A TODOS LOS TRABAJADORES:
"No se privatizará LyFC, ni se
venderán sus activos....."
Presidente Vicente Fox, el 14/12/2000 en Coapa.
"...establecer una estructura
competitiva que promueva la participación
privada...."
Proyecto Foxista de Reforma de la industria
Eléctrica.
El presidente Vicente Fox instó,
en fecha reciente a los diputados del partido Acción
Nacional, reunidos en Ixtápan de la Sal, a llevar
adelante: "...La Reforma de la industria
Eléctrica...".
Esta reforma, aunque no incluye la
venta de los activos sí considera su concesión para
su explotación por particulares.
De manera que, en última
instancia, vienen a ser lo mismo "la privatización" ,
la "desregulación", "la apertura al capital privado"
y cualquier otro término similar. Es decir, que en
todos los casos se trata de transformar una empresa
nacional, que entrega la totalidad de sus ingresos al
erario publico y se ajusta a tarifas y un presupuesto
determinado en las cámaras tomando en cuenta los
intereses tanto de los grandes, medianos y pequeños
industriales, como de la población -cuya calidad de
vida depende en gran medida del uso de la
electricidad- en un negocio particular -seguramente
extranjero- que viene a lucrar a costa de nuestras
industrias, nuestros trabajadores y nuestra
población.
Existe una gran diferencia entre
las dos ópticas o manera de ver las cosas: en la
primera, -la industria estatal-, se genera la
electricidad a partir de las fuerzas de la naturaleza
o recursos naturales propios con el fin de satisfacer
una necesidad general, que nos involucra a todos, o
sea, que se trata de dar un servicio público; en el
otro caso, -la industria privada-, se procura tener
la mayor ganancia posible, en el menor tiempo posible
y lo demás resulta irrelevante.
Es por eso que, a menos que el
Estado no desee hacerlo, la industria estatal puede
planificarse y desarrollarse de manera racional y
forzosamente tendrá que procurar el mantenimiento
adecuado y cuidar su operación tomando en cuenta a
todos los sectores; mientas que la empresa privada
trata siempre de minimizar las posibles inversiones
en mantenimiento, mantenimiento preventivo,
protecciones, y todos aquellos rubros que reduzcan
las ganancias, entre otros, los salarios y
prestaciones laborales.
Nuestra industria eléctrica es
vivo ejemplo del primer caso: tenemos un sistema
tarifario con tarifas para cada sector, la calidad y
continuidad del servicio es buena aún a pesar de las
reducciones presupuestales, hemos llevado la energía
eléctrica al 95% de la población, en LyFC hemos
reducido el tiempo de interrupción por usuario (TIU)
a la mitad, hemos soportado enormes incrementos tanto
en número de usuario como en cantidad de kwh
manejados con prácticamente la misma planilla de
trabajadores durante muchos años y eso a pesar de que
servimos a la ciudad más compleja del planeta, etc.
Si se "privatizara",
"desrregulara" o como eufemísticamente dicen ahora
"se abriera a la inversión privada", lo que viene
siendo lo mismo, pasaría precisamente lo que está
sucediendo en todo el mundo, justamente en los países
"paradigma" de la privatización, aquellos que Zedillo
ponía como ejemplo; Inglaterra, Argentina, Chile,
Uruguay, España y ahora ni más ni menos que el estado
de California en los Estados Unidos.
En Inglaterra la "privatización"
derivó en un gran monopolio eléctrico, sólo que
privado y extranjero (norteamericano), En Argentina y
Chile su industria eléctrica está en manos de
españoles que no cumplen sus compromisos con el
estado y no quieren invertir en nuevas plantas si no
aumentan más las tarifas, en Uruguay tienen
incrustada desde hace 15 años a FENOSA que en vez de
terminar sus trabajos crea cada vez mayor dependencia
de ellos, en España se unen las mayores empresas
(ENDESA e IBERDROLA) y conforman un nuevo monopolio
privado que mantiene las tarifas domésticas más altas
del orbe, tanto que prácticamente sostienen a la gran
industria, y finalmente en el estado de California de
los Estados Unidos, en el que las empresas privadas
incrementan hasta en 23 veces el valor de las tarifas
y crean enormes problemas de desabasto de energía,
amenazando con colapsar todo el sistema de
abastecimiento de electricidad de los Estados Unidos.
¿Y así quiere el Sr. Fox apresurar
su "reforma eléctrica"?
¿Así quiere que aceptemos sin más
ni mas una estructura que no está soportada ni
justificada por estudio alguno? En un par de años, o
menos, nos veríamos como ellos.
Para pasar de la estructura que
aún permanece el la Cl. 16 del CCT, a la que ellos
quieren, hay que multiplicar por 10 la administración
y complicar todo el aparato burocrático, sin más
razones que las abstractas de "acercar el servicio al
cliente" o sencillamente la de "modernizar".
La actual LyFC se estructuró
primero para lucrar, luego para su absorción por CFE,
ahora la quieren cambiar para su privatización, pero
nunca se han hecho estudios verdaderamente serios
para hacerla funcionar de la mejor manera, como una
estructura que busque la eficiencia, la
confiabilidad, la calidad, etc.
Es necesario que tomemos
conciencia y en defensa de la Industria Eléctrica
pidamos que se detenga este proceso absurdo ... ¡YA!
Ya lo ve Sr. Fox, si tuviéramos
una cámara escondida le diríamos como en la
televisión ¡TE CACHE...!
Por el Derecho y la justicia del
trabajador
MOVIMIENTO 27 DE SEPTIEMBRE del
SME