Preparan despidos en Pemex
Oficialmente, la administración de Pemex
niega que prepare despidos masivos. Pero, en los hechos, administración y
charros sindicales negocian el “reacomodo” de miles de trabajadores.
En algunos casos se proyecta una reducción del 76% en la plantilla
laboral. Esto es parte de la reforma energética de Calderón, que
apoyan el PAN y el PRI, en el contexto de las propuestas formuladas en el
proyecto SUMA que implicarían el despido de 32 mil petroleros, los cuales
se sumarían a los actuales 32 mil despedidos injustificadamente.
Proyecto SUMA apoyado por PAN, PRI y charros sindicales
Las propuestas dereforma energética para privatizar a Pemex tienen como antecedente
inmediato al llamado proyecto SUMA, diseñado en Houston, Texas. Esos
dictados fueron aceptados sumisamente por Fox y Luis Ramírez Corzo,
director en turno de Pemex. Luego, Calderón y Jesús Reyes Heroles,
adoptaron íntegramente el proyecto y lo tradujeron en iniciativas de
leyes. En la legislación secundaria que el PAN y el PRI proponen
modificar se expresan cada uno de los aspectos indicados en el proyecto
SUMA.
Este proyecto altera la estructura administrativa y operativa de
Pemex y, como aspecto crucial, plantea modificar la Ley Orgánica de
Pemex. Eso es precisamente lo que plantean el PRI y el PAN. El proyecto SUMA
propone integrar a los empresarios como “consejeros independientes”
al Consejo de Administración de Pemex. Al inicio del sexenio de Fox,
éste intentó hacerlo mediante un “manotazo” que no
prosperó. Ahora, Calderón insiste en su proyecto de Ley
Orgánica de Pemex llamándoles “consejeros
profesionales” designados por el Ejecutivo. El PRI propone exactamente lo
mismo adicionando que, esos consejeros, serán “ratificados por el
Senado”. Cuauhtémoc Cárdenas propone también lo
mismo.
El aspecto central del proyecto SUMA consiste en favorecer la
apertura al capital privado e incluye un portafolio de negocios basado en el
otorgamiento de contratos. Eso es lo mismo que proponen Calderón y
Beltrones.
El mecanismo para hacer posible la privatización es a
través de la llamada “autonomía de gestión” que
el proyecto SUMA propone para Pemex. Eso mismo proponen el PAN y el PRI
pervirtiendo el concepto, el cual implicaría que un gobierno corporativo,
al cual se incorporarían los consejeros “independientes”, que
tendrían absoluta libertad para decidir sobre las contrataciones,
inversiones y endeudamiento de la paraestatal.
En el proyecto SUMA se
elimina a la ingeniería de proyectos, el Instituto Mexicano del
Petróleo ni siquiera está considerado. Eso es justamente lo que
caracteriza a las iniciativas del PAN y el PRI, mismas que no hacen ninguna
referencia a la ingeniería ni al desarrollo tecnológico. El
objetivo es comprar todo a las transnacionales.
Asimismo, en el proyecto
SUMA se plantea el despido de 32 mil trabajadores. En las iniciativas del PAN y
el PRI no se menciona el asunto porque éste no es materia de ninguna de
las iniciativas de ley, sino un asunto laboral que se trata por separado. La
intención es imponer la reforma energética, después, las
consecuencias que se deriven serían más fáciles de aplicar.
El sindicato petrolero (STPRM) lo sabe pero nunca ha dicho nada porque los
charros sindicales son parte del proyecto privatizador de Pemex.
Falso que haya despidos dice Pemex
El FTE de México ha denunciado oportunamente que el
proyecto SUMA es la base para la privatización de Pemex. Tan es
así que, el FTE propone como alternativa al proyecto INTEGRA. El primero
desintegra a la paraestatal y, el segundo, integra al proceso de trabajo
petrolero, de allí su nombre. Al mismo tiempo, hemos denunciado que, en
tal proyecto, se plantea el despido de 32 mil trabajadores. No somos los
únicos que lo han denunciado. Es evidente que el sindicato lo sabe
porque, con su anuencia, desde hace décadas se viene perdiendo materia de
trabajo y jamás se ha dicho nada. Los charros sindicales son
partícipes del mismo proyecto.
También hemos denunciado
que, a la fecha, existen ya 32 mil demandas de trabajadores petroleros por
despidos injustificados. Esas demandas, interpuestas ante las autoridades
laborales correspondientes no han prosperado, en parte por el cúmulo de
demandas y, por otra parte, porque las autoridades de la Junta Federal de
Conciliación y Arbitraje, siempre se han sometido al capricho de los
charros sindicales y de las administraciones en turno de Pemex. Ambos actores,
Pemex y STPRM son codemandados porque, en contubernio, son los autores de los
despidos.
Ahora, el 31 de julio de 2008, mediante el Boletín No.
138, la burocracia de Pemex señaló que “algunas fuentes
informativas han difundido, erróneamente, que Petróleos Mexicanos
tiene el propósito de cesar a 30 mil trabajadores. Agregan que dicha
intención es del conocimiento del Sindicato de Trabajadores Petroleros de
la República Mexicana (STPRM), y que cuenta con el apoyo de su liderazgo.
Esto no tiene ningún fundamento y es falso”.
El hecho que
niega Pemex SÍ tiene fundamente y es cierto. Se trata del mismo modelo
que se siguió en 1997 para privatizar a Petrobrás. Obviamente que
la burocracia administrativa lo niega porque, habiendo sido vapuleados con su
propuesta de reforma privatizadora de Pemex, no les conviene hablar de despidos
en este momento. Ese es precisamente el plan consistente, primero, en imponer su
reforma y, luego, aplicarla. Hasta ese momento se instrumentarían los
despidos. Estos son obvios porque la reforma, tanto del PAN como del PRI,
proponen privatizar TODAS las fases del proceso de trabajo petrolero, mismo que
expresa la materia de trabajo.
La privatización afecta a la materia de trabajo
Al privatizarse fases enteras, la materia de trabajo no desaparece pero
dejaría de hacerla Pemex para que la ejecuten los contratistas. Estos no
solamente pondrían la inversión y, en su caso, la
tecnología, sino a los mismos trabajadores que no serían los
actuales. Estos quedarían sobrando y, en la medida en que la
privatización prosperase, en esa misma medida irían saliendo de
Pemex.
Según el boletín de Pemex, “en reiteradas
ocasiones, el Director General de PEMEX, Jesús Reyes Heroles G.G., ha
señalado que el plan estratégico de PEMEX no considera despidos
masivos. Por el contrario, ha insistido en que la reforma para fortalecer a
PEMEX, promovida por el Gobierno Federal, permitiría el crecimiento de la
empresa, con implicaciones favorables sobre la estabilidad en el empleo y el
bienestar de los trabajadores”.
El desmentido periodístico
salta a la vista. El “plan estratégico” es exactamente lo
contrario. La reforma de Calderón NO fortalece a Pemex NI
permitiría “el crecimiento” de la empresa, mucho menos
“implicaciones favorables en el empleo y bienestar de los
trabajadores”. El desmentido es inmediato porque los mismos
burócratas de Pemex ligan los despidos con la reforma energética.
Como ha sido en otros aspectos, su argumentación se basa en vulgares
mentiras.
Las privatizaciones, en NINGUNA parte del mundo han creado
empleo y menos bienestar. El caso de México, tratándose de la
privatización eléctrica, durante la construcción de las
centrales privadas, los contratistas crean empleos temporales y precarios,
luego, las transnacionales y sus filiales integran plantillas de
operación y mantenimiento ínfimas comparadas con la industria
nacionalizada sometiendo a los trabajadores a condiciones laborales inferiores,
con inestabilidad total en el empleo y nulos derechos sindicales.
La
administración de Pemex es incapaz de negar los hechos porque ellos
mismos informaron que “en coordinación con el STPRM,
Petróleos Mexicanos trabaja en un programa de reubicaciones, a fin de que
ningún trabajador petrolero se encuentre sin materia de trabajo, como
parte de la iniciativa estratégica para el desarrollo de los recursos
humanos de PEMEX”.
Esas “reubicaciones podrán ser
coyunturales pero NO resuelven nada. Si no hay materia de trabajo,
¿dónde serían reubicados? ¡En la calle! porque algunos
podrían ser reubicados pero, la mayoría, pasarían a quedar
disponibles, lo que los pone con un pie “en la calle”.
Pemex
y el STPRM mienten a los trabajadores petroleros y a la nación. Lo que
define a la materia de trabajo es el proceso de trabajo. Si éste ha
venido siendo fragmentado, y privatizado, la materia de trabajo no ha
desaparecido pero se ha perdido. Con la privatización de Pemex, la
pérdida de materia de trabajo sería mayor y eso no se resuelve con
declaraciones a los medios.
Pemex dice que “lamenta que algunos
grupos vengan difundiendo, sin fundamento, información falsa con el
propósito de dañar la relación, tanto de la
administración, como de los liderazgos, con los trabajadores
petroleros”. Por nuestra parte, lamentamos el cinismo de los
burócratas y charros sindicales de Pemex. En el STPRM NO existe
ningún “liderazgo” sino una camarilla mafiosa y criminal,
proclive a la privatización petrolera, al servicio del imperialismo y en
contra de los petroleros y de la nación mexicana.
Charros ya firmaron convenio
Días después, el 4 de agosto, en Tabasco se
regó como pólvora la noticia que impactó a los petroleros
de la región. Un diario local publicó que, “por acuerdo
cupular entre Carlos Romero Deschamps, secretario general del STPRM y la
dirección general de Pemex, los despidos de trabajadores de
“planta” y “transitorios” empezaron a ser una realidad,
y tan sólo en la región sur, irán a la calle cerca de 3 mil
obreros” (Ruiz F., Alfaro F. en www.tabascoHOY.com).
La
información fue obtenida mediante solicitud hecha al Instituto Federal de
Acceso a la Información Pública Gubernamental. Se trata del
“convenio administrativo-sindical número PEP-RS-VHSA
10469/2007” que contempla, de entrada, que 757 “plazas definitivas
sindicalizadas que se suprimen y personal de planta que se declara
disponible”.
En la sección 44 de Villahermosa laboran 4 mil
trabajadores de planta y unos 2 mil transitorios. El convenio
administrativo-sindical firmado el 15 de octubre de 2007 para su
ejecución a partir del 28 de mayo de 2008. Los charros sindicales
utilizan como brazo ejecutor al secretario del Interior del STPRM, Rosario
Alfonso Pérez Bocanegra “sobre quien pesan actos de
corrupción, explotación laboral y humillación de obreros
con necesidad de las fuentes de trabajo, quien a placer, elije, designa y admite
también a los recomendados y sobre todo los de su
preferencia”.
Por parte de Pemex, firmaron el convenio Rosendo
Calderón Villareal, Director corporativo de Administración,
Lamberto Alonso Calderón, Subdirector corporativo de Relaciones Laborales
y otros funcionarios. Por parte del STPRM firmaron Carlos Antonio Romero
Deschamps, secretario general, Fernando Navarrete Pérez, secretario del
Interior, actas y acuerdos, Eleuterio de la Rosa Esteva, secretario de Trabajo.
Por la sección 44 firmaron José del Pilar Córdova
Hernández, secretario general y José Jesús Zamudio
Aguilera, presidente del consejo local de vigilancia.
Reducción del 75.7% en Tabasco
En el convenio se indican las plazas de obras
determinadas y plazas definitivas de los trabajadores de planta con sus
diferentes categorías, más la ubicación de personal de
planta disponible, en espera algunos de ser reubicados, liquidados o jubilados.
Asimismo, se define la “Estructura orgánico ocupacional definitiva
que se requiere para la Subdirección y Gerencia de la Unidad de
Perforación y Mantenimiento de Pozos con jurisdicción en la
Sección 44 del STPRM”.
Esta incluye a 1,458 trabajadores,
definidos de la siguiente manera: 104 Gerencia de Perforación y
Mantenimiento de Pozos División Sur, 31 Area regional de
Exploración, 227 Coordinación de administración
patrimonial, 284 Subdirección de Ingeniería y Desarrollo de Obras
Estratégicas, 781 Gerencia de Transporte y Distribución de
Hidrocarburos, 30 Subdirección de Perforación y Mantenimiento, 1
Area Regional de Exploración.
Esto significa que, para Pemex y el
STPRM, 4,542 trabajadores sobran, empezando por los 2 mil transitorios,
más otros 2,542 petroleros de planta. Se trata de una reducción
del 75.7% de la actual plantilla laboral.
Administración y charros negocian más
El 15 de agosto, se publicó en
la prensa que “en Pemex se sigue un proceso deliberativo (sic) para
determinar la cantidad de trabajadores sindicalizados que podrían ser
movilizados, de unos 16 mil que el año pasado se encontraban sin materia
de trabajo”.
Según la información lo anterior se
lleva a cabo para “una aplicación más ágil, oportuna
y generalizada” de la cláusula 85 del Contrato Colectivo de
Trabajo, pactado con la paraestatal para el bienio 2007-2009, conforme al
anuncio que hizo en su momento el director general de Petróleos
Mexicanos, Jesús Reyes Heroles.
“La Comisión Nacional
Mixta de Reacomodo, encargada de resolver la situación laboral del
personal adscrito a instalaciones y/o equipos fuera de operación de
Pemex, efectúa sesiones de trabajo en las que se toman diversos acuerdos
para dar agilidad a los movimientos, se asienta en una resolución del
Instituto Federal de Acceso a la Información, sobre un recurso presentado
por un ciudadano” (Pérez M. en www.mileniodiario.com).
Pemex
“considera que el proceso deliberativo no concluirá hasta en tanto
se suscriba el Convenio Administrativo Sindical y se ratifique ante la Junta
Federal de Conciliación y Arbitraje, para ser aplicado en los centros de
trabajo”.
Esto es, administración y charros ya están
negociando los movimientos que podrían incluir despidos iniciales de 16
mil trabajadores.
Plazas actuales de trabajo en Pemex
De acuerdo a la Memoria de Labores 2007 de Pemex,
publicada en marzo de 2008 (en www.pemex.com), al 31 de diciembre de 2007,
laboraban en Pemex 147 mil 275 empleados, siendo 129 mil 606 plazas definitivas
y 17 mil 669 temporales.
Entidad |
Total |
Definitivas |
Temporales |
|
|
|
|
Pemex Exploración y Producción |
51,259 |
39,607 |
11,652 |
Pemex Refinación |
46,914 |
43,205 |
3,709 |
Pemex Petroquímica |
14,245 |
14,158 |
187 |
Pemex Gas y Petroquímica Básica |
12,728 |
11,660 |
1,063 |
Pemex Corporativo |
22,039 |
20,976 |
1,063 |
|
|
|
|
TOTAL |
147,185 |
129,606 |
17,674 |
|
|
|
|
De este total, los trabajadores sindicalizados en el STPRM, con
registro No. 1131, son 91 mil 911, según información de la
Dirección General de Registro de Asociaciones de la STPS (en
www.stps.gob.mx/asociaciones_sindicales). Existe una fuerte proporción
(37.6%) de empleados llamados “de confianza”, especialmente en las
áreas administrativas del Corporativo de Pemex. Además, 70 mil
trabajadores laboran subcontratados por “terceros”, por supuesto,
carentes de derechos y en condiciones laborales miserables. En las plataformas
marinas, de 18 mil petroleros que allí laboran, 14 mil son de empresas
contratistas. Del total general, el 32% de las plazas en Pemex las ocupan los
contratistas.
CCT 2007-2009 vigente
El Contrato Colectivo de Trabajo
vigente 2007-2009 (en www.pemex.com) indica en la cláusula 85 las
acciones que se siguen en el caso de movimiento de
personal.
CAPÍTULO XIII
MOVIMIENTOS DE
PERSONAL
CLÁUSULA 85. El patrón tendrá
libertad para movilizar a sus trabajadores sindicalizados en toda la
República Mexicana, siempre que estas movilizaciones obedezcan a la
necesidad de que los trabajadores laboren dentro de su misma especialidad y sin
perjuicio de su categoría.
Las movilizaciones podrán tener
efecto en los siguientes casos: I. Cuando se haya agotado o disminuido la
materia de trabajo. II. Cuando haya exceso de trabajadores en determinado
centro o unidad de trabajo. III. Cuando se requieran los servicios de los
trabajadores por razón de su experiencia, especialidad o aptitudes en
otro centro de trabajo. En los casos I y II, la
movilización no ocasiona vacante, y en el III sí la
ocasiona. En caso de que la movilización se motive por la tercera causa
señalada, el trabajador movilizado deberá ser ascendido a la
categoría inmediata superior. En caso de que la movilización se
motive por la primera o segunda de las causas apuntadas y el patrón cubra
la vacante del trabajador movilizado, la movilización quedará sin
efecto y el trabajador afectado regresará con todos sus derechos al
puesto de donde salió, siendo por cuenta del patrón todos los
gastos erogados por la movilización.
Las comisiones especiales que
se confieran a los trabajadores en forma temporal, sin que ello se deba a la
necesidad de cubrir una vacante, no se considerarán como
movilizaciones.
En los casos de movilizaciones masivas, entendido como
tales aquéllas que afecten a grupos de 30 -treinta- o más
trabajadores sindicalizados de un mismo centro de trabajo, que obedezcan a las
causas señaladas en los incisos I y II del párrafo
segundo, se les promoverá a la categoría inmediata superior a la
que ostenten permanentemente en el momento de la movilización ...
Movilizarse contra la privatización de Pemex
Los despidos en Pemex solamente se
podrán evitar impidiendo la reforma energética del PRI y del PAN.
Este es el contexto político. Desde ahora, sin reforma, las
cúpulas de Pemex y del STPRM preparan los despidos disfrazados de
“movilización” de trabajadores que carecen de materia de
trabajo. Esta será perdida si se llegara a aprobar la reforma.
Los
petroleros no debemos esperar a que ocurran los despidos. Para ello, es preciso
movilizarse junto al pueblo de México en defensa de Pemex. La
privatización es desfavorable para la nación en múltiples
aspectos, los despidos de trabajadores son únicamente la consecuencia y
no precisamente la más importante. La privatización
afectaría el empleo de los petroleros pero, más aún, el
derecho de la nación sobre sus recursos naturales energéticos y
sobre el patrimonio colectivo de su infraestructura física. A la lucha
petroleros. ¡Unidos venceremos! (b212, 20 ago 2008).
Enfrentamiento de petroleros con golpeadores durante la toma del edificio sindical del STPRM
FOTO J. Villaseca, en www.jornada.unam.mx