 firmaron los contratos. Se trata de construir una industria petrolera privada, dijo Coldwell, quien, junto con Peña, Videgaray, Beltrones y otros, habían negado que la reforma energética fuera privatizadora. Es peor, es la Expropiación Petrolera Extranjera. Es el inicio de la invasión a la nación.

Este es otro momento aciago para la nación mexicana. Como hace 500 años, cuando los invasores españoles apoyados por totonacas y otros se apoderaron de la tierra y sus recursos de los antiguos mexicanos, hoy, Peña Nieto y socios guiando a las transnacionales de rapiña les entrega el patrimonio energético de la nación.

Aquella vez hubo combate, incluso cuerpo a cuerpo, casa por casa, en tierra y aguas. Hoy, casi nadie quiso enterarse. No es casual, el sometimiento ha sido ignominioso y fascistoide, mediante tres vías principales. Una, el empobrecimiento económico secular de la gran mayoría de la nación, de tal manera, que se vive en la sobrevivencia e incapacitados para luchar. Dos, la desorganización generalizada mediante la fragmentación y la represión. Tres, la enajenación de la conciencia hasta limarla casi totalmente, mediante la utilización de los medios mercenarios y la utilización de la mentira como mecanismo de control.

Para imponer la aprobación de la reforma energética a nivel constitucional, Peña Nieto, socios y asesores repitieron hasta la saciedad que no había privatización y lo que se aprobó fue peor: la desnacionalización energética. Para imponer la aprobación de la legislación energética secundaria, repitieron hasta el hastío que no había privatización.

Esta empezó desde 1976, formalizada en 1992 y elevada a rango constitucional en 2013-14 con la desnacionalización de Peña Nieto, siguiendo las instrucciones del imperio, encabezado por B. Obama, H. Clinton y el ITAM.

Hoy, los procesos de trabajo energético están fragmentados, las industrias desintegradas y, en ambos casos, las funciones estratégicas entregadas al capital privado. Hasta los activos de Pemex están en venta. Pero, lo más grave, las reservas de hidrocarburos, probadas y certificadas por Pemex se están entregando a las corporaciones; también, la refinación del petróleo crudo y el procesamiento del gas natural, más el transporte, distribución y almacenamiento de hidrocarburos, por medios terrestres y de ductos.

Durante 78 años, Pemex fue el único que producía (extraía) petróleo, pues, debido a la Expropiación petrolera de 1938, esa función la realizaba en exclusiva. Esto ya no ocurre más. Ahora, también lo harán las empresas privadas, con una ganancia de más de 40 dólares por barril. La Expropiación petrolera extranjera, advertida largamente por el FTE, ya empezó.

"A partir de este 10 de mayo Petróleos Mexicanos (Pemex) deja de ser el único productor de hidrocarburos en el país, y en adelante se contará con la extracción de crudo de empresas privadas en 19 áreas petroleras en tierra y aguas someras del Golfo de México, donde se espera una inversión de 124 millones de dólares en los primeros años y de 989 millones a lo largo de las concesiones (Cardoso V., en La Jornada, 11 mayo 2016, p.18).

"La Secretaría de Energía y los ganadores de la tercera licitación de la ronda uno firmaron los contratos correspondientes para extraer crudo en las 19 de 23 áreas petroleras asignadas, aunque su actual producción es menor de 100 barriles por día. Las empresas Geo Estratos, Strata y Sarreal incumplieron con la garantía de seriedad exigida en las bases de licitación, por lo cual perderán los depósitos de 260 mil dólares, y las otras dos, de 65 mil dólares cada una".

"El secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, sostuvo que la firma de los contratos genera gran certidumbre entre los inversionistas y las empresas que buscan ubicarse en el país. “Se firman los contratos de una licitación con la que México superó las expectativas y alcanzó un porcentaje de adjudicación que corresponde a los más altos estándares internacionales (...), se trata de construir una industria privada de hidrocarburos que coexista y se complemente con nuestra empresa nacional, Pemex, pues con las licitaciones de la ronda uno se incorporan a la exploración y extracción un total de 28 nuevas empresas que modifican el ecosistema de producción de hidrocarburos en México”, indicó el funcionario.

"Añadió que los campos petroleros asignados representan un atractivo por su potencial de 61 mil barriles diarios de petróleo, con costos de producción por debajo de los actuales precios deprimidos del mercado.

"Se calcula en promedio un costo de producción de 20 dólares por barril y, según el presidente de la CNH, resulta atractivo porque son campos en producción y no existe el riesgo de la exploración".

"Se trata de construir una industria privada de hidrocarburos", dijo Coldwell. ¿Eso no es privatización? Son tan cínicos y corruptos que ellos mismos afirman lo que antes negaban.

Las mentiras del gobierno son diarias e incontables, su método es fascistoide, repetirlas hasta convertirlas en su "verdad".

Una más. El costo de producción (extracción) de que hablan no es cierto. Pemex reportó (en febrero 2016) a los inversionistas extranjeros que ese costo (de extracción) es de 8.22 dólares por barril.

El costo de exploración y extracción es de 17.97 dólares por barril pero, en este caso, no habrá ninguna exploración solamente extracción.

"Bajo esas condiciones ya operan las empresas que firmaron contratos: Strata, para los campos Peña Blanca y Carretas, localizados en Nuevo León; Diavaz, que ganó el campo Barcodón, en Tamaulipas, además del llamado Catedral, en Chiapas; Perseus, que se adjudicó los campos Tajón y Fortuna Nacional, ambos en Tabasco; el Consorcio Manufacturero Mexicano, al que se le asignaron los campos Mareógrafo y Calibrador, en Nuevo León; Grupo Diarqco, que ganó Mayacaste y Calicanto, en Tabasco; Renaissance, que obtuvo los campos Mundo Nuevo, Topén y Malva, en Chiapas; Lifting, que explotará el campo Cuichapa Poniente, en Veracruz; Industriales Globales se adjudicó el campo Duna, ubicado en Nuevo León.

"Asimismo, las empresas Canamex Dutch, con Perfolat de México, y American Oil Tools ganaron en conjunto el campo Moloacán, en Veracruz; las empresas Roma Energy, junto con Tubular Technology y Gx Geoscience Corporation firmaron el contrato para el campo El Paraíso, en Tabasco; Sistemas Integrales, Nuvoil y Constructora Marusa, explotarán el campo Benavides-Primavera, en Nuevo León, y Grupo R Exploración y Producción, junto con Constructora y Arrendadora se hacen cargo del campo Secadero, en Chiapas".


Ref.: 2016, elektron 16 (134) 1-2, 14 mayo 2016, FTE de México.

¡No, a la Expropiación petrolera extranjera!

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