¡Quebrar a CFE y LFC!
Fox propone expropiar facultades constitucionales a la industria eléctrica nacionalizada. Al sector se le quitaría el 70 por ciento de sus ingresos. CFE y LFC atenderían solo a usuarios domésticos, servicios y agrícola. Para la industria y el comercio la atención sería privada. CFE y LFC podrían quebrar y aún desaparecer. Esa propuesta es inaceptable pero, ¡No basta rechazar las propuestas de Fox, hay que rechazar las de Salinas! La alternativa está en la cabal integración de la industria eléctrica nacionalizada.
De entrada se le quita a CFE el control y
operación del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) pero no nada
más, se le suprimen las funciones que actualmente lleva a cabo de manera
exclusiva en los términos de los artículos 27 y 28
constitucionales. CFE y LFC serían reducidas drásticamente y
entrarían en una fase de extinción degenerativa y
sistémica. Para LFC la situación estaría peor e iría
a la quiebra. La propuesta de Fox de reformar el sector eléctrico
implica “el desmantelamiento y desaparición de la Comisión
Federal de Electricidad (CFE), aunque se diga lo contrario”, dijo el
senador priísta Manuel Bartlett (Ballinas V, Pérez C, López
G, en La Jornada 200802). Bartlett, senador del PRI y presidente de
la comisión de puntos constitucionales del Senado de la República,
misma que habrá de dictaminar al respecto, declaró que "no hay
ningún riesgo de que el PRI cambie su decisión de no realizar
cambios a la Constitución para llevar a cabo la reforma eléctrica.
Once mil 500 delegados del Consejo Político dijeron al CEN del partido
que no se hagan cambios a la Constitución que permitan privatizar el
sector". Agregó que la pretendida reforma es “una
argucia” y significa privatización, “como lo han estado
haciendo, pues abusan y se aprovechan de la ley actual para que todos los
días el gobierno autorice privatizaciones en el sector y no hay
inversión gubernamental, eso se lo está dejando a la
inversión privada”. Expresó Bartlett que él
“le diría a Fox que deje de violar la ley. El gobierno debe detener
las privatizaciones que a diario lleva a cabo aprovechándose de los hoyos
que tiene la legislación”. La posición del senador
Bartlett es plausible y contraria a la manifestada por la cúpula de su
partido. Sin embargo, sus propuestas de iniciativas de reforma a la
legislación secundaria son contradictorias. Muy bien que reconozca la
existencia de la Privatización Eléctrica Furtiva, mejor
sería que hubiera coherencia y fuera modificada la iniciativa del PRI
(también la del PRD) que favorece la participación privada. El
senador es consciente pero su argumentación no es firme. “Cuando se
dice que la iniciativa del PRI también considera la inversión
privada, sí, en efecto, lo que proponemos es continuar con el
autoconsumo, eso está permitido en la propia Constitución, en la
que se establece que particulares pueden generar energía para autoconsumo
y venta a la CFE, pero no dice que se puedan vender entre particulares, eso es
ilegal”. Nos permitimos señalar que la Constitución, en
su párrafo sexto del artículo 27 constitucional referido a la
energía eléctrica NO dice nada de lo que Bartlett
declara. En todo caso, debía referirse a la actual Ley de Servicio
Público de Energía Eléctrica (LSPEE) modificada en 1992.
De acuerdo a esas reformas se “inventaron” figuras
jurídicas para hacer entrar la participación privada. Una de esas
figuras es el llamado “autoabastecimiento”, mismo que no se respeta
pues bajo tal denominación la Comisión Reguladora de
Energía (CRE) ha otorgado múltiples permisos fraudulentos a
empresas extranjeras, las que han creado carteras de innumerables clientes,
incluyendo entidades públicas, para “autoabastecerlos”.
¡Eso, es privatización! Por supuesto que la propuesta de Fox
está peor pero, ni ésta ni la ratificación a las reformas
de 1992 son aceptables para la Nación. El senador Bartlett tiene una
posición importante pero incompleta, tal vez obnubilado por la
política borrosa de sus asesores. Por eso es que individuos como
Rodríguez Prats, senador del PAN y presidente de la comisión de
energía del Senado, ha dicho cínicamente que “la reforma
constitucional propuesta por el presidente Fox es muy concreta, legaliza lo que
ya se hace”. El panista se ha
expresado retador porque sabe de las fechorías de su gobierno. Declaro
que “Si el PRI dice que no haya reformas constitucionales, entonces que
proponga que se cancelen las empresas que hay en el país. “Si de
verdad no quieren simulación que se atrevan a proponer la
cancelación de esas compañías a las que el PRI
benefició con privatizaciones”. Tal vez el PRI no haga lo que
Rodríguez Prats indica pero, eso, es lo que debe hacerse: cancelar TODOS
los permisos privados por anticonstitucionales y fraudulentos, otorgados por los
gobiernos del PRI y del PAN. Más aún, a los responsables debe
llevárseles ante al justicia por traición a la Patria. Unos
días después de que Fox envío sus 5 iniciativas al Senado,
el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) dio una primera respuesta. Frente
al Senado de la República se realizó un mitin. En el evento, el
SME expresó que la propuesta de Fox “significa la quiebra
técnica” de las empresas del sector porque destinaría a
particulares el suministro de los grandes consumidores, que representan 71 por
ciento de los ingresos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y de
Luz y Fuerza del Centro (LFC). Presente en el mitin, Bartlett dijo
“Vamos a desmenuzar la iniciativa y demostraremos nuevamente que no tienen
razón. Nos quieren poner como intolerantes, necios y obcecados, pero los
necios son ellos, porque después de que el Congreso les dice 'no', vuelve
otra vez la burra al trigo. Entonces, ¿quiénes son los obcecados en
privatizar? ¡Son ellos!, tenemos que defender el patrimonio nacional”
(Martínez F, en La Jornada 220802). ¡Muy bien! Defender
el patrimonio nacional incluye cerrarle las puertas a la privatización
rechazando cualquier modificación constitucional. Pero, también
hay que impedir que esa privatización se meta por las ventanas. En
consecuencia, no hay cabida a ningún Plan B y las iniciativas de reformas
a la legislación secundaria (del PRI y PRD) deben revisarse
suprimiendo toda ratificación a las contra reformas del
92. Para apreciar la gravedad de las
iniciativas del gobierno del PAN respecto a CFE y LFC, el SME declaró
que, con tales propuestas, Fox “terminaría de hundir a Luz y Fuerza
del Centro empresa que sobrevive en permanente déficit financiero”
(Martínez F, en La Jornada 250802). Con la reforma neoliberal,
“pasarían a manos de particulares alrededor de 50 mil servicios
especiales (grandes consumidores), mismos que representan 71.3 por ciento de sus
ventas”. LFC se quedaría sólo con el sector
doméstico (18.5 por ciento de sus ventas, pero 88.4 de los usuarios,
“es decir, muchos que facturan poco”), de servicios (9.9 por ciento)
y el agrícola, que para el DF y entidades circunvecinas representa
sólo 0.1 por ciento de los “productos” de LFC. Una
situación similar ocurriría para el sector eléctrico a
nivel nacional porque, actualmente, la mediana y gran industria, así como
el sector comercial agrupan 67.4 por ciento de los ingresos de las empresas
públicas de la industria eléctrica. Es decir, LFC y la CFE se
quedarían sólo con 32.6 por ciento por concepto de usuarios
domésticos, de servicios y agrícolas. Martínez
precisó la información al escribir que “las cuentas
especiales o grandes usuarios son aquellos catalogados en índices de
consumo de más de 2 mil 500 megavatios al año, y aun cuando LFC
tiene actualmente 5.6 millones de contratos, de los cuales 50 mil cuentas
especiales referidas (industria, cadenas comerciales, hospitales privados,
etcétera) generan alrededor del 70 por ciento de los ingresos de la
empresa”. El SME aclaró que “a menor ingreso habrá
mayores deficiencias en todas las áreas de la empresa. Ya de por
sí de cada peso que ingresa a LFC se destinan 94 centavos a la
Comisión Federal de Electricidad, su principal proveedor de
energía, por lo que arrastra un permanente déficit financiero,
deudas y millonarias pérdidas por ilícitos (robo o pirateo de
energía)”. A la propuesta de Fox el SME le llamó
“acta de defunción” de LFC. Fox y sus compinches dicen que
“No es privatización”, sin embargo, se han dedicado a
repartir esquelas. Basta leer sus propuestas para observar que CFE sería
reducida a casi nada y, LFC sería reducida a nada. Este aniversario
de la nacionalización eléctrica está caracterizado por la
mayor agresión que gobierno alguno haya proyectado contra la
Nación. Pero los trabajadores y pueblo de México impediremos el
atraco de Fox y sus Amigos. Las empresas eléctricas extranjeras son
perniciosas, los permisos fraudulentos deben cancelarse.
¡Ninguna concesión a los particulares!
Así lo indica la Constitución, así debe reafirmarse en la legislación
eléctrica secundaria.
¡No PrivatizaciónEléctrica!
¡Venceremos!
|