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FRENTE DE TRABAJADORES DE LA ENERGÍA, de MEXICO
Organización obrera
afiliada a la Federación Sindical Mundial
Conferencias de la
Resistencia
Villa de Cortés,
México
16 de Junio de 2007.
Lo que es la Privatización Eléctrica Furtiva
J.
López-Islas
Frente de
Trabajadores de la
Energía
energia@fte-energia.org
1. Antecedentes.
El nacimiento de la industria eléctrica en
México, en el siglo XIX, es producto de la demanda de energía para
la industria Minera y Textil, principalmente, y ésta era proporcionada
exclusivamente por empresas extranjeras.
Uno de los problemas que
enfrentaba el país era que las transnacionales no invertían en
generación eléctrica para el servicio público y domestico,
centrando su inversión solo en lo que significaba una ganancia segura,
quedando fuera de sus planes de negocios y de expansión de
generación grandes regiones del territorio nacional.
2. La Nacionalización de la Industria Eléctrica en 1960.
Esta fue motivada, entre
otras razones, por las altas tarifas eléctricas fijadas arbitrariamente
por las empresas transnacionales de la energía, por el mal servicio que
proporcionaban y, en segundo lugar, por la exigencia de los trabajadores
electricistas en su afán por lograr una industria eléctrica
independiente y en manos de la nación.
A partir de entonces, el
Estado se hizo cargo de la prestación del servicio público de
energía eléctrica propiciando la electrificación de casi la
totalidad del territorio nacional.
3. LSPEE 75-92.
En 1975, se logró la primera ley de servicio
público de energía eléctrica (LSPEE). Con la
modificación a ésta Ley secundaria en materia de energía
eléctrica, por Carlos Salinas de Gortari, en el año de 1992, se
inicio la privatización de la industria eléctrica nacionalizada,
en cumplimiento de los acuerdos de Washington.
Algunas de las
modificaciones a la LSPEE fueron la creación de la Comisión
Reguladora de Energía (CRE) y de 5 figuras jurídicas
inconstitucionales.
a) PRODUCTOR INDEPENDIENTE DE ENERGÍA
(PIE).
b) COGENERACION.
c) IMPORTACION Y EXPORTACION.
d)
PRODUCTOR EXTERNO DE ENERGIA y
e) AUTO ABASTECIMIENTO.
Estas
figuras representan una trasgresión a la Constitución mexicana en
materia eléctrica, cuyas funciones están reservadas exclusivamente
a la nación. (Párrafo sexto del artículo 27
constitucional). De acuerdo a la Carta Magna, corresponde a la nación
generar, transmitir, trasformar y distribuir energía eléctrica que
tenga por objeto el servicio público. En esta materia no se otorgaran
concesiones a los particulares.
4. Iniciativas privatizadoras.
El 2 de febrero de 1999, la INICIATIVA
ZEDILLISTA, planteó modificar los artículos 27 y 28 de la
Constitución Mexicana. Esta propuesta fue rechazada por la Cámara
de Senadores y por la Suprema Corte de Justicia de la Nación en
2002.
En 2002, hubo una INICIATIVA FOXISTA. Esta insistía en
modificar la Constitución para abrir el sector a la inversión
privada, pero no prosperó. Ahora, Calderón vuelve a insistir al
respecto.
5. Medidas privatizadoras.
Con las modificaciones legislativas de 1992, se
constituyo la CRE, instancia que ilegalmente otorga los ilegales permisos para
generar energía eléctrica por los particulares.
Los
contratos ilegales con los permisionarios eléctricos les garantizan un
precio inalterable en el gas natural, insumo básico de las plantas de
ciclo combinado, independientemente de su precio en el mercado. Es decir, que en
este caso, si se dan variables en el precio del gas éstos aumentos
serán absorbidos por la Comisión Federal de Electricidad (CFE)
mientras que, las transnacionales, estarán blindadas en sus ganancias
pues, además los contratos, establecen el compromiso de la CFE en la
compra de los excedentes en generación de los privados se requieran o
no.
Actualmente, la CFE ha dejado de producir nueva generación
dedicándose solamente a comprar la energía generada por los
productores privados. Esto ha conducido a la SALIDA DE MULTITUD PLANTAS DE
GENERACION PROPIA.
6. Situación presupuestal.
El PRESUPUESTO DE
HACIENDA solo sirve para que la industria siga funcionando sin
considerar un presupuesto necesario para su expansión en
generación propia.
El gobierno federal sigue insistiendo en la
modificación a las leyes secundarias y, ahora, también plantean
modificar a la Constitución para beneficiar a las transnacionales
legalizando la inversión privada.
El impulso de campañas
permanentes en los medios, para inducir en la población la idea de que es
ineludible la inversión privada en las empresas públicas, con el
mito de la falta de recursos para el desarrollo de la industria nacional, es una
argucia engañosa.
Todas estas medidas se llevan a cabo con el
objetivo de desmantelar a la industria energética y pervertir el concepto
de servicio público.
7. Situación actual.
A la fecha, continúan
otorgándose permisos privados en generación otorgados a los
particulares. Al 27 de abril de 2007, la información de los permisos
privados indicaba que, son un total de 556 permisos otorgados por la CRE. La
capacidad eléctrica instalada correspondiente a esos permisos asciende a
22,930 MW. De ese total, 12,557 MW corresponden a la figura de Productor Privado
Independiente (PIE) con 21 permisos. Es decir, se trata de permisos grandes.
Otros 5,881 MW corresponden a la figura de Autoabastecimiento con 443
permisos.
El último permiso es MUY IMPORTANTE. Se
trata de un permiso en la modalidad de PIE, otorgado con fecha 17 de mayo de
2007, mediante permiso número E/625/PIE/2007 y resolución
número RES/136/2007. El permiso se otorgó a Fuerza y
Energía de Durangp, S.A. de C.V. para instalar una central con una
capacidad de 596 MW. Solamente con éste permiso la privatización
se eleva al 37% (sin contar los permisos a Pemex y a CFE). Es decir, que hoy
existe una industria eléctrica paralela e ilegal en manos privadas con el
beneplácito del gobierno federal y, por supuesto, del norteamericano.
Se busca, además, otorgarle a la CRE la función de fijar
las tarifas eléctricas que hasta ahora corresponde a la secretaria de
hacienda.
También, se impulsa a rajatabla la propuesta
gubernamental de otorgar Autonomía de Gestión a
PEMEX, CFE y LyFC. (De ésta autonomía, ya gozan las empresas
paraestatales). Esta propuesta la comparten todos los partidos políticos.
La diferencia estriba en que la “autonomía” que proponen los
neoliberales radica en la plena y unilateral capacidad de los funcionarios
“empresariales” de las paraestatales para hacer negocios con las
transnacionales en detrimento de las empresas públicas y en contra de
todos los mexicanos.
Mientras todo esto ocurre, muchos intelectuales y
políticos de todas las tendencias y colores, TODOS,
siguen repitiendo que se trata de “intentos” del gobierno federal
para privatizar el sector energético. Es inútil tratar de
convencerlos y/o informarlos. NADIE quiere darse por
enterado de que no son intentos ni planes para una privatización
futura.
La privatización energética YA
ESTA en marcha. Empezó en 1992, hace 15 años y
aún no se dan por enterados. A la fecha, el 37% de la industria
eléctrica nacional es de propiedad PRIVADA. Se trata de 21 mil 121 Mw de
capacidad eléctrica instalada pri-va-da. TODA la
industria del gas es PRIVADA. Tratándose de la distribución,
transporte y almacenamiento de gas natural, así como, de la
exploración y explotación de gas seco. En materia petrolera, las
transnacionales YA se apoderaron de la planeación, exploración de
petróleo, perforación de pozos, principalmente en la plataforma
marina. Lo mismo ocurre en la industria
eléctrica.
“Acelerar la privatización
energética”, de eso se trata. Las corporaciones transnacionales
quieren disfrutar de la rentabilidad actual de PEMEX y de CFE. A esas
corporaciones no les interesa que el petróleo crudo mexicano se agote en
el corto plazo. Mientras más pronto puedan extraerlo y exportarlo, mejor,
después simplemente se irán. Por ahora, les interesa el negocio
floreciente y la ganancia rápida y cuantiosa.
8. Respuesta a las privatizaciones.
El 27 de septiembre de 2006, a convocatoria del
Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), se formó el Frente Nacional en
Defensa de la Soberanía Energética. Entre sus objetivos
está la difusión a nivel nacional de la lucha contra las
privatizaciones y la movilización popular para detener la embestida
privatizadora dándole continuidad a la resistencia emprendida por el SME
en 1999.
9. Propuestas del Frente de Trabajadores de la Energía de México.
1- Restablecer
la legalidad constitucional rota por los gobiernos en turno
al vulnerar flagrantemente lo dispuesto por los artículos 25, 27 y 28
constitucionales en materia energética. La ruptura es cada vez más
grave debido al otorgamiento de cientos de permisos privados inconstitucionales
tanto en la industria petrolera como en la eléctrica.
2- Orientar
los objetivos, las actividades y la renta de la industria petrolera con
criterios de beneficio social. La industria nacionalizada no puede, ni debe,
reducirse a simples criterios mercantiles sino al desarrollo social. Esto supone
una Política Energética Independiente formulada, desarrollada,
concretada y evaluada por los investigadores, ingenieros, técnicos y
trabajadores de la energía.
3- Explotar racionalmente los recursos
naturales energéticos que son propiedad de la Nación, no del
Estado ni menos de los gobiernos en turno. A este respecto, es preciso un
Programa Nacional de Energía, así como los correspondientes Plan
Nacional de Hidrocarburos, Plan Eléctrico Nacional, y diversos programas
estratégicos.
4- Impulsar la investigación
científica y el desarrollo tecnológico que permita la
transición energética hacia otras fuentes alternas.
Desafortunadamente, al momento, el mundo no está preparado. En
México ha existido un sistemático y planeado bloqueo oficial al
desarrollo tecnológico propio.
5- Reorganizar todo el proceso de
trabajo energético con base en la intervención de los trabajadores
organizados. Esta es la lucha en el espacio-tiempo del saber obrero que requiere
de un nuevo tipo de organización, a través de Consejos
Obreros.
6- Participar formalmente de los planes y proyectos de
Integración Energética Latinoamericana y
Caribeña.
7- Derogar todas las reformas inconstitucionales a la
legislación petrolera y eléctrica; efectuadas a través de
las leyes secundarias, cancelar todos los permisos privados en materia
petrolera, de gas (transporte, distribución y almacenamiento) y
generación de energía eléctrica (en todas las modalidades);
cancelar los Contratos de Servicios Múltiples; y las franquicias a las
gasolineras.
8- Otorgar a Pemex, CFE y LFC los recursos necesarios para
financiar su desarrollo integral en los diferentes proyectos
estratégicos.
9- Respetar el derecho de los trabajadores a
organizarse sindicalmente, democratizar a su organización sindical y
reorganizarla en todos los centros de trabajo del país.
10-
Impulsar la participación social organizada en la vigilancia del
funcionamiento y desarrollo de la industria energética
nacional.
11- Modificar radicalmente la política de
extracción de petróleo crudo y su exportación estableciendo
diferentes plataformas de producción, continental y marina, a las
actuales, reorientando el proceso productivo a la transformación de los
energéticos primarios.
12- Suspender la exportaciones de
petróleo crudo porque la relación reservas
probadas/producción actual es mucho menor a 20 años, de hecho
menos de la mitad.
13- Suspender los proyectos eléctricos, tipo
ciclo combinado, a base de gas natural.
14- Construir el número
necesario de refinerías energéticas.
15- Impulsar un
Programa de cogeneración eléctrica entre la industria petrolera y
la eléctrica.
16- Desaparecer a la Comisión Reguladora de
Energía por ser lesiva al interés de la
nación.
Consideramos que la inclusión de proyectos
nucleares de potencia debe estudiarse más detenidamente y mejor. Existen
razones al respecto, entre otras,
a) México no tiene capacidad de
financiamiento nuclear, esos proyectos son muy costosos.
b) Las sociedades,
en general, tiene una alta percepción del riesgo y no desean
instalaciones nucleares de potencia.
c) Salvo EU, Francia y Japón, la
tendencia mundial es sin energía nuclear de FISIÓN a base de
uranio y/o plutonio.
d) La energía nuclear de potencia, tipo
fisión, tiene muchos problemas tecnológicos de no resueltos.
e)
Es inconveniente para México la dependencia total del combustible
nuclear, por razones políticas y militares.
Como alternativa
proponemos:
17- Impulsar las actividades de investigación y
desarrollo en materia de energía, para el soporte científico y
tecnológico a la industria energética nacionalizada de
México. Esto incluiría el desarrollo de proyectos sobre FUSION
termonuclear controlada.
18- La integración de los actuales
institutos del sector (IMP, IIE, ININ) en uno solo, el Instituto Nacional de
Energía, dedicado al estudio de todas las fuentes
energéticas.
19- Asimismo, proponemos la INTEGRACIÓN de la
industria eléctrica nacionalizada con base en la Ley Reglamentaria del
Artículo 27 Constitucional en Materia de Energía Eléctrica
(Ley eléctrica del FTE).
20- Nuestra propuesta considera,
también, que los trabajadores y pueblo de México debemos construir
una sólida unidad democrática y solidaria para rescatar a la
industria energética de México en todos los sentidos. Dado el
avance neoliberal, está planteada la necesidad de una nueva
Nacionalización que implica 3 banderas esenciales:
a) El derecho
de propiedad colectiva social,
b) El desarrollo de una Política
Energética Independiente,
c) La integración del proceso de
trabajo energético.
En consecuencia, proponemos la
RENACIONALIZACION de la industria energética de
México (petróleo, gas, energía eléctrica y el
agua).
Las propuestas energéticas que proponemos son parte del
Programa Obrero cuyas banderas enarbola el FTE de México.
Este
histórico proceso requiere socializar las propuestas formuladas entre los
trabajadores y forjar la unidad conciente y organizada para lograr
los objetivos acompañando este proyecto con la correspondiente
movilización social y acciones propias de la dinámica proletaria
concreta.
10. Conclusiones.
La defensa de las empresas públicas no es
tarea exclusiva de los sindicatos. Esta es una tarea de todos los mexicanos
concientes, en defensa de la industria energética al servicio del pueblo
y para el desarrollo independiente de nuestra nación. Esto se
logrará solamente con la movilización de las organizaciones
sociales y trabajadores mexicanos.
¡Salud y Revolución Social!
Frente de Trabajadores de la Energía,
de México
