energia@fte-energia.org
prensa@fte-energia.org
Organización obrera afiliada a la FEDERACIÓN SINDICAL MUNDIAL

Volumen 6, Número 77, julio 27 de 2006

30 años de la huelga eléctrica de la Tendencia Democrática

16 de Julio de 1976

En el curso de la noche de ayer y la madrugada de hoy, cientos de miles de gente ajena a los electricistas y miles de soldados del ejército federal ingresaron a todos los centros de trabajo de la industria eléctrica nacionalizada en todo el país. Con esta acción el Estado ha impedido el ejercicio del derecho de huelga consagrado por la ley. Este es un atropello más a las conquistas de quienes hemos marchado a lo largo y ancho del país defendiendo los mas caros anhelos de los mexicanos. Ante esta situación de agresión desproporcionada, los electricistas de la Tendencia Democrática no arriaremos las banderas, continuaremos en lucha.

La huelga para mejor ocasión

Así se publicó en los diarios vespertinos de la capital mexicana aquel 16 de julio de 1976. En todos los medios se dio la noticia al siguiente día.

Desde la noche anterior, se había producido una enorme tensión en todos los centros de trabajo electricistas. En varias partes, los esquiroles y soldados ingresaron en la oscuridad. En las centrales generadoras, los electricistas se resistieron a salir y se concentraron en los talleres sin interrumpir el trabajo. Conforme transcurría la noche se conocía que, en todo el país, se ejecutaba el mismo operativo. Muchos trabajadores se dispusieron a resistir negándose a entregar las instalaciones. Se había tomado el acuerdo de evitar el enfrentamiento más aún con la fuerza armada. Mientras los soldados del ejército federal, fuertemente armados, se disponían a tomar posesión de las instalaciones, la dirección del movimiento propuso eludir la confrontación directa en desiguales condiciones.

Firmeza y prudencia obrera

En algunas partes la situación fue conflictiva. En Celaya, los compañeros se negaban a salir. Los soldados se trasladaron a tomar una subestación en Jaral del Progreso; en el camino, campesinos armados salieron a su paso. Pueblo Nuevo se había inundado, los electricistas se atrincheraron en el interior de los centros de trabajo negándose a abandonarlos; el pueblo acudía solidario e incluso ofreció armas. La recomendación era no favorecer una situación que agravara el conflicto, la respuesta debía de ser política.

En las primeras horas del día se iniciaron los problemas. En varias centrales se produjeron fallas, líneas aéreas de transmisión eléctrica cayeron, hubo apagones, también accidentes. Los invasores reclutados por los charros sindicales, eran desempleados, campesinos, merengueros, vendedores ambulantes. Obviamente, desconocían la operación y funcionamiento de la industria eléctrica. En los centros de trabajo, se amontonaban temerosos apoyados por el ejército.

Movilización y solidaridad del pueblo

Ante la desproporcionada represión política-militar del Estado intensificamos la movilización. Todos fuera del trabajo nos convertimos en brigadistas de tiempo completo y acudimos a la solidaridad del pueblo enarbolando nuestras banderas: 1- Integración de la Industria Eléctrica Nacionalizada, 2- Unidad Sindical Democrática, 3- Contratación Colectiva de Trabajo Unica. Estas banderas siguen vigentes y no caerán jamás de nuestras manos. ¡Este puño sí se ve! ¡Viva la Tendencia Democrática!

Esta página es construida por trabajadores del sector energía.
La información contenida puede citarse total o parcialmente, mencionando la fuente.


Comentarios Comisión de Energia Suscribirse Comisión de Prensa