Los trabajadores y los pueblos vivimos en un mundo determinado por la lucha de clases. Los trabajadores defendemos nuestros derechos inmediatos e históricos. Es una de nuestras metas lograr la transformación social. La unidad que requerimos para cumplir los fines inmediatos e históricos es un medio para concretar un programa propio. La lucha de clases tiene alcance mundial y la lucha que proponemos se enmarca a nivel nacional, regional e internacional. Formular el programa, construir la organización, desarrollar la conciencia de clase, ejercer la dinámica concreta y practicar la solidaridad internacional son nuestras tareas políticas en la época actual. Los sindicatos son organismos necesarios para la resistencia y lucha contra el capitalismo. Reivindicamos la necesidad de hacer de los sindicatos verdaderos instrumentos de lucha democrática. La independencia de clase es condición indispensable para desarrollar una política propia. Esto plantea la constitución de la clase para sí y la organización de la conciencia de clase expresada en un partido político propio. El partido político de la clase obrera es necesario por razones políticas, organizativas y para la acción. Es la organización de la conciencia colectiva, basado en el pensamiento revolucionario clásico, en lucha por el socialismo. Superar la enajenación burguesa es nuestra aspiración, en la lucha concreta por las reivindicaciones inmediatas e históricas. El Estado es un aparato de opresión burguesa encargado de administrar la violencia contra los trabajadores y los pueblos. Proclamamos el control obrero de la producción, la dualidad de poderes y la lucha por el poder proletario. La lucha de los trabajadores no es ajena a la lucha de los pueblos en defensa de sus recursos, territorios, soberanía, independencia y derechos sociales. Junto con otros sectores sociales, los trabajadores somos parte de una misma lucha que, en alianza estratégica, nos permita instaurar una nueva sociedad solidaria, otro mundo mejor, que anhelamos los trabajadores y los pueblos. La lucha obrera es antimperialista y solidaria. Los recursos naturales constituyen un patrimonio colectivo del mundo. Defendemos los recursos naturales, y la infraestructura física de las naciones, como un derecho social de los pueblos. En esta lucha, planteamos a la solidaridad internacional como una acción política para compartir experiencias, apoyos y propuestas. ¡Proletarios de todos los países, uníos! Esta página es construida por trabajadores del sector energía.
La información contenida puede citarse total o parcialmente, mencionando la fuente.
|
|