Lo que se preveía, se decía y evidenciaba paso a paso está confirmado. En los tres reactores accidentados en Fukushima se produjo la fusión de los núcleos de combustible nuclear. Los núcleos están degradados, los niveles de radiación y de contaminación son excesivos, y las dosis a los trabajadores son letales. La crisis es real, 46 reactores de 54 están parados, TEPCO va a la quiebra.
La Tokio Electric
Power Company (TEPCO), dueña y operadora de la central
nucleoleléctrica de Fukushima Daiichi, reportó que aumentó
la fuga de materiales radiativos en los reactores nucleares accidentados en
marzo de 2011.
La cantidad total de Cesio-137 fugado de las vasijas de contención de los reactores 1, 2 y 3 alcanzó los 70 millones de Becquerels (Bq) por hora (h), es decir, 70 Mega Becquerels por hora (MBq/h) (Jiji Press, 23 ene 2012, en http://enenews.com/tepco-admits-radiation-levels-fukushima-increasing-releasing-70000000-bqhr-reactor-3-leaking). En diciembre anterior, el nivel reportado fue de 10 MBq/h en las unidades 1 y 2 y de 40 MB/h en la unidad 3. Confirmada la fusión de los 3 núcleos Se estimaba pero ahora es oficial.
El anterior 1 de diciembre, TEPCO confirmó la fusión (meltdwon) de las barras de combustible nuclear en los 3 reactores de Fukushima, de acuerdo a la información de Europa Press citada en Tokio (en www.elmundo.es/elmundo/2011/12/01/internacional/1322723300.html). De acuerdo a un informe de Tepco, difundido por la cadena NHK, en el reactor 1 la fusión fue total, mientras que, en los reactores 2 y 3 fue parcial. El núcleo de la unidad 1 se degradó en una masa viscosa que habría caído al agua acumulada en la vasija de contención. “Al precipitarse al fondo de la vasija de contención, el combustible podría haberlo erosionado, disminuyendo su grosor en unos 65 centímetros, por lo que es posible que en las zonas más delgadas, de 37 centímetros, rompiera la pared provocando una fuga”. “En el caso de los reactores dos y tres, el informe apunta que las barras de combustible se fundieron en un 57% y un 63% por ciento, respectivamente, con lo que, probablemente, esta masa viscosa también se precipitó al fondo de la vasija, aunque sin erosión”. “El informe, encargado por TEPCO a varios institutos de investigación y patrocinado por el Gobierno de Japón, se basa en mediciones de temperaturas y cantidades de agua acumuladas en las vasijas de contención, entre otros datos”. Otro reactor en paro, ya son 46 de 54 La agencia EFE informó el 8 de
diciembre que la central nuclear de Mihama, en el oeste de Japón, detuvo
uno de sus tres reactores a causa de una filtración interna de agua
radiactiva en esa unidad, lo que deja al país con solo ocho de sus 54
reactores activos (en http://noticias.lainformacion.com/economia-negocios-y-finanzas/energia-nuclear/el-cierre-de-otro-reactor-nuclear-deja-a-japon-con-solo-ocho-unidades-activas_uD5694YtWHasqKHgiYIC01/).
De acuerdo a la cadena NHK, se trata del reactor 2 de la central operada por Kansai Electric Power Company (KEPCO). El paro manual se debió a una falla técnica y, desde principios de noviembre, se había filtrado agua radiativa desde la vasija de presión a un tanque de almacenamiento, y existía el riesgo de que desbordara su capacidad de procesado. Según KEPCO todo el líquido contaminado se encuentra dentro del tanque en el interior del reactor, por lo que la filtración no ha afectado al medioambiente. En Mihama estaba previsto que la unidad 2 detuviera sus operaciones el 18 de diciembre para una revisión rutinaria. El cierre de esta unidad supone que 46 de los 54 reactores nucleares de Japón, o el 85 por ciento, permanecen detenidos, bien por seguridad tras el accidente en Fukushima Daiichi o bien por mantenimiento. De los once reactores que opera KEPCO, todos en la región de Kansai (donde se encuentra Osaka), solo hay dos en operación y se había programó detener su operación el anterior 16 de diciembre y el próximo febrero, respectivamente, para ser inspeccionados. La situación sigue siendo muy seria La confirmación de
la fusión (meltdown) de los 3 reactores accidentados revela la gravedad
de la situación. Por ello los altos niveles de radiación y
liberación de materiales radiativos que se han detectado.
Un Becquerel corresponde a una desintegración por segundo. 70 millones de Bq serían 70 millones de radiaciones emitidas por segundo. En una hora, esto equivaldría a la emisión de 4200 millones de radiaciones. Las dosis producidas son, a todas luces, excesivas. Para los trabajadores se trata de dosis letales. Que solo 8 reactores de 54 estén en operación indica la magnitud de la crisis. Antes de los accidentes de marzo de 2011, Japón obtenía casi un tercio de su electricidad de las centrales nucleares. En estos momentos, la contribución sería de apenas 5 por ciento. Entre tanto, aún cuando TEPCO anunció el 16 de diciembre de 2011 la “parada en frío” del reactor 1, es evidente que la situación está lejos de ser estable y menos de haber sido controlada. A casi un año del desastre se siguen confirmando los pronósticos más pesimistas que, entre otros, el FTE de México anunció el 18 de marzo de 2011, en la conferencia “Tsunami nuclear”, presentada en el 18 Foro de Energía.
Parte del núcleo degradado en el fondo de la vasija del reactor 1
de Fukushima. 30 nov 2011. Fuente: www.world-nuclear-news.org Frente de Trabajadores de la Energía, de México Esta página es construida por trabajadores del sector energía.
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