Aseguran que los precios de las gasolinas y el gas bajarán en enero próximo. La razón; la privatización del mercado de combustible, antes a cargo de Pemex. No hay fundamento ni credibilidad. Es la fe supersticiosa del gobierno en la privatización energética. ¿Cómo bajarán los precios de las gasolinas o del gas natural? ¿Lo harán las transnacionales? ¿Será por decreto? ¿Por cuánto tiempo?

El secretario de hacienda de Peña Nieto es un vulgar pillo. Ve el mundo al revés. Dice que la economía crece y es a la inversa. Un día anuncia un pronóstico de crecimiento, al otro día otros organismos lo desmienten. Dice que los ingresos petroleros están blindados y la caída es sostenida, la "volatilidad es pasajera", dijo, y el peso se sigue depreciando.

Antes, durante y después de la reforma energética de Peña Nieto, que desnacionalizó a las industrias petrolera, petroquímica y eléctrica, repitió que habría bienestar para los mexicanos, "los mexicanos lo verán en sus bolsillos". Ha resultado, precisamente, lo contrario.

¿Mentiroso? Lo es. ¿Inepto? También. ¿Manipulador? Igual que Peñita. ¿Corrupto? ¡Faltaba más! Todas las mentiras las dice para apoyar la privatización energética, Videgaray como Peña creen a ciegas el dogma neoliberal, según el cual, lo privado es lo único y absoluto. Con una visión fetichista, creen que con solo invocar a la privatización, esta hará mejoras nunca antes vistas. Su fe en el capital es supersticiosa.

No se trata solamente del discurso aprendido en el ITAM, sino de una política rastrera con el imperio, para eso lo pusieron donde está.

En el caso más reciente, Videgaray fue a la Cámara de Diputados. Primero, se mostró ridículo. Le pidió "respetuosamente" a los diputados que no aumenten los impuestos en alimentos, medicinas y otros. El exhorto es FALSO e indignante. Videgaray se engaña solo. Los diputados NUNCA aprueban nada que no proponga el gobierno. Si Videgaray no quiere más aumentos es porque ya los impuso y los diputados los aprobaron. Ya no propone más porque estaría provocando a la sociedad, la que tiene un respaldo ínfimo para el gobierno de Peña.

"El funcionario hizo un ‘‘exhorto respetuoso’’ al Congreso de la Unión a no aumentar los impuestos, ni establecer el cobro del impuesto al valor agregado (IVA) en alimentos y medicinas o elevar la tributación a la renta empresarial y el ingreso de los trabajadores, aun cuando en la actual legislatura ninguna fracción ha propuesto una medida en ese sentido (Méndez E., González R., en La Jornada, p.3, 2 octubre 2015).

‘‘Respetuosamente, señoras y señores diputados, exhortamos a esta Cámara a no aumentar impuestos, a no establecer un IVA a medicinas y alimentos, ni a otros conceptos tributarios como son el impuesto sobre la renta’’, expresó Videgaray.

Se mostró tan cínico que hasta la fracción del PAN se rio del mismo.

Segundo, dijo que a partir de enero de 2016 bajarán los precios de los combustibles. Esa fecha fue la determinada por la legislación energética secundaria de Peña, aprobada en 2014. NUNCA se dijo que tal fecha sería para que bajaran los precios, sino para que los empresarios privados participaran libremente en el mercado de energéticos. Peña y Videgaray entienden que, con la privatización, a la que llaman "competencia", los precios bajarán automática e ipso facto.

Hoy, Videgaray dijo que los precios bajarán y, por supuesto, se lo atribuye a la privatización.

"El precio que pagan los consumidores por la gasolina disminuirá en enero próximo como resultado de la liberalización del mercado del combustible, controlado actualmente por Petróleos Mexicanos (Pemex), propuesta por el gobierno federal, anticipó Luis Videgaray Caso, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), al comparecer en la Cámara de Diputados.

"En el mensaje con que inició su comparecencia, Videgaray aseguró que la liberalización del mercado de la gasolina, que pondrá fin a tres décadas en que el precio del combustible fue administrado por el gobierno federal, se traducirá a partir de enero próximo en una reducción en el costo que pagan los consumidores. Sin embargo, no adelantó el porcentaje esperado de disminución.

La privatización petrolera furtiva empezó desde 1992, legalizada en 1995-96, en materia de transporte, distribución y almacenamiento de gas natural, gas LP y gas grisú. A la fecha, unas cuantas transnacionales, encabezadas por la española Gas Natural Fenosa, dominan las 14 regiones geográficas en las que fue dividido el país por la Comisión Reguladora de Energía (CRE).

Está en marcha la distribución, transporte y almacenamiento de petróleo crudo, productos petrolíferos y petroquímicos. Todo lo harán, según la reforma privatizadora de Peña y Videgaray, los contratistas privados, nacionales y/o extranjeros, así como los franquiciatarios privados de Pemex.

Con 23 años de privatización del gas los precios a los consumidores NUNCA han bajado, al contrario, SIEMPRE han aumentado. El atraco es tal que no existe ni manera de reclamar ante tanto abuso.

En el caso de las gasolinas y el diesel, la mitad producida por Pemex y la otra mitad importada, ambos productos de venden muy caros. El FTE ha demostrado que los costos de producción de Pemex son menores a los precios de venta. Incluso, el litro equivalente de gasolina de importación vale menos que los precios de venta al público.

Que ahora bajen esos precios no sería la gran cosa, después de aumentarlos reiteradamente. Además, NADA indica que el país sea autosuficiente ni en materia de gas natural ni en gasolinas. En el caso del gas natural, Pemex suministra solo una parte, el resto se importa, por cierto, a precios mucho mayores que los indicadores internacionales para la región. El negocio está en manos de transnacionales, como la española Repsol. Las corporaciones reciben el gas barato, vía la CFE, pero los consumidores domésticos pagan elevados precios.

A partir de enero próximo NO habrá abastecimiento nacional de gas, este se seguirá importando, con todos los vicios asociados en favor de las transnacionales. Estas, ¿bajarán los precios? ¡NUNCA!

Aún cuando el gobierno de Peña y Videgaray tiene prisa en privatizar el petróleo de la nación, eso NO conduce a aumentar la producción de gas natural asociado, aún cuando se están regalando reservas probadas para EXTRAER petróleo crudo. Este es el que interesa a las transnacionales no el procesamiento del gas que, por lo demás, también está en vías de privatización. Cuando se haga será más caro. Pemex no puede cumplir su función en materia de gas porque está impedida, técnica y financieramente.

Si el costo de las gasolinas más barato es el de Pemex, ¿por qué no produce la petrolera mexicana el volumen necesario para atender la demanda nacional? Por razones políticas. No hay capacidad instalada, todas las refinerías actuales están en obsolescencia, con su factor de eficiencia muy mermado, pero tampoco existe NINGUN proyecto para construir nuevas refinerías.

La refinación del petróleo crudo, su transporte, distribución y almacenamiento, están previstas para concesionarlas a las transnacionales y socios nacionales.

A partir del próximo enero NO habrá NINGUNA refinería más, de nadie. Estaciones de servicio privadas sí las habrá, serán las gasolineras Oxxo de Femsa, la distribuidora de la Coca Cola.

¿Qué gasolina se distribuirá? La abastecida por Pemex, o de importación, vía Pemex o directamente. En ambos casos, el costo (de compra) es más bajo que el precio de venta. Eso seguirá siendo así porque, TODOS los privados asociarán la correspondiente ganancia. ¿Acaso Oxxo o quien sea, renunciarán a la ganancia? ¡JAMAS! Si acaso, lo harían en día de la inauguración del "nuevo mercado", hasta podría haber payasos que regalaran globos o café para adornar al nuevo paisaje de gasolineras.

Para el capital privado NO está prevista NINGUNA baja en los precios. NINGUNA petrolera privada bajará los precios ni renunciará a su ganancia, tampoco subsidiará a nadie. Vaya, ni siquiera pagará salarios a los trabajadores. Con el tiempo prescindirá de estos, todo será automático. Ni siquiera habrá manera de reclamarle a nadie.

¿Podrían bajar los precios por decreto? ¡Dudámoslo! Con la privatización el gobierno NO puede, el que manda es el capital. Videgaray anuncia, como vocero oficioso, algo que NO está en sus manos decidir por muy zalamero que sea con las transnacionales.

Las corporaciones NUNCA bajaran los precios y tarifas, su función NO es el beneficio social. Esto sería en el caso de la Nacionalización, verdaderamente asumida, lo que nunca existió cabalmente en México. Hubo avances, pero insuficientes y pervertidos. Se dejó todo, erróneamente, en manos del gobierno y del charrismo sindical, los que terminaron destruyendo a las industrias energéticas nacionalizadas.


Ref.: 2015, elektron 15 (272) 1-3, 2 octubre 2015, FTE de México.

El litro de Coca Cola vale mucho más que el litro de petróleo crudo de exportación. Ahora Oxxo también venderá gasolinas,
¿Bajará los precios de éstas? ¡Já!

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