energía, periódico del Frente de Trabajadores de la Energía

Valentín Pacho, secretario general adjunto de la FSM , reconocido luchador por los derechos de los trabajadores, perseguido por distintas dictaduras del continente, ex secretario general de la CGTP (Perú), senador de la Republica por Izquierda Unida, y miembro del Partido Comunista Peruano.

Visitó Toluca este Mayo en el que se recuerdan los100 años de la celebración del 1 de Mayo en México, con el objetivo de estrechar lazos de mayor amistad con los trabajadores del movimiento sindical y en especial con los compañeros del Frente de Trabajadores de la Energía en México. Fue una oportunidad para un encuentro periodístico y cultural, en el cual, el compañero Pacho puso de relieve “mi saludo muy fraterno a este grupo de intelectuales y periodistas del Estado de México”.

Por tal motivo se abrió un programa político-cultural en la casa Balum Canan, siendo el XV regidor del H. Ayuntamiento de Toluca, Mario Medina, quien diera la bienvenida a uno de los máximos líderes sindicales a nivel mundial.

Con su canto México-Peruano el dúo “Corazón Caliente” ofreció unas piezas de gran valor artístico, se exhibió el video-documental " 100 años del 1 de Mayo en México", en una producción de Cazaimagen, y la palabra poética del argentino Pedro Salvador Ale, dando al programa un relieve de representantes de gran talento en tierras mexiquenses.

El Dr. David Bahena nos dio un panorama del movimiento sindical a lo largo de estos 100 años y presentó al dirigente del FSM Valentín Pacho.

Valentín Pacho sostuvo: “América Latina vive una nueva situación, ha ido rompiendo y superando aquella etapa dolorosa que han sufrido nuestros pueblos, como por ejemplo, las dictaduras sanguinarias que han tenido que soportar varios países de nuestra América, de las cuales casi nadie se ha salvado. Detrás de esas dictaduras sanguinarias siempre estuvo la mano del imperialismo. Hoy estamos saliendo de etapas también muy duras, como ha sido la dictadura del neoliberalismo. Gobiernos, que supuestamente han sido elegidos democráticamente, aplicaron las medidas más nefastas contra los trabajadores y en especial contra nuestros pueblos marginados por el sistema. Las consecuencias de estas políticas neoliberales han sido tan duras como las dictaduras militares porque significa, con el nombre de flexibilización, el cercenamiento de derechos de la clase trabajadora, las subastas de las propiedades de las naciones y de nuestros recursos naturales que fueron entregadas a las transnacionales. Esto ha sido otro golpe cuyas consecuencias también han tenido que soportar los trabajadores y los pueblos, pero, como la injusticia no puede ser eterna, sucedió en estos últimos años la rebelión de nuestros pueblos, la reacción casi unitaria de los trabajadores, del movimiento sindical, exigiendo cambios, y eso se percibe ya claramente con la elección de gobiernos no comunistas, no socialistas, aunque sí son gobiernos progresistas que han iniciado cambios y que por lo menos han empezado a escuchar las demandas, el clamor mas importante de los trabajadores y de los pueblos. Esto es lo que se vive en varios pueblos en América latina.

En tal panorama, en el cual la clase trabajadora no puede ser imparcial, Valentín Pacho subrayó el papel que corresponde asumir:

“Yo pienso que los trabajadores primero tienen que fortalecer su unidad, pero la unidad para luchar no solamente por los intereses inmediatos de los trabajadores y recuperar los derechos cercenados, sino ponerse firmes frente a esta crisis de un capitalismo que ya no da más. El movimiento sindical tiene que jugar un papel por los cambios hacia la transformación de la sociedad, con los cambios como alternativa al sistema capitalista, es decir, en el movimiento sindical no cabe el apoliticismo, ese es un contrabando que hicieron muchas corrientes de un sindicalismo reformista que hizo que los trabajadores solo se encuadren en sus aspectos reivindicativos gremiales. Para ellos, la política es no meterse en cuestiones políticas. Así como los gobiernos aplican políticas, hoy en día los sindicatos también deben luchar con una política a favor de los cambios y para profundizar esos procesos que muchos países han iniciado. Los sindicatos no pueden quedar al margen, tienen que luchar por la profundización con decisión. Creo que la responsabilidad del movimiento sindical es hoy muy alta, yo soy dirigente de la Federación Sindical Mundial, y luchamos por esos dos objetivos. Por eso es que nuestras organizaciones afiliadas luchan porque la crisis no la paguen los trabajadores, que la paguen los culpables, pero también luchamos por cambios hacia la transformación de la sociedad. Por tanto, la FSM apoya plenamente la revolución cubana, el proceso bolivariano que se vive en Venezuela, y aquellos cambios que muchos países y gobiernos progresistas están dando. El movimiento sindical debe ser claro en señalar que buscamos una nueva sociedad”.

Preguntamos a Valentín Pacho qué puede mostrar el movimiento sindical y social de América latina a los trabajadores de Europa, hoy duramente castigados por las políticas de ajuste, y esto nos respondió:

“Estas ultimas crisis, una detrás de otra, crisis que han surgido en el mismo corazón imperialista, ha repercutido fuertemente, todavía no salimos de ellas, están afectando a muchos continentes y lo que no se pensaba es que iba a tocar a la Unión Europea, donde la situación que afrontan los trabajadores es muy dura. Sin embargo, vemos que en Europa, donde los sindicatos más importantes no son afiliados a la FSM, sino afiliados a la otra internacional, no han respondido a la altura de la situación. Nosotros no compartimos eso del `diálogo´ con el enemigo en lugar de la confrontación, el imperialismo no dialoga con nosotros antes de aplicar sus medidas, ellos las aplican con toda su fuerza. Nosotros necesitamos organizar a las masas en acción, organizar un sindicalismo en lucha para entonces dialogar. Usted no puede dialogar sin un ejercito detrás cuando el enemigo esta con toda su artillería, con todo su arsenal. En esas condiciones, no caben diálogos, el sindicalismo tiene que organizar acciones de lucha. Sin embargo nos parece que son muy pocas las organizaciones sindicales que han enfrentado los ajustes en Europa y, los que mas se resaltan son los sindicatos de Grecia, que son afiliados a la FSM y han enfrentado con todas sus fuerzas las recetas neoliberales para no ver cercenados sus derechos. Lo de Grecia se repite en España, Italia, esto sigue y va a seguir, por eso el movimiento sindical en América latina, a pesar de sus deficiencias, es un movimiento que exige cambios. Esa es la diferencia, no solo lucha por sus reivindicaciones, pelea por cambios, por una sociedad mejor. Es un ejemplo. Ojala que este proceso se acelere en América latina y en esa dirección veo muy interesante la proyección que esta expresando en sus acciones y pronunciamientos, por ejemplo, la CTA de Argentina; es un caso muy especial, diferente a otras centrales, esto se percibe. Ojala esa actitud se siga fortaleciendo”.

El dirigente pone en un lugar destacado la lucha de ideas y la conciencia de clase. Señaló:

“Para la FSM el punto central es recuperar la conciencia de clase. En varios sectores se ha ido perdiendo dada la acción e ideología de dominación que implementaron las políticas neoliberales, que no solo afectó a pensadores progresistas sino a muchos los sectores que no pudieron responder a la avalancha y las ofensivas ideológicas de las políticas neoliberales o de sus ideólogos. También afectó al movimiento sindical, a la militancia sindical cuya despolitización es nefasta. Por eso, debe entrarse en un proceso intenso de formación política para despertar la conciencia de clase y recuperar fuerzas”.

En ese despliegue de formación, Valentín Pacho da gran importancia a la comunicación:

“Las cuestión de las comunicaciones es muy importante, es el arma mas poderosa que han tenido las políticas neoliberales, ó sea, han sido la prensa, los medios de comunicación controlados por el poder económico y político, lamentablemente, los que direccionan la ofensiva neoliberal. En este contexto, la prensa del movimiento sindical ha entrado en una lucha de David contra Goliat. Pero la clase trabajadora debe difundir, leer y estudiar, y la dirigencia sindical debe propiciar esto, fortalecer sus mecanismos de comunicación. Por supuesto, no tenemos los recursos para una prensa millonaria, pero debemos actuar con audacia e inteligencia para encontrar las maneras eficaces para ser leídos y escuchados por todos.

Lo otro es la educación, la formación política, las escuelas, tenemos que propiciar el apoyo a los sindicatos que tengan esa convicción. La derecha tiene los mejores centros de educación, las mejores universidades privadas donde forman sus cuadros para dominar, nosotros, los trabajadores, si queremos cambios, tenemos que tener también nuestro centro, no serán sofisticados, no serán millonarios, pero tendrán una proyección y una ideología muy claras.

Fuente: www.papelrevolucion.org

Fuente: 2013, elektron 13 (130) 1-4, 10 mayo 2013.