En 2012, el costo promedio de las gasolinas vendidas por Pemex fue de 7.91 pesos por litro pero el precio al público fue mayor. El costo de las gasolinas importadas fue de 10.83 pesos por litro. El costo promedio del petróleo de exportación fue de 8.35 pesos por litro. Es más caro importar gasolinas que exportar petróleo crudo. El gobierno propone seguir importando petrolíferos. El FTE propone construir 3 nuevas refinerías y producir las gasolinas internamente.

A partir del 2 de noviembre, la gasolina Magna subió a 12.02 pesos por litro, la Premium a 12.58 y el diesel a 12.38 pesos. Durante 2013, el aumento acumulado ha sido de 1.21 pesos por litro.

De acuerdo a la estructura de la demanda de combustibles para el transporte, en 2012, el 65.5% correspondió a las gasolinas automotrices, el 27.5% al diesel, el 4.8% a turbosina y el 2.2% a otros.

En 2012, el precio promedio al público fue de 10.286 pesos por litro para la gasolina Pemex Magna y de 10.937 pesos por litro para la gasolina Pemex Premium.

Al tercer trimestre de 2013 el gobierno, vía la secretaría de hacienda, informó que los consumidores seguirán recibiendo un apoyo a través de los< precios administrados de las gasolinas y el diesel, que asciende a 84 mil millones de pesos. Se indica que ese apoyo beneficia principalmente a los hogares de mayores ingresos.

En 2012, la propia secretaría informó que los subsidios ascendieron ese año a 222 mil 757 millones de pesos (7 mil 122 millones de dólares).

En 2012, Pemex vendió 803 mil 700 barriles diarios de gasolinas con un valor de 369 mil 165.1 millones de pesos. Eso significa que el costo promedio de gasolina fue de 7.91 pesos por litro.

Del total de la demanda interna, la elaboración de gasolinas por parte de Pemex fue de 418 mil 100 barriles diarios, el resto correspondió a las importaciones.

Durante 2012, se exportaron 1 millón 255 mil 600 barriles diarios de petróleo crudo, con un valor de 46 mil 788.1 millones de dólares (608 mil 713.181 millones de pesos a una cotización promedio peso-dólar de 13.01 en ese año). El precio promedio del barril de petróleo crudo de exportación fue de 101.81 dólares por barril. Consecuentemente, el costo del litro de petróleo crudo de exportación fue de 8.35 pesos por litro.

En 2012 se importaron en promedio 395 mil barriles diarios de gasolinas por un valor de 19 mil 107.5 millones de dólares (248 mil 588.575 millones de pesos). De manera que el costo del litro de gasolina fue de 10.83 pesos por litro.

Los datos anteriores corresponden a los indicados en la Memoria de Labores 2012, y en el Anuario Estadístico 2013, ambos de Pemex.

Si la demanda interna total de gasolinas en 2012 fue de 803 mil 700 barriles diarios y la elaboración propia de Pemex de 418 mil 100, eso indica que se produjo nacionalmente solo la mitad, el resto se importó. (Nota: las cifras reportadas por Pemex tienen imprecisiones lo que dificulta un mejor cálculo).

Las ventas internas se reportan incluyendo la producción propia y las importaciones, resultando un costo de 7.91 pesos por litro. Si se consideran solamente las importaciones, el costo es de 10.83 pesos por litro, es decir, la gasolina de importación es más cara que la producida por Pemex. Comparada con el precio de exportación de petróleo crudo, es decir, 8.35 pesos por litro, la gasolina importada es más cara que el petróleo crudo de exportación.

Lo anterior muestra que importar gasolinas ni siquiera es negocio. Una gran proporción de las divisas obtenidas por la exportación de crudo se reciclan inmediatamente con la importación de gasolinas. Lo peor es que las gasolinas de importación son más caras que el crudo de exportación. Eso es grave, habida cuenta que el petróleo se exporta crudo y de cada barril se pueden obtener multitud de productos con valor agregado, lo que ocurre en los Estados Unidos no en México.

Los datos también indican que la mitad del consumo nacional de gasolinas se produce en las 6 refinerías de Pemex actualmente en operación, a pesar de las vicisitudes e inconvenientes por tratarse de plantas con más de 30 años de trabajo industrial.

En virtud de la situación actual, con un nivel de importación de gasolinas de 395 mil barriles diarios, se requieren 3 refinerías nuevas, adicionales a las existentes, cada una con una capacidad de producción de 150 mil barriles diarios de gasolinas, para satisfacer la demanda interna. La Política Energética Independiente propone que sean refinerías energéticas, esto es, para producir gasolinas y cogenerar energía eléctrica al mismo tiempo.

El gobierno de Peña Nieto propone lo contrario: no construir ninguna refinería por parte de Pemex, sino seguir importando gasolinas caras para revenderlas más caras, como parte de una política antinacional lesiva a la nación. Aún así, siguen haciendo falta nuevas refinerías. Si ese es el caso, Peña pretende que sean privadas a cargo de transnacionales. Eso sería una vez aprobada la reforma energética que desnacionalizaría a Pemex y a la CFE.

¿Con ello bajarían los precios de las gasolinas? En un principio, Peña dijo que sí, después dio marcha atrás y ahora dice que no. ¿Entonces, para qué privatizar la refinación? Obviamente para favorecer la acumulación privada de capital y el aumento de la tasa de ganancia privada.

¿Cómo combatir los gasolinazos que son efectos, con apagones de la electricidad? Eso es ridículo. Hay que ir a las causas. La privatización solo se puede combatir impidiéndola, revirtiendo la privatización furtiva en marcha desde 1992-1995 y evitando la desnacionalización energética que propone Peña Nieto. ¿Cómo? Construyendo organización social en todo el país y movilizándonos con dinámica propia e independencia de clase. No basta decirlo, se necesita decidirse y hacerlo.


Ref: 2013, elektron 13 (399) 1-2, 5 noviembre 2013, FTE de México.