Número 41, Agosto 30 de 2003

Gerardo Barragán

En un ciclo de 52 años, desde el Cerro de la Estrella, aguardaban con silencio el paso de Las Pléyades. Los antiguos mexicanos esperaban que, después de medianoche, cruzaran el cenit sin que hubiera fin del mundo. Entonces se encendía el nuevo fuego y seguía la era del nuevo sol.

Esta vez, mirando el paso de Las Pléyades, Gerardo de Pachuca está dormido, en un tiempo circular, como Alfaqui mayor siguiendo al tiempo y al reloj de arena.

Más de 30 años trabajador nuclear y otros tantos sindicalista. Cultivó la química, la astronomía, la antropología, la historia. Ocupó un lugar al lado de su clase. Presidente de la Comisión Nacional de Vigilancia del SUTIN, siempre el delegado de su grupo (Química analítica), e inolvidable secretario de debates de los Congresos Nacionales de la época.

Estuvo presente en la historia del país y marchamos con las banderas de la Tendencia Democrática del SUTERM. Gerardo fue forjado por la experiencia proletaria más importante de las últimas décadas en México.

El sindicato ha de vivir la democracia como práctica permanente para la defensa de los intereses inmediatos e históricos de nuestra clase, fue la divisa con que creció el movimiento. Con nuestra generación, honesto y cabalmente honrado, participó en diversas aportaciones democráticas hoy patrimonio colectivo del movimiento obrero.

Los Estatutos del SUTIN, el Sindicato, el Contrato Colectivo de Trabajo, la propia Fuente de Trabajo, los 17 aumentos salariales en 6 años, la Legislación Nuclear Mexicana, el desarrollo de proyectos, el Edificio Sindical, la presencia internacional del sindicato, sus principios y programa, la ejemplar solidaridad de los nucleares, se conquistaron al calor de grandes luchas, encabezadas por el mismo grupo de amigos siendo secretario general david bahena; y, Gerardo allí estuvo. Así se recordó en la Despedida por sus compañeros y amigos.

Siempre con las banderas de los trabajadores de la energía, hasta la fecha (10 de agosto de 2003). Con Gerardo Barragán se van extraordinarias jornadas de lucha del sindicalismo nuclear en México, compartidas con la Tendencia Democrática de Electricistas y Nucleares, ahora con el FTE.

El cielo profundo viste de duelo.
¡Te recordaremos alegre, compañero de alma
extraordinaria, que seguirás tu tiempo!