Despliegue organizado de acciones
Movilizarse tomando iniciativas y con
dinámica propia es la tarea del momento. Los electricistas, asumiendo
autocríticamente la situación, necesitamos acudir a la solidaridad
del pueblo promoviendo acciones organizadas. Al mismo tiempo, es necesario
discutir la salida conveniente al conflicto. Para el FTE no hay duda, la
solución está basada en la propuesta histórica de los
electricistas democráticos: ¡Integración de la industria
eléctrica!
Movilizarse con el pueblo
Presente en los medios impresos, radio y
televisión en el valle de Toluca, el FTE de México llama al pueblo
de México a solidarizarse con el Sindicato Mexicano de Electricistas
(SME). En asamblea general de la División Toluca, el Frente
expresó a los compañeros el necesario despliegue de las fuerzas y
acudir a la acción organizada del pueblo.
En amplias entrevistas
con los medios, el FTE detalló las implicaciones de la toma
policíaca y militar de las instalaciones eléctricas de Luz y
Fuerza. Considerando los aspectos históricos, industriales,
técnicos, políticos, laborales, sindicales y sociales, se
informó a la audiencia en el Estado de México y estados vecinos
para aclarar la situación, toda vez que el pueblo de México tiene
derecho a saber qué está pasando en la industria eléctrica
de la nación.
En una reflexión autocrítica y
profunda se presentaron datos concernientes al fondo del asunto, especialmente,
el proceso de privatización furtiva en marcha desde 1992, así
como, las propuestas confidenciales del Banco Mundial al gobierno federal para
proceder a la privatización del 100% de la generación
eléctrica, que al momento ya alcanza el 49.4%.
También se
explicó que las transnacionales pretenden una nueva generación de
contra-reformas inconstitucionales para apoderarse del Sistema Eléctrico
Nacional y, en particular, de las redes eléctricas de transmisión
y distribución eléctrica. En este último caso, la
pretensión de las transnacionales consiste en crear una empresa de
distribución en el centro del país, fraccionada en 17 pedazos.
Esta propuesta es inaceptable para la nación.
El FTE
enfatizó en la necesidad de ejercer todas las acciones al alcance que
deben concretarse tomando iniciativas creativas. Presentes en la asamblea del
SME los compañeros de Unidad Patriótica, las brigadas de la
resistencia en el Valle de Toluca y otras más, manifestaron su decidido
apoyo a los electricistas del SME en defensa de la industria eléctrica
nacionalizada.
Fortalecer la resistencia
El Estado mexicano se ha propuesto quebrar a la
resistencia electricista ofreciendo liquidaciones millonarias. La
secretaría de energía (Sener) está enviando cartas
personales a los domicilios de los compañeros, la Policía Federal
Preventiva acosa a las familias en las unidades familiares, en los medios los
llamados a “cobrar” son reiterados.
Se trata de un plan
cuidadosamente preparado para presionar a los electricistas y hacerlos caer en
la trampa. Más aún, hay un evidente chantaje. El gobierno ha
planteado una fecha límite: el 14 de noviembre para sostener su
oferta.
Entre tanto, el Estado sigue realizando sus acciones con plena
ilegalidad. Las medidas oficiales están basadas en la legislación
terciaria, violando lo dispuesto en el artículo 27 constitucional y la
propia Ley de Servicio Público de Energía Eléctrica.
Mediante un simple decreto, apoyándose en la legislación
secundaria aprobada por los legisladores de todos los partidos políticos
en la contre-reforma energética de 2008, está planteada una seria
agresión laboral, sindical e industria en el sector eléctrico
nacionalizado.
Es previsible que el gobierno del PAN interpondrá
ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (Junta) un
“Conflicto Colectivo de Naturaleza Económica”, aduciendo
“causa de fuerza mayor”, basada en la “quiebra
financiera” de Luz y Fuerza del Centro. La Junta seguramente
llevará a cabo un juicio sumario y en una sola sesión
determinará en favor del gobierno, resolviendo la terminación de
las relaciones laborales, individuales y colectivas, condenando a la empresa a
indemnizar a los trabajadores conforme a la Ley Federal del Trabajo.
Con
ello, el gobierno intensificará la presión contra los
trabajadores. No obstante, la resistencia electricista debe mantenerse con
firmeza. NO es el momento de aceptar ninguna liquidación, ni siquiera el
cobro por parte de los jubilados.
El gobierno intentará que caiga
el primero y después los demás, aprovechándose de los
elementos más débiles e inconcientes. La manera de fortalecer la
resistencia consiste en cohesionar a los compañeros mediante actividades
variadas y amplias en el tejido social de la
nación.
Complacencia de legisladores y gobernadores
El gobierno federal ha procedido a
acuerpar sus instancias burocráticas, tanto partidos políticos,
como legisladores y gobernadores. Los diputados y senadores están
eludiendo su responsabilidad política. Ayer, por abrumadora
mayoría, se negaron a iniciar una controversia constitucional contra el
decreto de ocupación de Luz y Fuerza, ni siquiera la diputación
del PRD apoyó la propuesta que fue turnada a comisiones.
Esta
controversia, considerada por la representación sindical de facto como la
principal respuesta inmediata a la acción unilateral del Estado, es
cuestionable porque requiere de la mayoría de legisladores. Pero,
además, es un recurso que, en manos de la Suprema Corte de Justicia,
podría ser un proceso largo con alto grado de incertidumbre. Como
planteamiento estratégico es un recurso muy débil que no resuelve
el fondo del conflicto.
Movilización y solución
El FTE estima que se debe enarbolar una propuesta
decorosa y digna de solución. Nuestra propuesta se basa en la
tradición histórica de los electricistas democráticos, esto
es, la integración de la industria eléctrica nacionalizada. Esto
significa que aún en las adversas condiciones que se han configurado, el
Estado debe llevar a cabo las funciones constitucionales estratégicas en
materia eléctrica, relacionadas con la región central del
país, a través de un solo Organismo.
La solución que
propone el FTE requiere de una amplia movilización de los electricistas
para concitar el apoyo mayoritario de la población, así como una
intensa discusión de los trabajadores para que mediante decisiones
colectivas mayoritarias se concrete la propuesta.
[2009, elektron 9 (246) 1-2, 14 oct
2010].