Arabia Saudita anunció que encabezará una coalición militar, ideológica y mediática de 34 naciones islámicas que combatirán el terrorismo. Se excluye a Irán, Irak y Siria. El gobierno saudita pide la salida de Bashar Al Assad. Antes, participó en la formación del Estado Islámico y lo ha financiado, ahora dice combatirlo. Lo hará en coordinación con la coalición liderada por el imperio. ¿De verdad combatirá al terrorismo "islámico" o se trata de impedir cualquier arreglo para terminar con la guerra?

"Arabia Saudita anunció la formación de una nueva alianza para combatir el terrorismo a nivel mundial integrada por 34 países musulmanes de Medio Oriente, África, Asia y Europa, pero de la que está excluido Irán (PL, en Cubadebate, 15 diciembre 2015).

"El centro de mando del ente armado estará en Riad “para coordinar y apoyar las operaciones de lucha contra el terrorismo” y “enfrentar el problema del mundo islámico con el terrorismo”.

"En virtud de ello, sus acciones complementarían las del bloque aéreo que lidera Estados Unidos contra el Estado Islámico (EI) en Siria e Iraq.

"Se hacen arreglos, apuntó, para “la coordinación con naciones amigas amantes de la paz y organismos internacionales a fin de apoyar los esfuerzos para combatir al terrorismo y garantizar la paz y seguridad globales”.

"Las autoridades wahabitas destacaron que la iniciativa sigue “las enseñanzas de la Sharía (ley) islámica y preceptos que rechazan el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones porque es un delito y una injusticia atroz repudiada por todas las religiones divinas y el instinto humano”.

"El comunicado del príncipe saudita indicó que el terrorismo y sus atrocidades, que propagan la corrupción y destrucción prohibidas por la Sharía en el mundo, “constituyen una seria violación de la dignidad y los derechos humanos, especialmente el derecho a la vida y a la seguridad”.

"La alianza, sin embargo, excluye a Irán, país persa y musulmán de mayoría chiita con el que esta nación árabe, donde predomina la rama wahabita del Islam sunita, mantiene permanentes fricciones por razones políticas, ideológicas y confesionales, a pesar del peso regional de ambos.

"Riad explicó que la coalición, no obstante, se sustenta en los principios y objetivos de las Cartas de la ONU y de la Organización de Cooperación Islámica —a la que pertenece Teherán—, la cual llama a los estados miembros a cooperar para combatir el flagelo.

"Además de los seis estados árabes del Golfo, forman parte de la alianza Jordania, Pakistán, Bangladesh, Benín, Turquía, Chad, Togo, Túnez, Djiboutí, Senegal, Sudán, Sierra Leona, Somalia, Gabón, Guinea, Palestina, Islas Comores, Costa de Marfil, El Líbano, Libia y Maldivas.

"Mali, Malasia, Egipto, Marruecos, Mauritania, Níger, Nigeria y Yemen también participan, mientras que más de 10 países expresaron su apoyo a la misma y adoptarán las medidas necesarias en ese sentido, incluida Indonesia".

El gobierno de Arabia Saudita manipula la situación. Primero, dice combatir al terrorismo siendo que fue promotor en la formación del Estado Islámico al cual ha financiado. ¿Ya cambió de opinión ante las atrocidades de los malandrines?

En la declaración de prensa hecha en Riad, el monarca saudí dijo que el terrorismo está contra las enseñanzas de la Sharía (ley) islámica. Suena muy bien. ¿Por qué hasta ahora, después de años patrocinando al terrorismo en Irak y Siria?

Precisamente, en estos países el EI se ha posesionado de una parte del territorio y comete todo tipo de tropelías. ¿Cómo combatirá la nueva coalición al terrorismo en estos lugares, explícitamente excluidos? ¿Desde fuera o intervendrán con tropas en territorios ajenos?

Al respecto, Arabia Saudita no explica nada, pero sí dice que se aliarán con la coalición que lidera el imperio y con "naciones amigas" que no menciona.

¿Y a Irán, qué? No es nación amiga a pesar de formar parte de la Organización de Cooperación Islámica, cuyos principios invoca.

A Arabia Saudita, desde luego, le molesta que Al Assad esté en la presidencia del gobierno sirio. Pero no se trata de asuntos personales. Es lo mismo en el caso de Irán. Con este gobierno se mantiene una disputa aparentemente por motivos religiosos y tribales para enmascarar el meollo.

El fondo está en el petróleo. A Arabia Saudita no le conviene que Irán reanude sus amplias exportaciones de crudo, mismas que inundarán más al ya saturado mercado internacional, porque disminuirán sus cuotas en ese mercado.

Pero hay algo más importante. Con esa política de exclusión específica se pretende dividir más al frente árabe, al tiempo que se busca intervenir directamente en cualquier país de la región. La intención es evidente, eso se hace para obstaculizar todo intento de acuerdo político y así terminar con la guerra mercenaria.

Esto favorece al imperio y no es casual, Arabia Saudita es su aliado.

Una solución negociada en Siria no parece posible. Los Estados Unidos insisten ante Rusia y esta se dice dispuesta pero la discrepancia entre ambos es irreconciliable. No hay acuerdo sobre qué grupos de oposición deben ser invitados al supuesto diálogo. El imperio, obviamente, privilegia a sus afines. Tampoco hay consenso sobre los grupos terroristas a los que hay que combatir. El imperio, en este caso, tiene criterios diferentes a los rusos. Más aún, aunque dice combatir al Estado Islámico, en los hechos más parece que lo apoya.

El papel de Al Assad sigue causando discrepancias. Mientras Rusia apoya que siga en el gobierno y que el pueblo sirio decida su destino una vez que haya sido derrotado el terrorismo, el imperio exige la salida del presidente sirio y garantías de que no participará más en política, de otra manera no habrá diálogo ni se enfrentará unificadamente al terrorismo. Es decir, el imperio se muestra abiertamente intervencionista y necio, chantajea y apoya al Estado Islámico al que dice combatir. Este comportamiento no está determinado por la presencia de Al Assad sino por los intereses geopolíticos del imperialismo en la región.

"El Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) aprobó de forma unánime una resolución de apoyo al proceso de paz en Siria, la cual había sido acordada antes por Estados Unidos, Rusia y otras potencias internacionales (BBC /Russia Today, en Cubadebate, 18 diciembre 2015).

"El proyecto tiene entre sus objetivos lograr una reunión entre el gobierno de Damasco y la oposición. Asimismo, se insta a que las conversaciones comiencen a partir del 1 de enero próximo.

"A su vez, el documento estipula los términos previamente acordados sobre la creación de un gobierno de transición y la celebración de elecciones bajo supervisión de la ONU.

!Además exige a todas las partes que cesen los ataques a la población civil y subraya que será el pueblo, quien decida el futuro del país!

La ONU vuelve a revelarse como un aparato inútil y funcional al imperio. La resolución acordada es tibia y manipuladora.

¿De qué proceso de paz habla, mientras tolera que el imperio y sus aliados mantengan la guerra en Siria? ¿Por qué insiste en un gobierno de transición si Al Assad está en Funciones? Obvio, porque los gringos lo piden. ¿Las elecciones bajo supervisión de la ONU garantizan algo? Nada, sirven solo para protocolizar las decisiones norteamericanas y darles apariencia de democráticas.

La resolución pide "a todas las partes" que cesen los ataques a la población civil. ¿Quiénes son "todas las partes"? ¿Se refieren al Estado Islámico, al que ni siquiera menciona, o a la coalición del imperio que tampoco menciona?

Cuando subraya que será el pueblo el que decida el futuro del país, solo hace demagogia, el pueblo no está en condiciones habida cuenta del terrorismo múltiple a que está sometido. Se trata de imponer una solución "desde fuera", Rusia procede con diplomacia, pero a la vez con tibieza.

El mismo Kerry acusó a Rusia de atacar a opositores con sus bombardeos, criterio rechazado por Lavrov. El imperio miente y provoca. Teme a la aviación rusa.

"Los sistemas de defensa antiaéreos S-400 rusos en Siria han dejado en tierra a cazas de EE.UU., afirmó un funcionario del Pentágono (Cubadebate, 19 diciembre 2015).

"El S-400 obliga a EE.UU. a dejar en tierra a los aviones de combate tripulados, y el Departamento de Defensa (Pentágono) se está esforzando por adoptar una nueva estrategia en la región, así lo afirmó el comandante del Ejército estadounidense Tim Smith en declaraciones publicadas el viernes en el portal local Bloomberg View.

"Según el militar, los S-400 ya han provocado pánico en el Pentágono, incluso los oficiales de esta entidad han definido dichas unidades como una señal de la “agresión rusa”.


Ref.: 2015, elektron 15 (351) 1-3, 21 diciembre 2015, FTE de México.

Sistema ruso de defensa antiaéreo. FOTO: Russian Defense Ministry

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