En una de las últimas noches de octubre Ulises nos dejó, se convirtió en luna y se fue de este mundo. Ya no lo vamos a ver, el tampoco nos podrá mirar. Los corazones obreros sienten las ausencias, la presencia y la conciencia de los nuestros. Ahora, es noviembre, luego diciembre, la lucha sigue en tiempo circular.

Ulises Ricoy, ingeniero, doctor e investigador petrolero, experto mexicano en materia de reservas de hidrocarburos, representante del grupo de ingenieros petroleros del sur, forjador de la propuesta para el desarrollo integral de la industria petrolera de México. Iba a estar con nosotros, el FTE, en el I Foro Eléctrico Nacional, sería ponente en materia de petróleo. Compartíamos puntos de vista sobre la Política Energética Independiente y, específicamente en torno a la necesidad de un Programa Nacional de Hidrocarburos, propio, independiente de las administraciones y gobiernos en turno, como lo propone el Frente.

La Política Energética Independiente es necesaria para México. En materia eléctrica y petrolera la política que se sigue es la del imperialismo. Tratándose de los hidrocarburos, hace décadas que el gobierno federal se ha dedicado a extraer cuantiosos volúmenes de petróleo crudo, en su mayor parte para la exportación, al tiempo que quema en la atmósfera el gas natural asociado. Desde el principio dijimos que esa era una política incorrecta. Hoy la situación es muy clara: en la industria petrolera nacional existe una situación desastrosa. Multitud de pozos petroleros han sido indebidamente explotados, cada vez se importan más volúmenes de gasolinas y se han dejado de producir diversos petroquímicos. No existe suficiente gas natural y las reservas petroleras están en declive. México es un gran productor de petróleo crudo a nivel mundial pero sus reservas probadas son muy bajas, apenas para 20 años.

El gobierno federal siempre ha negado la crisis en Pemex, la que ha sido auspiciada por las sucesivas administraciones y por el charrismo sindical petrolero y, ahora, con el gobierno foxista por los empresarios de las transnacionales que dirigen a la principal empresa del país. Recientemente, sin embargo, han reconocido que las reservas de petróleo son efectivamente bajas. Sin embargo, hacen de esta verdad un manejo tendencioso concluyendo que hace falta la inversión privada. Esta cada vez es mayor, por lo pronto en la petroquímica, la exploración de petróleo y gas, la perforación de pozos y la distribución terrestre y marítima de hidrocarburos.

Lo que pretende el gobierno es la privatización de Pemex y está avanzando en esa dirección. Pocas voces auténticas se alzan en contra. En 1978, petroleros de las secciones 34 y 35, nucleares de Salazar y el PMT de Heberto Castillo integramos el Frente Nacional en Defensa de los Recursos Naturales. Muchas propuestas se presentaron pero el gobierno hizo lo contrario. Ahora están las consecuencias negativas a la vista.

Contra el desastre en Pemex, Ulises trabajaba, destinando tiempo adicional a sus labores como profesional de Petróleos Mexicanos. Junto con otros ingenieros petroleros, desarrolló una propuesta que el FTE apoyamos y la hicimos nuestra en la I Asamblea. Estimamos de fundamental importancia la elaboración de un Plan Nacional de Hidrocarburos y de un Plan Eléctrico Nacional, formulados por los trabajadores, ingenieros e investigadores del sector, que contengan las directrices fundamentales y acciones específicas de política energética, desde el punto de vista de los mexicanos no de los gringos.

El FTE expresa su pesar por la pérdida de Ulises, amigo, compañero, petrolero, mexicano preocupado por su Patria.

Reconocemos en los técnicos y profesionistas de Pemex a hombres y mujeres de gran valía. En todo el país, está en marcha un importante proceso de lucha. A los ingenieros e investigadores conscientes los invitamos a sumar fuerzas integrándose al Frente deTrabajadores de la Energía. A este Frente pertenecemos trabajadores e investigadores petroleros. Juntos podremos avanzar más rápida y sólidamente, lo dice nuestro lema: ¡Unidos Venceremos!