EL PRI provoca a la nación
El PRI presentó su propuesta de
reforma energética consistente en reformas y adiciones a diversas leyes
secundarias en materia petrolera. El PRI ha difundido por la televisión
privada que se trata de “Modernización sin
Privatización”. Es, exactamente, al revés. Las iniciativas
del PRI no modernizan a Pemex y sí la privatizan. El PRI provoca a la
nación pretendiendo engañarla. Pero, las propuestas del PRI, como
las del PAN son inconstitucionales y deben desecharse.
Iniciativas privatizadoras
El senador Manlio Fabio Beltrones anunció
ayer 23 de julio que su partido, el Partido Revolucionario Institucional (PRI),
“propone una reforma energética” para modificar varias de las
leyes secundarias en materia petrolera. Estas son la Ley de la
Administración Pública Federal, la Ley Orgánica de Pemex,
la Ley de la Comisión Reguladora de Energía y la Ley Reglamentaria
del Artículo 27 Constitucional en Materia Petrolera; es decir, las mismas
que Calderón y el PAN pretenden modificar. Además, se agregan
reformas a la Ley de Obras Públicas y Ley de Entidades Paraestatales,
así como nuevas leyes, tales como, la Ley de la Comisión Nacional
Reguladora y la Ley para la Transición
Energética.
¿Para qué modificar a la Ley de la
Administración Pública Federal? Para otorgarle facultades
adicionales a la secretaría de energía (Sener), de manera que,
promueva la intervención privada en la industria energética, y
para “regular” todas las fuentes de energía. Eso, es lo mismo
que proponen Calderón y el PAN. “Regular” es la clave dictada
por el Banco Mundial.
Estas propuestas, de entrada, son inaceptables
porque conducen a que las demás iniciativas solamente detallen como se
haría tal “regulación”, sinónimo de
privatización. Las propuestas son inconstitucionales porque contravienen
a los artículos 25, 27 y 28 constitucionales.
Reiteramos que esta
Ley, propuesta por el PAN y ahora por el PRI, es la misma que ya fue aprobada
por el Senado, el 17 de abril de 2007, con una votación de 94 votos a 0
(cero). Esta reforma fue auspiciada y redactada por el senador Francisco
Labastida Ochoa (PRI). Esto es, el PRI no solamente le hace el juego sucio al
PAN sino que es coautor de la misma reforma privatizadora.
“Autonomía de gestión” pervertida para Pemex
¿Para qué reformar a la Ley Orgánica de Pemex? Para hacerla
“congruente” con la Ley (reformada) de la Administración
Pública, ya que, en ésta se contienen nuevas facultades que antes
eran funciones de Pemex, tales como, las relacionadas con las plataformas de
producción y exportación, y la cuantificación de reservas
de hidrocarburos.
En la iniciativa del PRI se hacen esas
“adecuaciones”, lo mismo que en propuestas del PAN. El PRI, igual
que el PAN, propone otorgarle “Autonomía de gestión” a
Pemex. He allí la otra clave de los dictados del Banco Mundial.
El
PRI y el PAN proponen un gobierno corporativo para Pemex que incluye modificar
la integración del Consejo de Administración. PAN y PRI proponen
15 miembros, de ellos, 6 representantes del gobierno en turno y 5 charros
sindicales del STPRM; así como 4 consejeros adicionales, que el PAN llama
“independientes” y el PRI “profesionales”. Ambos
partidos proponen que esos “consejeros” sean designados (sic) por el
Ejecutivo federal; ahora, el PRI agrega que “serán ratificados por
el Senado”, es decir, simple maquillaje.
Lo más importante
son las funciones que realizaría ese gobierno corporativo que
incluiría la toma de decisiones unilaterales sobre inversiones
(cualquiera que sean), contratos (de todo tipo) y endeudamiento. Lo mismo
propone el PAN, ahora el PRI adicionó que “la autorización
del techo” de endeudamiento la hará el Congreso y la
secretaría de hacienda (SHCP).
Bonos ciudadanos para especuladores
En la propuesta de reforma a la Ley Orgánica
de Pemex, el PRI y el PAN proponen que Pemex emita “bonos
ciudadanos”. La intención es la misma: “convencer” a la
población con mentiras. Además de tratarse de
“migajas” y son contraproducentes porque la nación no
necesita ningún bono ya que a ésta le pertenece la propiedad del
petróleo y de PEMEX; tanto el PRI como el PAN, proponen simples
falacias.
Esos bonos serían adquiridos por las personas
físicas “constituidas como sociedades de inversión
especializadas en fondos para el retiro, fondos de pensiones, sociedades de
inversión para personas físicas y otros intermediarios financieros
que funjan como formadores de mercado”. ¿Quiénes serían
esas lindas personas? ¡Los especuladores, jamás ningún ciudadano!
Desintegración de Pemex
El PRI propone la creación de 4 filiales: ductos,
refinación, transporte, almacenamiento y distribución. ¿Por
qué esta propuesta? Para desintegrar a Pemex y privatizarla a pedacitos.
Es lo mismo que propone el PAN. El PRI, experto demagogo, señala que
“Pemex será el operador”; se trata de palabras huecas. Luego,
se indica que el operador “puede celebrar contratos de arrendamiento para
equipo e instalaciones”. ¿Quiénes serían los
dueños de esa infraestructura? Los
contratistas.
“Tratándose de la construcción de
ductos y los servicios de refinación de petróleo, transporte,
almacenamiento y distribución de hidrocarburos y derivados de
éstos, Petróleos Mexicanos podrá contratarlos (sic) con sus
organismos descentralizados de carácter estratégico
filiales”.
El enredo anterior tiene una significación muy
simple. Pemex otorgaría contratos a “sus mismas” filiales que
no serían suyas sino privadas ya que estarían en manos de
contratistas. A diferencia del PAN, la misma propuesta burda la presenta el PRI
como privatización disfrazada.
Contratismo a discreción e inconstitucional
Las iniciativas del PRI
proponen seguir con el contratismo que ha corroído a Pemex. En el caso de
la Ley Orgánica en materia de Adquisiciones, Arrendamientos, Servicios y
Obras públicas, el PRI propone lo mismo que el PAN, incluyendo que haya
“contratos por adjudicación directa e invitación a cuando
menos tres personas”.
Igual que el PAN, el PRI propone que
“en los casos de desarrollo e innovación tecnológica”
(sic), el Consejo de Administración (corporativo) optaría
“por no llevar a cabo el procedimiento de licitación
pública”. Esta disposición privatizadora incluye a TODO tipo
de contratos, especialmente, en las aguas del Golfo de México,
interés central del imperialismo.
Las iniciativas del PRI
consideran explícitamente la participación privada (extranjera) en
la “Exploración” de hidrocarburos. El otorgamiento de
contratos a los particulares lo prohíbe la Constitución y, tanto
el PAN como el PRI, apoyan la ruptura de la legalidad
constitucional.
“Regular” para privatizar
Lo mismo que el imperialismo ha hecho en otras
partes del mundo, se pretende seguir haciendo en México:
“Regular” al sector público, es decir, privatizarlo. El PRI,
como el PAN, solamente repiten los dictados imperiales, la iniciativa que
presentan no es propia.
Exactamente igual que el PAN, el PRI propone la
reforma a la Comisión Reguladora de Energía (CRE). ¿Para
qué? Para que se siga encargando de la privatización
energética furtiva. A la fecha, con los últimos datos disponibles,
más del 47% de la capacidad de generación eléctrica total a
nivel nacional es PRIVADA. La industria eléctrica de México ya
está desnacionalizada. ¿Cómo ha ocurrido? Mediante el
otorgamiento de 744 permisos privados de generación a otras tantas
transnacionales y sus filiales.
Algo similar ocurre en el caso de la
distribución, transporte y almacenamiento de gas natural,
distribución y transporte de gas LP por medio de ductos,
exploración y producción de gas natural seco.
¿Por
qué no se ha detenido este proceso? Porque las indicaciones del Banco
Mundial consisten en privatizar el 100% de las industrias eléctrica,
petrolera y del agua.
El PRI, tratando de pasarse de audaz, ahora propone
una Comisión Nacional Reguladora (CNR), el PAN “solamente”
una Comisión (Reguladora) del Petróleo. ¿Qué
haría la CNR? Regular todas las actividades del sector energético
para privatizarlas mediante el otorgamiento de permisos privados.
La
fórmula de la CRE le ha resultado exitosa al imperialismo,
transnacionales y gobiernos neoliberales en turno. Lo que proponen el PAN y,
ahora el PRI, es lo mismo que han venido realizando a la fecha entregando el
patrimonio nacional a las corporaciones imperialistas.
¡Alto a la provocación del PRI!
Las iniciativas del PRI, como las del
PAN, deben ser DESECHADAS por ser lesivas a la nación. El PRI, al
anunciar su propuesta sin consultar a la nación, dinamitó el
Debate Oficial que organizó el propio Senado. No obstante haber sido un
debate EXCLUYENTE, la mayoría se expresó en contra de la reforma
propuesta por Calderón. Pero, el PRI, lejos de atender los reclamos y
señalamientos prefirió formular “otra” propuesta que
únicamente “maquilla” mal a la del PAN.
El PRI y sus
voceros consideran que con el anunció que hicieron ya
“tronaron” a la Consulta Popular del 27 de julio. No es así.
El pueblo de México tiene tomada su decisión, el consenso casi
unánime es contra la privatización energética.
Lo
que si es cierto es que la promoción de la Consulta ha sido floja, que no
hay coordinación nacional y que las preguntas las hicieron “con las
patas”, como lo advertimos oportunamente. Los supuestos
“expertos” son unos ineptos. En una de las preguntas excluyeron la
“exploración” de hidrocarburos, misma que el PRI propone que
se privatice. ¿Fue deliberado o las preguntas las formulo el PRI, y/o Aznar
y operadores? Ebrard, sin ver, aprobó esas preguntas.
A pesar de
ello, el 17 no harán falta votantes sino urnas y boletas. La Consulta se
puso en manos del aparato burocrático del PRD que prefiere negociar con
el gobierno privatizador. La cúpula oficial del PRD ha anunciado,
también, que presentará su propuesta de preforma
energética. Más valdría que no lo hiciera porque sus
propuestas son privatizadoras y porque la alianza PRI-PAN no les daría
oportunidad de nada. Si van a formular una propuesta por lo menos debía
ser digna y a fondo.
Pase lo que pase, el movimiento no termina el 27 de
julio ni mucho menos. A partir del mismo 27 se inicia la siguiente etapa, misma
que debemos organizarla mejor, con propuestas organizativas y políticas
superiores. El Debate Popular continúa. Más organizaciones
políticas, culturales y sociales debemos sumarnos para ser capaces de
estructurar acciones mayores. ¡Abajo la reforma privatizadora del PAN!
¡Abajo la reforma privatizadora del PRI! (b186, 24 jul 2008).
Plataformas marinas de Pemex en el Golfo de México