La baja en los precios internacionales de petróleo crudo afecta las ganancias del capital. En Estados Unidos, las grandes corporaciones hacen ajustes con recortes a sus gastos. La calificadora Moody´s baja la calificación a las transnacionales por la reducción en las ganancias. En México, Peña Nieto regala producción y renta petrolera, disminuyendo la parte correspondiente al Estado. Recibe a cambio corcholatas y espejitos. Tiene prisa por deshacerse del patrimonio nacional, lo demás no le importa.

A Peña Nieto y adláteres no les bastó DESNACIONALIZAR a la industria energética para su privatización. Los partidos políticos aprobaron una propuesta antinacional, a nivel constitucional. Ahora, tienen prisa por deshacerse del patrimonio energético de la nación.

Para ello, otorgan a las transnacionales las mayores facilidades posibles, a afecto de que se apropien del petróleo mexicano. Ya les han regalado la información geológica y sísmica, les oferta la extracción en las aguas someras, les entrega reservas probadas y probables, les garantiza cuantiosas ganancias con los costos de extracción más bajos del mundo.

Además, el gobierno les otorga facilidades fiscales que Pemex no tiene, a la petrolera mexicana la excluye, acepta como "ganadores" a consorcios SIN experiencia en la materia y, además, reduce la parte que le tocaría al Estado, esto es, cede la producción y las utilidades, mismas que las transnacionales comparten con el Estado no al revés.

En tales condiciones, es evidente que las corporaciones son las que fijan las condiciones en que quieren apropiarse de los recursos naturales energéticos de la nación.

¿Por qué procede así Peña Nieto? Hay dos razones principales. Una, porque así fue diseñada la tal reforma por el imperialismo y sus agencias, esto es, para favorecer la acumulación privada de capital. Dos, porque Peña Nieto y el imperio quieren destrozar todo antes que su fracaso sea evidente, es decir, busca entregar todo para evitar que su reforma sea reversible.

De allí la rabia del chaparro contra todo lo que suene a "populismo". Peña no sabe qué es eso, tampoco conoce la importancia estratégica de la energía, es un simple burro. Tampoco le importa. El capital imperialista "incrustó" en el gobierno a sátrapas cínicos que trabajan contra la nación. Esos son Peña, Videgaray, Carstens, Beltrones, Lozoya, Coldwell y otros, "asesorados" por el ITAM, Woodrow Wilson Center, IMCO y otros.

Por ello es que el Estado cede en todo, lo ha explicado muy bien Rosío Vargas, investigadora de la UNAM.

Esto ocurre mientras el mercado internacional del petróleo crudo está ocasionando problemas a las mismas transnacionales, pues, debido a los bajos petroprecios, sus ganancias han bajado. Tan es así que la propia Moody's, calificadora del imperio, les ha bajado la calificación a las corporaciones energéticas.

Pero en México, se intercambia petróleo por corcholatas. Por eso, desde la fase 1 de la Ronda 1 de licitaciones de contratos, se redujo la parte de utilidades y dividendos correspondiente al Estado. Para la fase 2, la reducción será todavía mayor.

Lo que el gobierno recibirá será MUCHO MENOS de lo que recibía con Pemex. Esta, incluso, hacía mayores inversiones que las INFIMAS que ofrecen las corporaciones privadas.

Todo esto configura un escenario abominable. Es una evidente traición a la nación. En el gobierno de Peña Nieto hay, desde luego, ignorancia, pero también perversidad. Su ignorancia podrá ser temeraria, pero no es justificación.

Lo que ha hecho Peña, y lo que ha dejado de hacer arrullado por el imperio y el crimen, motivan tirarlo y sancionarlo. Lamentablemente, sigue haciendo falta lo principal: no tenemos organización social ni política.

La mayoría de la nación viviente está apática, inmersa en multitud de problemas económicos y de otro tipo, ni siquiera tiene voz asfixiada por los medios mercenarios. Pocas son las voces que se distinguen de las demás, como el FTE, Rosío Vargas y otros pocos investigadores y periodistas.

No obstante, la propuesta enarbolada por el FTE está vigente y en marcha. Debemos organizarnos y luchar por la re-nacionalización energética, con base en la Política Energética Independiente.

"Ejecutivos de las mayores petroleras de Estados Unidos no tienen certeza de hacia dónde van los precios del petróleo, se desprenden de activos a precios de liquidación, retrasan pagos a proveedores y están en el dilema de reposicionar sus negocios, cita un especial de The Wall Street Journal titulado Las energéticas de Estados Unidos se ven obligadas a ajustar sus cuentas. El reportaje del diario estadunidense agrega que las energéticas han desafiado por más de un año la ley financiera de la gravedad, al endeudarse y gastar miles de millones de dólares para extraer petróleo a pesar del derrumbe de los precios del crudo (La Jornada, p.26, 17 septiembre 2015).

El rotativo añade que algunas firmas más pequeñas ya negocian con sus acreedores, se desprenden de activos a precios de liquidación y retrasan el pago a sus proveedores en un intento por conservar efectivo.

"The Wall Street Journal precisa que, aunque las más afectadas serán las empresas más pequeñas y endeudadas, el ajuste podría tener repercusiones significativas en los mercados globales de crudo. Comenta que datos oficiales divulgados el mes pasado revelan que en junio la producción estadunidense finalmente comenzó a caer a cerca de 9.3 millones de barriles al día, un descenso de casi 3 por ciento desde que la producción de este año llegó a un máximo en abril".

"Moody’s rebajó a negativa su perspectiva para el sector de compañías integradas de petróleo y gas, diciendo que la fuerte caída de los precios del crudo pesará sobre los ingresos en 2016. Después de que el precio del petróleo bajó a la mitad desde junio de 2014, empresas como Royal Dutch Shell, Exxon Mobil y Total han recortado sus gastos hasta 20 por ciento suprimiendo empleos y reduciendo costos (Reuters, en La Jornada, p.26, 17 septiembre 2015).

"Moody’s añadió en un informe que el año que viene serán necesarios más recortes, lo que perjudicará el crecimiento de la producción a largo plazo de las compañías. El flujo de caja libre del sector, o ingresos menos gastos y dividendos, fue negativo en 2014, como consecuencia de los costos elevados y se prevé que se derrumbe hasta una cifra negativa de 80 mil millones de dólares en 2015, para mejorar sólo mínimamente en 2016 hasta 55 mil millones, dijo la agencia.

"Moody’s ha rebajado su previsión del precio del petróleo en varias ocasiones desde 2014. Actualmente espera que el crudo Brent se negocie en promedio a 55 dólares por barril en 2015 y a 57 dólares en 2016. El Brent se negociaba a cerca de 48 dólares por barril el miércoles (16).

"La agencia prevé desinversiones de entre 40 mil y 60 mil millones de dólares en 2015-2016 para mejorar el flujo de caja, después de vender activos por 70 mil millones de dólares en 2013 y 2014".

En este contexto, lo que está sucediendo en México, con la entrega que Peña hace del petróleo a las transnacionales, es indignante.

Lo que dice Rosío Vargas, de la UNAM, en entrevista de Israel Rodríguez publicada en La Jornada, es alarmante.

"Las recientes reducciones en el porcentaje de las utilidades operativas para el Estado en la segunda licitación de la ronda uno para explotar nueve campos con certeza geológica, aglutinados en cinco contratos de explotación compartida, reflejan una ausencia de valoración por las autoridades mexicanas de lo que es el recurso nacional y la importancia de la renta petrolera actual y de la futura, advirtió Rosío Vargas Suárez, internacionalista de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) (Rodríguez I., en La Jornada, p.27, 18 septiembre 2015).

“Quien no conoce la importancia de la energía en un sistema internacional hace lo que está haciendo nuestro gobierno. La energía es poder”, subrayó.

"A principios de la semana, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) determinó reducir la participación de la utilidad operativa para el Estado de 40 por ciento a niveles promedio de 34 por ciento en la segunda licitación de la ronda uno. Esto demuestra que el gobierno federal, a través de la SHCP, ahora se inclina a maximizar la asignación de campos, más que por la renta petrolera.

“La prisa por asignar la ronda uno es porque no quieren, sobre todo en Estados Unidos, que se les revierta la reforma energética y por eso les urge entregar los bloques”.

"En entrevista, afirmó que los dos bloques que se asignaron de los 14 subastados en la primera licitación comprometen una inversión de 2 mil 600 millones de dólares en un horizonte de cinco años, cuando Petróleos Mexicanos (Pemex) hubiera aportado en ese mismo quinquenio unos 54 mil millones de dólares.

"Rosío Vargas explicó que la reducción en el porcentaje para el Estado de la renta petrolera y las recientes flexibilizaciones a los contratos de la tercera licitación de la ronda uno no los hace ninguna nación y aquí lo estamos ofertando al mejor postor cuando el petróleo es un bien estratégico y fundamental para cualquier país.

"México no está valorando lo que está entregando y esto no debería de haber sido porque son áreas de certeza geológica con reservas probadas, probables y posibles. Esto se resume en que estamos aceptando corcholatas y espejitos.

"Vargas Suárez dijo que también está el mito de la inversión extranjera. Dijeron que en la primera licitación el monto de inversiones con los dos bloques asignados será de 2 mil 600 millones de dólares, pero lo que no dicen es que esto es para cinco años. No dicen cuánto podría ganar Pemex en un año, que según cálculos conservadores podría aportar 54 mil millones de dólares anuales.

"Otro elemento es haber sacado a Pemex de la segunda licitación por justamente la competitividad en términos de costos de producción. La pregunta sería: ¿por qué sacaron a Pemex si la idea era introducir competitividad? La sacaron precisamente porque sus costos eran altamente competitivos.

"Adicionalmente, ahora hay inscritas empresas petroleras, pero también hay otras que son nuestros nuevos petroleros, pero que no tienen experiencia. Una de las cosas que también se dijo en el debate de la reforma (energética) es que México carecía de capacidad gerencial y tecnología. Entonces ¿por qué estamos trayendo aprendices de brujo cuando la idea era introducir tecnología y capacidad gerencial? Estamos ahora dándoles las condiciones para que aprendan. Esto habla de la falacia de la competitividad como argumento.

"La especialista consideró fundamental que las autoridades dieran a conocer el denominado Government take, que es un indicador de carácter económico de evaluación que muestra la relación de beneficio entre lo percibido por el Estado y las empresas petroleras. Es una cifra fundamental para saber cómo está la negociación del gobierno. Se observa ya que hay una baja en el acopio de los ingresos del Estado, al descender de 40 a 18 por ciento. Esto pone en evidencia que la renta que se va para el Estado bajó de manera brutal".

"Los bajos precios del petróleo a nivel internacional, así como la caída en la producción de hidrocarburos a escala nacional, implicaron que la captación de ingresos petroleros en el primer semestre del año disminuyeran su participación en los recursos presupuestarios, al representar ahora solamente 18.6 por ciento, cuando en el pasado alcanzaron 33 por ciento (Rodríguez I., en La Jornada, p.22, 20 septiembre 2015).

"El segundo informe trimestral sobre Finanzas Públicas y Deuda Pública, difundido por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), reveló que los ingresos fiscales derivados de la actividad petrolera ascendieron a junio de 2015 a 216 mil 519.9 millones de pesos y representaron 18.6 por ciento del total de los recursos presupuestarios del sector público.

"Al respecto, la investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Rosío Vargas Suárez consideró que esta tendencia se acentuará aun más en el futuro con la entrega de áreas petroleras para su explotación al sector privado en el contexto de las licitaciones de la ronda uno, lo que significaría una menor renta petrolera para el Estado.

"Recordó que con las recientes modificaciones a las bases de licitación los privados obtendrán al menos 60 por ciento de las utilidades, además de que podrán deducir la mayoría de sus costos de inversión.

"Señaló que esta baja brutal es la pérdida de la renta petrolera para el Estado, porque justamente con estos nuevos contratos lo que se comparte es la renta y es la parte leonina que se va.

"El nuevo límite de participación de 35.9 por ciento en las utilidades operativas en la explotación de campos que será para el Estado es una parte mínima en relación con la que tenía anteriormente el Estado mexicano y Petróleos Mexicanos (Pemex), que era ciento por ciento.

"Además se va a compartir producción. Cuando vengan los contratos de licencia, vamos a tener una situación todavía peor porque son concesiones. Este gran porcentaje de más de 60 por ciento que se va a utilidad operativa de los privados tiene que ver con la redistribución del excedente entre los principales actores. Y aquí el principal actor trasnacional, o el actor privado es el que se lleva la parte del león en detrimento del Estado y con ello de la sociedad mexicana, por no decir pueblo mexicano, que el término está totalmente desvalorado por aquello del populismo.

"En el fondo, dijo, habrá salida de esta renta del propio espacio territorial mexicano, porque se va en términos de ganancias a las empresas trasnacionales, advirtió".


Ref.: 2015, elektron 15 (270) 1-4, 30 septiembre 2015, FTE de México.

Plataforma petrolera de Pemex en el Golfo de México. FOTO: PEP

---