Volumen 15, Número 318, agosto 24 de 2015
 


Reforma energética al gusto del imperio



El objetivo de la reforma energética del imperio, que Peña Nieto y mafias impusieron con mentiras, es garantizar suministros seguros de petróleo crudo a la economía más voraz del planeta. Por ello la insistencia de Peñita para elevar las plataformas de producción y exportación de petróleo crudo, siempre a cargo de las transnacionales. El gobierno niega los hechos argumentando sandeces. A los documentos divulgados por el departamento de estado de los Estados Unidos, el priísta Penchyna le llama "fantasía sin sustento alguno". Su traición a la nación es lo que no pueden sustentar, ni Peña ni adláteres.


Deleznable traición

La geopolítica energética del imperialismo es la que determina, lo demás es demagogia barata del gobierno. En la estrategia imperial, Estados Unidos reforzará el control regional y mundial, a México se le asignó el papel de simple esquirol.

Es sabido que los recursos de hidrocarburos en el planeta son finitos. Se conoce que tomaron millones de años para formarse, que en los últimos 100 años el capitalismo ha dilapidado la mitad y que, en los próximos 30 años, proyecta acabar con el resto, principalmente, por el sector automotriz.

Por lo pronto, el petróleo fácilmente accesible en el mundo es poco, concentrado solo en algunos lugares, y descubrimientos relevantes no los hay. Además, el petróleo se extrae cada vez a mayores profundidades, incrementando los costos.

En este contexto, el plan estratégico geopolítico del imperialismo consiste en EXTRAER todo el petróleo donde quiera que esté, sea en el Medio Oriente, Polo Ártico o Golfo de México.

En México hay petróleo en las aguas someras, a bajas profundidades y, el costo de extracción por barril, es el más bajo del mundo. Aquí, también, el gobierno está al servicio del imperio, este impuso a Peña Nieto. A su vez, el pequeño hombrecillo, traumado y perverso, es un títere manipulable al antojo.

Peña puso la seguridad nacional en manos del Comando Norte, este es el que decide lo que debe hacerse o no. Por lo mismo, el petróleo lo pone a disposición de las transnacionales. Eso es lo que recientemente decidió Pascual, ahora exembajador norteamericano en México. Los gringos mandan y saben lo que quieren, no por casualidad la embajada gringa aquí representa la mayor base de operaciones de la CIA en el mundo.

Lo que hizo Pascual corresponde a los designios del imperio, en este caso, a través del Departamento de Estado (DoS) para diseñar la reforma energética que Peña presentó a los legisladores. En ese grupo está Duncan Wood, director del Woodrow Wilson Center ligado al ITAM, apoderado de Pemex, de la CFE y de la CNH, entre otras entidades energéticas.

Así que las bondades que, mentirosamente, ofreció Peña eran falsas. Así lo expresó el FTE. El objetivo de la reforma es garantizar la seguridad energética del imperialismo.

Control imperialista

"La consultoría Cambridge Energy Research Associates (CERA), fundada por Daniel Yergin, ideólogo de la seguridad energética de Estados Unidos, en la que también participa como vicepresidente el embajador Carlos Pascual, jugó un papel muy importante en el diseño de la reforma energética de México a nombre del Departamento de Estado de Estados Unidos, consideró Rosío Vargas Suárez, internacionalista de la UNAM (Rodríguez I., en La Jornada, p.3, 11 agosto 2015).

"Explicó que no es sólo esta consultoría, que ahora se llama IHS CERA, sino que hay otros tanques de pensamiento en los que hay grupos o coaliciones que representan el establishment, como el encabezado por Tony Garza, que defienden los intereses texanos, y el de Duncan Robert Wood, académico del ITAM, que lidera en México el Centro Woodrow Wilson. También está el Atlantic Council, entre otros.

"La académica, cuyo tema de investigación es el sector energético de Estados Unidos y su implicación para México, afirmó que Carlos Pascual es un agente clave, porque es el encargado en el Departamento de Estado de manejar los asuntos de energía a escala internacional, clave en el reposicionamiento hegemónico de Estados Unidos.

“México entra como participe dentro del proyecto de integración energética de América del Norte y justamente la idea es hacer producir al máximo a Canadá y a México para tener esta oferta superabundante que permita este reposicionamiento hegemónico de Estados Unidos. El proyecto de Carlos Pascual se refiere al manejo del crudo, la electricidad, el gas shale y para aguas profundas.

"En el texto queda claro que quien estaba cabildeando esta reforma era Carlos Pascual desde el Departamento de Estado, y este diplomático curiosamente ha estado en Polonia y Ucrania reorganizando el marco regulatorio para el gas shale, que es el proyecto geopolítico de Estados Unidos.

"Entonces, no es extraño que ahora vuelva a aparecer Carlos Pascual en reuniones que organiza la consultoría CERA, que preside Daniel Yergin, quien es el cerebro de la seguridad energética de EU".

Beneficios para el imperio

Pascual sigue "asesorando" al gobierno norteamericano, detrás está la CIA, por supuesto. El exembajador, también, sigue dictando línea al gobierno mexicano, ha analizado el fracaso de la Ronda 1 fase 1 y plantea lo que el gobierno de Peña se limita a anunciar.

La desnacionalización y privatización energética se hizo para el beneficio del capital imperialista. Lo que quieren los bancos y petroleras transnacionales es la mayor ganancia, los mayores volúmenes de crudo y por el mayor tiempo posible. Es decir, se mueven en el marco de la geopolítica energética del imperio.

Si el gobierno ofrece condiciones que no gusten a las corporaciones, lo que sigue es muy simple, pedirán más y el gobierno de Peña cederá. El imperio no tiene prisa, lo principal ya se hizo, reformar la constitución para entregarles el petróleo. ¿Cuándo dispondrán del mismo? ¡Cuando quieran!

"Rosío Vargas citó la reciente reunión celebrada el 23 de julio de 2015 en la Casa de Representantes para Asuntos Exteriores de la Subcomisión del Comité para el Hemisferio Occidental, en la que desde el Departamento de Estado el embajador Carlos Pascual reconoce los beneficios que traerá la apertura energética en México para Estados Unidos, en términos de negocios, empleo y alineamiento estratégico; de ahí su recomendación para que México revise los términos en que oferta sus recursos petroleros.

"Para ello el embajador Pascual propone cuatro cosas: clarificar las causas que limitaron los alcances de esta primera etapa de la ronda uno, al sugerir lo que el gobierno mexicano podría mejorar ante la circunstancia de que los inversionistas internacionales no tienen conocimiento de los activos del país y no saben cómo funciona México.

"Por ello, México debería transparentar sus activos, los contratos, los términos fiscales, los negocios locales, la seguridad, ofrecer retornos que atraigan capitales, aun cuando la industria internacional recorta gastos de inversión.

"En segundo término, sugiere que los campos petroleros ofertados fueron pequeños y quizá no de mucho interés para las grandes compañías internacionales.

"En tercer término: los contratos se ofrecieron por cuatro años con dos de extensión, sin embargo, algunas compañías pudieron haber querido términos más amplios en el contrato para desempeñar una exploración extensiva, tal como si hubiera existido un complejo como el Presal, capaz de ser explotado a niveles mayores de profundidad.

"En cuarto lugar señala que las ofertas mínimas del gobierno pudieron haber sido influidas por los históricos costos de producción de Pemex, menores que los de los potenciales inversores".

De la "verdad" a la "inspiración" histórica

Los funcionarios de Peña son muy torpes y solo declaran sandeces. Es el caso del panista (ahora priísta) Meade, secretario de relaciones exteriores de Peña. Este sátrapa considera, emulando a Murillo Karam, que la reforma regresiva de Peña es "histórica". Le faltó una (a) porque esa reforma es ahistórica. Nadie en el mundo se dedica a entregar gratuitamente sus recursos energéticos al capital extranjero, salvo gobiernos aldeanos, primitivos, dictatoriales y genuflexos.

Qué Peña Nieto buscó "inspiración" en la historia de México es una vacilada. Sabido, probado y comprobado está que Peña NO lee ni escribe, solo repite lo que le dictan.

Murillo, a la versión oficial sobre la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa, le llamó "verdad histórica". Meade, a la reforma entreguista de Peña le llama "reforma histórica". Ambos se exceden y muestran cínicos, habida cuenta que son cómplices de las atrocidades y parte de la misma cloaca.

Meade habla de "gran debate" siendo que este NUNCA lo hubo, no debatió ni el PRI-AN, lo que hubo fue una imposición basada en mentiras.

"Para construir la propuesta de reforma energética ‘‘el presidente Enrique Peña Nieto buscó inspiración en nuestra propia historia’’, aseguró el canciller José Antonio Meade, tras rechazar que la misma haya sido obra del gobierno estadunidense (Pérez, en La Jornada, p.3, 12 agosto 2015).

‘‘Es parte de una iniciativa que recogía palabra por palabra el texto constitucional vigente en la época del presidente Lázaro Cárdenas; luego entonces, excepto que esos comunicados de prensa –desclasificados– se hayan referido a esa época de la historia, en la época reciente el debate empieza justamente con ese momento histórico y se amplió después a toda la sociedad’’, dijo el funcionario.

‘‘Como dijo el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell (la reforma energética) se enriqueció con las experiencias de países como Colombia, Noruega, entre otros, pues fue un debate de una reforma propiamente mexicana inspirada en principios mexicanos y construido al amparo de un debate rico, fértil que la mejoró, que la enriqueció, en donde quienes fueron los actores fundamentales fueron los propios mexicanos’’, enfatizó.

Base para la seguridad energética

Pascual ha dicho, exactamente, lo contrario de lo que declaran Peña y adláteres.

"La apertura del sector energético mexicano al capital privado ‘‘crea la oportunidad’’ de hacer de la región de América del Norte ‘‘una nueva base para la seguridad energética mundial’’. La expresión es de Carlos Pascual, ex embajador de Estados Unidos en México e identificado como uno de los promotores, desde el Departamento de Estado, de los cambios legales que se concretaron en este gobierno (González R., en La Jornada, p.3, 12 agosto 2015).

"En una audiencia ante un comité del Congreso de su país, el 23 de julio pasado, Pascual sostuvo que la importancia estratégica y comercial de la reforma energética impulsada por el presidente Enrique Peña Nieto va más allá del sector de la energía.

"Uno de sus planteamientos es que México puede ser suministrador de energéticos a Centroamérica y el Caribe y contribuir a generar alternativas para proveer energéticos a costo menor al del mercado a países de esa región, labor que ahora realiza parcialmente Petrocaribe, mecanismo auspiciado por el gobierno venezolano.

‘‘La importancia estratégica y comercial’’ de la reforma aprobada en México en el primer año de gobierno del presidente Peña, ‘‘y su significado para Estados Unidos y la región de América del Norte’’ tiene que ver no sólo con el sector de la energía, sino que va más allá, expuso Pascual en una presentación del 23 de julio pasado ante el Subcomité del Continente Americano de la Cámara de Representantes. La audiencia llevó por título Persiguiendo la independencia energética de América del Norte: las reformas energéticas en México.

‘‘En la producción de hidrocarburos, la realización de estas reformas da a Estados Unidos, Canadá y México una oportunidad para hacer de Norteamérica una nueva base para la seguridad energética global’’, señaló Pascual en ese testimonio, al que acudió como vicepresidente para temas de energía de IHS, firma global de consultoría de negocios

"El colapso de precios del petróleo, que han disminuido a la mitad en un año, ‘‘ha profundizado una severa crisis en Venezuela, lo que ha comprometido su capacidad para mantener los subsidios’’, dijo Pascual.

‘‘Con los bajos precios actuales (...) los países del Caribe tienen una oportunidad de encontrar fuentes competitivas de suministro. En la actualidad existe un diálogo activo entre Estados Unidos, Canadá y México para abrir nuevas fuentes de abastecimiento o el financiamiento de nuevas formas alternativas de energía que reduzcan la dependencia que tienen esos países. La apertura del sector energético de México a la inversión privada y el compromiso internacional harán más fácil hacer de México un socio en estos esfuerzos’’, dijo.

No es fracaso, es traición

Penchyna, senador de caricatura al servicio de Pascual, la reforma energética de Peña no es un fracaso. Claro, en 75 años nadie se había atrevido a semejante traición. Para el imperio es un triunfo. Por eso, se burla de las divulgaciones del DoS norteamericano. Solo le queda la risita, de argumentos carece, sabe que él mismo es parte activa de la traición a México.

"Pese al desinterés mostrado por las petroleras extranjeras para invertir en México, como quedó de manifiesto en las licitaciones para la ronda uno, el presidente de la Comisión de Energía del Senado, David Penchyna (PRI), aseguró que la reforma energética no ha sido un fracaso (Becerril A., Ballinas V., en La Jornada, p.4, 12 agosto 2015).

"El legislador, uno de los impulsores de esa reforma constitucional que dio marcha atrás a la expropiación petrolera, sostuvo que no sólo no se ha fallado, sino que la inversión creció en 13 por ciento en el sector energético ‘‘en el peor momento de la industria petrolera mundial’’.

"Por segundo día consecutivo Penchyna descalificó la información del Departamento de Estado de Estados Unidos –divulgada la víspera y publicada por La Jornada– sobre que la actual precandidata demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Hillary Clinton, impulsó la privatización del petróleo en México.

"Al respecto, Penchyna sostuvo que ‘‘es una buena fantasía’’, pero no tiene sustento alguno. Agregó que se trata de ‘‘una elucubración bastante relevante, del tamaño de la falta de contenido que tiene’’. E insistió: ‘‘Es una aseveración absurda fuera de la realidad en el proceso que vivimos los mexicanos’’.

A su juicio, ‘‘se trató de hacer una fábula o un cuento o una novela para decir que un personaje de esa naturaleza influyó y dictó la política energética’’. El priísta aseguró que no disminuirán los requisitos para la inversión en la explotación petrolera, luego del fracaso de la llamada ronda uno. Se ha malinterpretado, dijo, ya que los requisitos no van a cambiar. ‘‘Lo que se actualiza son las variables económicas de una fórmula econométrica con la que se fija una oferta de licitación transparente’’.


Ref.: 2015, elektron 15 (225) 1-4, 15 agosto 2015, FTE de México.


Dignidad
Hernández, en La Jornada, 15 agosto 2015






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