Fox amenaza a Gobernadores con un nuevo recorte presupuestal y los presiona para apoyar su reforma eléctrica. No hay argumentos ni razones, se trata del chantaje en sus términos explícitos. Ese chantaje es parte de la deshigiene, corrupción y amoralidad política del foxismo.

A los gobernadores pertenecientes al PRI y al PRD, el gobierno de Fox les planteó, mediante oficios, un “nuevo recorte” presupuestal. En reunión realizada en Tlaxcala Santiago Creel, secretario de gobernación, les expresó la necesidad de Fox “de apoyo a la reforma eléctrica” (Méndez E, Dávalos R, en La Jornada 250802). Después, invitó a los gobernadores a una reunión con el propio Fox para conocer la iniciativa en materia eléctrica.

Desde su llegada a la reunión, Creel había llegado en busca de “aliados” para que prospere la iniciativa del Ejecutivo en materia eléctrica. En ese contexto ubican los foxistas “los amarres” que realizan con Madrazo y Gordillo, del PRI.

El chantaje es evidente. Según se publicó en la prensa nacional, a cada gobernador se le envió un oficio dos días antes de la reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago). En ese oficio se habla de una “proyección” de los recursos que dispondrán hasta final del año. Es decir, se disfraza el recorte del presupuesto para los estados. Al mismo tiempo, se aprovecha la ocasión para involucrar a los gobernadores en el apoyo a pretensión foxista de privatización eléctrica.

La higiene política del foxismo está en entredicho. Ante la carencia de argumentos y razones recurre al chantaje descarado. Así como Castañeda, procónsul del imperialismo en México, considera que los embajadores mexicanos son “sus empleados”, el Fox cree que los gobernadores también son “sus empleados”. Varios de ellos no necesitan de presión alguna pero, el recorte afectará a la población y, la decisión para cualquier modificación constitucional, no depende de los gobernadores, si bien, muchos tienen influencia sobre los diputados federales en sus estados.

El gobierno foxista sabe bien que no tiene mayoría en el Congreso de la Unión y busca “aliados” mediante la corrupción y el chantaje. El caso Tlaxcala es ilustrativo pero no es el único, ni el chantaje se limita al recorte presupuestal. Existe, también, mentira, deshigiene y amoralidad política.

El presidente de la comisión de energía de la Cámara de Diputados, diputado panista Juan Camilo Muriño declaró que, “todos los partidos y el Presidente coinciden en la no privatización del sector eléctrico nacional”. ¡Eso no es cierto!, Fox y el PAN promueven explícitamente la sí privatización de la industria energética. Si en el discurso lo niegan es por carencia de ética política. Su esquizofrenia es otra expresión del chantaje apoyado en la mentira, dicen una cosa y hacen otra.

Muriño expresó la “necesidad urgente” de que se modifique la Constitución, pues como están redactados los artículos 27 y 28 constituyen "un problema" e impiden "el desarrollo del sector como a todos nos gustaría" (Méndez E, en La Jornada 210802). Esto implica que la nacionalización eléctrica es “un problema” para el foxismo y, que les “gustaría” lo contrario, es decir, la desnacionalización, la privatización.

Otro panista, Juan José Rodríguez Prats, presidente de la comisión de energía en el Senado, dijo que “lo único que haría el Congreso sería "constitucionalizar" la participación que los empresarios tienen en el sector eléctrico desde 1992” Esto es, el PAN quiere legalizar la privatización actualmente en marcha.

¿Porqué, entonces, Fox dice que no propone privatizar a la industria eléctrica? Porque: 1- Se quiere pasar de listo creyendo que podrá engañar a toda la Nación, 2- Sus argumentos no son sólidos, ni siquiera se basan en ningún diagnóstico del sector, ni mucho menos alguna planeación coherente, 3- Su discurso está permeado de mentiras llanas que trata de hacer pasar como verdades, 4- Repite mecánicamente los textos del Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional, 5- Ha renunciado a gobernar para los mexicanos, 6- Está al servicio del gobierno norteamericano y de las empresas transnacionales, 7- Fue formado por el imperialismo para traicionar a México, 8- Es parte activa de la contrarrevolución neoliberal. ¡Todo esto, el pueblo de México lo rechaza!.