FTE 
MEXICO
 e n e r g i a 
PERIODICO DEL FRENTE DE TRABAJADORES DE LA ENERGIA DE MEXICO
 Vol. 2, No.21         Mayo 1 de 2002

Restablecer Legalidad Constitucional

Es tiempo de corregir, de enderezar el rumbo, restableciendo para beneficio y orgullo del pueblo de México la legalidad constitucional. ¡Basta ya, de subordinar los intereses de México a los planes y designios del Fondo Monetario Internacional, del Banco Mundial, del imperialismo yanqui! ¡Basta ya de que Fox, Castañeda y su partido el PAN se desvivan por cumplir y agradar a su amo Bush ¡Se toparán siempre con la resistencia combativa de los trabajadores mexicanos!.

 

Dos acontecimientos de suma importancia en el terreno Legislativo y Judicial coronan la lucha que el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y el Pueblo Trabajador emprendimos hace un poco más de tres años a través del Frente Nacional de Resistencia Contra la Privatización de la Industria Eléctrica (FNRCPIE). Los hechos nos colocan hoy, en una situación inmejorable para asestarle el golpe definitivo a la pretensión de los gobiernos neoliberales del priísmo y del panismo foxista, para privatizar la industria eléctrica nacional y nos imponen nuevas tareas para restablecer la legalidad constitucional en materia eléctrica, violentada en 1992 con las reformas salinistas a la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica (LSPEE).

El primero ocurrió en el Senado de la República cuando en la sesión del miércoles 23 de abril, las fracciones parlamentarias del Partido Revolucionario Institucional (PRI), del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), en una decisión por demás histórica votaron contra las iniciativas privatizadoras del Partido Acción Nacional (PAN), del Verde Ecologista y la del expresidente priísta Ernesto Zedillo, que entre otras, planteaban modificaciones a los artículos 27 y 28 constitucionales con el fin de establecer un mercado eléctrico, donde se otorgaba a los inversionistas privados la generación, distribución y comercialización de electricidad, permitiendo a los particulares hacer del servicio publico de energía eléctrica un jugoso negocio; las tres iniciativas fueron desechadas por votación mayoritaria.

El segundo se da en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el 25 de abril, cuando ocho de los once magistrados votaron en contra del decreto de reformas al reglamento y a la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica, emitido por Vicente Fox en mayo de 2001, que posibilitaba la generación de energía eléctrica sin limite en la capacidad instalada a los inversionistas privados en cogeneración y autoabastecimiento, permitiéndoles generar por encima de sus necesidades de auto abastecimiento, para vender sus “excedentes” a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), “legalizando” así, su participación en el negocio de mercado eléctrico soñado por los gobiernos privatizadores.

La revocación que anuló el decreto presidencial, restablece en parte el mandato constitucional que garantiza un Servicio Público integral otorgado exclusivamente por el estado, por ser éste, el energético, un sector estratégico para la nación.

Estos acontecimientos no hubieran sido posibles, sin la lucha tenaz y la movilización decidida del pueblo de México, principalmente de los trabajadores electricistas del SME, de los trabajadores electricistas democráticos del SUTERM, de los trabajadores Nucleares democráticos, de las organizaciones políticas, sindicales, religiosas, urbano populares, de militantes y dirigentes destacados de los partidos políticos, intelectuales no funcionales, investigadores, artistas y civiles sin partido representados en el FNRCPIE.

Razones hay, para sentirse bien, sin embargo no podemos sentarnos a festejar cuando tenemos frente a nosotros y dentro de nuestras respectivas zonas de trabajo, cientos de permisos privados para construir plantas de generación eléctrica otorgados por la privatizadora Comisión Reguladora de Energía (CRE), que pesan sobre nosotros desde la reforma salinista de 92, que modifico anticonstitucionalmente el concepto de Servicio Publico y que hoy representa un 33 % de la generación eléctrica nacional en manos privadas.

No podemos festejar, cuando las iniciativas de Reforma Eléctrica de las fracciones parlamentarias del PRI y del PRD, ¾(a pesar de su afán por restablecer la Legalidad Constitucional que con su histórico voto en contra de los privatizadores nos brindaron a todos los mexicanos)¾ dejan sin embargo intactas, en ambas iniciativas, las reformas Salinistas a la LSPEE, avalando de esa manera la privatización furtiva, que en los hechos ha creado una industria eléctrica paralela sin modificar la constitución.

Paradójicamente el PAN al ver perdida su iniciativa en el Senado de la Republica, amenazó con interponer una acción de inconstitucionalidad a las reformas salinistas de 92 -(hay que agarrarles la palabra, a ver si se atreven a cumplir con su amenaza)- pues el PAN como los demás partidos saben bien que esas reformas abrieron el camino de la privatización eléctrica en México.

Hay que bregar mucho aún para sentirnos satisfechos, necesitamos que los partidos que hoy se presentan como nuestros aliados profundicen en la discusión de una verdadera reforma integral no sólo eléctrica, necesitamos una reforma del sector de la energía que contemple la integración de la industria eléctrica nacionalizada, la integración de la industria petrolera nacional y de los institutos de investigación nacionales en un solo organismo publico de energía, que integre nuevamente las cadenas productivas de nuestras industrias, rotas por las ambiciones desnacionalizadoras de los gobiernos privatizadores; fomentar la investigación científica y el desarrollo de tecnologías propias. Necesitamos la concreción de una iniciativa integral, independiente y soberana que se oponga a los planes energéticos de George Bush; es necesario que las propuestas de los trabajadores del sector de la energía profesionales, técnicos, investigadores, obreros y usuarios del servicio público sean consideradas en la elaboración de esta nueva iniciativa. Necesitamos derogar las reformas salinistas a la LSPEE, concluir la integración de la industria eléctrica nacional, y ofrecer un mejor servicio al pueblo de México.

Luchar, por encima de los vaivenes partidistas, de los reposicionamientos camarales coyunturales. Los legisladores del PRI, del PRD y los que se sumen a la defensa de la soberanía nacional tienen la palabra y un compromiso de lealtad con el pueblo que voto por ellos, el PRI comprobó ya, el 2 de julio del 2000 lo que pesa el voto de castigo, esperamos sinceramente que les sirva la lección de lo que significa la voluntad popular, el PRD no esta en mejor posición sabe del “voto útil” y debe pensar que con declaraciones desafortunadas como las declaradas el 18 de marzo por el gobernador de Michoacán Lázaro Cárdenas Batel, quien se pronunció por “abrir Petróleos Mexicanos a la inversión privada” en un afán por estar a la moda del discurso neoliberal. Olvidando el costo que significo a la Nación la expropiación petrolera, irresponsablemente propone entregar de nueva cuenta a los saqueadores extranjeros nuestra sangre, sí, nuestro petróleo la sangre de nuestra economía. ¡¡Cuidado!!

Compañeros legisladores: la incongruencia, la deshonestidad y la falta de oficio político sólo traerá para su causa el repudio político electoral y quizás un descontento social de incalculables proporciones. Es tiempo de corregir, de enderezar el rumbo restableciendo para beneficio y orgullo del pueblo de México la legalidad constitucional.

¡Basta ya, de subordinar los intereses de México a los planes y designios del Fondo Monetario Internacional, del Banco Mundial, del imperialismo yanqui! ¡Basta ya de que Fox, Castañeda y su partido el PAN se desvivan por cumplir y agradar a su amo Bus! ¡Se toparan siempre con la resistencia combativa de los trabajadores mexicanos!

¡Nuestra Lucha no ha Concluido, la Lucha Sigue! ¡La Historia no ha Terminado!

¡Un Mundo Mejor es Posible!

¡¡UNIDOS VENCEREMOS!!

Frente de Trabajadores de la Energía, FTE

Movimiento 27 de Septiembre del SME


Desde el hondo crisol de la Patria de Zapata, los trabajadores de la energía de México, saludamos a la Revolución Cubana y a su Comandante en Jefe Fidel Castro. Después del Moncada, recibimos a Fidel en ésta su casa, también la casa del Ché. Al triunfo de la Revolución, los electricistas mexicanos fuimos los primeros en solidarizarnos, hoy lo ratificamos. Nuestra solidaridad es combativa, en lucha contra el imperialismo y su política energética neoliberal y antiobrera.

¡Viva Cuba Socialista! ¡Viva Fidel! ¡Viva el Ché!


 C O N T A C T O 

Comisión de Prensa, FTE: prensa@fte-energia.org
Comisión de Energia, FTE: energia@fte-energia.org