S. B. Osorio

El licenciado Sergio Benito Osorio, de la Mesa de Observación Ciudadana de la Energía y expresidente de la comisión de energía de la Cámara de Diputados señaló que el petróleo ha sido el eje de la política energética nacional durante los últimos 40 años. Sin embargo, desde hace 18 años ha caído la inversión dando como resultado el desmantelamiento de Pemex. Los precios del gas han llevado a la quiebra de pequeñas y medianas empresas. No se han vuelto a construir nuevas refinerías. La política petrolera se ha basado únicamente en la extracción de petróleo crudo y su exportación, principalmente a los EU.

Las empresas extranjeras que fueron expropiadas han recuperado terreno. Es el caso de Shell que compra crudo mexicano, lo refina en EU y, luego, vende gasolina a México abastecedor de petróleo que junto con Arabia Saudita y Venezuela participa de la regulación del mercado.

Muchas cosas se han perdido, sin embargo, la expropiación petrolera junto con la nacionalización de los ferrocarriles, la industria eléctrica, la reforma agraria y la legislación laboral han sido parte de un proyecto nacional que debe rescatarse nuevamente, dijo Benito Osorio.

En el país y en el mundo hay una nueva coyuntura. Existe una iniciativa para la integración energética de las Américas, que es parte de la agenda entre los gobiernos de México y Estados Unidos. Esto es tan grave que la reforma eléctrica podría pasar a un segundo plano, lo que importa es la integración hemisférica. Esto es así, porque México no tiene los problemas de abasto eléctrico que tiene California ni se puede hacer tan dramática la situación porque no estamos al borde de un apagón. El caso California no se resolverá en el corto plazo y, por primera vez en la historia del capitalismo, la economía se podría detener. En este sentido es importante estimar lo que ocurrirá con el diseño de la integración hemisférica y qué política energética es la conveniente para México.