Petroleros en Lucha

Los trabajadores petroleros democráticos participamos activamente en el Foro del FTE “Defensa del Petróleo de México” realizado el 18 de marzo de 2002 en la Universidad Obrera de México. Impedir la privatización de Pemex, lucha a fondo contra el charrismo, recuperación democrática del STPRM: Nuestras banderas de lucha.

“El cambio democrático en el Sindicato Mexicano de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana no será de golpe y porrazo, tampoco lo será por el beneficio gubernamental. La democracia nunca se va a conseguir con la dádiva a los gobernantes. Tanto las libertades como la democracia, se ganan luchando, construyendo los puentes entre una dirección decidida, honesta y las bases trabajadoras”

Este fue el principio de la ponencia de los petroleros en el Foro del FTE. El compañero Alfredo Guerrero examinó con claridad la situación del mundo, del país, la industria nacionalizada y el sindicato de petroleros. Preciso y contundente, dijo:

“Hablamos de derrocar a los charros y su autoritarismo, de la formación de Consejos Obreros que representen realmente los intereses de los trabajadores, instancias democráticas consultivas de todas las secciones, que analicen, deliberen, decidan por todos y no por unos cuantos. Se dice fácil pero el futuro no será si no analizamos nuestro presente, para saber con exactitud con que nos enfrentamos, y cómo vamos a combatir los grandes retos que frente a nosotros parecen murallas infranqueables. ¿Pero realmente lo serán?”

Para ello propuso examinar los contextos a nivel mundial y nacional.

La realidad mundial

Respecto a este nivel destacó las modificaciones económicas y políticas traídas por el neoliberalismo. Señaló que la desnacionalización es la característica más distintiva del proceso de recolonización. Se refirió al problema de la deuda externa, la política de “ajustes” de los organismos financieros internacionales, la sumisión de los gobiernos en turno a los dictados del imperialismo y la ofensiva de éste en todos los rincones de América Latina. Al mismo tiempo, analizó el ambiente de lucha que ocurre en varias partes: Argentina, Ecuador, Perú, Brasil. Sin embargo, dijo, hay una fuerte carencia de direcciones sindicales y políticas capaces de dirigir adecuadamente la lucha de los pueblos.

El compañero expresó que, “en la actual época de dominio imperialista mundial, y en medio del proceso de recolonización, las tareas de liberación nacional son indisolubles de las tareas de liberación social. No hay plena soberanía, reforma agraria, derechos indígenas, trabajo, educación, salud, vivienda, sin expropiar al imperialismo y a sus agentes nacionales, sin recuperar las fuentes energéticas, los medios de producción y cambio y ponerlos al servicio de los oprimidos”

La realidad nacional

Al analizar este nivel, Alfredo destacó la posición especial que representa México para los Estados Unidos (EU) señalando que “la subordinación económica y política de nuestro país a los EU es estratégica para sus planes y acciones de dominación a escala continental”

En seria crítica al TLC dijo que este ha significado aumento de la dependencia, saqueo del país y miseria para el pueblo.

México es el país latinoamericano más endeudado, las inversiones extranjeras se concentran en el financiamiento para el pago de esa deuda. La situación es tal que México ha puesto como aval ante los acreedores “las exportaciones de petróleo bajo control de la Reserva Federal Norteamericana”

Otro aspecto que analizó fue la desnacionalización de la industria y del sistema financiero indicando que actualmente el 83% de está en manos extranjeras.

En materia alimentaria la situación es grave. “El nivel de dependencia de la economía mexicana en relación a la de Estados Unidos se expresa claramente en la dependencia alimentaria. Las importaciones agroalimentarias pasaron de 790 millones de dólares en 1982 a 8 mil 204 millones de dólares en 1999, lo que equivale al 97% del valor de las exportaciones de petróleo crudo en 1999. México es el mayor importador de granos básicos de América Latina y pasó a ser el segundo mercado para la exportación de carne de bovino de Estados Unidos”, indicó Guerrero.

Entre tanto, ha habido una sobreexplotación de los trabajadores y un desempleo creciente.

“México está considerado como uno de los países del mundo en donde más aumentó la productividad del trabajo en los últimos años. Sin embargo, “Los salarios siguieron un curso inverso. En términos absolutos en 1999 los salarios eran aún 20% inferiores a los de antes de la crisis del 94.

En esas circunstancias, no obstante, se preparan modificaciones a la legislación laboral que atentan más contra los derechos obreros.

Igual o peor está el rubro de la soberanía nacional y su cotidiana entrega al capital extranjero. “El actual gobierno mexicano está más cerca de un gabinete de administradores coloniales que del gobierno burgués de un país dependiente” Son los “hombres de negocios” del imperialismo. Fox formó un gabinete ministerial de gerentes de las trasnacionales. La mayor parte de sus secretarios están vinculados a Coca Cola, Telmex, Avantel, Bimbo, NKF, Hoteles Presidente, Visa, BBVA, Bancomer... En el caso de Pemex, Fox designó como Director a un empresario transnacional, presidente y director general de Dupont México desde hace 12 años.

¿Frente a que tipo de régimen de gobierno estamos? Alfredo analizó la situación creada por los regímenes priístas en más de siete décadas y la situación de ahora, con el foxismo en el gobierno. “¿Qué cambió? En rápido análisis, casi nada, al contrario muchas acciones de política neoliberal se han profundizado. Uno de los aspectos que permanecen sin cambios es la relación del Estado con el corporativismo sindical expresado en el charrismo. Alfredo Guerrero revisó la situación en el propio sindicato petrolero.

La realidad sindical

De entrada, Alfredo hizo un breve recuento de la participación de los trabajadores en la expropiación petrolera, resaltando las grandes luchas de la época. Revisó también la trayectoria del STPRM desde su fundación a la fecha, pasando por el “Quinismo”, señalando como fue que se perdieron las libertades democráticas, el sentido de las asambleas y la desnaturalización de la organización sindical plagada de corrupción y violencia por parte de una camarilla mafiosa.

En esta situación se da la lucha por la democracia sindical. Refirió que en 2000 se participó en procesos electorales en todo el país, completamente viciados, que dieron como resultado los tradicionales fraudes y la imposición de las mismas mafias, reconocidas por el gobierno y legitimando a los charros.

Al mismo tiempo, Fox utiliza a los charros sindicales, como ocurrió en la anterior revisión contractual, obligándolos a aceptar modificaciones regresivas tendientes a favorecer la privatización de Pemex. Como consecuencia, está en marcha una reestructuración en la empresa que amenaza con despedir a un fuerte número de trabajadores. Por lo pronto, ya empezaron con el despido injustificado de varios petroleros (y petroleras) democráticos en varias secciones del país.

Precisamente, dijo Guerrero, “en diferentes secciones y grupos se empiezan a generar opiniones que rompen con el esquema en que la oposición se había enfrascado desde hace tiempo” Esto es muy importante, sobre todo en momentos como los actuales en que los charros son perseguidos por el gobierno acusados de corrupción.

“Como trabajadores sindicalizados es el momento de aprovechar esta desavenencia entre intereses de mafias” y, ¿cuál sería la alternativa? Alfredo Guerrero, expresó con firme convicción: “Es imprescindible luchar por: 1.- La defensa de nuestra fuente de empleo y contra la compactación; 2.- democracia sindical; 3.- No a la privatización de Pemex”

Estas demandas tienen un significado profundo pues se refieren a cuestiones cruciales. Hoy, en México no es posible ningún cambio de fondo sin democracia sindical. Hoy, la soberanía e independencia se expresa en la defensa de la industria energética como propiedad de la Nación.

Para finalizar, Alfredo Guerrero propuso la formación de un Consejo Sindical Petrolero, dentro del cual, se integre una Comisión Organizadora que prepare una gran Convención Democrática Petrolera. Concluyó nuestro compañero expresando que, es el momento para alcanzar acuerdos e instaurar la democracia en nuestro Sindicato y, con esta, la defensa de la industria petrolera nacionalizada. “Es, precisamente, la Convención Democrática Petrolera la que nos permitirá organizarnos mejor”

¡Unidos Venceremos!