El Frente de Trabajadores de la
Energía es una organización que se crea bajo
principios fundamentales que se hacen imperativos en
el México actual. Esos principios fundamentales son
los siguientes:
- Democracia Sindical.
- Defensa del Sector energético nacionalizado.
- Defensa de la soberanía y de nuestros recursos
naturales.
- Respeto al Estado de Derecho.
- Libertad y autonomía sindical.
- Rechazo total al corporativismo.
- Respeto y dignidad sindical y de libre
asociación.
- Respeto al derecho de huelga y en contra de
la requisa.
La situación que se avecina para
el sector energético de México, obliga a replantear
los esquemas de la lucha obrera y popular en nuestro
país.
A partir del 2 de julio se crearon
serias expectativas de cambio en las relaciones
políticas, sociales y económicas del país. Durante
más de 71 años se dió una forma de gobierno donde la
corrupción, el autoritarismo, la demagogia y el
corporativismo fueron los cimientos de una forma de
gobierno que tuvo como resultado más de 40 millones
de pobres, una diferencia insultante de clases
sociales y la cancelación de los derechos de
igualdad, afectando las expectativas de desarrollo
humano para las grandes mayorías.
En este contexto, y
específicamente sobre el sector de Energía, que es el
eje central de la política económica del actual
gobierno, habría que hacer ciertas consideraciones
necesarias:
La reciente selección de cuatro
prominentes empresarios de México, como miembros del
Consejo de Administración de Pemex exigen un
análisis por las implicaciones que esto tiene para el
futuro del país. En primer lugar, éstas designaciones
parecen un cobro inicial de facturas por el apoyo
económico que estos personajes dieron a la campaña de
Vicente Fox, particularmente en los casos de Lorenzo
Zambrano y Alfonso Romo; lo cual ha llevado a Fox a
dar inicio a una privatización disfrazada, con serias
amenazas para el futuro de la empresa. Estas
designaciones son a todas luces violatorias a la ley,
ya que existen serios conflictos de intereses por la
diversidad de negocios que representan estos
personajes; independientemente que el Consejo debe
estar integrado por representantes del Estado y del
Sindicato. Y éstos empresarios de ninguna manera
representan al Estado, representan intereses
específicos.
Por otra parte, en la reciente
visita de Bush, el tema de la energía en la agenda
fue un aspecto importante; ya que el presidente de la
nación más poderosa del mundo, busca apropiarse de
nuestras reservas energéticas para no depender del
petróleo de la OPEP. Recordemos que desde la firma
del Tratado de Libre Comercio, se han acrecentado las
presiones para privatizar la industria petrolera.
Las reservas probadas y
potenciales de nuestro país son comparables con la
riqueza de Medio Oriente, donde se concentra el 75%
de las reservas mundiales de petróleo actualmente. En
las pláticas Fox- Bush, se incluyó en la agenda la
formación de un bloque energético continental. Para
concretar este bloque, nuestro país ha abierto el
sector energético a inversiones de grandes
corporaciones, fundamentalmente estadounidenses.
Además, George Baker, directivo de Mexico Energy
Intelligence señaló que Bush podría ofrecer a México
fondos para convertir a Pemex en la "mejor empresa
petrolera del mundo". Curiosamente son los mismos
términos empleados por el presidente de México, en la
instalación del nuevo Consejo de Administración de la
paraestatal. Pero habría que preguntarse por el
costo social, económico y político que una decisión
de esta naturaleza representaría para México.
Se argumenta que la
reestructuración de Pemex busca aumentar la
productividad y la competitividad de la empresa, la
cual se piensa medir en función de las ventas de
crudo y la exportación de materia prima a bajos
precios, sin darle valor agregado y sin buscar que se
formen cadenas productivas que permitan incentivar el
desarrollo económico del país. Lo anterior ha
generado un fenómeno tragicómico: siendo la quinta
empresa petrolera del mundo, no somos
autosuficientes. Importamos grandes cantidades de
gasolina y de gas para consumo interno, porque hemos
perdido capacidad productiva debido a la falta de
inversión en nuestras plantas. Ahora mismo tenemos
una severa crisis energética por el alto precio del
gas, lo cual ha afectado gravemente a muchas cadenas
productivas por el precio de ese energético básico.
Todo lo anterior va acompañado de
una burla a las promesas de campaña y a los
compromisos por la libertad y democracia sindical,
tantas veces manifestadas por el actual presidente de
México. Se nombró a cinco representantes del STPRM en
el Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos,
dando un apoyo tácito al corporativismo y al
charrismo sindical, pues tales representantes son la
prueba de los viejos vicios antidemocráticos y
corruptos del añejo y anquilosado sistema que se ha
basado en el corporativismo y en el autoritarismo, la
imposición y usurpación, en contra incluso de las
bases trabajadoras, de los representantes de los
gremios, los cuales han perdido la esencia del
sindicalismo y la defensa de los derechos de los
trabajadores.
Es una incongruencia del actual
gobierno, el apoyo que Fox le ha dado a los más
conspicuos representantes del autoritarismo, la
corrupción y la picaresca política de México: la
"Güera" Rodríguez Alcaine y el "contador privado"
Carlos Romero Deschamps, cuya impunidad los ha
llevado a tener estructuras de poder faraónicas y con
riquezas incalculables, al amparo del poder y la
corrupción, a pesar de las múltiples denuncias;
algunas de carácter penal, que están interpuestas
ante uno de los sistemas judiciales más corruptos que
existen en la actualidad. Ambos "líderes sindicales"
han cumplido eficazmente su misión como máximos
controladores de los movimientos obreros
independientes y democráticos. Es por ello, que la
formación del Frente de Trabajadores de la Energía es
un hito histórico que es necesario impulsar por parte
de todos los hombres libres y con conciencia
democrática que existen en México.
El nacimiento del Frente de
Trabajadores de la Energía, hecho que hoy nos
convoca, nace de la necesidad de expresar un ¡YA
BASTA! a la política de impunidad, autoritarismo y
resguardo de los intereses más obscuros y espurios
que existen en nuestro país. México está en grave
riesgo de que el fascismo se apodere de las
estructuras políticas de la Nación. La única
alternativa para conservar un país libre y solidario
es crear organizaciones en donde los principios de
Libertad, Soberanía, Democracia, Nacionalismo y
respeto al Estado de Derecho, sean los que imperen en
las relaciones políticas de los hombres y las
instituciones.
¡Ya basta de decisiones ilegales,
basadas en argumentaciones dolosas y sofistas!
¡Ya basta de violaciones a la Ley
y a nuestra Carta Magna!
¡Ya basta de impunidad, corrupción
y autoritarismo!
¡Ya basta de cancelar los más
legítimos intereses de desarrollo humano para los
mexicanos!
¡Ya basta de fomentar la
desigualdad y la cancelación de oportunidades para
todos!
Coordinadora Nacional de
Trabajadores Petroleros Democráticos del STPRM