En la bahía, cerca de la central nuclear de Fukushima, se detectaron altos niveles de radiatividad por Tritio. Una fuga de 300 toneladas de agua se habría filtrado al Océano Pacífico. La empresa TEPCO no vigiló correctamente el almacenamiento de agua.

Tanques de almacenamiento de agua contaminada en Fukushima

Los índices de Tritio en el agua de la bahía cerca de la planta nuclear de Fukushima son los más altos en la historia de las mediciones, de acuerdo a un informe de TEPCO, citado por el diario japonés ‘Nikkei’ (Kyodo, RT, en Cubadebate, 20 agosto 2013).

Según el informe, las mediaciones detectaron un nivel de 4,700 Becquerels (Bq) de Tritio por litro en una muestra de agua de mar tomada de la bahía. La medición anterior mostró niveles de 3,800 Bq por litro. `‘Nikkei’ reportó que la concentración de Tritio en el agua del puerto ha venido aumentando constantemente desde mayo.

La Autoridad Reguladora Nuclear (NRA) de Japón estimó que la reciente detección de una fuga de agua contaminada empeorará la clasificación del proceso por eliminar el peligro en la accidentada central nuclear de Fukushima Uno (Kyodo, en Cubadebate, 21 agosto 2013).

En opinión de ese organismo, se analiza elevar a tres de un máximo de ocho, el nivel del problema, a causa del torrente de 300 toneladas de líquido radiactivo filtrado desde un tanque de almacenamiento.

Si se clasifica en ese rasero, el accidente alcanza la categoría de grave, según la escala internacional establecida para esos casos y cuyo máximo es ocho.

El operador de la planta nuclear japonesa de Fukushima no vigiló correctamente el almacenamiento del agua contaminada que se ha filtrado y son una fuente de preocupación internacional, dijo el regulador nuclear del país (Reuters, en Cubadebate, 23 agosto 2013)

Tokyo Electric Power Co. (TEPCO), también fracasó en su intento por mantener los registros de las inspecciones de los tanques, dijo Toyoshi Fuketa, miembro de la NRA, en una conferencia de prensa en la localidad de Hirono, tras una visita a la planta de Fukushima Daiichi.

La crisis nuclear japonesa aumentó hasta su peor nivel desde que un gran terremoto y un posterior tsunami azotase la planta hace más de dos años, cuando TEPCO anunció que había filtraciones en un tanque de agua altamente contaminada. Fue la quinta y más grave filtración del mismo tipo de tanque.

El OIEA de Viena dijo que seguía la situación en Fukushima “seriamente” y estaba listo para ayudar si se lo piden, mientras que China dijo estar “conmocionada” al oír que todavía había agua filtrándose e instó a que Japón proporcione información “de forma puntual, minuciosa y precisa”.

La filtración de 300 toneladas de agua contaminada de la central accidentada de Fukushima, en Japón, se debió a un enorme depósito desplazado a causa del hundimiento de una losa, como en otras dos reservas, que serán vaciadas por precaución, explicó este la compañía TEPCO (AFP; en La Jornada en internet, 24 agosto 2013).

Si bien TEPCO no estableció totalmente una relación causal entre el desplazamiento del depósito y la filtración de agua, el operador de la central nuclear quiere limitar los riesgos de nuevos vertidos.

El depósito cilíndrico afectado, de 11 metros de altura, fue instalado en junio de 2011 en otro emplazamiento de la central.

Pero un mes después, en julio de ese año, una losa de hormigón se hundió varios milímetros. TEPCO decidió desplazar esta reserva, junto a otras dos situadas al lado, en septiembre de 2011.

Los otros dos depósitos en cuestión y su nuevo emplazamiento fueron identificados.

"Con el objetivo de minimizar los riesgos de fuga, vamos a efectuar desde mañana los preparativos para trasvasar el agua que contienen a otras reservas", indicó la compañía.

La filtración de 300 toneladas de agua altamente contaminada de un primer depósito fue descubierta el lunes (19 de agosto), pero aparentemente esta existía desde hacía varias semanas e incluso meses.

Esa agua, vertida sobre el suelo, se habría filtrado parcialmente hasta el océano Pacífico, situado a 500 metros.

El OIEA calificó de "grave" este incidente, que clasificó en el nivel 3 de la escala internacional de eventos nucleares (INES).

TEPCO aseguró haber controlado unos 300 depósitos más del mismo tipo sin hallar otras fugas. Dos puntos de muy fuerte radiactividad fueron hallados y por el momento se desconocen sus causas.

El Tritio es un isótopo radiativo del Hidrógeno, que emite radiación beta (electrones) con una vida media física de 12.3 años. Esto es, se trata de un radinúclido de vida media corta, cuyo órgano específico es el cuerpo entero. El principal riesgo a la salud se debe a la ingestión o inhalación.

En el presente caso lo que ocurre es la contaminación por alta concentración radiativa vertida innecesariamente al mar. Siguen de manifiesto las contradicciones y fallas del operador (TEPCO, la empresa, no los trabajadores).

La central estaría inundada y contaminada. El agua para el enfriamiento de los reactores se ha vuelto un problema. No existe supervisión adecuada para su almacenamiento. Hay negligencia. No extraña porque así ha sido desde el principio de los accidentes nucleares severos en 2011. El operador (TEPCO) ha sido incapaz de reaccionar correctamente.


Ref: 2013, elektron 13 (277) 1-2, 26 agosto 2013, FTE de México.