Número 38, Mayo 30 de 2003

Sontang provoca a García Márquez

Susan Sontang es una escritora norteamericana, típica del posmodernismo, especializada en criticar cuanto huela a socialismo. Le dicen crítica de la política exterior norteamericana, su crítica es “la moda”, por supuesto superficial.

Esta vez, con relación a Cuba, volvió a aparecerse, después la premiarían en España.

Los medios publicaron que Sontang criticó a Gabriel García Márquez, por “guardar silencio” sobre las largas condenas de prisión a disidentes y fusilamientos en Cuba.

Pareciera que la escritora no lee las noticias, ni conoce la historia, ni tiene información de lo que pasa en el mundo, pero no es así bien sabe lo que hace.

"Admiro a García Márquez como un gran escritor, pero no me parece correcto que guarde silencio ante lo que está ocurriendo en Cuba", señaló Sontag en Colombia, en el marco de la XVI Feria Internacional del Libro de Bogotá. (Fuente: www.bbc.co.uk).

Esto es, la señora escogió la tierra de García Márquez para provocarlo.

Como muchos otros inmaculados de una supuesta izquierda, dice que tuvo un pasado pro cubano, pero ya no. "Yo apoyé a Cuba contra Estados Unidos, pero pronto me di cuenta de lo que suponía Castro. Ahora he visto que un hombre como José Saramago, que aún hoy se declara comunista, rechaza la monstruosidad que ha ocurrido en Cuba", dijo Sontag.

Por supuesto, exactamente igual que los gobernantes norteamericanos, Sontang se aprovecha de las infortunadas declaraciones de Saramago para hacer propaganda contra Cuba. “Pronto” de dio cuenta quién es Fidel, a quien es incapaz de entender la intelectual. La respuesta cubana a la provocación imperialista le parece “monstruosidad”, es decir, la acción contra el delito flagrante no debiera hacerse, si los delincuentes son patrocinados por los yankis, la acción de la CIA es propia de ángeles seguramente.

"Pero me pregunto: ¿qué va a decir Gabriel García Márquez? Temo que mi respuesta es: no va a decir nada".

A García Márquez, se le reconoce como Premio Nobel que es, pero siempre se le llama “amigo personal de Fidel”. Esta vez, así lo hicieron para provocarlo.

"Creo que su obligación como gran escritor es salir a la palestra. No puedo excusarlo por no hablar. El valor de su voz pudo ayudar a muchos individuos que luchan".

¿Qué quería Sontang que dijera García Márquez? Que estaba en contra de la pena de muerte. ¿Para qué? Para que los medios utilizaran su declaración y la manipularan, orientando las “opiniones” contra Cuba.

En parte, la escritora logró su objetivo. Ese es su trabajo, lo demás es demagogia. Esos escritores posmodernistas están prestos para sumarse a la política del gobernante imperialista en turno, son intelectuales incrustados (“embedded”) como los periodistas que van entre las tropas agresoras y publican sin ética de ningún tipo.

Los hechos, sus hechos, colocan a Sontang del lado de la mafia de Miami, y de las entelequias intelectualoides del posmodernismo.