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Organización obrera afiliada a la FEDERACIÓN SINDICAL MUNDIAL

Volumen 6, Número 72, febrero 28 de 2006

El Charrismo, en crisis, sigue manipulando a los trabajadores

¡Charros, charros!

Deplorable imagen del sindicalismo en México. Mafias de criminales afiliados a la CIOSL y ORIT han destruido al sindicalismo mexicano durante más de 70 años. El Congreso del Trabajo de los charros sindicales no tiene remedio. Es preciso terminar con esa simulación, corrupción y crimen.

Otra reelección entre mafias sindicales

Víctor Flores Morales, uno de los charros sindicales más corruptos y violentos “amenazó” con reelegirse, una vez más, al frente del Congreso del Trabajo (CT), organismo cúpula del corrompido sindicalismo mexicano que tiene como pilar a los charros de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), organismo afiliado a la CIOSL y a la ORIT, todos responsables directos de destruir al sindicalismo de México a lo largo de 7 décadas.

Se dijo que, si Flores seguía con su amenaza, siete (7) organizaciones abandonarían al CT, entre ellas, la CROC, la CROM, la COR, los sindicatos minero, petrolero y el SME (Rivera M.A., en La Jornada 14 feb 2006). En conferencia de prensa varios “líderes” anunciaron que habían firmado un “Acuerdo por la Transparencia y Legalidad del Congreso del Trabajo” (Muñoz P., en La Jornada 14 feb 2006).

La información es extraña porque, el sindicato petrolero pertenece a la CTM y ésta apoya a Flores; el SME, por su parte, no tiene nada que hacer en el CT. Que Carlos Romero Deschamps, charro petrolero firme acuerdos entre charros no extraña pero que, lo mismo haga Martín Esparza, secretario general del SME, es una deshonra innecesaria, más aún después de 6 años de lucha contra la reforma constitucional de privatización eléctrica.

“Muerto insepulto” que oprime a los vivos

Los reporteros acostumbran llamar “líderes” a los charros sindicales. El 14 de febrero Napoleón Gómez del sindicato minero e Isaías González de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) reconocieron que el CT es un “muerto insepulto” utilizado “para fines personales”. Ambos charros dijeron buscar la renovación (sic) del CT y que impugnarían legalmente la reelección del otro charro.

Al otro día, el CT se volvió a dividir. Víctor Flores, charro del sindicato ferrocarrilero, no se reeligió solamente “prolongó” su mandato. Catorce charros, por su parte, eligieron a Isaías y a Napoleón como presidente y vicepresidente, respectivamente., quienes recibieron el apoyo de los charros del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) encabezados por Elba Esther Gordillo, representante personal de Fox al interior del PRI.

Isaías y Napoleón realizaron su acto en las instalaciones del CT, tomaron posesión de las oficinas y dijeron que serían los “cirujanos que revivirían al muerto”. Flores, se reunió en un hotelucho de su propiedad y allí se reeligió. Ambos actos fueron violentos, con la asistencia de grupos de golpeadores provistos de palos, tubos y otras armas, como acostumbra el charrismo de uno y otro bando.

De inmediato, los dos grupos de charros acudieron a la secretaría del trabajo y previsión social (STPS) a solicitar la llamada “toma de nota” que les permita acreditar legalmente la personalidad con que se ostentan. Los funcionarios foxista dijeron que analizarían “a fondo” las documentaciones pero trascendió que reconocerían a Flores. Los charros disidentes declararon que, si eso ocurriera, acudirían al amparo. ¡Já! Ambos grupos carecen de legitimidad, formalmente porque NADIE tiene mayoría y, políticamente, porque NINGUNO representa a los trabajadores. Ambos grupos son camarillas mafiosas de criminales desde hace más de medio siglo.

Fox y charros sindicales son aliados

Con celeridad inusitada, obviando toda higiene política, la STPS otorgó el 17 de febrero la toma de nota a Flores Morales para que siga al frente del Congreso del Trabajo ya que, según Francisco Salazar, secretario del trabajo foxista, contribuye a “la paz laboral, la democracia y la legalidad” (sic). El criminal ofreció diálogo a sus disidentes pero también, dijo prepotente, “están abiertas las puertas para el que quiera irse” y amenazó con retomar violentamente las instalaciones sindicales.

Los charros disidentes anunciaron que desconocían el reconocimiento otorgado por Fox a Flores Morales. De inmediato, un grupo de más de 100 golpeadores atacaron con violencia las instalaciones del sindicato minero-metalúrgico, ocasionando destrozos y robos.

Al otro día, 18 de febrero, se realizó un evento para conmemorar otro aniversario del CT. Las instalaciones de éste, que habían sido tomadas por los disidentes fueron entregadas. “Hoy es día de la libertad sindical”, dijo Napoleón. Los charros disidentes anunciaron la creación de una Coalición de Sindicatos Nacionales y Confederaciones por la Renovación aclarando que eso no significa que abandonen las filas del CT (Gómez C., León G., en La Jornada 19 feb 2006). La celebración oficial no se llevó a cabo, será después a puerta cerrada, en la casa presidencial con la asistencia de Fox.

Charrismo, pilar de las privatizaciones

Esta es la imagen del “sindicalismo” mexicano. Lamentable, vergonzosa, deplorable. Los charros sindicales NO representan a los trabajadores, sin embargo, mantienen un férreo control. En los recientes hechos, las bases estuvieron totalmente ausentes, todo fue una farsa entre menos de 30 “líderes”, en la ilegalidad total y contra los intereses obreros. Sin embargo, el gobierno procedió a “legitimar” al sector más degradado del charrismo sindical.

¿Por qué ocurre este deplorable espectáculo? Porque gobierno, transnacionales e imperialismo tienen en el charrismo sindical al pilar número 1 para llevar adelante su política neoliberal. Flores, que enfrenta centenas de demandas por fraude y robo, particularmente de los fondos de retiro de miles de ferrocarrileros, gángster que resuelve los asuntos sindicales mediante la violencia y el crimen es, sin embargo, un aliado estratégico de Fox. Flores, como TODOS los charros sindicales apoyan las privatizaciones de TODO, sea electricidad, petróleo, gas, seguridad social, educación, etc. así como la reforma laboral regresiva y antiobrera. Los charros sindicales, encabezados por Flores Morales, Gamboa Pascoe, Romero Deschamps, Isaías González, Napoleón Gómez, Hernández Juárez y demás charros, representan la infraestructura de criminales organizados que permite al gobierno hundir a los trabajadores y pueblo de México en la miseria.

Estrategia imperialista

¿Qué hace posible que el charrismo mantenga el control y la impunidad? ¡El apoyo directo del imperialismo! El charrismo sindical en México, que significa la desnaturalización de todos los sindicatos, la traición explícita y reiterada a la clase obrera, es una estrategia del imperialismo, diseñada y aplicada con éxito en México durante 7 décadas. La CIOSL y su organismo regional la ORIT han destinado miles de millones de dólares para crear esta monstruosidad que ha destruido al sindicalismo mexicano.

La mayoría (99.99%) de trabajadores mexicanos están secuestrados en sus propios sindicatos; los charros son los carceleros. Impotentes, los trabajadores mexicanos han perdido la fe en sus propias fuerzas, muchos ni ganas tienen de luchar. Sin embargo, otros nos mantenemos en lucha no obstante tantas vicisitudes. Los sectores que luchamos somos MUY pocos pero el futuro es de los que luchan.

¡Abajo el charrismo sindical!

El FTE de México propone a los trabajadores la lucha organizada y conciente para extirpar en serio al charrismo sindical. Nuestras propuestas implican la Reorganización democrática del movimiento obrero de México, enarbolando el Programa obrero que el FTE ha propuesto históricamente a los trabajadores mexicanos y a la Nación.
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