La política eléctrica oficial es desastrosa. La industria, desnacionalizada y privatizada, está peor. Como parte del llamado mercado eléctrico, el gobierno anuncia la primera subasta de contratos privados. La generación y comercialización eléctrica será privatizada en su totalidad. Así lo recomendó el Banco Mundial desde 1995, Peña y adláteres solamente ejecutan las órdenes del imperio. Actualmente, el 63.66% de la generación eléctrica ya es privada y va en aumento. Seguirá la privatización de la transmisión y distribución eléctrica. La CFE, casi quebrada, seguirá excluida y reducida a su mínima expresión.
Para calmar al vampiro el gobierno de Peña Nieto solo
sabe ofrecerle más sangre. ¿Qué hace el vampiro? Se chupa
toda la sangre y quiere más. El círculo se vicia de inmediato y el
truco falla. Eso está muy claro en el caso de la devaluación
monetaria, lo único que se le ocurre al Banco de México, oficina
del Fondo Monetario Internacional (FMI) consiste en subastar dólares.
Primero subastó 200 millones de dólares diarios y nada, el peso siguió cayendo; luego, subastó 400 millones de dólares diarios y lo mismo. Así puede seguir subastando, los dólares se los chuparán los de siempre y el peso seguirá devaluándose frente al dólar y demás monedas. Pero las subastas son el fetiche de Peña Nieto y socios para deshacerse del patrimonio energético de la nación. En materia petrolera, las llamadas licitaciones son vulgares subastas al mejor postor mismo que, desde luego, se apropia de la mayor ganancia. Si en la Ronda 1 fase 1 la proporción fue de 80% para la transnacional ganadora y el 20% para el gobierno, con ínfimo contenido nacional, es previsible que en la fase 2 de la Ronda 1 la ganancia de quienes ganen será mayor y así sucesivamente. Lo pernicioso de las subastas no queda allí. Ahora, Peña Nieto, desnacionalizador de las industrias petrolera, petroquímica, eléctrica y de telecomunicaciones, anuncia que también habrá subastas eléctricas. Los economistas del ITAM; que usurpan a la CFE, preparan la primera subasta eléctrica. Con esta subasta se entregarán a las transnacionales, filiales, socios y prestanombres, la ejecución de proyectos a los que renunció el Estado a nivel constitucional. Es parte del "mercado eléctrico", dicen. Ese "mercado" no es sino la entrega del patrimonio eléctrico, funciones estratégicas, recursos naturales y renta asociada al capital nacional y extranjero. Es decir, vulgar privatización, la misma que Peña y adláteres repiten propagandísticamente que no existe. Como preludio, los usurpadores quebraron técnica, económica y financieramente, a la CFE. Son años reportando pérdidas, que nunca explican, por ser el resultado de la privatización eléctrica furtiva. Consecuentemente, la CFE estará excluida de las subastas, su papel consiste en mirar cómo sigue perdiendo funciones y facultades en favor de las corporaciones. Para ello, el gobierno consultó previamente a las transnacionales. ¿Cómo serán las subastas? ¡Cómo digan las transnacionales, únicas ganadoras de la subasta fantoche! Primera subasta eléctrica "La primera subasta eléctrica para el
nuevo mercado creado por la reforma energética será convocada en
octubre y se espera que el contrato sea asignado antes de que concluya el primer
trimestre de 2016, anticipó Pedro Joaquín Coldwell, secretario de
Energía (González R., en La Jornada, p.23, 19 agosto
2015).
"Las bases del mercado que pusimos a consulta en febrero de este año, cuya versión definitiva publicaremos antes de que concluya agosto, prevén también subastas a largo plazo que anclarán inversiones públicas y privadas de generación eléctrica por miles de megavatios, fundamentalmente con tecnologías limpias; en octubre de este año publicaremos la convocatoria de la primera subasta eléctrica de este tipo en el país, misma que esperamos adjudicar en marzo de 2016, expuso Joaquín Coldwell al participar en el tercer Foro Estrategias Energéticas, organizado por la revista especializada Energía a debate". Lo señalado es falso. Coldwell y Peña son tramposos y cínicos, dicen que "están cumpliendo con la ley, que los mandata". Eso, es la simple repartición del botín entre el capital. Inversiones públicas NO las habrá, si las hubiese no habría ninguna necesidad de subastas. Estas serán para que las llamadas inversiones sean totalmente privadas. ¿Miles de megavatios? ¿Cuántos, por qué y para qué? NINGUNA planeación ha definido a esos "miles de megavatios" porque la planeación eléctrica NO EXISTE, todo ha quedado al arbitrio de los privados y al capricho del gobierno en turno. A la fecha, el 63.66% de generación eléctrica total ya está privatizada. ¿Cuál es la justificación del gobierno? NINGUNA, se trata solo de generar por generar, siempre y cuando sea generación privada. Falsedades tras falsedades "En el campo de la electricidad, la reforma
energética avanza en objetivos como reducir costos, atraer inversiones y
promover el desarrollo de energías limpias, dijo Joaquín Coldwell.
Agregó que las bases del mercado eléctrico mayorista –cuya
creación está considerada en la reforma energética–
se encuentran en consulta y su versión definitiva se publicará a
finales de agosto. En octubre será publicada la primera convocatoria para
una subasta eléctrica en el país, añadió.
"La reforma energética prevé que la generación y comercialización de electricidad queden fuera de las actividades estratégicas a cargo del Estado. De esta manera, estará a cargo del sector privado dentro de los términos previstos en la ley, de acuerdo con un artículo de la consultora KPMG. Se prevé la creación de un mercado eléctrico mayorista, en el que las empresas públicas y privadas de generación eléctrica colocarán su producción y al que podrán concurrir generadores privados y grandes consumidores de energía eléctrica. "Durante su intervención, el titular de Energía anunció que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) iniciará el desarrollo de dos líneas de transmisión bajo nuevos esquemas derivados de la reforma energética. Una de ellas, será una línea de transmisión del Istmo de Tehuantepec al centro del país, adelantó". Los avances de la reforma energética NO son los que dice Coldwell. Ese politiquillo habla de "reducción de costos" pero no dice para quién. Los únicos beneficiados con esas reducciones, sustanciales, son los privados que, en su mayoría están dejando de ser clientes de la CFE. ¿Atraer inversiones? Las hay pero no son productivas, las "inversiones" privadas se reducen a los costos de las transnacionales que pronto recuperan, adicionados por la correspondiente ganancia. ¿Energías limpias? Otra vez, las transnacionales son las beneficiadas, las que siguen apoderándose del territorio y recursos naturales, solamente, para la acumulación de capital, mediante el despojo de tierras, aguas, viento e infraestructura física. El "mercado eléctrico" es solo una denominación burguesa para la privatización. No lo reconocen pero el mismo gobierno lo dice. La generación y comercialización dejaron de ser actividades estratégicas. ¿Para qué? Para que las realicen los privados, y todavía se atreven a decir que, eso, no es privatización. No todo queda en la privatización de la generación y comercialización eléctrica, también se incluye a la transmisión eléctrica. Lo que Coldwell adelantó es la privatización de las redes eléctricas, empezando con dos líneas. ¿Su argumento? El esquema está permitido por la reforma. Coldwell lo niega pero esa es privatizadora. Luego seguirá la privatización de la distribución eléctrica. La CFE cada vez será reducida a su mínima expresión hasta desaparecer. Por el momento, seguirá realizando sus funciones que, solo en materia de generación, apenas llega al 36.34%, el resto ya es privado. En la subasta, la CFE será excluida, como lo ha sido Pemex. ¿La razón? Carece de recursos, dirán, Para ello, el mismo gobierno la ha venido incapacitando. Informe tras informe, los itamistas solo reportan pérdidas y cada vez mayores. El FTE lo ha reiterado, esas pérdidas contables se deben, principalmente, a la privatización eléctrica y a la nociva política eléctrica oficial. Pérdidas crecientes en CFE "La CFE, ahora empresa productiva del Estado,
acumula en los últimos tres años y medio pérdidas por 139
mil 192 millones de pesos, cifra equivalente a los ingresos no tributarios
obtenidos en el primer semestre de 2015, los cuales alcanzaron 140 mil 355
millones de pesos, revelan informes oficiales (Rodríguez I., en La
Jornada, p.23, 10 agosto 2015).
"Entre las causas de este desempeño destacan el periodo de volatilidad cambiaria, que jugó un papel importante en el resultado final; el aumento en el pago de pensiones por el mayor número de jubilados, así como un incremento en el costo del servicio de la deuda y los menores precios de la electricidad. "La que se autodenominaba empresa de clase mundial muestra pérdidas crecientes y en 2012 tuvo un resultado negativo de 19 mil 216 millones de pesos. Sin embargo, a partir de 2013, primer año de gobierno de la presente administración, sus mermas prácticamente se duplicaron con respecto al año anterior, al ascender a 37 mil 552 millones de pesos. "En 2014 las pérdidas de la CFE aumentaron a 46 mil 832 millones de pesos, pero en la primera mitad de 2015 ya se incrementaron a 35 mil 592 millones de pesos. "La CFE se encuentra principalmente expuesta a variaciones en el tipo de cambio entre el peso mexicano, dólares y yenes japoneses, debido a que 70 por ciento de su endeudamiento externo está contratado en la divisa estadunidense". Esas "pérdidas" no son nuevas pero en la gestión de Peña Nieto se han vuelto excesivas. La privatización, causa principal Por supuesto que el gobierno
no lo dice ni informa a la Bolsa pero la privatización, derivada de la
política eléctrica antinacional, es la principal causa de que la
CFE opere con pérdidas contables.
No es que la CFE carezca de ingresos propios, los tiene, pero los transfiere a las transnacionales. Por ello es que los costos de explotación son mayores a las ventas totales anuales. Esos costos corresponden, principalmente, a los recursos públicos transferidos a las transnacionales. De entrada, la CFE considera una obligación reservar de su presupuesto anual el pago a las "inversiones" de las corporaciones, aumentadas con la respectiva ganancia. No existe en el mundo ninguna transnacional que trabaje gratis. Esos pagos se hacen puntualmente. De 1992 a la fecha, las transnacionales han recibido pagos excesivos cada año. Por si fuera poco, la CFE les suministra gas natural, seguro y barato, para las plantas privadas de ciclo combinado. Ese gas la CFE lo importa, a través de otra transnacional y lo paga siete veces más que los precios internacionales en la región. Toda esta transferencia al capital privado es un verdadero subsidio. El que así llama el gobierno, que supuestamente se otorga a los consumidores domésticos, mayormente lo paga la CFE con cargo a su propio presupuesto, el gobierno omite sus compromisos. Si tan solo el gobierno pagara ese subsidio del que habla, la CFE no tendría pérdidas contables. En cuanto a la reducción de precios, se trata de un regalo del gobierno, vía CFE a los grandes consumidores, pues, es el sector industrial el que paga menores precios. Acerca del endeudamiento y devaluación monetaria se trata de efectos derivados de una perniciosa política energética que, por supuesto, Ochoa Reza no menciona. Incluso, se contradice con Videgaray, este ha dicho que la devaluación del peso "es positiva" para México. Por su parte, Peña Nieto solo sabe endeudar desorbitadamente al país, incluyendo, a Pemex y a la CFE, las cuales, están sujetas a drásticos recortes presupuestales. En tales condiciones, NO hay empresa eléctrica en el mundo que pueda operar sin pérdidas. Finalmente, el objetivo estratégico del gobierno no es fortalecer a la CFE sino destruirla, al tiempo que promueve abiertamente la privatización total y generalizada de la ex industria eléctrica nacionalizada. Pérdida de clientes a los que subsidia "Por otro lado, históricamente
las tarifas de electricidad no han reflejado el costo total de la CFE para
proveer energía. El gobierno ha otorgado subsidios a los usuarios del
servicio de energía eléctrica para cubrir el exceso de los costos
de la empresa sobre sus ingresos, principalmente en relación con las
tarifas residenciales y agrícolas. Estos subsidios son créditos a
la CFE que se compensan con cargos a la empresa productiva del Estado, pero no
hay un intercambio de efectivo.
"En el primer semestre de este año las pensiones de la CFE aumentaron 13.6 por ciento en términos reales, debido al incremento tanto de la pensión media como del número de jubilados respecto al año anterior, y al mismo tiempo las pérdidas se acentuaron entre enero y junio de 2015 a causa principalmente de menores ingresos de la CFE asociados a la reducción de las tarifas eléctricas. "En un año la CFE ha perdido un millón 465 mil 398 clientes, al bajar de 69 millones 404 mil 282 registrados en el primer semestre de 2014 a 67 millones 938 mil 886 clientes al terminar junio de 2015. "Por el contrario, el número de funcionarios aumentó en el último año en 441, al ascender de mil 860 a junio de 2014 a 2 mil 301 a junio de este año. Lo anterior ocasionó que el número total de empleados aumentara en 453 en los últimos 12 meses, al incrementarse de 15 mil 647 en el primer semestre de 2014 a 16 mil 100 en el mismo lapso de este año". Privados se asocian con transnacionales "Una nueva sociedad entre la estadunidense AES
Corp y el mexicano Grupo Bal invertirá hasta 2 mil 500 millones de
dólares en los próximos cinco años, principalmente en el
sector energético de México, recientemente abierto a la
inversión privada, dijo el director de la unidad mexicana de AES, Juan
Ignacio Rubiolo (Reuters, en La Jornada, p.3, 11 agosto 2015).
"La asociación a partes iguales entre las empresas busca dirigir cerca de tres cuartas partes de la inversión a la generación de electricidad, tanto de fuentes convencionales como renovables, incluyendo energía solar y eólica. "En términos de magnitud, la idea es crecer al menos en los próximos cinco años el portafolio en dos gigavatios con inversiones estimadas entre 2 mil y 2 mil 500 millones de dólares, depende de cada tipo de proyecto, dijo el directivo en entrevista. "AES, que tiene presencia en 18 países, operará las plantas de energía que la sociedad construya. Todos los nuevos proyectos requerirán la venia de Grupo Bal, propietario de las gigantes mineras Fresnillo Plc y Peñoles, así como de una aseguradora, un fondo de pensiones y la conocida cadena de tiendas El Palacio del Hierro. "La asociación opera tres plantas de energía en México con una generación total de unos mil 50 megavatios, incluyendo una planta que ha suministrado electricidad a Peñoles durante varios años. En febrero, Grupo Bal anunció la creación de la compañía de exploración y producción de hidrocarburos Petrobal. La unidad tiene como objetivo aprovechar la histórica apertura del sector energético. La reforma permite a empresas privadas extraer petróleo por primera vez en décadas y abre completamente el sector eléctrico a la inversión privada. "Grupo Bal es propiedad del multimillonario Alberto Bailleres, uno de los hombres más ricos de México. El resto de la inversión de la empresa conjunta se destinará probablemente a proyectos enfocados al gas natural licuado, a la desalinización de agua y al almacenamiento de energía, donde AES es actualmente líder mundial, dijo Rubiolo. "El presidente ejecutivo de AES, Andrés Gluski, señaló que durante la próxima década México necesitará 25 gigavatios de nueva generación o reemplazo. Sin embargo, no dio detalles sobre el alcance de los planes". Los datos de las transnacionales son arbitrarios, ocurrencias a su gusto y conveniencia. Lo que quieren es una mayor tajada del botín. Ref.: 2015, elektron 15 (234) 1-4, 24 agosto 2015, FTE de México. ¡Repudio a política eléctrica oficial! Esta página es construida por trabajadores del sector energía.
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