La administración de Petróleos Mexicanos (Pemex) propone Contratos de Servicios Múltiples a empresas transnacionales. Esos contratos son violatorios de la Constitución del país. En esta materia no puede haber concesiones ni contratos. El derecho de la Nación es inalienable e imprescriptible. ¡Alto a la Privatización Furtiva de la Industria Energética Nacionalizada!

Al Senado de la República, la administración patronal de Petróleos Mexicanos (Pemex) le negó la información, después le informó parcialmente sin incluir los 40 anexos. A las 75 empresas privadas más grandes del mundo, en cambio, se les organizó el 20 y 21 de junio de 2002 una Conferencia Internacional “El Sector del Gas en México” para ofrecerles atractivos contratos asegurándoles todo tipo de garantías legales, aún en contra de los poderes legislativo y judicial.

Prepotencia y entreguismo del gobierno foxista. En el evento, hizo a un lado a diputados y senadores, ni siquiera se les invitó. Pero, Fox será derrotado, no se puede gobernar a los pueblos con base en la mentira sistemática y violentando cotidianamente la legalidad.

Mediante los Contratos de Servicio Múltiples (CSM), Pemex pretende que las empresas privadas transnacionales realicen actividades de exploración, desarrollo y producción de hidrocarburos, a corto y mediano plazos. ¡Eso, sencillamente, no es posible!

El artículo 27 constitucional, párrafo cuarto, es suficientemente claro y categórico. En materia de hidrocarburos (sólidos, líquidos y gaseosos), la propiedad corresponde a la Nación y el Estado llevará a cabo dichas actividades de manera exclusiva. En esa materia, dice el 27, no se otorgarán concesiones ni contratos. El derecho de la Nación sobre su patrimonio y recursos, es inalienable e imprescriptible.

En ese artículo se expresa justamente la conquista histórica del pueblo de México resultado de la expropiación de la industria petrolera en 1938. Fox, ahistóricamente, sin escrúpulo político alguno, desafía a la Nación.

¡País de cínicos! decía, en referencia a ese tipo de gobernantes demagogos y corruptos, nuestro compañero y amigo, el ingeniero Heberto Castillo cuando en 1978, el PMT, los nucleares de Salazar y los petroleros del Movimiento Petrolero Independiente Lázaro Cárdenas, participamos juntos en la lucha del Frente Nacional en Defensa de los Recursos Naturales, precisamente en contra de la política petrolera oficial.

El foxismo dijo a los empresarios que “esos contratos serán implantados de acuerdo con el marco constitucional y jurídico vigente en México” ¡Eso no es cierto, es vil mentira!

Si los legisladores aprobaran los CSM se estaría creando la ilegal figura de productor independiente de hidrocarburos, análoga a la de los productores independientes de electricidad.

''Reformar la ley reglamentaria del artículo 27 constitucional en el ramo del petróleo para introducir la figura de los CSM, como sugiere Pemex, sería equivalente a hacer en el petróleo lo que se hizo en electricidad en diciembre de 1992'', declaró V. Rodríguez Padilla, asesor del Senado (Rodríguez I, en La Jornada 140602)

¡Estamos totalmente de acuerdo! ¡Se trata de la Privatización Petrolera Furtiva, igual que la Privatización Eléctrica Furtiva, realizada en la práctica, al margen de la ley! Ojalá esta experiencia sirva para corregir las iniciativas de reformas a la legislación eléctrica secundaria presentadas por PRI y PRD, y asesores.

Según se indicó en los medios, las actividades a cargo del contratista serán, entre otras: realización, procesamiento e interpretación de estudios sismológicos; modelado geológico; ingeniería de yacimientos y de producción; planes de desarrollo, perforación, diseño y construcción de instalaciones; gestión de permisos; estudios ambientales; mantenimiento de instalaciones y pozos; operación de campos, y construcción de plantas de tratamiento de gas.

El contratista financiará toda la inversión y los gastos de operación, y está obligado a realizar un programa mínimo de trabajo fijado por Pemex, durante el periodo inicial de desarrollo. Además, gozará de libertad operativa para realizar dicho programa mínimo de acuerdo con su criterio y juicio propios.

El contratista, tendrá, entre otros derechos, los siguientes: libre acceso de un lado a otro del área de contrato, así como a las instalaciones de producción existentes; uso de cualquier arena, grava, terreno y agua del dominio público; contratación de personal nacional y extranjero; importación de cualquier bien, servicio o equipo; financiamiento de todas las operaciones en la manera que lo decida, etc.

En el ámbito laboral, la empresa contratista recibirá del sindicato petrolero (STPRM) una lista de trabajadores que considere aptos para realizar las obras, pero sin la obligación de contratarlos. Además, los contratos tendrán cláusulas de ''confidencialidad''

Por supuesto, es previsible que los trabajadores no los contratará directamente el sindicato petrolero pero sí los afiliará obligatoriamente, incluso el STPRM firmaría un contrato colectivo de trabajo con las empresas privadas. Ese contrato también sería fraudulento como ahora ocurre en el caso del SUTERM con las empresas eléctricas privadas. ¡El charrismo sindical es parte del negocio privatizador!

En los términos de los CSM, las transnacionales podrán explotar el gas natural no asociado hasta por 20 años. Estos contratos se llevarían acabo a través de Pemex Exploración y Producción (PEP).

De acuerdo a la información de Pemex, la celebración de los contratos de servicios múltiples se realizará mediante rondas, cada una de las cuales ofertará una cierta cantidad de bloques. Las características de la primera ronda de los CSM son las siguientes: están a concurso ocho bloques en la Cuenca de Burgos, localizada en los estados de Tamaulipas y Nuevo León. La mayoría de los bloques colinda con Estados Unidos y su superficie varía entre los 600 y mil 700 kilómetros cuadrados. (Rodríguez I, en La Jornada 140602).

“Los bloques cuentan con reservas probadas y certificadas internacionalmente; en consecuencia, el riesgo geológico es muy bajo y la posibilidad de que el contratista pierda su dinero es muy remota”

“Las empresas que participen en los CSM cobrarán 3.31 dólares por la extracción de cada millar de pies cúbicos de gas en la Cuenca de Burgos (al norte del país), mientras que si la misma extracción es realizada por Pemex el costo es inferior a 1.5 dólares por millar de pies cúbicos, declaró Rodríguez Padilla, también investigador universitario. Acotó que el cálculo consta en un documento elaborado por Luis Ramírez Corso, director general de PEP, en un documento enviado al Senado el 23 de abril pasado” (González R, Lomas E, en La Jornada 150602).

“El especialista apuntó que para desarrollar la misma capacidad de producción unitaria en Burgos, Pemex requiere de alrededor de 12 mil dólares por mil pies cúbicos de gas natural al día. Bajo los CSM, las compañías extranjeras que participen en la explotación cobrarán 15 mil dólares”, según la nota.

Lo que se propone con los CSM es, nada menos, que una industria petrolera paralela, igual que en materia eléctrica. Así como los privatizadores ya hablan de la nueva Industria Eléctrica Mejicana, seguramente esperan que pronto que exista Petróleos Mejicanos (Pemex, en realidad PeUSA).

Dos senadores del PRI, Salvador Rocha Díaz y Natividad González Parás, asumiendo la política del PAN, propusieron una iniciativa de reformas a la Ley Reglamentaria del Artículo 27 Constitucional en el Ramo del Petróleo. Esto ha suscitado malestar entre el propio PRI. Legisladores del PRI, PRD y PVEM se han opuesto señalando que aceptar dicha propuesta sería el primer paso para la privatización de Pemex. Podría establecerse una controversia ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación y, dichos contratos, podrían declararse anticonstitucionales.

Fox pone en riesgo a la Nación al ofrecer con mentiras dichos contratos, ha dicho el senador Manuel Bartlett (PRI) indicando que, se quiere privatizar de una manera “tramposa” a los hidrocarburos. Dijo que los senadores analizarán los CSM y, "si encontramos que son inconstitucionales, los frenaremos"

Para Rodríguez Padilla “El proyecto se enmarca dentro del esquema Pidiregas (Proyectos de Infraestructura Productiva de Impacto Diferido en el Registro del Gasto Público), por lo que representan deuda contingente para el Estado. Los CSM no liberan inversión pública, al contrario, la comprometen. Por cada dólar que Pemex obtenga con la venta de gas que le entreguen las empresas transnacionales, 67 centavos serán para pagar la deuda contratada con estas compañías”

“Además, evidencia que la política energética del Poder Ejecutivo es contradictoria: se busca abrir la industria eléctrica con el argumento de que el esquema Pidiregas es insostenible, pero se utiliza dicho esquema para abrir la exploración y producción de hidrocarburos -explica el también miembro de la Mesa Ciudadana de Observación de la Energía y asesor de la Comisión de Puntos Constitucionales del Senado de la República” (Rodríguez I, en La Jornada, 200602).

Los CSM son un pésimo negocio para el país. Rodríguez Padilla estima que “Pemex recibiría 5 centavos por cada dólar que ingrese de la explotación en Burgos”

Para Martens, todo está bien y ofreció a las empresas extranjeras que el gobierno de Fox intercedería en caso de controversias constitucionales. Con gran cinismo se atrevió a ofrecer a los inversionistas extranjeros que no enfrentarán controversias sobre la legalidad de los contratos de servicios múltiples (CSM), y en caso de que ocurran prometió que se solicitará a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) una resolución expedita (Rodríguez I, Gonzalez R, en La Jornada 210602).

Los abogados del gobierno, supuestos especialistas en derecho, señalaron que “si se concede la suspensión y esta controversia se resuelve en un término medio de dos años, los contratistas podrían seguir trabajando”

Francisco Barnés de Castro, subsecretario de Energía y empleado del Banco Mundial, aseveró que para la generación de electricidad en 2000 se requirieron mil millones de pies cúbicos al día y en 2005 se van a necesitar 2 mil millones de pies cúbicos y 4 mil millones en 2010, lo que implica que México tendrá mayor necesidad de gas para la generación de electricidad”

Para el FTE, la propuesta de los CSM es la continuación de la política privatizadora del foxismo. Esta política promueve la privatización eléctrica furtiva, al margen de la Constitución, con plantas eléctricas tipo ciclo combinado a base de gas natural. La mayoría de estas plantas están ubicadas en la frontera norte del país.

Ahora, se propone la privatización de la exploración y explotación del gas natural para abastecer a las plantas eléctricas privadas. Así, el combustible y la generación eléctrica se pondrían en manos de las transnacionales. En su discurso manipulador, los funcionarios de Fox dicen que el gas seguirá siendo de los mexicanos. Eso, sencillamente, no es cierto.

Esta política es fraudulenta en todos sentidos, porque además, las expectativas sobre el gas natural (no asociado) están infladas. La misma Cuenca de Burgos no ha sido lo que se esperaba.

La verdadera producción de gas natural está asociada a la producción de petróleo crudo. Pero la explotación irracional que se ha hecho de este recurso ha llevado a la pérdida, por décadas, de cuantiosos volúmenes de ese gas, que día y noche se queman en la atmósfera. A la fecha, las reservas de gas han disminuido apreciablemente. Según Pemex, apenas habría gas para 29 años pero hay otros cálculos que indican menos.

Lo que pretende el gobierno foxista es la entrega del patrimonio nacional al capital extranjero, a las empresas más fraudulentas y corruptas. El negocio es muy atractivo para Fox, ya que puede enriquecerse ampliamente aprovechando el capital acumulado que no es suyo, sino de la Nación. Para ésta no es negocio pero para Fox y sus Amigos, sí lo es.

Ante esta situación, los legisladores tienen al alcance una magnífica oportunidad para reivindicarse. Deben impedir que se construya una nueva industria petrolera privada, como ocurre ya con la electricidad. En este último caso, la experiencia debe llevarlos, en un acto de mínima coherencia, a modificar sus propuestas legislativas sobre energía eléctrica.

Por ningún motivo se debe aceptar que siga la privatización eléctrica furtiva inconstitucional. Es necesario que, antes de que las comisiones dictaminadoras se pronuncien, el PRI y el PRD revisen sus iniciativas y las corrijan, teniendo en cuenta el dictamen al respecto de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

La política energética privatizadora del foxismo cuenta con el apoyo del charrismo sindical. En la revisión contractual de 2001 entre Pemex y el sindicato petrolero (STPRM) se pactaron condiciones para intensificar la privatización en actividades de exploración, explotación y distribución de gas natural. En su oportunidad denunciamos estos hechos en plena movilización de los petroleros democráticos.

Los trabajadores de la energía rechazamos la privatización energética furtiva en materia de energía eléctrica y de hidrocarburos. El FTE propone una Política Energética Independiente, que tiene como base la integración industrial y la democracia sindical.

Llamamos a los compañeros petroleros a movilizarse en todo el país y, junto con el pueblo mexicano, impedir la privatización petrolera, derrotar al charrismo y defender la soberanía de México en materia de energía.

Mexicanos solidarios con la Revolución Cubana
presentes en la marcha del 12 de junio de 2002 en La Habana
FOTO: www.granma.co.cu