La presencia de 5 charros del
sindicato petrolero en el Consejo de Administración
de Pemex es lesiva al interés nacional. Esos charros
no representan ni al sindicato ni a los trabajadores
petroleros. Son beneficiarios, al igual que los
empresarios-consejeros, del patrimonio nacional.
El gobierno habla mucho del
"cambio" pero mantiene vigentes a las estructuras más
atrasadas, obsoletas y resistentes al cambio
democrático. Nada parece indicar que el foxismo tenga
la mínima intención de modificar sus relaciones con
el charrismo sindical. Los charros petroleros no
deben pertenecer al Consejo de Administración de
Pemex, porque se trata de delincuentes además de
ignorantes. Si Fox los sostiene es porque está
apoyando al corporativismo sindical y trata de
reforzar el poderío del charrismo.
Lo anterior se muestra también en
el caso electricista. Bien sabe Fox que, tanto en el
STPRM como en el SUTERM, los trabajadores repudiamos
a las camarillas encabezadas por Carlos Romero
Deschamps y Leonardo Rodríguez Alcaine. Hemos seguido
la vía legal y, sin embargo, no hemos obtenido
respuesta de parte de las autoridades laborales. A la
nación mexicana consta que esos grupos de poder
actúan al margen de la legalidad. Aún así el gobierno
los apoya pero los trabajadores insistiremos y los
venceremos.