Volumen 11, Número 205, diciembre 13 de 2011 |
CORRIDOS ZAPATISTAS
Autor: Armando Liszt Arzubide
Cantan: Hermanos Záizar
Escuchen señores, oigan el corrido de un triste
acontecimiento: pues en Chinameca ha muerto a mansalva Zapata, el gran
insurrecto.
Abril de 1919 en la memoria quedará del campesino, como una
mancha en la historia.
Campanas de Villa Ayala ¿por qué tocan tan dolientes? es
que ya murió Zapata y era Zapata un valiente.
El gran Emiliano que amaba a los pobres, quiso darles libertad. Por
eso los hombres de todos los pueblos con él fueron a luchar.
De Cuautla hasta Amecameca, Matamoros y el Ajusco, con los pelones
del viejo don Porfirio se dio gusto.
Trinitaria de los campos de las vegas de Morelos, si preguntan por
Zapata di que ya se fue a los cielos.
Don Pablo González le ordena a Guajardo que le finja un
rendimiento, y al ver a Zapata disparan sus armas al llegar al campamento.
A la orilla de un camino corté una blanca azucena, a la tumba
de Zapata la llevé como una ofrenda.
Señores ya me despido que no tengan novedad. Cual héroe
murió Zapata por dar tierra y libertad.
Fuentes: Historia Ilustrada de la Música Popular Mexicana. Disco de Promexa.
Album I Disco 2. Lado A. "El Corrido y la Crónica Popular". Mundo Musical Peerless.
Ignacio López Tarso. Corridos de la Revolución. 2 en 1. Sony Music.
1999.
Gilberto Vélez. Corridos Mexicanos.
Editores Mexicanos Unidos. 3a. edición, Octubre 1990.
México, p. 160-163.
Valentín
López González. Diccionario Histórico y
Biográfico de la Revolución Mexicana. Tomo IV,
Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución
Mexicana, México, 1991, p. 677-678.
Daniel Moreno. Batallas de
la revolución y sus Corridos. Editorial Porrúa.
Colección Sepan Cuantos... No. 334. México. 1978. p.
157-159.
Los Mejores Corridos. Colección
México y su Música. Warner Music Mexico. México, 2004.
Tres CDs. CD3 Pista 5. Versión de los hermanos Záizar.
Francisco Juliao (Coord.). Zapata Vivo. Corridos y Poesía
Coral. Esta edición se hizo con motivo del Primer Encuentro In
Xochitl in Cuicatl (Flor y Canto) Zapata Vivo, realizado en el estado de Morelos
en el año de 1976. Editores: Centro Cultural Mascarones de Cuernavaca
y la Universidad Autónoma de Morelos. Cuernavaca, Morelos,
México, 1976. 120pp.
Cantares del Pueblo. Epica y
Lírica del Corrido.Selecciones del Reader´s Digest.
México, 1986, p. 245-247.
Lola Elizabeth Boyd.
Emiliano Zapata en las Letras y el Folklore Mexicano. Ediciones
José Porrúa Turanzas, S.A. Madrid, España. Se
terminó de imprimir el 15 de enero de 1979. p. 143-147. Tomado de
Vicente T. Mendoza. Romance y Corrido. Ediciones de la Universidad
Nacional Autónoma de México. México, 1939. pp. 690-695.
También en Vicente T. Mendoza. El corrido de la Revolución
Mexicana. Biblioteca del Instituto Nacional de Estudios Históricos
de la Revolución Mexicana. México, 1956. pp. 81-85.
Armando de María y Campos. La
Revolución Mexicana a Través de los Corridos Populares. Tomo
I. México, 1962. p. 273-275. Biblioteca del Instituto Nacional de
Estudios Históricos de la Revolución Mexicana.
Nota: Las versiones de Armando de María y Campos
y de Gilberto Vélez tienen 36 estrofas, mientras que la versión
del disco sólo tiene nueve. Dado que la versión del disco y las de
los libros son diferentes, a continuación se transcribe la versión
del libro de Armando de María y Campos, la cual es interpretada por
Ignacio López Tarso.
LA MUERTE DE EMILIANO ZAPATA
Autor:
Armando Liszt Arzubide
Canta:
Ignacio López Tarso
Escuchen señores, oigan el corrido de un triste
acontecimiento: pues en Chinameca fue muerto a mansalva Zapata, el
gran insurrecto.
Abril de mil novecientos diecinueve, en la memoria quedarás
del campesino, como una mancha en la historia.
Campanas de Villa Ayala ¿Por qué tocan tan doliente? --
Es que ya murió Zapata y era Zapata un valiente.
El buen Emiliano que amaba a los pobres quiso darles
libertad; por eso los indios de todos los pueblos con él fueron
a luchar.
De Cuautla hasta Amecameca, Matamoros y el Ajusco, con los pelones
del viejo don Porfirio se dio gusto.
Trinitaria de los campos de las vegas de Morelos, si preguntan por
Zapata di que ya se fue a los cielos.
Le dijo Zapata a don Pancho Madero cuando ya era gobernante: -- Si no
das las tierras, verás a los indios de nuevo entrar al combate.
Se enfrentó al señor Madero, contra Huerta y a
Carranza, pues no le querían cumplir su plan que era el Plan de
Ayala.
Corre, corre, conejito cuéntales a tus hermanos -- ¡Ya
murió el señor Zapata, el coco de los tiranos!...
Montado con garbo en yegua alazana era charro de admirar; y en el
coledero era su mangana la de un jinete cabal.
Toca la charanga un son de los meros abajeños; rueda un toro
por la arena, pues Zapata es de los buenos.
Una rana en un charquito cantaba en su serenata: --
¿Dónde hubo un charro mejor que mi general Zapata?
Con mucho entusiasmo aplaude la gente y hartas niñas
concurrieron, que el jefe Zapata y sus generales dondequiera se lucieron.
Con jaripeo celebraba su victoria en la refriega, y entre los meros
surianos, que es charro, nadie lo niega.
Camino de Huehuetoca preguntaba así un turpial: -- Caminante,
¿que se hizo del famoso caporal?
Nació entre los pobres, vivió entre los pobres y por
ellos combatía. -- No quiero riquezas, yo no quiero honores. A
todos así decía.
En la toma de Jojutla dice a un mayor de su gente: --
¡Tráete al general García que le entre conmigo al frente!
A la sombra de un guayabo cantaban dos chapulines: -- ¡Ya
murió el señor Zapata, terror de los gachupines!
Fumando tranquilo se pasea sereno en medio de los balazos, y grita:
-- ¡Muchachos, a esos muertos de hambre hay que darles sus pambazos!
Cuando acaba la refriega perdona a los prisioneros, a los heridos los
cura y a los pobres da dinero.
Estrellita que en las noches te prendes de aquellos
picos, ¿Dónde está el jefe Zapata que era azote de los
ricos?
-- Cuando yo haya muerto, dice a su subalterno, les dirás a
los muchachos: con l'arma en la mano defiendan su ejido como deben ser
los machos.
Dice a su fiel asistente cuando andaba por las sierras: -- Mientras
yo viva, los indios serán dueños de sus tierras.
Amapolita olorosa de las lomas de Guerrero, no volverás a ver
nunca al famoso guerrillero.
Con gran pesadumbre le dice a su vieja -- Me siento muy
abatido: pues todos descansan, yo soy peregrino, como pájaro sin
nido.
Generales van y vienen dizque para apaciguarlo; y no pudieron a la
buena un plan ponen pa' engañarlo.
Canta, canta, gorrioncito, di en tu canción melodiosa: --
Cayó el general Zapata en forma muy alevosa.
Don Pablo González ordena a Guajardo que le finja un
rendimiento, y al jefe Zapata disparan sus armas al llegar al campamento.
Guajardo dice a Zapata: -- Me le rindo con mi tropa, en Chinameca lo
espero, tomaremos una copa.
Arroyito revoltoso, ¿Qué te dijo aquel clavel? -- Dice
que no ha muerto el jefe, que Zapata ha de volver...
Abraza Emiliano al felón Guajardo en prueba de su amistad, sin
pensar el pobre, que aquel pretoriano lo iba ya a sacrificar.
Y tranquilo se dirige a la hacienda con su escolta; los traidores le
disparan por la espalda a quemarropa.
Jilguerito mañanero de las cumbres soberano, ¡Mira en
qué forma tan triste ultimaron a Emiliano!
Cayó del caballo el jefe Zapata y también sus
asistentes. Así en Chinameca perdieron la vida un puñado de
valientes.
Señores, ya me despido, que no tengan novedad. Cual
héroe murió Zapata por dar Tierra y Libertad.
A la orilla de un camino había una blanca azucena, a la tumba
de Zapata la llevé como una ofrenda...
Zapata y la tierra, mural (fragmento) de Diego Rivera
Esta página es construida por trabajadores del sector energía.
La información contenida puede citarse total o parcialmente, mencionando la fuente.
|
|