Asamblea de base electricista
Electricistas de base, miembros activos
del SME, se reúnen en asamblea para analizar la situación derivada
del decreto gubernamental para la extinción de Luz y Fuerza del Centro.
Con una actitud crítica y reflexiva llaman a la unificación del
frente interno, mediante el restablecimiento de la normalidad sindical y la
discusión colectiva de una propuesta de solución al conflicto en
el sector eléctrico que sea favorable y digna para todos los
trabajadores.
La base electricista propone la unidad
Trabajadores de varias áreas
operativas: subestaciones, construcción, transportes, mantenimiento
eléctrico, cables subterráneos, mantenimiento mecánico y
otras se reunieron este 29 de octubre para analizar la situación
sindical, laboral e industrial que se vive en el sector eléctrico,
región central, consecuencia del decreto gubernamental de
extinción de Luz y Fuerza del Centro (LFC).
Con mucho ánimo
electricistas activos y jubilados discutieron sobre la grave situación
existente. La mesa de los debates fue presidida por jóvenes electricistas
quienes explicaron a los asistentes la propuesta para restablecer la normalidad
sindical y una propuesta de conjunto para resolver favorablemente el
conflicto.
Restablecer la normalidad sindical es una necesidad pues nadie
tiene reconocida la personalidad jurídica para representar al sindicato.
El problema creado es esencialmente político pero hace falta el
reconocimiento legal para formalizar cualquier acuerdo con el gobierno y
autoridades laborales.
Al momento, esta situación se ha obviado
por el grupo hegemónico “los verdes” y Martín Esparza
funge como secretario general de facto. No obstante, el conflicto poselectoral
se mantiene activo por parte de los anteriores contendientes, Martín
Esparza y Alejandro Muñoz.
Muñoz mantiene la demanda
interpuesta ante la Junta de Conciliación y Arbitraje y Esparza acaba de
perder un recurso de amparo que interpuso contra la negativa de la
Secretaría del Trabajo y Previsión Social para otorgarle la Toma
de Nota. Esto significa que el sindicato NO tiene ninguna representación
sindical jurídicamente acreditada.
Lo más grave es que,
tanto Esparza como Muñoz, carecen de alguna propuesta mínima de
solución para los trabajadores que se mantienen en resistencia. Esparza
se ha limitado a declaraciones en los medios, la promoción de una
controversia constitucional sobre el decreto de extinción de LFC sin que
los diputados hayan tomado ninguna decisión, y a interponer amparos
inciertos y de larga duración.
Mientras, miles de
compañeros ya han acudido a recibir sus liquidaciones y la tendencia es a
aumentar creando una verdadera desbandada de electricistas.
Por si fuera
poco, el gobierno ya anunció el juicio ante la Junta, a iniciarse este 31
de octubre, para dar por terminadas las relaciones individuales y colectivas de
todos los trabajadores. La Junta tiene 30 días para resolver. Como van
las cosas todo apunta a que dictaminará en contra del sindicato y,
aún cuando fuera a su favor, el gobierno se inconformará
negándose a aceptar el laudo de la Junta en cuyo caso ésta
condenaría a la extinta empresa a liquidar a todos conforme a la Ley, es
decir, la mitad de lo que indica el Contrato Colectivo de Trabajo.
Con el
frente interno dividido, las estructuras sindicales inoperantes y la
política aventurera de Esparza y Muñoz, los electricistas se
encuentran en la indefensión total. Por ello, se hace necesario tomar
medidas contra el tiempo antes de que sea más
tarde.
Organización para defender intereses comunes
Los compañeros asistentes a la
asamblea de la base electricista hicieron muchas intervenciones. Algunos dijeron
que tuvo que llegar está desafortunada experiencia para recuperar los
espacios perdidos pues las asambleas hace décadas que fueron literalmente
suprimidas. Aún en plena debacle los espacios siguen cerrados sin que
haya discusión, información ni solidaridad
mínima.
Junto con varios jubilados presentes, todos coincidieron
en que se vive una situación caótica. Algunos, incluso,
señalaron que no había salida. Pero en la medida en que
avanzó la discusión se llegó al convencimiento de que,
entre todos, debe construirse una salida favorable y digna al
conflicto.
Con mucho ánimo se aprobaron varias propuestas, entre
otras, el compromiso de impulsar la formación de una Coalición de
Electricistas y, para ello, se acordó:>
1- Publicar un Manifiesto y distribuirlo entre los trabajadores.
2- Recolectar firmas entre la base para constituirse en
Coalición.
Enseguida se nombró a una comisión de
trabajadores que encabezará la promoción de la
organización.
Finalmente, se citó a una nueva asamblea, a
realizarse el lunes 2 de noviembre, a las 12 hs., en la explanada del Monumento
a la Revolución.
En condiciones muy difíciles y contra el
tiempo, la decisión de la base electricista los enaltece y dignifica,
independientemente del desenlace final. La actitud de los compañeros es
encomiable, correcta y viable. Si no se concretarán sus propuestas no
sería por falta de voluntad o propuestas sino por las adversas
condiciones, internas y externas. Hoy, todavía hay posibilidades de salir
adelante, a pesar de la cerrazón sindical y
gubernamental
[2009, elektron 9 (280) 1-2, 30 oct 2009].
La base electricista debe tomar iniciativas políticas