Volumen 14, Número 282, marzo 26 de 2014 |
Mujeres en la minería
Presencia del FTE de México en
el Encuentro de Pueblos en Resistencia contra el modelo extractivo minero,
realizado en Zautla, Puebla, del 14 al 16 de marzo de 2014. Mesa sobre la
participación de las mujeres y consecuencias en su vida y procesos de
resistencia.
Mujeres contra el modelo extractivo minero, Chiapas, México
Luz del Alba Belasko *
FRENTE DE TRABAJADORES DE LA ENERGIA, de MEXICO
cazaimagen@gmail.com
RESUMEN:
El proceso extractivo en México ha crecido mayormente en la primera
década del siglo XXI, con un impacto más devastador que la
tecnología de “pico y pala” de la colonia. La
megaminería contemporánea utilizando el desarrollo
tecnológico de máquinas-herramienta para la perforación,
excavación, el desarrollo de explosivos, de procesos químicos para
la recuperación masiva de minerales implementando el denominado sistema
de tajo a cielo abierto, el cual implica la remoción de toneladas de
tierra por gramos o fracciones de gramo de material recuperable; desarrollo
viable gracias al uso de procesos químicos de flotación o
lixiviación con cianuros, mercurio u otros químicos altamente
tóxicos.
Los impactos de la minería contemporánea
tanto ambientales como sociales y a la salud destacan no sólo por ser
cuantitativos sino cualitativamente más agresivos en el tiempo y en el
espacio, agudizando los procesos de apropiación y despojo de tierras,
agua y otros recursos naturales e irreversibles en muchos de los casos,
agravando el descontento social y los escenarios de violencia y conflicto social
contra las empresas mineras. Dentro de está amalgama están
inmersas un grupo de mujeres que realizan este tipo de trabajo directamente en
las minas. Presentamos aquí algunas voces de ellas desde su cotidiana
jornada con la minería.
1. INTRODUCCIÓN
México es un país cuya minería se remonta a la época
prehispánica, con fines ornamentales y también la
fabricación de herramientas y armas rudimentarias para llevar a cabo
actividades cotidianas de subsistencia. El control de los recursos minerales
definió territorios y fronteras del dominio prehispánico,
así como rutas de conquista y colonización europea. La base de la
economía novo-hispana era la minería. Sin duda, el virreinato del
Perú, fue muy superior en la producción de metales preciosos (oro
y plata) en los primeros años del reino español en América.
Sin embargo, el descubrimiento de nuevos yacimientos desde Sonora hasta el sur
de la provincia de Estados Unidos, permitió que gradualmente la Nueva
España ocupara el lugar de privilegio.
En la historia del
México moderno, la minería ha jugado un papel importante y ha sido
una de las causas del estallido de la Revolución Mexicana de 1910, cuando
trabajadores de la compañía The Cananean Consolidated Copper
Company de Sonora se lanzaron a la huelga, como única alternativa ante la
discriminación y los abusos de los que eran objeto por parte de la
empresa norteamericana. La huelga fue reprimida en forma sangrienta, pero
dejó un firme antecedente de lucha social y laboral.
La
Revolución tuvo fuertes impactos sobre la industria minera. Los
principales actores de la Revolución mexicana lucharon para hacer
realidad su sueño de repartir el control de la tierra a quienes la
trabajaban. A la par, dentro de estos antecedentes la “mujer
mexicana” se organizó en un Primer Congreso Feminista , en la
ciudad de Mérida, Yucatán, en 1916, donde se empezaron a legitimar
y consolidar las bases jurídicas e institucionales de la identidad
nacional. Sin embargo, a pesar de la amplia participación de las mujeres
en la Revolución, en esa época, no fueron consideradas como
ciudadanas. De ahí surgió este movimiento y más tarde el
Congreso en el cual difundieron los acuerdos.
Desde entonces se ha
hablado sobre, maternidad libre y voluntaria, educación para las mujeres,
autoconcepción, derechos, igualdad, libertad. Sin embargo, la sagacidad
del sistema capitalista comenzó a desvincular a la mujer y crear el mito
de la madre sacrificada, la perfecta mujer del hogar, el abnegado adorno de la
sociedad, la comercialización y la contra propaganda para neutralizar las
propuestas de las yucatecas que revolucionaban la antigua moral y
proponían una educación para las mujeres basada en la igualdad y
la libertad.
2. EL PAPEL DE LA MUJER MEXICANA EN LA MINERÍA
En México, la
imagen de la mujer encierra un cúmulo importante de simbolismos
culturales e históricos. A la mujer se le idealiza como fuerza creadora y
dadora de vida, como en la época prehispánica con la Coatlicue,
Tonantzin. Pero también, a través de la Malinche, se expresa la
devaluación del pueblo mexicano sometido con la conquista. La mujer-madre
condensa, valores sublimes y patrióticos, de idealización y a la
vez de devaluación. Hay un día, el 10 de mayo, en la que se exalta
y enaltece a la madre con regalos y festejos, pero también de manera
contradictoria, el peor insulto entre las y los mexicanos es una "mentada de
madre".
La exaltación del "instinto materno" orienta el destino de
millones de mujeres. Pero, si analizamos el desarrollo de las sociedades vemos
que la maternidad no es un "instinto natural", sino un hecho social que cambia
de acuerdo al momento histórico y las necesidades sociales. El concebir,
parir y amamantar un hijo(a) es un hecho biológico que sólo las
mujeres por su naturaleza pueden hacer, hecho al que se le llama maternidad.
Pero el tenerlo no es sólo eso, porque necesita cuidados, atenciones,
cariño, amor, educación, etc., es un trabajo emocional y
físico al que se le denomina maternazgo, y éste no es natural sino
social.
Y en este ámbito, la relación existente entre los
sistemas de dominación ejercidos sobre el planeta y sobre las mujeres,
proponen perspectivas en las que el movimiento feminista y movimiento ecologista
se apoyen mutuamente. Las mujeres pueden tener un papel crucial, no sólo
como portadoras de un mensaje que nos oriente hacia una conciencia global
medioambiental, sino como activadoras de una posición activa en busca del
equilibrio en el planeta y la mejora de la situación de los sectores
más desfavorecidos.
Por siglos, y en todos los continentes, ha
existido la generalizada creencia de que la minería es una actividad
reservada a los hombres, así como una actitud de rechazo cultural a su
presencia en las minas, por el mito de la mala suerte. Legalmente la OIT en su
código de trabajo de 1930 prohíbe el trabajo de las mujeres en
labores mineras o subterráneas y en faenas calificadas como superiores a
sus fuerzas o peligrosas para las condiciones físicas o morales de su
sexo (art.126). Esta reglamentación duro en México hasta 1975
cuando celebraron el 1er Año Internacional de la Mujer., entre las
cláusulas reformadas de la ley laboral, fue la inserción de la
mujer en la minería.
Las mujeres deben darse cuenta de que no
podrán llevar a cabo su liberación ni encontrarán
soluciones a la crisis ecológica mientras que la sociedad continúe
fundando sus modelos de relación en sistemas de dominación. Las
demandas del movimiento de la mujer y las del movimiento ecológico deben
unirse para así poder afrontar una reforma radical de las relaciones
básicas socioeconómicas y de los valores subyacentes de esta
sociedad moderna e industrial
3. SITUACIÓN DE LA MUJER EN EL MUNDO DEL TRABAJO. PANORÁMICA GENERAL EN MÉXICO
La situación de la mujer mexicana en los sectores de la
minería y el metal es uno de los más desconocidos e ignorados de
la industria minera en México. Los indicadores hacia la igualdad de
género en México (2007) contribuyen a este objetivo, al mostrar un
panorama general de la situación de las mujeres y plantear, mediante la
interpretación de datos estadísticos, hacia dónde dirigir
nuestros esfuerzos.
Según datos del II Conteo de Población
y Vivienda, para el año 2005, había en México 103,263,388
personas, de las cuales 51.3 por ciento eran mujeres y 48.7 por ciento hombres.
A partir de la década de los años setenta, la fecundidad ha
descendido de manera notoria en nuestro país, lo cual se refleja en la
reducción de la base de la pirámide poblacional (Figura
1).
No obstante, la estructura por edad en México se mantiene
joven, pues 50 por ciento de la población no rebasa los 24 años de
edad (23 años en promedio para los hombres y 25 para las mujeres).
Ello impone retos particulares de planeación en materia de
creación de empleos, tanto para quienes están entrando en edad
económicamente activa, como en el mantenimiento de la oferta laboral para
las y los adultos que ya han acumulado años de trabajo y
experiencia.
Fuentes: INEGI, IX Censo General de Población, 1970; XII Censo
General de Población y Vivienda. Tabulados Básicos; II
Conteo de Población y Vivienda. Tabulados definitivos.
Figura 1. Población en México 1970-2001.
Asimismo, pese al poco peso relativo de la población
mayor de 60 años (8.3 de las mujeres y 7.1 por ciento de las hombres en
2005), su proporción está creciendo de manera acelerada, sobre
todo la de las mujeres, que tienen una esperanza de vida mayor. De aquí
la necesidad de tomar en cuenta las demandas y necesidades específicas de
esta población.
La migración es otro componente
demográfico que afecta la estructura de la población. Las mujeres
se suman cada vez más a las oleadas de migrantes hacia Estados Unidos y,
desde hace décadas, protagonizan migraciones rurales-urbanas e
interestatales.
Los motivos que explican la migración interna de
la población de 5 años y más durante el periodo 1995- 2000
son, principalmente, laborales para los varones y familiares para las mujeres.
Además, para una de cada cinco mujeres migrantes, los motivos laborales
son los que las empujan a cambiar de residencia.
Ello refleja,
además de la creciente incorporación de las mujeres al mercado
laboral, el espíritu de lucha y valentía que representa
aventurarse, como hasta hace poco lo hacían más los varones, en
busca de mejores condiciones de vida y de empleos más remunerados para
ellas y sus familias, ya sea ascendente o descendente.
En la
migración por motivos de estudio, la proporción es muy
pequeña para ambos sexos (3.6 por ciento), lo que refleja que si
necesitan migrar para poder continuar con los estudios, las mujeres no se ven
particularmente limitadas por su sexo (véase Tabla 1).
Tabla 1. Distribución porcentual de la población migrante de 5 años y más
por principales causas de migración según sexo, 2000.
Causa |
Total |
Hombres |
Mujeres |
Laborales
Familiares
Estudios
Salud, violencia e inseguridad
Otra Causa |
25.2
24.9
3.6
3.4
13.9 |
31.5
20.2
3.8
3.3
13.6 |
19.0
29.5
3.4
3.5
14.2 |
Total |
100.0 |
100.0 |
100.00 |
* No se considera 29% de la población que no especificó la
causa de migración. Fuente:
INEGI, XII Censo General de Población y Vivienda 2000. Tabulados de la
muestra censal.
Hay pocas encuestas que se pueden
consultar sobre estos temas. Hace una década, la Organización
Internacional del Trabajo (OIT 1999) indicaba que las mujeres representaban
entre el 5% y el 50% de la fuerza de trabajo en la pequeña minería
a escala mundial. Pero ellas casi nunca llegaban a obtener un reparto
mínimo de los ingresos, lo que demuestra que no hay equidad en la
distribución de los beneficios y la mujer recibe de manera proporcional
menor cantidad de dinero por su trabajo.
A diferencia de la alta
participación de las mujeres en la pequeña minería, en las
grandes operaciones ellas cuentan con menor participación. Pero no por
ello su participación es menos relevante. Como se observa en la siguiente
gráfica, las estadísticas en México de personal ocupado en
actividad minera por género en 2008, los hombres eran 82,265 y las
mujeres 6,787 (Figura 2).
Figura 2. Personal ocupado en actividades mineras por género
Fuente: INEGI, Censos económicos 2010.
Figura 3. Personal ocupado en actividades mineras por tipo de contratación.
En cuanto al personal ocupado en la minería, la mayor
cantidad corresponde a la minería metálica y, después, a la
no-metálica. En ésta existe una enorme proporción de
contratismo y, en la minería del carbón, domina mayoritariamente.
Las condiciones laborales de los trabajadores sujetos al contratismo u
outsourcing son precarias por carecer de derechos laborales.
De
acuerdo con los criterios censales, el total de remuneraciones incluye los
sueldos, salarios, prestaciones, contribuciones a la seguridad social y pago de
utilidades, que otorga al personal remunerado que depende de la razón
social. La remuneración promedio por persona remunerada en la
minería, a nivel nacional fue de 126,800 pesos anuales. Los trabajadores
de la minería metálica alcanzaron el valor más alto,
mientras que en la extracción y beneficio de minerales
no-metálicos se registró la remuneración promedio
más baja. En forma equivalente, al personal suministrado por otra
razón social se le pagó por el servicio prestado para la unidad
minera, o bien se le pagaron comisiones sin sueldo base. Por estos conceptos el
promedio fue de 177,600 pesos anuales por persona.
4. VOCES DE LA MUJERES MINERAS
En el corazón de la tierra zacatecana,
hay 36 mujeres que comienzan su jornada a las siete de la mañana, con un
peso de hasta cinco kilos con todo el equipo y su descenso de alto riesgo.
Aunque los procesos han cambiado y son más eficientes (tecnología
de punta), la vida es difícil. El daño a los pulmones, el polvo y
las doce horas de trabajo continuo. Son madres solteras y divorciadas.
Están en Madero, Zacatecas, a 15 km, en la mina Madero, propiedad de
empresa Peñoles que extrae siete mil toneladas diarias de minerales de
zinc.
- "Aquí tenemos las mismas máquinas contra pozeras
que se utilizaron para el rescate en Chile, pues existen los mismos riesgos". La
minera Madero, ubicada en la comunidad de Francisco I. Madero, en el estado de
Zacatecas, rompió hace 10 años con el mito, contratando mujeres en
casi todas sus áreas de operación.
- "Iniciamos con lo que
hoy se conoce como prospectiva de género. Desde entonces la mujer
está integrada a la operación minera y participa en la
mayoría de las actividades, desde la explotación, manejo del
equipo, operación subterránea, control y mantenimiento", dijo en
entrevista Octavio Martín Alvidrez Ortega, gerente de la
planta.
Pese a esta intención, el número de empleadas no ha
variado desde la apertura de la mina, en el año 2000. Según los
mismos administradores, actualmente representan sólo el 8 por ciento del
total de trabajadores.
El grupo minero Peñoles, propietario de la
mina Madero y responsable también de La Herradura, en Caborca, Sonora,
emplea en sus plantas, la primera subterránea y la segunda a cielo
abierto, a 78 mujeres, que entre sus 1,300 trabajadores con los que cuentan en
total, representan el 6 por ciento de los empleados.
Figura 4. Participación de las entidades federativas de México en la
producción minera. Fuente: Camimex
Figura 5. Los Recursos Minerales de México. Mapa Metalogenético. México
es un importante productor de Oro (Au), Plata (Ag), Cobre (Cu), Azufre (S) y Zinc (Zn)
Fuente: Servicio Geológico Mexicano
5. LAS JOYAS DE LA MINA
5.1 SONORA
Lizeth Germán tenía 16 años la primera vez
que la visitó; desde entonces supo que quería formar parte de la
mina. "Desde que la conocí, algo me llamó la atención y
quise trabajar aquí". En la actualidad, Lizeth tiene 20 años y
opera un vehículo 785-C capaz de cargar hasta 140 toneladas de mineral
por viaje. Para subir los seis metros de altura del camión y librar las
llantas de 2.5 metros de diámetro, sube unas escaleras que la llevan a
una cabina desde donde opera.
- "Al principio las dimensiones de la
maquinaria me asustaban, pero ahora ya las domino. Soy la única mujer
minera en mi familia y quiero seguir en esto durante más años".
Un camión del mismo tipo es el que maneja Mirza Galván, quien a
sus 22 años es madre de un niño de seis meses. Los restos de
paño que aún se observan en su rostro comprueban su reciente
maternidad.
Las dimensiones monumentales del 785-C hacen aún
más evidente su baja estatura.
"Las 140 toneladas de tierra que
caen sobre la caja hacen que todo tiemble. Hay veces que una siente que el
camión se va de lado o que la cabina se va a partir en pedazos. Al
comenzar en este trabajo, la sensación me paralizaba, pero eso ya se
acabó".
Tanto Lizeth como Mirza cumplen la misión de
realizar varios viajes al día llevando tierra con mineral a los
laboratorios o a barrancos de tepetate, en el caso de que ésta no
contenga oro. La gran mayoría de las mujeres a diario viajan 120
kilómetros desde Caborca para llegar a la mina, haciendo un recorrido
promedio de cuatro horas. Todos los días se levantan a las 4 de la
mañana para tomar el camión de la empresa que parte a la mina a
las 5:00.
- "Más o menos hacemos dos horas de ida y dos de
regreso, y en total pasamos 14 horas fuera de casa para laborar", cuenta Mirza.
La Herradura es una mina que trabaja las 24 horas del día y en la que las
trabajadoras rotan turnos cada semana en tres horarios: de 7:00 a 17:00 horas;
de 17:00 horas a 3:00 y un turno de empalme que corre de las 21:00 horas a las
7:00 de la mañana. Al igual que en otros trabajos, las mineras tienen
derecho a descansar dos días por cada semana laboral, por la que cobran
mil 200 pesos.
A diario se llevan a cabo dos voladuras de tierra que
hacen temblar el desértico paisaje colmado de cactus y sahuayos. Andrea
Sugey, quien lleva siete años trabajando en la mina, es una de las
encargadas de perforar hasta nueve metros bajo tierra para preparar el terreno
para nuevas explosiones. A pesar del ruido ensordecedor de la rotaria
-perforadora de 12 metros de altura- y sin prestar demasiada atención al
polvo que le ha puesto los ojos enrojecidos, Sugey, de 25 años, vio en La
Herradura la oportunidad de trabajo que no le quiso dar el campo.
En la
Herradura, los hombres tienen estrictamente prohibido mofarse de sus
compañeras. Incluso, la persona que realice algún comentario
machista puede ganarse el despido, según cuenta el operador de camiones,
Sergio Montante, quien conoció a su esposa en la mina: "Sí me da
temor que trabaje aquí, pero me aguanto. “Lo único que me
queda es respetar su decisión".
Las mujeres que ingresan a La
Herradura son capacitadas en grupos mixtos, por profesionales que han visto
resultados notables su trabajo. Guillermo Bernal, coordinador del área de
mina, dice que a la hora de operar maquinaria pesada, las mujeres han demostrado
que tienen la capacidad para ser más cuidadosas con el equipo: "De hecho,
hay mujeres que están en el top de productividad".
Las toneladas
de oro que han contribuido a obtener las mujeres de esta mina, no sólo
reflejan altos niveles de productividad, también echan abajo el mito que
por años le impidió a la mujer entrar a este campo laboral. En La
Herradura, se dice que: las mujeres ni secan, ni salan los terrenos.
5.2 ZACATECAS
Alma Solís trabaja desde hace 10 años en
la minera Madero, es una mujer de 1.70 centímetros de altura, rebasa
apenas los 30 años. A pesar de su complexión mediana, sus brazos
revelan los músculos formados por el manejo diario, durante 12 horas, de
un trascabo que mueve 5 toneladas de minerales. Separada de su esposo y con tres
hijos que mantener, no dudó en emplearse en la mina, donde antes ya
habían trabajado algunos de sus familiares. Aunque difícil, el
empleo era mejor pagado que en otra actividad: 5,200 pesos mensuales (700
dólares aproximadamente). Como el resto de sus compañeras, Alma
porta un equipo de seguridad que pesa alrededor de 5 kilos, entre un respirador
auxiliar; una lámpara con chip de localización;
casco; equipo de comunicación y botas.
- "Es mucha la
paranoia, la desesperación de sentirse encerrada, pero es un reto que
tenemos y hay que echarle ganas... nos preparamos diariamente,
psicológicamente, sabemos que es nuestro trabajo y estamos
engreídas aquí", dice.
Minera Madero, inició
operaciones hace 10 años, es un yacimiento subterráneo de unos 250
metros de profundidad, del que diariamente se extraen 7,000 toneladas de
minerales de zinc, plomo y cobre. En ella trabajan actualmente 450 personas, de
las cuales 36 son mujeres.
Elsa María López
Hernández, es facilitadora de mina, su cargo es de mando medio y consiste
en asignar a cada uno de los empleados sus labores. Es originaria de Pachuca,
capital del estado de Hidalgo, donde estudió y se graduó en la
licenciatura de ingeniería de minas. Soltera y con menos de 30
años, Elsa cuenta que no ha sido sencillo dar instrucciones a hombres,
algunos de ellos mayores que ella y con más años de experiencia en
la minería.
- "El hecho de que llegue alguien menor que ellos y
con menos experiencia, que llegue a mandarlos o ponerles alguna actividad es
difícil, pero el trato diario es lo que te da la pauta para una buena
relación", agrega. Cuestionadas respecto a las condiciones laborales, las
mineras entrevistadas respondieron que están satisfechas con su empleo y
con la seguridad en el desempeño de su labor.
El rescate
de los 33 mineros en Chile, es una imagen todavía fresca en la
memoria de sus colegas mexicanos. En la minera Madero, donde todos los
días sus trabajadores descienden poco más de 2 kilómetros,
el miedo se vive igual que en todas las minas del mundo, según narran. A
lo largo del recorrido, rumbo a la profundidad, se observan varios nichos con
figuras de la Virgen de Guadalupe y otras imágenes religiosas.
-
"Me imagino que fue muy desesperante para ellos y para sus familias. Gracias a
Dios todo salió bien. Te pones a recapacitar en muchas cosas, si algo
estás haciendo mal, tratas de hacerlo mejor para salir y ver la luz del
día, porque te está esperando tu familia", dijo Imelda Escamilla,
dedicada al monitoreo del proceso de trituración en la planta.
-
“La mina chilena es similar a la de Madero, ambas son subterráneas
y explotan metales”
Las mineras entrevistadas señalaron, sin
embargo, que no se puede vivir todos los días con miedo y pensando que
algo les va a ocurrir, aunque para sus familias, el temor no
desaparece.
- "Estamos esperando todos los días a ver si regresa,
tenemos una angustia, pero es la ley de la vida, siempre estoy bajando a dios y
a todos los santos para que cuiden a mis hijos", dice la madre de
Alma.
6. MINERÍA PRIVADA Y TRANSNACIONAL
De acuerdo a la Ley minera vigente en
México, los minerales que son originalmente propiedad de la
nación, son concesionables. A la fecha, hay 25 mil concesiones mineras
otorgadas a los particulares, principalmente, mineras canadienses para la
extracción y comercialización de Oro, Plata, Platino, Cobre y
todos los demás minerales, metálicos y no-metálicos, con
excepción del Uranio y otros minerales radiactivos. Las empresas mineras
en México, pagan actualmente un impuesto denominado, Derecho a la
Minería, que dependiendo de la vigencia y el área
geográfica donde está el yacimiento, puede ir desde los 5 hasta
los 100 pesos por hectárea. El gerente de minera Madero dice, por
ejemplo, que esta empresa paga en promedio cada año al gobierno federal,
entre 3 y 4 millones de dólares. Legisladores se han pronunciado por
revisar las concesiones mineras, ya que en otros países se pagan
regalías entre 3 y 5 por ciento del valor de los metales y minerales que
extraen y en México no existe esta obligación.
La
inversión extranjera directa en múltiples sectores, incluyendo el
minero, ha penetrado un capital que se ha ido elevando en respuesta no
sólo al negocio involucrado, sino a un creciente índice de consumo
de materiales. El efecto de la apertura al capital extranjero en la estructura
de la producción, en la agudización del proceso de
concentración financiera de la minería y el papel de los grupos
empresariales minero-metalúrgicos extranjeros y nacionales expandiendo
sus operaciones.
Por ejemplo, Industrias Peñoles, que destina 75%
de su producción al mercado mundial (sólo EUA representó en
2006 el 61% de las ventas totales de la empresa), tiene un acuerdo para la
producción de plomo y zinc con Dowa Mining y Sumitomo Corporation que es
la que adquiere y envía el zinc a Japón (aunque también
compra plata). Lo mismo pasa con la mina de oro más grande de
México, la Herradura, en la que la empresa mexicana opera en
asociación con Newmont Gold de EUA (Peñoles, 2007: 23,27). Las
actividades de plata en el lote de Juanicipio I, se hacen en alianza con la
canadiense Mag Silver, que posee el 44% del proyecto. También,
Peñoles extrae cobre en Sonora con la Corporación Nacional de
Cobre de Chile (Codelco) por medio de la subsidiaria conjunta: Pecobre (51%
propiedad de Peñoles, 49% de Codelco) (Peñoles, 200718).
La
facilidad de operación del capital minero se favorece no sólo del
apoyo gubernamental, de la energía barata, sino de la mano de obra
barata. La estrategia de contratar personal femenino en estas empresas es
utilizada para justificar su bondad ante el desempleo, la inequidad de
género, el apoyo a madres solteras, las becas a los hijos.
Únicamente dádivas ante los enormes niveles de productividad que
se están dando en nuestro país.
La Cámara Minera de
México (Camimex) detalló que, en 2010, el valor de la
producción de minerales de la República fue de 12 mil millones de
dólares. Oro, Pata y cobre son los recursos minerales más
importantes, por volumen. México ocupa el primer lugar mundial en
extracción de los dos primeros metales, así como, el tercero en
Celestita, y segundo en Bismuto y Fluorita. Fresnillo y Peñasquito son
las vetas con los mejores rendimientos. Las exportaciones del sector ascendieron
a 22 mil 139 millones de dólares, el año pasado, cifra duplicada a
la década pasada; superó a las remesas y al turismo, y está
debajo del petróleo y de la industria automotriz.
"No obstante,
el adverso panorama mundial y la difícil situación
económica, aunada al problema de inseguridad, 2010 fue positivo para la
minería de México. Se consolidó como la tercera actividad
que más divisas genera. Recuperó el cuarto sitio como mejor
destino para invertir, a nivel mundial, y el primero en Latinoamérica",
puntualizó la organización.
La producción nacional
aumentó 10.3 por ciento, durante el año pasado, por los resultados
favorables en Coque, Oro, Plomo, Plata, pellets de Hierro, Fluorita y Zinc;
así como por los rendimientos negativos en yeso, Carbón no
cotizable, Cobre y Azufre.
Figura 6. Proyectos de exploración minera en México. Fuente: Camimex
Empresas mineras con capital extranjero en México por origen de su oficina central
Fuente: Dirección General de Promoción Minera
7. CONCLUSIONES
En relación a lo que sucede en nuestros
días en la industria minera, tiene una amplia gama de visiones y
ópticas. Pero mencionaremos dos de ellas; una desde el acercamiento sobre
la condición de la mujer minera y sus recursos. Y la otra, el sistema de
género que busca ser un mecanismo de poder y control para establecer la
forma de inserción de las mujeres en el desarrollo basado en la equidad.
En los países latinoamericanos el denominado índice de feminidad
de la pobreza, alcanza valores superiores a 100 entre la población de
mujeres que se encuentran entre los 20 y 59 años, es decir, las mujeres
jóvenes y las mujeres con capacidad laboral plena, son afectadas por los
problemas de pobreza que las alejan y limitan en su desarrollo humano. Lo cual
las hace más vulnerables para tomar cualquier trabajo de riesgo y
explotación.
Ellas son movidas por los mismos fenómenos que
mueven a sus padres, hermanos, maridos, hijos o compañeros pero
agravados, porque en ellas se acentúa su vulnerabilidad. La precaria
estructura comercial de los productos agrícolas y la pauperización
del campo hace que se feminice la pobreza rural de una manera más
crítica que la de los hombres. La actividad minera es una razón
por la cual encuentran una opción para completar el ingreso
familiar.
La mujer que decide trabajar en el mundo minero encuentra
muchos más obstáculos que los que enfrentan sus pares masculinos.
Entre otros, se pueden mencionar que su carga diaria de trabajo se incrementa de
manera notable, usualmente a más de dos jornadas diarias, porque su
jornada doméstica no es compartida con el hombre. Con frecuencia, las
normas mineras no incluyen un trato diferenciado, según las diferencias
biológicas por género. Además, en algunos casos, ellas
poseen niveles de escolaridad inferiores a los de los hombres. Por ende, las
mujeres son más vulnerables a las dificultades implícitas en el
manejo burocrático de trámites para la consecución de
títulos y derechos mineros, créditos y licencias
ambientales.
Asimismo, en México las mujeres no son vistas como
sujetos receptores de formación y entrenamiento en áreas
técnicas tales como mecánica, electricidad, hidráulica,
operación de máquinas y equipos, etc. Es muy diciente el hecho
de que algunas madres mineras, al ser las únicas responsables del cuidado
de sus hijos, se vean obligadas a llevarlos a las minas. Los niños que
trabajan en la minería no sólo se exponen a riesgos inmediatos
sino también ponen en peligro su educación y su desarrollo
físico y socioeconómico en el largo plazo.
Según la
OIT, las principales características de las mujeres mineras son:
“falta de acceso al crédito y a la financiación; menor
conocimiento técnico que sus homólogos masculinos; falta de
representación y apoyo; falta de competencias en materia de
gestión y administración, agravadas por un analfabetismo
generalizado; percepciones socioeconómicas con respecto a su
condición; y tradiciones culturales que imponen una pesada carga familiar
y limitan su independencia y movilidad. Los condicionamientos legales,
administrativos y financieros impiden la participación de las mujeres en
la minería en pequeña escala o la limitan al papel de asalariado
básico, con frecuencia en la minería no estructurada e
ilegal.
Esta situación ocurre en México, aunada a la
carencia de representación sindical auténtica, debido a la
desnaturalización del movimiento sindical mexicano, contrario al
interés general de los trabajadores (as).
Es tarea de los
trabajadores (as) la defensa de los recursos naturales minerales y el uso
racional de los mismos mediante una orientación hacia la
satisfacción de necesidades humanas. La explotación minera solo
con fines de arrasamiento y saqueo debe impedirse. La lucha contra las
transnacionales mineras está en la agenda de los sindicalistas, hombres y
mujeres, y de las poblaciones en general. La minería debe realizarse
solamente por la industria nacionalizada, lo que supone rescatar el derecho de
las naciones sobre sus recursos naturales minerales e industrias
relacionadas.
La explotación minera no desaparece en sí a
la pobreza y a las necesidades como se anhela y hacer creer; sirve sobre todo
para el enriquecimiento cada vez más caudaloso de las multinacionales, y
en forma más específica de sus contados accionistas. Los recursos
naturales deben ser manejados por las naciones en forma soberana, no por las
grandes corporaciones especializadas en la depredación planetaria.
8. En SINTESIS:
1. México es uno de los 10 países productores de Oro a nivel
mundial. Por concepto de derechos, en 2012 las corporaciones pagaron 5.91 pesos
por hectárea concesionada. Después de 15 años pagan 129.24
pesos. En 2012, las mineras produjeron 96.5 toneladas de Oro con un valor de 68
mil 254 millones de pesos, con ganancias por 68 mil 354 millones de pesos en
2012. México se ubica entre los primeros 10 países productores de
oro a nivel mundial El saqueo es inaudito, el gobierno carece de controles solo
sabe de corrupción y entreguismo.
2. Las concesiones mineras son un regalo del gobierno mexicano en turno al
capital extranjero, principalmente, canadiense. Lo que las mineras pagan por el
“derecho” al saqueo indiscriminado es casi nada. De hecho las
corporaciones pagan al gobierno unas cuantas monedas en desuso. A cambio,
obtienen toneladas de minerales procesados que comercializan a precios
exorbitantes en el mercado internacional.
3. Lo que más interesa a las corporaciones son los minerales
preciosos, como el Oro y la Plata. Para lixiviar al primero, utilizan compuestos
de cianuro y enormes cantidades de agua que contaminan, al tiempo que arrasan
con el medio ambiente al remover millones de toneladas de mineral. ¿Hay
algún pago por este daño ambiental? Ninguno. Por el
contrario, la concesión les otorga a las compañías el
derecho a desmontar los terrenos y despoblar a las comunidades. Lo primero que
hacen es corromperlas para que las tierras les sean rentadas a plazos muy largos
y en condiciones miserables. Si hay oposición organizan la
represión, contando con la fuerza pública puesta por el gobierno a
su servicio. Después, se dedican a sacar todo lo que pueden.
4. En los últimos años, las transnacionales han sacado
más Oro que durante 300 años de coloniaje español. Para
seguir haciéndolo, el gobierno reclama el 0.5% de las ganancias. No es
nada. Pero ni así pagarán. Es muy probable que ni impuestos
paguen. NADIE sabe bien cómo está la situación, ni el
gobierno.
5. Actualmente, hay más de 27 mil concesiones mineras por todo el
país. Pero el gobierno no tiene control de nada. La propia
Auditoría Superior de la Federación de la Cámara de
Diputados es incapaz de supervisar a las mineras, no cuenta siquiera con
personal o inspectores, el gobierno tampoco. Lo único que este sabe hacer
es otorgar concesiones discrecionales. Con estas, las corporaciones proceden a
despojar a las comunidades y a saquear a la nación.
6. En tales condiciones, la minería es una actividad innecesaria,
inaceptable y repudiable. Lo único que ocasiona son daños a la
población, a la salud y al medio ambiente, aparte de los
económicos y sociales. ¿Qué beneficios hay para la sociedad?
Prácticamente ninguno. El empleo que crean las mineras es poco y
precario, sin seguridad social y sin medicina del trabajo. Desarrollo social no
existe y crecimiento económico menos.
7. ¿Qué hacer? Nacionalizar a la minería y la
metalurgia, con base en un plan nacional en la materia y una política
independiente al respecto. Eso no lo hará el gobierno sino el pueblo
organizado y en lucha.
8. La medida no se puede ejecutar en lo inmediato, por supuesto, antes
deben construirse la organización social y desarrollar la lucha. Nada es
gratuito ni espontáneo. Tampoco es fácil. Pero es necesario y no
es opcional. Por ahora se ve muy difícil pero si no cambiamos la
situación pronto será peor. El capitalismo siempre deja tras de
sí un desastre. Es el caso de la minería.
Referencias
• Alvarado, Ana María (2009), Replanteando la Industria
Extractiva, Universidad de York, Toronto, 2009.
• An Mbendi Profile for Mexico (Mining in Mexico). MBendi.
www.mbendi.co.za/indy/ming/am/mx/p0005.htm
• Banco de Datos Digital (GEOINFO), 2010.
• Boletín de la Sociedad Geológica Mexicana,
2008.
• Boletín Informativo, REMA (Red Nacional de Afectados por la
Minería), 2011.
• elektron, 11 (327) 1-16, Boletín del Frente de Trabajadores
de la Energía, de México, 2011.
• Informe de la Minería Mexicana, Informe Institucional de la
Secretaría de Economía, 2010.
• Oancea, Dan, "State of the Industry Review", Mining in Mexico.
www.infomine.com/countries/soir/mexico
• Organización de las Naciones Unidas, CEPAL, Serie Recursos
Naturales e Infraestructura No. 144.
• Reyes, Alfonso, ed. Secretaría de Economía.
http://www.economia.gob.mx/?p=2
• Revisión de Algunas Tipologías de Depósitos
Minerales en México, Tomo LVIII, No. 1, p. 161-181, 2006.
• Servicio Geológico Mexicano, Cartografía
geológica minera, geoquímica y geofísica en escalas,
2008.
• Tabulados Básicos, II Conteo de Población y Vivienda,
2010.
* Este documento fue preparado
por Luz del Alba Belasko, documentalista con amplia experiencia en el
campo de la etnología y la investigación. Se ha dedicado a la
fotografía y al periodismo con un compromiso social y
antisistémico a lo largo de los últimos veinte años de
carrera profesional. Ha expuesto alrededor del mundo: España,
Canadá, Francia, Cuba, Sudamérica, África, India y
México. Ref: 2014, elektron 14 (100) 1-12, 15 marzo 2014,
FTE de México.
Esta página es construida por trabajadores del sector energía.
La información contenida puede citarse total o parcialmente, mencionando la fuente.
|
|