A pesar de la nefasta política energética oficial, Pemex sigue siendo la petrolera más rentable del mundo. Pero Peña Nieto insiste en destruirla; también a CFE. En 2015, recortes presupuestales; luego, reducciones a las inversiones en los próximos 4 años. Pemex aporta cuantiosos recursos fiscales, pero opera con endeudamiento excesivo y, ahora, igual que CFE, mediante financiamiento bursátil de la Fibra E.

La aportación de Pemex a los ingresos presupuestales del gobierno está a la baja. Aún así, la petrolera mexicana utilizó 58 por ciento de los ingresos brutos obtenidos de enero a agosto para cumplir con la carga fiscal impuesta.

Esto ha llevado a "un déficit financiero de 201 mil millones de pesos hasta agosto de 2015, sin precedente en los últimos 38 años, por lo menos desde 1977, según los registros de la Secretaría de Hacienda (Zúñiga J. A., en La Jornada, p.5, 12 octubre 2015).

"La insuficiencia de los ingresos de la petrolera ha sido cubierta con recursos de deuda interna y externa, lo que ha generado una paradoja al generar un mayor gasto por el incremento del costo financiero del propio endeudamiento. Casi dos terceras partes del incremento del gasto total se explica por el aumento en el pago de intereses, comisiones y otros gastos de la deuda de Pemex".

Para agravar la situación, el gobierno propone reducir las inversiones en Pemex, entre 2016 y 2019. Esto lo decidirán los diputados en el próximo presupuesto federal.

"Los informes de Pemex detallan que originalmente el Capex, que considera las inversiones asociadas a los procesos de descubrimiento y desarrollo, preveía 32 mil 400 millones de dólares en 2016; 33 mil 700 millones en 2017; 32 mil 800 en 2018 y 31 mil 500 millones de dólares en 2019 (Rodríguez I., en La Jornada, p.19, 11 octubre 2015).

"Del monto total previsto inicialmente por 130 mil 400 millones de dólares para los próximos cuatro años, la distribución del Capex 2016-2019 era de 78.8 por ciento para Exploración y Producción y el 21.2 por ciento restante para transformación industrial".

A pesar de la baja en la producción y la caída en los petroprecios, Pemex se mantuvo en 2104 como la petrolera más rentable del mundo.

"De acuerdo con informes de la agencia especializada Bloomberg, citados por la empresa productiva del Estado, el rendimiento de Pemex durante el año pasado antes de impuestos y derechos fue de 30.88 por ciento, por arriba de 18.03 por ciento de Statoil; de 16.23 de Chevron; de 14.15 de Shell y de 1.40 por ciento de BP".

La política petrolera oficial es de austeridad. A sus dos principales fuentes de financiamiento, y únicas empresas, les reduce el presupuesto, de manera contradictoria y absurda.

"La caída de los ingresos petroleros en el sector público ha ocasionado que el gasto dirigido a proyectos de inversión de Pemex y de la CFE se reduzca considerablemente, revelan cifras oficiales (Rodríguez I., en La Jornada, p.23, 12 octubre 2015).

"Solamente entre 2014 y 2016 el gasto de inversión de Pemex se reduce 22.5 por ciento real, al pasar de 378 mil 373.9 millones de pesos en 2014 a 293 mil 68 millones en 2016. Por su parte, el monto de inversión en la CFE también disminuye en el mismo lapso 7.7 por ciento en términos reales, al descender de 39 mil 751.8 millones en 2014 a 36 mil 685.7 millones de pesos (Rodríguez I., en La Jornada, p.23, 12 octubre 2015).

"De acuerdo con los analistas del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), existen dos causas principales por las cuales las finanzas públicas se han visto afectadas.

"La primera es la caída de los precios de la mezcla mexicana de exportación, cuya consecuencia es que de enero de 2014 a agosto de 2015 el precio del barril de crudo haya decrecido 55.2 por ciento, al bajar de 90.49 a 40.45 dólares.

"La segunda causa es la caída en la producción petrolera del país, la cual ha sido de alrededor de 8 por ciento anual de enero a agosto de 2015".

La caída en los ingresos petroleros llevó a Peña y Videgaray a "un recorte en 2015 de 124.3 mil millones de pesos, específicamente el presupuesto de Pemex se redujo en 62 mil millones y el de la CFE en 10 mil millones de pesos".

El gobierno aprovecha perversamente la situación y obliga a Pemex y a CFE a someterse a los buitres, ahora mediante la llamada Fibra E, poniendo TODAS las funciones petroleras y eléctricas en manos de especuladores.

La Fibra E es "el Fideicomiso de bienes raíces del sector energético e infraestructura, que surge ante un cambio importante en el sector de exploración y extracción de hidrocarburos, donde el precio y la producción del crudo disminuyen de manera importante y causan un recorte en el gasto en inversión otorgado a las empresas productivas del Estado.

"El funcionamiento del Fibra-E es generar un certificado bursátil fiduciario (CBF) que cubrirá actividades exclusivas que ya generen flujos estables en materia energética e infraestructura, tales como el tratamiento, refinación, enajenación, comercialización, transporte y almacenamiento del petróleo; el procesamiento, compresión, licuefacción, descomposición y regasificación, así como el transporte, almacenamiento, distribución, comercialización y expendio al público de gas natural; el transporte y el almacenamiento de petroquímicos que se encuentren vinculados a ductos.

"Este vehículo financiero también financiará las actividades de generación, transmisión o distribución de energía eléctrica, de acuerdo con los términos de la Ley de la Industria Eléctrica y otras disposiciones jurídicas y proyectos de inversión en infraestructura implementados a través de concesiones, contratos de prestación de servicios o cualquier otro esquema contractual, siempre que estos sean celebrados entre el sector público y particulares para la prestación de servicios al sector público o al usuario final que se encuentren en etapa de operación".

Para aumentar el desastre, a la pesada deuda de Pemex se suma la cuantiosa carga del pago de la misma. La política energética oficial terminará destruyendo a Pemex y a CFE. El plan está my avanzado con la creciente privatización petrolera, petroquímica y eléctrica.

"En los próximos tres años, en la segunda parte de la actual administración, Pemex deberá erogar 16 mil 400 millones de dólares por pago de deuda, revelan informes de la petrolera mexicana (Rodríguez I., en La Jornada, p.26, 20 octubre 2015).

"Para ello, su programa de financiamiento para el próximo año prevé contratar deuda en los mercados financieros nacionales e internacionales por 15 mil 700 millones de dólares, monto superior en 700 millones al autorizado para 2015, que asciende a 15 mil millones.

"En 2016 Pemex deberá pagar 5 mil 300 millones; en 2017, 5 mil 200, y en 2018 deberá erogar para la deuda el monto más abultado, por 5 mil 900 millones de dólares.

"Los últimos informes de Pemex detallan que su deuda al primer semestre de 2015 asciende a 86 mil millones de dólares".


Ref.: 2015, elektron 15 (290) 1-2, 20 octubre 2015, FTE de México.

---